Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

cinco

Beomgyu no acostumbraba a estar solo por las noches, es por eso que cuando Soobin le dijo que la noche siguiente no haría patrullaje, automáticamente le preguntó si podía ausentarse también.

Lo raro fue que al día siguiente no asistiera a clases. El mayor de los dos es bastante saludable y que Yewon le había respondido que en realidad estaba enfermo se le hizo bastante extraño.

Pero claro que dejó de importarle en cuanto asumió que el chico sólo había entrado en celo, a pesar de que, según lo que podría recordar, era pronto para que aquello ocurriera, y que en lugar de hacerse pasar por enfermo le acomodaba ser un poco más sincero con aquello del celo.

Hasta que una persona llegó a su mente, la cual probablemente delate a su hermano. La hermana menor de los Huening, Bahiyyih.

Se dirigió hacia los salones donde la chica estaría esperando por su próxima clase, un sector que se caracteriza por llevar a los alumnos de primer año como la pequeña omega. Caminó unos cuantos minutos hasta que la encontró conversando de forma bastante cariñosa con quien parecía ser una joven alfa. Recordó que hace no mucho, Bahiyyih había conocido a una chica de su edad, una alfa que tenía por nombre Seo Youngeun.

La tierna hermana menor de un idiota llamado Seo Beomjune.

— ¡Hiyyih! —la chica se volteó al escuchar el apodo y sonrió de forma automática cuando lo vio, llamando la atención de la alfa también.

—Oh, Oppa, ¿qué te trae por acá? —preguntó en lo que el alfa se acercaba.

—Nada malo, solo quería saber si sabes algo de Soobin, según Yewon está enfermo pero no hay mejor fuente que tú para confirmarlo.

—Oh, ¿Choi Soobin? —preguntó Youngeun, haciendo que Beomgyu asienta en respuesta —. Por lo que supe, ayer estuvo metido en una pelea con Beomjune, que de hecho Yeonjun estuvo de testigo.

Beomgyu frunció el ceño, confundido por la información, luego miró a Huening, quien sólo alzó los hombros, revelando así que en realidad no tiene la menor idea de qué pudo haber pasado con el alfa.

— ¿Y por qué se habrían peleado?

Youngeun alzó los hombros, revelando que su conocimiento llegaba hasta ese punto.

—Supongo que es una disputa de terreno.

Eso no sonaba bien.

Las disputas de terreno a términos de comparación es que ellos dos estaban tratando de comprobar cual de los dos en tiene más grande, con peleas físicas, verbales y muchas veces tiene que ver con relaciones amorosas. No tenía idea de la historia que manejan esos dos, sólo sabía que en su momento fueron amigos, pero que luego comenzaron las peleas y disputas entre ellos. Ahora supone que la riña es más profunda porque Soobin estaba enamorado de Yeonjun pero el omega prefirió estar con Beomjune.

—Oh, creo que ya entiendo lo que está pasando.

—Yo no —comentó Bahiyyih — ¿Qué quieren decir con todo esto?

Youngeun le explicó a la omega de qué iba una disputa de terreno, y entonces la omega lo pensó un poco.

—Pues la disputa no tendría sentido. En términos de biología Soobin es el alfa más apto.

—Sí, pero Beomjune también tiene un sentido de liderazgo y…

—Ego frágil —contestó Bahiyyih —. Siempre ha intentado molestar a Soobin con lo que sea. Intenta demostrarle que es mejor que él y que todos al tener todo lo que Soobin quiera, ¿no crees?

—Pero Soobin no es la persona más querida que digamos…

—Hey, ¿cómo que no? Es un gran chico —abogó el alfa —. Usualmente es una de las mejores personas a las cuales puedes recurrir si algo pasa, y de verdad puedes contar con él como si fuera un amigo, no importa nada. Solo que seas leal con él.

Youngeun guardó silencio y miró a Bahiyyih, quien le sonrió y asintió.

Nadie entendía de dónde salieron las cosas que perjudicaban a Soobin, y aún si lo hicieran, casi todos conocían al alfa, era imposible que creyeran en cualquier otro disparate que se dijera de él.

—Lo dices porque es tu hermano, ¿no?

—Claro que… ¿Eh? —Bahiyyih miró a su compañera, confundida, aunque la confusión venía por el alfa también.

— ¿De dónde sacaste eso? —preguntó la menor y entonces Youngeun miró a los dos, extrañada por las reacciones que tenían.

—Beomjune fue quien nos lo dijo —contestó la chica.

— ¿A ti y a quién, Youngeun?

La alfa frunció el ceño, cada vez más confundida con lo que se le estaba preguntando.

—A su grupo de amigos… Y a Yeonjun.

Beomgyu tomó aire. Ahora entendía el chiste de dónde se enteró Taehyun de lo ocurrido.

—Uh, ¿hay algo de malo con eso?

—Pues, que tu hermano está buscando perjudicar a Soobin con eso, algo que no es de mayor relevancia.

El timbre que indicaba el inicio de clases se hizo oír, a la vez que la expresión de entendimiento y nerviosismo se hacían notar de manera inmediata en el rostro de la pequeña Seo, la cual se fue a su salón sin soltar alguna otra palabra.

—Me debo ir —indicó Choi —. Bahi, si quieres puedo llevarte a tu casa después de clases.

—Me parece bien, hace tiempo que no me acompañas, eh —ambos rieron y entonces un mensaje llegó al celular de Bahiyyih —. Oh, es Soobin.

Soo

Hiyyih, necesito pedirte un favor.
Ayer por la noche un grupo de matones me atacó

¿Estás bien? O.o

De pana, pero el traje valió queso
De paso si le puedes quitar la capa
Edna Moda tenía razón 😭

Oh no, no tengo el tiempo
¡Puedes coserlo por tu propia cuenta!

Es que, no he salido de mi cuarto TT

A ver y por qué no.

Mi bella cara no está en las condiciones para eso.

Eres un desastre, Soo.

Bahiyyih suspiró y le mostró la pantalla a Beomgyu, quien siseó ante las palabras del alfa.

—Oh, si quieres yo me hago cargo de eso —comentó y entonces los ojos de la omega se iluminaron —. Sé coser y no creo que sea tanto.

— ¡¿De verdad harías eso?! —el alfa asintió y Bahiyyih chilló, abrazando a Beomgyu — ¡Gracias, gracias!

El alfa rió con suavidad mientras acariciaba el hombro de la menor, diciendo que no era gran cosa y luego la chica se fue a tomar sus clases como era debido, entonces decidió por su parte ir a sus clases y pensando en cómo ir a buscar el traje destruido de Soobin.

A Soobin no le gustará mucho saber la nueva información que portaba.

El chiste de sus padres es bastante simple.

Choi Seokjin, un alfa surcoreano casado con una delta marcada por él, tenían una hija y para el momento en el que acontecen las cosas estaban esperando mellizos; y Juana María Irrázaval, una hermosa beta originaria de Chile que, al igual que Seokjin, es profesora.

Ambos se conocieron fuera de sus países, ya que ambos incursionaron en un magíster para poder ejercer clases en las universidades. Primero la relación de ellos se basaba principalmente en aprender el idioma del otro y en compartir apuntes o estudiar juntos. Fueron avanzando de eso hasta volverse amigos, hasta que a Seokjin se le ocurrió la idea de robarle un fogoso beso a Juana María.

Y antes de que acabara el magíster, ocurrió.

Su madre se niega a darle los detalles completos, pero, podía asegurarse que a pesar de ser sin compromisos, ella lo habría sentido como un momento especial y único.

Seokjin volvió a su vida en Corea, conoció a sus nuevos cachorros y siguió con su sistema de vida, pero la vida de Juana María cambió por completo al enterarse que de esa noche dio un fruto.

Sí, su presencia armó un caos al principio, pero no quita que su madre lo ama y que aunque tuvo que hacer cosas que no fueron de su agrado, tampoco había problemas con su padre a pesar de que no convive mucho con él.

El problema viene cuando la esposa de Seokjin aparece otra vez en la escena.

Aquella mujer cuando lo vio por primera vez en realidad lo consideró un cachorro tierno y educado, pero cuando supo que era el hijo de su esposo con una mujer que no era ella, simplemente, se armó la grande. Incluso cuando su madre también se enfureció al darse cuenta que fue "las patas negras" de alguien casado, eso le dio mucha vergüenza.

Y es lo que en realidad temía, volver a causar un problema con esa mujer, la cual claramente le tenía una mala increíble. También no quería armar problemas desde que seguía siendo un secreto de su madre, puede estar claro que se sintió humillada cuando vio que el hombre que la había cautivado es un hombre infiel.

Pero su hermano necesitaba los apuntes y que se llevara su traje para que Bahiyyih pueda arreglarlo, así que tenía motivos para defenderse.

Tomó aire y tocó el timbre, deseando que en realidad abriera alguien más amigable, como su padre o Yewon, incluso que Soobin tuviera la confianza de abrir, pero, la madre de ellos y esposa de su padre fue quien abrió la puerta.

—Uh…

— ¿Tú?

Tragó saliva, tratando de ordenar las palabras que debía usar de forma sabía para evitar un desastre.

—Buenas tardes, vine a dejarle los apuntes de hoy a Soobin y… —mordió su labio, casi dejando saber a la madre que son los famosos héroes anónimos —Y explicarle la materia.

— ¿Explicarle?

— ¡Sí! Pues verá, están pasando nueva materia, y créame que será mejor si alguien le explica un poco a Soobin.

— ¿Acaso insinúas que mi hijo es un tonto?

— ¡Para nada! Ocurre que el maestro no va a explicar la materia de nuevo, estoy seguro que él lo entenderá mejor que yo y la clase entera…

Ambos guardaron silencio, entonces la mujer extendió su mano hacia el chico.

— ¿Uh?

—Dame los apuntes, yo se lo explicaré.

—Señora Kang, con todo respeto —comenzó —. No puedo entregarle mis cuadernos, yo también debo estudiar.

— ¡Olvídate de que vas a hablarle a mi hijo! —la mujer cerró la puerta en la cara de Beomgyu, el cual suspiró rendido.

Sí, terminó armando otro problema con esa mujer.

Soobin

Iré en la noche a tu casa, deja la ventana abierta.

¿Así que eras tú quien la tiene tan enfadada? ㅎㅎ

Chistoso, de todas formas arreglar tu traje es una
wea completamente innecesaria.

Entonces la ventana abierta
¿Quieres que te tenga algo para beber?

Leche de chocolate, por favor 😋

Suspiró y guardó su celular, caminando esta vez hacia la escuela de sus hermanos para recogerlos mientras pensaba en cómo, al menos, ganarse la simpatía de aquella mujer.

Por supuesto que lo quería lejos de sus hijos, es un rechazo común al ser ella tan territorial y básicamente ser la legítima mujer de su padre al haber sido marcada por él, pero, ya iban casi veinte años de lo ocurrido y en términos más salvajes, sus hijos son bastante poderosos por su cuenta, y así como ellos sobrevivieron, él también lo hizo.

No es algo que le gustaría rebatir, puesto que causaría demasiado conflicto, pero, también es el hijo de Seokjin, y está en su completo derecho de disfrutar de su familia paterna.

— ¿En qué piensas tanto? —alzó la mirada, viendo a su hermana menor y sonrió.

—Nada, no te preocupes.

El tiempo se le pasaba una vez comenzaba a pensar, tan así que acababa de darse cuenta que sus hermanos estaban ahí.

— ¿Volverás a salir por la ventana hoy?

Beomgyu miró extrañado a Nicolás.

— ¿Salir por la ventana?

— ¡Sí, vestido como Tuxedo Mask!

Guardó silencio ante lo que dijo su hermano menor y entonces miró a Lucía, quien sólo asintió.

—La otra vez te vimos salir por la ventana vestido de esa forma ¿cómo es que no te has fracturado?

Tragó saliva y rápidamente los tres entraron a un callejón, el cual estaba sin ninguna persona. Luego, de sus billetera sacó un par de billetes, dejando cada mitad en las manos de sus hermanos.

—Escuchen, ninguna palabra de esto a la mamá.

Lucía y Nicolás se miraron y bastó con que sonrieran para entonces tener un acuerdo entre ellos, luego miraron a su hermano mayor, ya mentalizados en qué decirle.

—Oh, bueno —comenzó Lucía, Beomgyu ya sabía el rumbo que estaba por tomar esta tontería —Un secreto como este es difícil de guardar, ¿verdad Nicolás?

— ¡Sí, muy difícil!

Bufó al entender lo que sus hermanos querían.

—Bien, los llevaré a ese evento de popurri.

—Pompompurin —corrigió la niña.

— ¡Y yo quiero ir a ver a Pororo! —luego lo pensó mejor — ¡No, mejor a Tayo, vendrá al teatro!

—Y dulces.

— ¡Autitos!

—Mi tarea por una semana.

— ¡Ir al parque de diversiones!

— ¡Está bien! Les haré esos favores, pero recuerden, ninguna palabra de esto a la mamá y, todo será con tiempo, el dinero de la cafetería no me alcanza para tantas cosas de una.

Los niños sonrieron y asintieron, luego continuaron su camino hacia su hogar mientras se preguntaban en qué podrían gastarse su dinero, mientras que Beomgyu se preguntaba si acaso valía tanto ocultar que es el Gato.

El chiste de Soobin le estaba costando caro.

En realidad no era partidario de volver a salir por la noche, pero, debía admitir que perfectamente pudo haber ido a la casa de Soobin más temprano. En su defensa, sus dudas lo llevaron a quedarse en su cuarto y mirar el techo como un idiota, aún cuando podría haber estudiado, o bien, ir a quejarse a Soobin.

¿Cómo se atrevía a faltar a una clase tan importante para la bendita investigación?

Lo matará en cuanto lo vea, de eso no cabía duda.

Suspiró mientras caminaba hacia la casa donde vivía el alfa Choi, estaba a unos segundos de llegar y golpear la puerta, hasta podía ver la ventana abierta de la cual recordaba muy bien que se trataba del cuarto del alfa.

Caminó con calma, al menos hasta que escuchó el reconocible disparo de un gancho y detuvo sus pasos al ver cómo una figura que conocía bien estaba ingresando por la ventana del chico. Se escondió en el costado de la casa que estaba al lado y esperó por varios minutos, viendo cómo uno de los payasos que tanto se robó de su mejor amigo salía de la dichosa ventana, entonces frunció el ceño mientras abría la boca por la sorpresa.

Lo sabía. Lo que vio significaba que de verdad Soobin estaba envuelto de forma directa a la estupidez. Y por supuesto que se lo haría saber a Taehyun, también a todo el mundo.

Olvidó su objetivo principal y corrió en camino a su hogar, aún pensando en la manera la cual podría exponer a todos que Choi Soobin era el farsante detrás de los tan alabados Zorro y Gato.

Ingresó a su cuarto entonces caminó en círculos durante un buen rato, armando el discurso que daría para que su mejor amigo se entere de a quién ha tenido de verdad en su boca. Algo mezquino, lo sabe, pero prefiere eso a tener a su amigo en esa estúpida burbuja en la cual, mientras más pase el tiempo, más dañina será para él.

Aunque se olvidaba de algo esencial, y es que Taehyun tiene juicio propio.

—No.

— ¡Pero, podrás saber quiénes son tus héroes!

Yeonjun estaba anonadado, pero entonces el chico le sonrió.

—Lo sé, pero si son anónimos es porque quieren separar su vida normal de lo que son sus vidas como Zorro y Gato.

Suspiró mientras miraba a su amigo y el timbre se hizo oír, entonces lo vió. Vió a Choi Soobin.

— ¡Tú!

El chico no reaccionó ante el grito de Yeonjun, aunque en realidad nadie lo haría, no cuando estaba todo el alumnado dirigiéndose a sus clases.

Bufó y encontes se encaminó hacia Choi Soobin, quien caminaba algo apurado, tan así que lo perdió de vista entre los estudiantes. Se encaminó hacia el salón de clases, asumiendo que lo vería allá, hasta que lo encontró, pero hablando con el maestro de aquella materia.

—Ya te dije que no voy a separarlos.

—Por favor, a Yeonjun no le es cómodo trabajar conmigo, tampoco es mi idea molestarlo.

—El trabajo en parejas está hecho para que formen un equipo y cumplan con lo que deben, sin importar sus problemas personales, si él tiene un problema contigo entonces deben hablarle en otro momento, lo único que les estoy pidiendo es que cumplan con su tarea.

Guardó silencio, estaba detrás de Soobin y escuchando cada palabra de los dos.

—Pero…

—Sin peros, Soobin. Entra al salón y cumple con tu deber, es lo que me importa qué hagas —contestó el docente mientras apuntaba el salón, a lo cuál el alfa suspiró y entró.

Suspiró y saludo al maestro, luego entró al salón y se sentó al lado de Soobin, quien no le dirigió la palabra o algo parecido.

Lo miró por unos segundos y luego el maestro ingresó al salón, pero en lugar de dar una clase común, le dió el chance a los estudiantes de seguir con sus investigaciones.

A pesar de ello, ni Soobin ni Yeonjun estaban haciendo algo al respecto, ya sea avanzar lo que Yeonjun tenía o comenzar otra vez, en lugar de eso había un gran silencio y sus mesas vacías. De por sí la situación era bastante extraña desde que Soobin se le declaró, pero ahora las cosas estaban extrañas y difusas.

No lo entendía, si decía estar tan enamorado de él, ¿cómo iba a dejar ir la oportunidad de ganar cercanía tan rápido? ¿De verdad tuvo una pelea con Beomjune?

—Intenté… Intenté pedirle al maestro que nos deje hacer el trabajo con otros compañeros —Alzó la mirada en dirección al pelinegro, quien tuvo la mirada fija en sus manos, las cuales a su vez estaban posadas en la mesa —Pero, se negó a dejarnos cambiar de pareja. Lo siento.

No dijo nada, puesto que acababa de oírlo en vivo y en directo.

—Puedo investigarlo todo por mi cuenta, luego la acomodas y la presentamos, así hacemos las cosas por separado y…

—Entonces pierde el sentido que sea un trabajo en parejas, Soobin.

Soobin lo miró y tragó saliva.

—Sé que te incomoda estar cerca mío, y no quiero seguir molestando con eso —contestó—. Me lo dejaste claro la otra vez.

Sabía a lo que se refería, ese día se negaba por completo a que Soobin fuera su compañero de una investigación, y es que la verdad no pensó mucho en las consecuencias de aquello.

Incluso si Soobin ya no es una persona de su agrado, de seguro lo hizo sentir mal con lo que hizo.

Suspiró mientras pensaba en ello, buscando las palabras correctas para lo que seguía.

—Escucha, solo es un trabajo de investigación, si nos enfocamos los dos en investigar y acomodar la información, entonces nos tomará menos tiempo y solo nos quedará presentarlo —Intentó negociar, y a pesar de que vió el brillo en los ojos de Soobin y las feromonas de este salían como si fuera lo más refrescante que su nariz pudo olfatear, este se mantuvo sereno y a cambio, pareció pensarlo.

—Bien, lo haremos como quieras —contestó el alfa, y entonces Yeonjun asintió.

—Bueno.

Ambos comenzaron con la investigación de cero, anotando juntos los puntos que creían importantes de lo que iban encontrando y para cuando acabó la clase, ya llevaban una buena parte de la investigación hecha.

No le dijo adiós, pero sí hizo un gesto con la cabeza, el cual fue contestado con un "te veo la próxima clase, Jun" antes de separarse e ir uno por su camino.

Estaba tranquilo, caminando a un paso normal y mientras pensaba en lo que Soobin tenía en mente.

¿Acaso se estaba rindiendo en la disputa de terreno, o estaba planeando algo?

Entonces, vino a su cabeza el suceso del día anterior y su ceño volvió a fruncirse. Por supuesto, aquél momento era una pantalla de humo para distraerlo de lo que en verdad importaba.

Quitarle ese antifaz.

Gruñó y su aroma se volvió amargo, al menos hasta que vio un boletín en el muro que estaba apuntando los próximos efemérides.

"Obra de teatro, audición de guiones".

Bingo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro