Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Zootopia (1)

Nayeon amaba cuando su familia y ella salían de vacaciones a unas cabañas en el bosque, porque así podían relajarse y olvidarse del estrés que implicaba convivir con híbridos carnívoros.

Cuando esto pasaba a la coreana le gustaba transformarse en conejo y correr un rato, también le gustaba construir madrigueras provisionales donde le gustaba descansar sin que su familia la molestara.

Su padre, el señor Im, normalmente se encargaba de conseguir los vegetales que comerían en su estancia ahí, pero esta vez no había podido cargar todas las bolsas hasta la cabaña que rentaron, así que le pidió a Nayeon que fuera a recogerlas.

La conejita quiso correr en su forma animal, por lo que se transformó y comenzó a correr dando pequeños saltitos, el auto estaba algo alejado pues se encontraba en el estacionamiento del recinto, el lugar donde pagabas por la cabaña y el guardabosques te daba la llave.

Nayeon visualizó el auto a unos cuantos metros, podía sentir el calor que generaba su cuerpo por correr pero le gustaba pensar que estaba ejercitando su cuerpo y por tanto, volviendolo saludable.

Siguió feliz hasta que de pronto una mano grande la cargó sin mucho esfuerzo -¡Mira papá, un conejo!- una chica la miró directamente a los ojos y Nayeon quiso cagarse encima por el miedo, pues olía a alfa.

La chica la llevó hacia otro adulto y se la mostró -Se ve bien alimentado, no lo dejes escapar, puede cenarlo tu hermana, ya sabes que le gusta la carne de conejo- el hombre le picó la panza y ella se asustó más.

Diablos, no solo eran alfas, también carnívoros, ¡estaba muerta! Ella iba a ser la cena, ojalá hubiera podido despedirse de sus padres aunque sea una última vez.

La chica corrió hacia el bosque, donde un zorro rojo hacía un hoyo en el suelo -¡Tzuyu, te conseguí la cena!- dijo la alfa, el zorro paró y se transformó, apareciendo en su lugar una hermosa chica con el cabello rojo y un flequillo bien cortado, era alta, delgada y muy atractiva, tenía los ojos más cautivadores que Nayeon había visto, junto a unos labios delgados.

La chica que aparentemente se llamaba Tzuyu la tomó entre sus manos y Nayeon sintió que iba a orinarse del miedo, sin embargo aguantó ese impulso.

Tzuyu la acercó a su rostro para inspeccionarla y Nayeon pudo oler el fuerte olor a canela sobre la alfa, lo que la hizo estremecer. Tzuyu acercó a la chica a su nariz y la olfateó, Nayeon cerró los ojos con el corazón a punto de salirse de su pecho por el miedo, la alfa paró y sonrió -Está bien Shu, vuelve con papá y Mark, yo me encargaré- la chica asintió y se fue por donde llegó.

Cuando estuvieron solas Nayeon quiso llorar, pues sabía que iba a ser asesinada a sangre fría, su pequeño y esponjoso cuerpo tembló cuando Tzuyu la movió haciéndola bailar ridículamente.

-Tienes un olor muy rico, omega, el pay de manzana es mi favorito y además combina con la canela- dijo la alfa con una voz divertida que ocultaba un doble sentido.

Nayeon movió su nariz con curiosidad al escucharla decir eso, Tzuyu le acarició las orejas y sonrió -No voy a comerte, transformate pero no huyas, quiero conocerte- dijo y se hincó para dejar a la conejita en el suelo, Nayeon quiso correr pero algo dentro de sí la hizo acatar las órdenes de la alfa. Se transformó y apareció en su forma humana, mientras sus mejillas se sonrojaban de forma involuntaria.

La alfa recorrió su cuerpo y cara con la mirada -¡Wow, realmente eres más bonita de lo que imaginaba!- buscó un olor en particular y lo encontró -Efectivamente, pay de manzana- dijo como si nada.

Nayeon sintió vergüenza pues era cierto, su olor era ese. Se encogió en su lugar -Quiero irme- pidió, Tzuyu asintió.

-Claro, solo dime tu nombre, por favor, eres muy bonita- la alfa parecía ser muy agradable, pues siempre estaba sonriendo.

-Me llamo Nayeon- contestó, a pesar de lo sucedido anteriormente podía notar que el ambiente no era peligroso.

-Encantada de conocerte Nayeon, yo soy Tzuyu- su voz alegre hizo sonreír a la conejita.

Nayeon jugó con sus manos y después las puso detrás de su espalda -Bueno, tengo que irme- se disponía a caminar cuando la chica tomó su mano.

-Espera, dame tu número, quiero conocerte más- ambas se sonrojaron con una vergüenza llenando el ambiente, pero la omega no se negó, le dio su número y además le dijo donde estaba su cabaña.

Tzuyu no intentó ocultar su felicidad y dio pequeños brincos en su lugar -¡Genial! Iré a visitarte, ¿Cuánto tiempo estará aquí tu familia?- Nayeon pensó un momento y después dio su respuesta.

-Un mes- la alfa asintió satisfecha por la respuesta.

Ambas se dijeron adiós y Nayeon volvió al auto, tomó la comida y volvió a la cabaña. Al llegar su padre no paró de regañarla, pues se había tardado demasiado, la omega decidió omitir lo que pasó para que sus padres no se asustaran y recibió el regaño.

En su estancia ahí Tzuyu no paró de visitarla, al principio sus padres casi se infartan al encontrar a una alfa carnívora platicando con su hija mientras ambas estaban acostadas en el pasto, Nayeon tuvo que presentarlos para que estuvieran tranquilos y curiosamente se llevaron muy bien.

Nayeon ahora disfrutaba de hacer sus madrigueras mientras a su lado el zorro rojo cavaba un hoyo, incluso llegaron a hacer competencias sobre quien excavaba más rápido.

Sinceramente, Nayeon quería demasiado a Tzuyu, le había tomado mucho cariño en un mes.

Un día hablando se enteró que no vivían cerca pero sí en la misma ciudad, así que podían seguir viéndose después de terminar las vacaciones. Nayeon estaba feliz.

Al término del mes la familia de Nayeon estaba empacando sus cosas y Tzuyu fue a ayudarles, ya que su familia aún se quedaría cinco días más.

Tzuyu tomó la mano de Nayeon antes de subir por la última maleta -Ven conmigo- ambas caminaron hasta que llegaron cerca del río, la híbrida de zorro apretó sus manos con fuerza y la miró directamente a los ojos -No puedo dejar que te vayas sin que escuches mis sentimientos- la híbrida de conejo movió su nariz rápidamente, una característica de que estaba intrigada.

Tzuyu la miró directamente a los ojos -Me gustas y quisiera que fueras mi omega- el rostro de Nayeon fue invadido por un sonrojo.

-Pero no podemos estar juntas, soy una híbrida de conejo- dijo nerviosa, Tzuyu se encogió de hombros -¿Y eso qué?- se acercó a la coreana, haciendo que su corazón latiera por estar con una carnívora a esa distancia.

-¡Los zorros son carnívoros!- exclamó la híbrida de conejo con su nariz moviéndose.

-No voy a comerte, al menos no así- contestó la híbrida de zorro rojo con un doble sentido en su comentario, acompañado del movimiento burlón de sus cejas.

Nayeon golpeó su hombro y sintió los nervios de su omega por la proposición -Pero, no soy fuerte como los zorros rojos- indicó con un tono lastimero, Tzuyu volvió a encogerse de hombros

-No importa, me gusta que seas débil por ser un conejo, creo que eres muy tierna- intentó acercarse más y Nayeon mordió su labio inferior con nerviosismo.

-¿Si acepto prometes no ser brusca con el cortejo? He escuchado que los zorros juegan mucho- movió sus pies de un lado a otro, y jugó con sus manos.

Tzuyu pareció pensarlo pero al final asintió -Lo prometo- Nayeon sonrío y entonces ambas se acercaron.

-Entonces acepto- la alfa le dio un beso en la mejilla y cuando iba a besar sus labios un grito se escuchó.

-¡Nayeon debemos irnos!- ambas se alejaron con risas tímidas y regresaron a la cabaña tomadas de la mano.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro