Capitulo 3

'Votación'

El silencio del dormitorio era más aterrador que cualquier grito.  246 miraba sus manos, buscando inconscientemente rastros de sangre, aunque sabía que no había ninguno.  Había sobrevivido.  Pero el alivio era efímero, una capa delgada sobre un abismo de culpa.  Las imágenes de los cuerpos caídos, los disparos, los gritos, se repetían en su mente, una película de horror en la que él había sido un actor involuntario.  ¿Habría podido hacer algo más?  La pregunta lo carcomía, un gusano que roía su conciencia.  La tensión era palpable, una espada suspendida sobre ellos.  El juego había terminado, pero la pesadilla no.  El silencio era un presagio, una amenaza latente, y el sabor amargo de la supervivencia se mezclaba con el terror de lo que estaba por venir.

—Hola —dijo 120, acercándose lentamente.  Su propia respiración era un poco entrecortada, un reflejo de su propio miedo, aunque intentaba ocultarlo tras una expresión de calma.  Sin decir nada más, colocó una mano sobre la de él, un gesto simple, pero lleno de un cariño y apoyo que intentaba transmitir sin palabras. La calidez de su mano contrastaba con el frío entumecimiento que sentía 246.  Él la miró, sus ojos llenos de un terror que apenas podía contener.  Su mano, bajo la de ella, temblaba ligeramente.

—No... no esperaba que fuera así —dijo 246, su voz apenas un susurro, roto por la emoción contenida. —Pensé que serían apuestas... que saldríamos pronto... no... no lo sé.

Sus palabras fueron entrecortadas, como si cada sílaba le costara un esfuerzo enorme. El miedo era palpable, un peso invisible que lo oprimía.

120 apretó ligeramente su mano, transmitiendo apoyo sin necesidad de palabras.  Su propio miedo era evidente en la ligera tensión de sus músculos, pero mantuvo su expresión serena, intentando proyectar una fuerza que ella misma no sentía del todo.

—Ya pasó — susurró, su voz suave pero firme. — Está bien...  todo va a estar bien.

Su voz era una caricia, un intento de calmar la tormenta que se agitaba dentro de él, y dentro de ella misma.  El silencio que siguió fue un espacio compartido, un reconocimiento mutuo de su miedo y de su necesidad de consuelo.

—¿No te da miedo? —cuestiona incrédulo, ella aplana sus labios en una delicada línea y suelta un pequeño suspiro, para asentir

—Mucho... —susurró. —Pero el miedo no nos puede vencer.  Salimos vivos.  Eso es lo que importa ahora.  Concentrémonos en eso.

246 no pudo contener la sorpresa ante la fortaleza de 120, asombrándose ante su calma después de que estuvo a centímetros de un disparo.

—Por cierto, soy Gyeong-seok —se presentó, extendiéndole la mano, la cual hasta ahora se dio cuenta que ella había soltado.  Le sonrió, aceptándola sin pensarlo, dándose un apretón delicado, cálido.

—Un placer, Seok, soy Hyun-ju.

El apretón se prolongó más de lo habitual, una conexión silenciosa que trascendía la simple formalidad.  Sus dedos se entrelazaron, una corriente invisible fluyendo entre ellos, un lenguaje silencioso que hablaba de una comprensión profunda, más allá de las palabras.  Ninguno de los dos parecía dispuesto a romper el contacto, perdidos en la intensidad de ese instante.

Pero las puertas se abrieron y los soldados de rosa entraron, como acto involuntario y de terror Hyun-ju, se escondió detrás de Gyeong-seok quien se puso alerta por cualquier cosa que pudiera pasar, en este momento ellos son los enemigos y pueden atacarlos sin piedad. Los otros jugadores comenzaron a esconderse debajo de las camas y otros detrás de los demás.

—Todos ustedes han logrado terminar el primer juego, muchas felicidades a todos —habla un guardia, tan tranquilo como si minutos atrás no los hubieran asesinado como terneros en un matadero —Así que es hora de anunciarles lo resultados del primer juego —sobre él, hay un inmenso letrero donde esta el numero 456, pero cuando este lo señala rápidamente comienzan a bajar la suma —, de 456 jugadores, 91 fueron eliminados y 365 jugadores completaron el primer juego. Una vez más, felicidades a los que lograron ganar en el primer juego —felicito el guardia con el cuadrado dibujado en la mascara, pero eso en lugar de alegrarlos, los asusto más

Hyun-ju, se asomo ligeramente sin soltar la mano de Gyeong-seok, quien se mantiene alerta.

—Disculpe —interrumpe la jugadora 149, quien arrastra a su hijo con ella —. Señor se lo suplico, tenga piedad por favor —se arrodillo mientras lagrimas comienzan a deslizarse en sus mejillas —La deuda que mi hijo tiene voy a pagarla —junto sus manos en modo oración —enserio, no importa lo que haga pero voy a pagarla. Prometo pagarla, se lo suplico —dice al borde de la desesperación, —perdónenos la vida —se gira a su hijo que solo observa asustado —ven, ¿Qué haces parado? —lo reprende al momento de jalarlo de los pantalones para hacerlo arrodillarse junto a ella —de rodillas suplica

El hijo obedece, copiando la acción de su madre asustada que lo que mas desea es mantener con vida y seguro a su hijo.

—Señor por favor perdónenos, déjenos ir, por favor —dijo con la voz chillona —Se lo suplico

—Por favor —segunde su madre

—Jugadores por favor —comienza el guardia rosa —, parece que estamos teniendo un mal entendido

—Señor se lo suplico —continuaron mas jugadores colocándose de rodillas junto a los jugadores 149 y 007 quienes los animan a pedir perdón

—No queremos lastimarlos, ni cobrarles sus deudas, estamos aquí para darles una oportunidad —anuncia el guardia observando como mas gente se une a suplicar un perdón

—¡Clausula 3, los juegos pueden terminarse si la mayoría concuerda! —exclama el jugador 456

Gyeong-seok, hunde sus cejas tal parece que ese hombre sabe mas de lo que aparenta, sobre esos juegos, llegando a preguntarse el porque.

—¿No es verdad? —agrega retándolos con la mirada

—Así es —responde dándole un asentimiento

—Bien, déjenos votar como es nuestro derecho —pide caminando entre los jugadores arrodillados

—Por supuesto —ambos parecen hacer contacto visual —. Como viene en el acuerdo respetamos su derecho a la libertad de elección  —un suspiro de alivio es lo que todos dan al escuchar esas palabras, pero esto esta muy lejos de acabar, ya que los guardias agregarían algo que los enloquecería —. Antes de votar, déjenme anunciar la cantidad del premio, como se prometió anteriormente —con decisión presiono un botón del control, que alza a la altura del pecho, dejando ver la gran alcancía de cerdo que les han mostrado a su llegada y sin esperar los fajos de billetes comenzaron a caer uno a uno, asombrando e iluminándoles los ojos a los jugadores, tanto dinero junto los dejo boquiabierto.

—Es mucho dinero —dijo una jugadora

—Miren —señalo otro

Hyun-ju y Gyeong-seok, se dan una rápida mirada mientras ella se aleja un poco para observar la cantidad que cae en la alcancía

—Como noventa y un jugadores murieron en el primer juego, hasta ahora se han acumulado 9 100 millones de wones —los murmullos resonaron, dejando en claro que algunos querrán continuar.

Gyeong-seok, piensa en su pequeña, ¿Qué pasara con ella si muere en el siguiente juego? ¿Quién la cuidara si de alguna forma no llega a tiempo a la meta, si uno de esos guardias lo asesina, quien le contara cuentos antes de dormir, quien hará lo posible para que el dolor desaparezca y sobre todo a quien llamara papá?

—Si desean dejar de jugar, esa cantidad se repartirá en montos iguales a los 365 jugadores que aun quedan y podrán irse —

—¿Entonces como lo repartirá? —cuestiona el numero 100 con evidente enfado

—Serán 24 millones 931 mil 500, wones —comunica

—¿Enserio casi morimos y solo nos darán 24 millones? ¡Esto es una mierda, que se vayan al carajo! —resoplo el jugador 124 dejando pensativo al jugador 230 que tenia la mirada perdida, una mirada distante, como si no creyera donde esta ahora mismo

—¿24 millones? —por fin habla el 230 levantando su mano derecha —¿De 45 600 millones de wones? —

—Así es —responde el guardia —Según las reglas del juego se agregan 100 millones de wones a la esfera por cada jugador eliminado. Cada vez que juegan un juego y eliminan mas jugadores , el premio aumenta en función del numero de jugadores eliminados —explica con paciencia —

—En ese caso, ¿Cuál es el numero del premio, si ganamos al final? —pregunta el jugador 100

—Como se menciono anteriormente el premio para los 456 jugadores, es de 45.600 millones de wones. Los jugadores que lleguen al sexto juego se repartirán en montos iguales los 45.600 millones de wones.

—¿Así que si soy el único que queda es seguro que me lleve todo el premio? —cuestiona un jugador

—Si, si es correcto —responde el guardia

Más asombro, la avaricia comienza a dibujarse en el rostro de los jugadores aún vivos, demostrando que harán todo por llevarse el premio completo a sus casas.

—¿Y también en el próximo juego podremos votar para decidir si nos podremos ir?

—Como se menciona en el acuerdo firmado cada vez que un juego termine las votaciones se reabrirán para decidir si el juego termina o avanza y se llevaran el dinero acumulado hasta ese momento—menciona un poco cansado de estar repitiendo lo que al inicio se ha dicho —Nuestra prioridad siempre va ser la voluntad de los jugadores querer participar en los juegos —mas susurros —Dicho esto podemos comenzar con la votación —finalizo

Frente a ellos han colocado dos botones; uno azul con un circulo en el y un rojo con una equis.

—Deben presionar circulo si desean continuar o equis si desean retirarse, el orden de votación es el numero inverso a sus espaldas, jugador 456 pase por favor —pidió

Las miradas cayeron en el hombre, recordado por avisarles sobre lo que sucedería en el primer juego y que todos habían ignorado. avanza entre la multitud y antes de siquiera llegar al panel una mujer lo detiene, todos alzan la mirada a la jugadora que esta en las camas de arriba.

—Todo esto es completamente inútil, así como no sabias cuando llegarías al mundo, tampoco sabrás cuando vas a irte —esto lo dice observando a la gran multitud que la escucha con atención —. El momento y lugar de tu muerte, ya están decididos por los mismos dioses desde que naces. ¡Por mucho que lo intentes, no podrás escapar de tu destino! —exclama cuando 456 toma el valor de seguir avanzando y sin pensarlo más selecciona equis

—Una vez que hayan votado se les entregará una insignia que deberán colocarse en el pecho de lado derecho que se muestra en la pantalla —comunican al entregarle dicha insignia con la equis en ella

Las votaciones van rápido, la equis va adelantada, pero pronto el circulo comienza a alcanzarlos.

Cuando es el turno de Gyeong-seok, este duda moviendo su mano de la equis al circulo y viceversa, tratando de pensar, ¿es mejor irse y ver como muere su hija lentamente o quedarse y quizás morir, pero lo haría intentándolo? Aun indeciso recuerda a su pequeña, esperándolo con esa hermosa sonrisa, esos ojitos que se iluminan al verlo y el como lo llama "Papá" mientras lo ve dibujando, el como ama sus dibujos y cuando estaba por votar circulo, su mano se mueve de forma automática a la equis, quizás debería irse con su pequeña, sin pensarlo mas lo presiona, toma la insignia y se coloca en el lado correspondiente, justo a unos centímetros de 456, pues si ese hombre voto por irse, la cosa debería ser seria.

Cuando fue el turno de 230, el marcador hace saber que los círculos van ganando, cosa qué aterro a los que ya quieren irse, pero de pronto el jugador 456 toma delantera exclamando nuevamente por su atención.

—¡Esperen! —todos lo ven —No pueden hacer esto ahora —extiende sus brazos a los laterales —¡Abran los ojos! ¿Todavía no lo ven?  —cuestiona incrédulo ante las actitudes de los demás  —¡Estos no son simples juegos, a este paso todos moriremos! ¿Quieren morir? —nadie dice nada, permanecen en un silencio atroz —Tenemos que irnos de aquí ¡Ya! —señala el tablero mostrando que el circulo lleva 93 votos, mientras que la equis 87 —Debemos salir, ganar en las votaciones —pide suplicando —¡Ay que parar esto ahora!

—¿Qué crees que estas haciendo, porque sigues alborotándonos con tus tonterías? —cuestiona numero 100, ya fastidiado de sus gritos, acercándose a él— Desde que entramos nos asustas con que nos van a matar

—Es cierto —defiende una jugadora —¡Maldito loco! —da un paso adelante —Desde el primer juego estas con que nos vamos a morir, sentí tanto miedo que casi me muero —

—¿Además como sabias que nos dispararían, acaso trabajas con ellos? —interroga otro, uniéndose a los reclamos de los círculos

—Dinos la verdad, ¿eres un infiltrado? —pregunta el jugador numero 100 —¿Te estas haciendo pasar por un jugador, ustedes lo metieron aquí, quieren enloquecernos? —señala a los guardias

—¡Cállese, cuide lo que dice! —interrumpe 390 acercándose a su amigo —Si no fuera por él, usted ya estaría muerto, gracias a este hombre muchos seguimos vivos, tu numero 226, te vi tan asustado que casi te orinas

—¿Que, trabajas para él? —cuestiona 226

Estos comienzan a pelear, hasta que 149 trata de calmarlos y pedirles que deberían salir, causando el conflicto entre los círculos y las equis, tanto grito hizo que 456 perdiera la razón y exclamara.

—¡Yo ya estuve en estos juegos! —el silencio se presenta en el lugar tan amargo que repite —¡Yo ya estuve en estos juegos! —resopla —Es por eso que sabia que nos iban a disparar —explica tratando de mantener la calma —. Yo estuve hace tres años y los que estuvieron conmigo en esos juegos...—su voz comenzó a bajar el tono, recordando a sus amigos caídos, recordando el sabor amargo que sintió al llevarse el premio, reviviendo lo que perdió. —Murieron, todos ellos

—¿Murieron? —cuestionan entre murmullos

—¿Todos ellos? —

—Espera, si todos murieron, significa que te llevaste el premio tú, ¿verdad?

456, despego sus labios al escuchar aquella pregunta, como si eso fuera lo importante y no el hecho que perdió amigos, familia, no comprende el porque importaría mas el dinero. La pelea comenzó ya que todos se molestaron de que él haya ganado, reclamándole el por que ha regresado.

—Si tu ganaste quiere decir que podemos ganar, danos consejos —pide 230

456 trata de hacerlos entender, hacerles saber que si votan morirán, pero nadie parece hacerle caso, la pelea fue tanta que un guardia tuvo que interferir.

—Desde ahora no toleraremos interferencia en las votaciones —comunico —Ahora dicho eso retomaremos las votaciones

Los votos siguen aumentando y el circulo va encabezando la lista, cuando el turno de Hyun-ju, llega no duda mucho y presiona por quedarse, un juego más, solo eso necesita para costearse su operación, sabe que las deudas no terminaran, pero al menos su nueva vida podrá iniciar, eso que tanto a deseado, la persona que tanto quiere ser, esta a unos juego de completarse.

Sus miradas se cruzas, pero ella la retira rápidamente, sabe que ha votado en contra de su pensamiento y quizás eso haya concluido con su amistad que recién había iniciado.

El turno de 007 esta por votar decidiéndose por quedarse, hasta que su madre se asoma de forma misteriosa para gritarle.

—Ni se te ocurra votar por quedarte —reprende, logrando que este vote por irse

Todos los que desean irse festejan al empatar con los círculos, solo falta un numero, es quien decidirá si pueden irse o deben quedarse, sin saber que un solo voto los hará adentrarse mas en el infierno.

—Y por ultimo 001 —pide el guardia

001 se acerca sin vacilación, tarda unos segundos, los mismos que jugaron con la esperanza de todos y los mismos que las terminaron ya que circulo fue su decisión, haciéndoles saber que no podrán irse con vida del juego o quizás su juego.

NOTA DE LA AUTORA; Cap un tanto largo, espero lo hayas disfrutado, si es así no seas tímida/o y comentan, anda nadie te juzgará ❤️.

Sin más por el momento me despido, lamento si hay errores ortográficos, tengo los ojos chuecos, pues al revisar nunca me doy cuenta de que existen haha. Aun así, nos vemos en la próxima actualización. ¡Cuchau! 😉.

PSD; ¿les gusta los nuevos separadores? 🤭. Porque a mí me encanta 🙂‍↔️.