Historia hecha con: _Malvavisco
Él y yo, somos los protagonistas..espero que lo disfruten.

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¿Alguna vez creíste en el amor?, pues yo nunca lo había creído, pensaba que era algo estúpido, gastar el tiempo con alguien que luego vas a dejar. O simplemente esa persona que te "ama" te dejaría.

Bueno...Yo no creía en el amor hasta ver a la bella flor que conocí.

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Era un día nublado, caminaba tranquilo mientras hablaba con un compañero de la universidad, pues yo ya tenía mis 19 años. Estaba recién empezando una carrera en la universidad de Chile.

Conversabamos tranquilos hasta que mi compañero me dijo que había algo especial de los videojuegos, el Festigame. Yo solo fuí con él sin más que decir. Habían muchas personas con cosplays de los personajes, habían cosas para comprar y algunos campeonatos.

Luego fuí al baño ya que quería tomar agua y tenía cierta calor. Mi sorpresa fué al ver a ¿una chica?..si, creo que era una chica, ¿pero que hacía en el baño de hombres?, su cosplay era de una chica, pero mi duda seguía.

Me acerqué lentamente y toqué su hombro, tenía su rostro tapado con sus manos. Me miró, efectivamente...estaba llorando, tenía sus ojos rojos y un tanto hinchados, obviamente luego me dí cuenta que era un chico. Tomé con cuidado sus mejillas limpiando sus lágrimas.

- Lamento molestarte, solo quiero saber que es lo que te pasó. Claro, si me quieres contar.

Dije tratando de sonar amable, aquel chiquillo me abrazó con fuerza llorando. Sus ojos eran verdes, un color muy lindo a mi parecer, sus cabellos...no sabía de que color eran, respecto a su disfraz, llevaba una faldita que le hacía ver muy lindo. Dios...¿en que estaba pensando?, se supone que me gustan las chicas..no los chicos.

En fin.

Tome su cintura con suavidad rodeandole con mis brazos consolandole. Con cuidado lo cargué sacando lo del baño para así llevarlo a un asiento.

- Perdí mi casa...papá está muy molesto conmigo, y mi mamá me abandonó cuando era pequeño...Mi hermanito..acababa de morir

Dijo el chico, con una voz quebrada, su tono de voz era suave y su cuerpo se sentía tan delicado..como una flor.

- Entonces..no tienes hogar.

Murmuré a lo que él asintió con su cabeza por lo que yo dije. Solo pude suspirar pesado y tomar sus mejillas besando su frente. Tomé la mochila que llevaba colgando por su hombro izquierdo y me la puse.

- Te quedarás conmigo entonces. Vivo en un departamento..y hay dos chicas viviendo ahí también. Compartirás habitación conmigo, ¿Te parece?

Dije a lo que él pareció pensar. Finalmente asintió con su cabeza. En eso mi amigo regresó de donde estaba aunque al vernos quiso coquetear con el pequeño. A lo que yo le alejé y le dije que me iba a casa. El se quedó en esa fiesta.

- ¿Como te llamas?, esque...estas con ropa de chica, pensé que eras mujer al principio. Así que me gustaría saber tu nombre. Yo soy Matías, es un placer conocerte pequeño

Dije aquello tomando su mano para besar el dorso de esta, a lo que él tuvo un pequeño rubor en sus mejillas, baja su mirada, notandose su vergüenza. Sonreí de lado soltando una baja risa, el sólo desvío su mirada.

- No te ri-rías... Mi nombre es Elías

Había dicho tartamudeando, lo encontré muy adorable. Luego de su pequeña pausa había dicho su nombre.

- Lindo nombre. Te queda perfecto. Bueno, vamos a casa.

Dicho esto, le tomé de la mano y comencé a caminar a casa seguido de aquel bello chico. No se por qué, pero encontraba a Elías muy adorable, no era como otros chicos, pensaba que era diferente pero único.