No pasó mucho para que ___________ fuera dada de alta, por supuesto que antes de ser liberada de aquella lúgubre habitación y a petición de su médico, a la chica no le quedó más remedio que someterse a unos últimos exámenes para cerciorar que todo estuviera en orden. Sus padres, felices de que las cosas hubiesen salido sin complicaciones, se responsabilizaron de su hija el tiempo que fuera necesario.

Ya había transcurrido un mes de todo eso, y poco a poco fue recobrando la memoria. Donde su mente le proporcionó las imágenes de aquel trágico accidente que casi le cuesta la vida.

Todo parecía haber cobrado un poco de sentido, no obstante tenía la ligera sensación de que sus recuerdos carecían de algo, la pieza faltante del complejo rompecabezas que su cerebro se esforzaba por reconstruir. Sin embargo, cada uno de sus intentos acababa en una terrible jaqueca capaz de retorcerle el alma misma.

Un suspiro de frustración fue expulsado de sus labios. La tormenta que se presentaba fuera de su hogar no le ayudaba ha estructurar sus ideas en lo más mínimo. Y no era que la lluvia le disgustara, al contrario. Esta siempre cumplía con el objetivo de apaciguar sus males, a excepción de ahora, pues los estruendosos rayos que caían con violencia desde el cielo y provocaban una fuerte vibración en los cristales la estaban desesperando.

El cielo se caía a pedazos y ella observaba a través de la ventana aquel espectáculo de luces mortales, rezando para que finalizara cuanto antes.

Con el fin de que la candente iluminación que los rayos generaban , no se colara al interior de su hogar. Cerró las cortinas que colgaban en cada extremo de la ventana encargada de proporcionarle la vista hacia el exterior.

No obstante, lo que ___________ no se esperaba era que con la caída del último rayo, un recuerdo enterrado en lo más recóndito de su cabeza, saldría a la luz.

Aquel joven de cabellera verde que estuvo presente el día que despertó del coma.

-..Loki..-

Un rayo de esperanza cayó en los habitantes de Asgard, en cuanto las travesuras de Loki dierim por terminadas. Si bien en un principio muchos estuvieron preguntándose el motivo de que el dios más caótico del reino detuviera su modo de entretenimiento, con el tiempo optaron por no indagar más en el tema. Temerosos de que toda paz que anhelaron, desapareciera con el retorno de sus pesadillas más reales.

Por otro lado, cierto peliverde que durante un tiempo fue el centro de las conversaciónes Asgardianas, yacía recostado en el balcón de su habitación. Su rostro no reflejaba emoción alguna, estando este completamente neutro.

Cuestionandose una y mil veces cómo permitió que una mortal se adentrara en su vida de tal forma que llegase a derramar lagrimas por ella. Desde que se prometió asimismo no volver a poner un pie en Midgard, Loki no hizo más que permanecer sumido en la amargura y lamentos. Comenzando desde el principio, cuando su instinto bromista lo impulsó a dar un recorrido por el mundo humano, conociendo así a quien hoy sería su dolor más grande.

Varias fueron las veces que su afán de verla atentaron contra su voluntad, más consiguió retener ese deseo. Sabiendo que si retornaba a aquel lugar, el dolor se intensificaría.

-Loki- una voz masculina habló a sus espaldas, pero el peliverde sabía perfectamente de quien se trataba y por ende, jamás volteó hacia ese sujeto -La cena está servida-

Muy pocas eran las ocasiones en la que Thor se dirigía a Loki, y cuando lo hacía solo era para notificarle que Odín quería verlo. No obstante, esa vez en especial fue diferente, el pelirrojo conocía la razón del comportamiento de Loki, y incluso para él, que todo parecía no provocarle una reacción. Lo consternó.

-Dile al viejo que cenaré después- anunció con un tono perezoso, centrando sus ojos solo en los jardines del palacio.

Thor no objetó más, retirandose de la habitación.

6 meses después

-¿Aún no lo superas verdad?- La azabache hizo una pausa cuando estuvo en la necesidad de digerir su hamburguesa, prosiguiendo una vez ya hecho eso - Eran bastante unidos, bueno hasta que tu.. - Izzy consideró que era mejor dejar esa conversación a medias, como mejor amiga de __________ comprendía lo doloroso que debía ser perder todo rastro de recuerdos de alguien que consideraba especial.

Sin embargo, si Loki se dignaba aparecer. Le rompería la cara por hacer semejante estupidez.

La malteada de fresa que la pelirroja ordenó minutos antes, permanecía intacta, sin apetito alguno como para dar un sorbo. Desde que recuperó sus recuerdos, no tuvo noticias de Loki en los meses que transcurrieron, causando que el sentimiento de aflicción se prolongara todavía más.

Seguramente -y conociendo la manera de ser del nórdico- este creyó que la mejor opción que tenía era volver a Asgard, ese reino rodeado por una gran muralla incompleta y del que él tanto le platicó en repetidas ocasiones.

__________ daría lo que fuera para coseguir dar con el paradero de ese lugar, lugar que la mayoría de los humanos consideraba ficticio, empero a pesar de haber indagado en multiples libros polvorientos y un sin fin de páginas de Internet, sus esfuerzos fueron infructiferos.

Aunque sus expectativas de hallar una cosa así fueron bajas desde el comienzo de su investigación, no se dió por vencida.

-_________- La angustiada voz de Izzy explotó la burbuja en la que se encontraba, no teniendo más remedio que fijar su mirada antes extraviada en algún punto de la nada, a su mejor amiga con el propósito de tranquilizarla.

-Lo lamento, ¿Que decías?- Todavía despistada , la pelirroja se acomodó en su silla correspondiente. Estremeciendose cuando el aire fresco de la mañana colisionó en su rostro.

Nubes oscuras decoraban el cielo que alguna vez resplandecía en un azul candente, y algunos rayos de luz se filtraban a través de esas masas de agua, brindando una leve iluminación a la ciudad de Oslo.
El invierno regresó en menos de lo que canta un gallo y las altas temperaturas eran perfectamente capaces de congelarte la piel.

Con su ensordecedor sonido, la campana de la universidad advirtió que el receso había finalizado, siendo el antesdicho lo suficientemente fuerte como para ser oído en toda la cuadra.
Ambas jovenes pagaron la cuenta, regresando a sus respectivas clases.

Una vez estas dieron por terminadas, __________ volvió a su apartamento. Desde la partida de Loki, este ya no se sentía igual, tornándose un sitio frío y desolado.

Sus padres habían vuelto a su ciudad natal, aún así estos llamaban a diario para saber el estado de su hija.

Sin muchos ánimos caminó hasta la cocina para prepararse un café.

-¿Donde dejé el azúcar?- Refunfuñando, su mano rebuscó dentro del estante que colgaba en la pared, topandose con unas frituras.

Frituras que la hicieron sonreír con melancolía, pues estas eran las favoritas del nórdico. Una lágrima recorrió su mejilla y aterrizó sobre el envoltorio que sus manos sostenían.

¿Qué tan difícil era superar la partida de aquel dios?

Limpiando todo rastro de aquel líquido que amenazaba con caer de sus ojos, guardó las frituras en su respectivo lugar y continuó con la preparación de su café.

Tal vez la tarea que tenia pendiente le ayudaría a distraerse unos minutos.

-Eres el ser más tonto que he conocido jamás- con un jalón de oreja, Frigg le lanzó una mirada de desaprobación al peliverde, el cual emitía pequeños quejidos por la inesperada acción de la rubia -¿Por qué la dejaste ir?- Soltando la oreja adolorida de Loki, la mujer lo observó unos segundos esperando pacientemente la respuesta del chico.

- Ya no me recuerda, ¿de que sirve estár con ella si ni siquiera sabe quien soy?- Con el semblante serio, Loki se recostó en el balcón de su habitación, donde ya se le hacia habitual frecuentar -Déjame en paz ¿quieres? mis asuntos personales no son de tu incumbencia- tan frío como el invierno, desvió su mirada para enfocarla en algún lugar que fuese más interesante que el rostro de la diosa.

Frigg suspiró, dándole la razón. Es cierto que ella no estaba en una posición para decirle que hacer o que no hacer con su vida sentimental, después de todo Loki no era un niño -a pesar de que muchas veces actuara como tal- pero verlo sufrir de la manera en que él lo hacía, le afligía.

Incluso alguien como Loki merecía ser amado y a leguas se notaba el amor que sentía por la humana, de quien tampoco dudaba de sus sentimientos hacia él.

Las esperanzas de que la chica recuperara todo recuerdo en el que Loki estuviese involucrado, aún prevalecía en Frigg.

-No te recordará si no regresas para solucionar las cosas- Sus facciones se suavizaron y su mano se asentó en la espalda del peliverde -deberías considerarlo - y sin nada más que aportar, la reina de los dioses nórdicos se marchó tan majestuosa como siempre.

Dejando mucho en que pensar a Loki, el cual meditó toda la noche las palabras de Frigg.

Las estrellas de Asgard fueron opacada por la luz del sol, responsable de que los pájaros de la zona despertaran a varios con sus melodiosos cantos. Loki despertó en cuanto una de las aves se posó en la ventana de su habitación, quien animosa y risueña batió sus alas blancas iniciando su canto matutino.

Algo que molestó al dios del engaño. No estaba de ánimos para escuchar a ese pajarraco cantar, bastante tenía con los cuervos de Odín, que cabe resaltar, no lograbas silenciarlos con nada.

Teniendo que abandonar su cómoda cama, se dirigió adormilado hasta la ventana, soltando maldiciones en norrœ tunga, mejor conocido como nordico antiguo.

Al vivir con __________ esas cosas eran menos factibles, pero tenía que caer en la realidad. Él ya no estaba junto a ella.

-Lárgate, fuera- Abriendo el ventanal con desgano, el chico movió sus manos con el fin de auyentar al pequeño pájaro, que no tardó en marcharse despavorido luego de aquello.

"Deberías considerarlo"

Las palabras del día anterior resonaron en su cabeza por milésima vez. Ya no soportaba ni un segundo más escuchando la voz de Frigg en sus pensamientos, pues solo causaba que su malhumor incrementara.

Regresó a la comodidad de su cama, tumbandose boca arriba y frotando su rostro con su mano en un intento desesperado de poner su mente en blanco.

Se prometió asimismo no regresar a Midgar, pero siendo sinceros él no era alguien que cumpliera sus promesas. Ni una vez en toda su existencia tuvo la dignidad de hacerlo.

Esta podía ser la excepción ¿o no?

Se sentía frustrado consigo mismo, quien iba a decir que una humana pondría su vida de cabeza. Le apetecía salir fuera y gastarle bromas a todos, pero su lado burlón no salía por más que se esforzara. Desde la perdida de memoria de ___________, solo se la pasaba apreciando la vista desde su balcón.

Cerró sus ojos presto para volver a dormir, y cuando el sueño se estaba apropiando de su cuerpo y mente. Unos graznidos muy irritantes impidieron que su cerebro se apagara por unos cuantos minutos más.

-Algún día haré de esos pajarracos un buen caldo- Frunciendo su ceño y sin más remedio, Loki tuvo que renunciar a su sueño. Optando por tomar una ducha.

Ingresó a su baño y ahí permaneció unos minutos, dejando que el agua se llevara consigo todo lo malo y una vez ya listo, y sin más opciones disponibles. Salió a los jardines con el fin de despejarse un poco.

El lugar estaba desolado, era temprano por la mañana y la mayoría aún se encontraban bajo sus mantas. Las únicas expeciones después de él eran Odín y Thor, los cuales acostumbraban a madrugar.

Tomó asiento en una banca vacía, inclinando su cabeza hacia atrás. Apreciando el cielo unos momentos. Este era una paleta de colores de naranja, rojo y amarillo. Señal de que el sol no había salido en su totalidad.

-Tal vez.. hechar un vistazo no haría daño- Sus promesas se fueron por la borda tal como lo suponía, sin poder contenerse más. El dios del engaño decendió hacia Midgard, no sin antes cambiar su vestimenta y así pasar desapercibido.

Abordó el subterráneo que utilizaba frecuentemente para llegar a la Universidad. Tanto la estación como las calles eran un ajetreo total pero, no se podía esperar más de un Lunes por la mañana.
Su música favorita se reproducía en su teléfono y llegaba hasta su sistema auditivo gracias a sus audífonos.

La sensación de que alguien o algo la observaba, la acompañó hasta su última parada. En donde más gente aguardaba para abordar el tren a empujones. Impacientes para llegar a su destino.

La parte más complicada era tomar el subterráneo, y ahora que se encontraba a unas pocas cuadras de la universidad. Su mente estaba en calma, no obstante algo en las lejanías llamó su atención.

Un joven que estaba de espaldas a ella, absorto en lo que parecía ser un teléfono. Sus ojos se iluminaron inmediatamente cuando fue testigo del parecido que compartía con Loki.

Su corazón no tardó en despertar de su estado letargo, latiendo con intensidad. No se lo pensó dos veces y se acercó a él corriendo tanto como sus piernas se lo permitieron, pero sus intentos se vieron obstruidos cuando una ola de personas impidió que lo alcanzase.
Algún distraído que caminaba en dirección contraria, chocó de manera brusca contra su hombro, provocando que ___________ cayera al suelo y que la gente tuviera que abrirse paso para no terminar de la misma forma.

El chico se volteó, rompiendo las ilusiones de ____________. Pues no se trataba de quien ella creía.

Una mujer tuvo la gentileza de ayudarla a ponerse de píe, preguntándole repetidas veces si no se había hecho daño. La pelirroja le hizo saber que se encontraba bien y agradeciéndole inmensamente, continuó con su recorrido hasta llegar a su Universidad.

Sus pies se detuvieron involuntariamente en la entrada. Dándole el permiso a su mente de jugar con ella nuevamente. Trayendo al presente tortuosos recuerdos y manifestando la silueta de aquel dios esperando por ella en las escaleras que daban a la puerta principal.

Justo como en los viejos tiempos.

-¿Te sorprendí?- Expulsó una fuerte carcajada para después hecharle un vistazo a el lugar -Conque aquí es donde transcurre tu aburrido día-

-¿Qué haces aquí?, ¿como me encontraste? estas empapado, te vas a resfriar- La preocupación de ______ se manifestó de forma explosiva, sacándose una de sus chaquetas se la colocó a Loki para cubrirlo y luego de eso lo jaló bajo el paraguas.

-Ow si te intereso- Se burló sin evitar contener su risa.

Con la caída de la primera gota de lluvia, cayó su lágrima. No una que resbala por la mejilla, sino una que se desliza por el alma, directo desde el corazón.

Loki, quien la siguió desde su respectivo hogar. Presenció cada acción de la chica desde una distancia prudente, en silencio y con un rostro inexpresivo por fuera. Pero con un caos inmenso por dentro, batallando para regresar a Asgard, decidiendo que por hoy ya la había visto suficiente.

Pero como era de esperarse, por segunda vez volvió a perder la guerra. Optando por quedarse un poco más.

Nunca se había contradecido tanto como ahora.

Se recostó en la rama del árbol en la que se situaba, esperando el próximo movimiento de la pelirroja. La cual de imprevisto, comenzó a gritar su nombre de una manera desgarradora, suplicando que si se encontraba allí, que se dejara ver.

Dejándolo estupefacto.

He vuelto después de miles de años. La inspiración no me llegaba y por más que intentara, las palabras no salían.

También quería agradecerles por todo el apoyo que le han dado a esta historia, jamás pensé que les pudiera gustar tanto. Muchas gracias! 💕