Brook.

Estoy muerta, no debí beber tanto anoche, mi cabeza parece que va a explotar y mi cuerpo se siente pesado, recargo mi cabeza una vez más sobre la mesa y observo la pizarra delante de mí, el profesor Rodríguez explica una formula química y sus posibles variantes para resolver un problema, suspiro y apoyo mi frente contra la madera.

– Mierda – susurro mientras una fuerte puntada en el costado de mi cabeza me lastima.

– ¿estás bien? – susurra una chica en mi dirección y asiento.

– Sí, no te preocupes – ella sonríe con cortesía y después de unos largos 20 minutos termina la clase.

Recojo mis cosas con lentitud y desciendo los pocos escalones que me separan del piso por el cual camino sin ganas. Una vez en el pasillo no he dado ni dos pasos cuando unos brazos de piel tostada y tatuada rodean mis hombros

– Hola hermosa – la voz divertida de Kyle me hace cosquillas en mi mejilla mientras el aprovecha la cercanía para dejar un sonoro beso – ¿Cómo estás? – Mis ojos se fijan en él y ríe – te ves fatal – comenta divertido liberándome

– hola Kyle, estoy muerta, nunca más vuelvo a celebrar un cumpleaños en la semana si al día siguiente tengo clases, no preste atención a ninguna de ellas – le comento y el me ve con diversión

– lo siento ha sido mi culpa, me deje llevar – levanto mi mano para detenerlo ha intentado excusarse demasiadas veces por su escapada con esas cinco chicas

– No te preocupes Kyle, en serio no pasa nada – el suspira y ladea su rostro y luego me regala una media sonrisa

– ¿Te he dicho que eres hermosa? – pregunta dejándome completamente sorprendida y fuera de juego

– G-gracias – tartamudeo y su sonrisa se ensancha

– y allí esta ese sexy rubor que tanto me gusta – siento como mis mejillas se calientan aún más y el ríe suavemente – quiero disculparme por dejarte ayer – continua sin apartar sus lindos ojos cafés de mi – vamos a mi casa y te invito el almuerzo – propone y dudo un momento.

– ¿Por qué le das tanta importancia? – el suspira y luego se pasa la mano por el cuello algo incomodo

– la verdad es que me gustas Brook – suelta sin más y mis ojos se abren como platos

– ¿disculpa? – suelto incrédula y el ríe

– Me gustas, creo que eres una chica increíblemente hermosa – asegura y yo suspiro

– ¿sabes que no se ve bien una declaración después de haberme dejado sola con tu mejor amigo que cabe acotar es un imbécil y nos odiamos, para irte a hacer cosas con cinco chicas diferentes? – pregunto después de recuperarme de la sorpresa y esta vez, son sus mejillas las que lucen ligeramente sonrosadas y sonrió.

– en realidad es horrible lo sé, pero quería que lo supieras porque lo que paso con ellas fue solo sexo –

– Tuviste sexo con cinco chicas distintas al mismo tiempo – el ríe y asiente

– lo sé, suena más loco cuando lo dices tú – no puedo evitar reír y el suspira – escucha Brook solo quiero que nos conozcamos, tienes algo que me gusta mucho, no voy a negarlo, pero solo quiero eso conocerte un poco mas

– no sé, no me convences – digo en tono divertido y el vuelve a reír.

– pues déjame intentarlo, ¿Qué dices? – pregunta haciendo un puchero y vuelvo a reír

– no lo sé – digo pensándomelo, el ríe y suspira

– Todos merecemos una segunda oportunidad y en mi defensa, estaba ebrio, soy hombre y venga aun ni sabias que me pasaba algo contigo – vuelvo a reír al escuchar sus razones

– bien, pero hagamos algo – digo sosteniendo una de mis libretas contra mi pecho – si acepto ir a comer contigo, no quiere decir que esté dándote una oportunidad, me caes bien Kyle, pero sigo sin saber que pensar de ti – él sonríe ampliamente y asiente

– Me basta con eso – asiente y toma mi mano para tirar de mí y guiarme al estacionamiento

– ¿A dónde vamos? – él sonríe y me guiña uno de sus lindos ojos cafés

– A mi casa – frunzo el ceño y me libero de su agarre

– ¿no íbamos a comer? – el asiente

– Hoy tengo que preparar el almuerzo yo, reglas de convivencia – argumenta sonriendo, después vuelve a tomar mi mano y me guía camino a su camioneta.

– mi auto esta por allá – le digo señalando a mi espalda

– vale, pero iras en el mío luego te traigo acá y regresas a casa escoltada por mí – dice abriendo la puerta de la camioneta para que suba.

Me lo pienso un rato y después de algunos segundos suspiro

– joder, ¿Por qué te tardaste tanto? Muero de hambre – la voz de Zero me hace mirar al frente, al asiento del copiloto – ah ya – dice al verme – otra vez con ella – posa sus ojos en Kyle que sonríe ampliamente – ¿en serio? – él se encoge de hombros y decido subir después que sus ojos tan distintos me miran con aprensión.

– Gracias – susurra Kyle cerrando la puerta.

Mientras Kyle rodea la camioneta, Zero me observa a través del espejo retrovisor con seriedad, luego la comisura de sus labios tira un poco y me muestra una media sonrisa

– ¿segura que es por Kyle? – pregunta con ese tono de voz ronco y sexy con el que suele hablar.

– ¿disculpa? – suelto en el momento en que su mejor amigo abre la puerta y entra.

No dice nada y vuelve a fijar sus ojos en la pantalla de su teléfono, después de algunos minutos en silencio, Kyle enciende la radio y comenta en tono serio.

– ¿Cómo te ha ido con la maqueta? – Zero a su lado se tensa ligeramente y mira sobre su hombro para verme un instante

– Ha salido bien, pero seguirán estudiando las opciones de los paneles solares que propuse – Kyle sonríe y luego se fija en mi

– ¿y a ti que te ha parecido la universidad? – sonrió y me concentro en el

– Pues es increíble, todo aquí es sumamente grande y competitivo, pero me encanta – Kyle asiente y mis ojos se desvían una vez más a la nuca de Zero.

Líneas negras sobresalen del cuello de su franela, dejando a la vista la sombra del tatuaje de los ángeles, comienzo a detallar su aspecto, su cuello es ancho y el tono amarillo de su cabello decolorado lo hace lucir interesante, una de sus manos se desplaza por su cabeza como si buscara sostener su cabello y sonrió, lo he visto hacer ese gesto varias veces, supongo que ahora que lo tiene corto ha de extrañarlo.

Alcanzo a notar las letras en sus nudillos, cuando las leo en conjunto mis ojos se abren como platos y mi boca se abre ligeramente, dice Nico, desvió mis ojos hacia su perfil y su ceño fruncido, no hace más que confirmarme lo que ya sé, pero que aún no deja de sorprenderme. ¿Cómo es que Zero y Nico son hermanos gemelos y son tan diferentes?

– ¿Brook? – me llama Kyle, sacándome de mi estado de ensimismamiento

– ¿si?

– ¿estás bien? – pregunta mirándome a través del retrovisor y asiento

– sí, lo siento pensaba en otra cosa, disculpa – Zero ríe con suavidad y luego comenta ignorándome por completo.

– joder, esta tía esta re buena – dice enseñándole una foto de una chica en la pantalla de su teléfono.

Por curiosidad mis ojos se desvían a la pantalla, pero solo alcanzo a ver una mujer rubia con pechos grandes cubierta de tatuajes.

– mierda, es un mujerona – concuerda Kyle riendo – ¿Quién es? – pregunta con curiosidad a lo que Zero ríe

– una jodida loca que me agrego al Instagram – Kyle ríe y luego vuelve a fijarse en mí y me guiña uno de sus ojos.

Cuando llegamos a su departamento, Zero se pierde escaleras arriba, ignorándome por completo, cosa que realmente agradezco, porque no quiero cruzar palabras con él. Kyle me conduce a la cocina, después de dejar sus cosas en una de las sillas altas, mientras abre el refri y se pierde en su interior

– ¿te gusta la comida italiana? – pregunta desde allí

– Sí, mucho soy fan de la lasaña – le aseguro cosa que lo hace sonreír

– Genial, porque soy experto preparándola – agrega sacando ingredientes de la nevera – mi papa es americano pero mi madre es italiana, por lo que tuve que aprender a cocinar – agrega mirándome – además es chef y pues me enseño algunas cosas – agrega sonriendo ampliamente

– vaya eso no lo sabía – comento sentándome en uno de los bancos – así que tú y Zeta se comparten las cosas de la casa – el ríe y niega

– solo la comida, el resto viene alguien hacer todo lo demás – hace una pausa y sonríe – somos algo quisquillosos con la comida – agrega mientras toma una tabla y coloca sobre ella una bandeja con tocino y un cuchillo – comeremos pasta y como estoy seguro que EL HIJO DE PUTA DE MI MEJOR AMIGO ESTA MUERIENDO DE HAMBRE – grita para que Zero lo escuche y rio – hare algo rápido.

Kyle se mueve por la cocina como todo un experto, la rapidez con la que corta los ingredientes me tiene abismada, es increíble como lo hace lucir tan fácil, mientras conversamos sobre nuestras familias, noto que evita por completo el tema de mi hermano y sonrió, en serio le agradezco que lo haga y ese pequeño gesto me parece muy dulce de su parte.

– huele a gloria – dice Zero entrando a la cocina me giro para verlo y viene solo con el jean que tenía puesto, sin camisa – prepararas carbonara ¿verdad? – dice señalando el sartén donde ya se sofríen el tocino con cebolletas y ajo, realmente huele divino.

– Aja – dice Kyle agregando la pasta al agua hirviendo

– ¿tu cocinas? – pregunta en mi dirección y rio

– sí, tienen que probar mi sopa de agua es una completa exquisitez – Kyle comienza a reír mientras, Zero simplemente me ve con una media sonrisa en los labios y niega con su cabeza – soy pésima en la cocina, por más que mi mama haya intentado enseñarme no se me da – completo y Kyle ríe

– es una pena, pero podría enseñarte si gustas – elevo mis manos en el aire y niego

– No, hay cosas para las que uno nace y otras para las que sencillamente no debemos si quiera acercarnos, la cocina es mi lugar prohibido si es para preparar algo – Zero me mira con seriedad y luego se despega del mesón donde ha estado todo el rato mirándome.

– Avísame cuando esté listo – dice pasando nuevamente de mí y honestamente no sé qué mierda le pasa, no entiendo porque me ignora la mayor parte del tiempo pero otras sencillamente no puede despegar sus ojos de mí.

Kyle me observa un instante y luego la espalda de su amigo y suspira, niega con la cabeza y luego muerde su labio inferior

– No le hagas caso – agrega mirándome y rio

– En realidad no me importa – el asiente mientras comienza a sonar mi teléfono, le muestro la pantalla para que vea que tengo una llamada y me pongo en pie para salir de la cocina

– hola mama

– hola cariño ¿cómo estas? – responde mi madre animadamente del otro lado y no puedo evitar sonreír al escucharla tan animada – adivina – dice sin siquiera dejarme responder

– pues, soy pésima en este juego mami – ella ríe y luego continua

– Me han aceptado, empezare a trabajar en Evans constructores la próxima semana – comienzo a reír emocionada por la noticia y suspiro

– eso es increíble mama, te dije que te aceptarían eres la mejor ingeniero civil que existe, siempre lo he dicho – mama ríe del otro lado, mientras yo camino por la amplia sala del departamento de los chicos

– si me han avisado justo hace unos minutos y no me he resisto llamarte y darte la buena noticia – ambas reímos entusiasmada, cuando en ese momento se abre la puerta de vidrio corrediza que da hacia el área de la piscina y Zero entra con expresión ceñuda

Nuestras miradas se encuentra y se detiene en el umbral de la misma, sus ojos descienden por mi cuerpo mirándome detalladamente, la forma despectiva en la que me observa me incomoda, escucho las palabras de mi mama al otro lado del teléfono, pero no estoy prestándole a ninguna atención, porque venga tener a Zero Evans delante de ti, sin camisa con sus músculos ligeramente tensos y esa mirada intimidante en esos preciosos ojos de diferentes colores, es algo que sencillamente te deja en otro mundo.

Sus preciosos ojos vuelven a fijarse en los míos y sonríe de lado, echa andar y pasa junto a mi ignorándome una vez más, como si el supiera algo de mí que yo no sé y que se le antoja increíblemente divertido, en serio este chico me confunde mucho, suspiro sonoramente y trato de regresar a la realidad, porque debo ser honesta, Zero Evans hace que me desconecte y no solo porque es exactamente igual a mi amor platónico, sino que su jodido aspecto se me antoja incluso mucho más sexy de lo que su hermano en algún momento me lo pareció y eso está mal en todos los sentidos porque el tipo es un completo imbécil.

– ¿Brooklyn estás escuchándome? – insiste mama y rio

– no, mami lo siento, ¿Qué decías?

– estas totalmente distraída, quieres que te llame en otro momento

– Brook – escucho a Kyle a mi espalda – está listo, iré por Z – agrega guiñándome un ojo

– ¿esa ha sido la voz de un chico? – pregunta mama en ese tono cómplice y picaron que suele usar cuando quiere sacarme información

– Sí, mama es un amigo y me ha invitado a almorzar – explico riendo y ella me imita

– Pues entonces no te quito más tiempo, pásalo bien, te amo cariño – agrega y sonrió

– también te amo mama, saludo a mi papa

– Seguro hija – finalizo la llamada y me giro para ingresar a la cocina que tiene un delicioso aroma a comida.

Detrás de mi entra Kyle y luego Zero, ambos me miran un instante y luego el primero camina hacia la estufa, donde comienza a servir los platos con rapidez, Zero por el contrario pasa detrás de mi directamente al refrigerador, del cual saca una coca–cola y una botella de jugo, las deja sobre la encimera y luego se mueve por la cocina hacia uno de los estantes de dónde saca una bolsa de papel y del interior una barra de pan, toma un cuchillo de cierra y corta varios trozos.

Kyle al verlo sonríe y luego me observa, me guiña un ojo antes de dejar un plato delante de mí y en silencio toma asiento en el banco a mi lado, después de devolver el pan restante a la bolsa de papel, Zero toma asiento al otro lado de la encimera, deja el plato con trozos de pan en medio de él y nosotros y ojea la pasta con una media sonrisa en los labios.

– Se ve buena – comenta mirando a Kyle que sonríe después de tomar un poco

– Buen provecho – agrego tomando mi tenedor para iniciar a comer, ambos sonríen y comenzamos

Debo decirlo la pasta es una exquisitez, está muy, muy bueno la verdad, jamás me imagine que Kyle fuera tan bueno en la cocina. Mientras comemos, tenemos una de esas conversaciones ramdon en las que básicamente solo dices tonterías como para llenar el silencio, Zero interviene pocas veces en nuestra conversación, solo hace algunas acotaciones a los comentarios hechos por Kyle y básicamente me ignora toda el resto del tiempo, una vez terminamos de comer, él se pone en pie deja todo dentro del lava bajillas y sale de la cocina dejándonos solos, no sin antes empujar la cabeza de Kyle antes de salir en son de broma.

– ¿Qué está mal con él? – pregunto una vez nos ha dejado solos, Kyle ríe y niega con la cabeza

– Ambos no se soportan, es gracioso – comenta parándose junto a mí – ¿quieres ver una película? – agrega sonriendo y me lo pienso, esto está extendiéndose mucho más de lo que esperaba.

– Creo que es mejor que me vaya, habíamos dicho que solo sería comer – el asiente y luego de unos segundos suspira

– de acuerdo, pero entonces déjame darme una ducha iré al estudio después de dejarte – dice caminando fuera de la cocina – si quieres espérame en la sala o ¿quieres subir conmigo? – pregunta dudando un instante pero niego

– Te espero en la sala – el asiente y se va dejándome sola.

Salgo de la cocina y me dejo caer en el sofá de piel, tomo mi teléfono y empiezo a revisar las redes, Sarah ha estado subiendo fotos muy bonitas con Charlie, inevitablemente sonrió, Sarah no es de compartir fotos con chicos en su fit, esto está poniéndose serio. Suspiro y en ese momento una risa suave pero ronca me hace girarme.

Zero camina en bóxer hacia la cocina, con una sonrisa burlona en los labios, mierda, es imposible que este chico este haciendo esto y que luzca así de bien, debería ser un jodido pecado estar tan bueno, mis ojos descienden por su anatomía, admirando no solo su cuerpo sino también los tatuajes que son realmente increíbles y cubren toda su espalda, sus brazos y en uno de sus muslos.

Después de perderse en la cocina suspiro, pareciera que lo hace apropósito pienso, sabe que parece un Dios Griego rebelde y sin más se pasea con ese cuerpo delante de quien desee admirarlo, aunque bueno estoy en su casa supongo que es costumbre que se la pase así, suspiro y evito seguir mirando hacia la entrada de la cocina.

Me levanto para ir al baño y así distraer mi atención del idiota egocéntrico de Zero, mientras escucho desde la cocina como el conversa con alguien, supongo que está en el teléfono. Entro al baño y me observo en el espejo, las ojeras debajo de mis ojos me hacen sonreír, hacía tiempo que no hacía algo como lo de anoche, suspiro y tomo un poco de agua para lavarme la cara, estoy cansada y algo fatigada, el almuerzo me ha dejado así. Una vez termino seco mis manos y mi rostro, camino hasta la puerta y la abro.

Me quedo de piedra en el umbral, Zero está de pie allí mirándome con intensidad, da un paso en mi dirección y por inercia yo retrocedo uno, sonríe de lado, mis ojos se desplazan hasta sus labios, hasta la argolla que decora su labio inferior y que se me antoja increíblemente sexy.

– Podría jurar que te gusta lo que ves – su voz es ronca y baja.

– Pues te equivocas – digo regresando a sus distintivos ojos que brillan con intensidad, da un paso más hacia mi y me tenso.

Su sonrisa se ensancha y es todo lo que necesita mi corazón para acelerar su ritmo, mi garganta se seca y atrapo mis labios entre mis dientes, joder es increíblemente hermoso, aunque este cubierto de tatuajes, lleve túneles y piercings, nada de estas cosas lo hace ver menos hermoso, incluso estos aspectos solo acentúan su belleza y lo sexy que es, tomo aire para comenzar a hablar pero lo que hace en ese momento, me lo impide, coloca una de sus tatuadas manos sobre mi abdomen y me empuja con suavidad para devolverme al interior del baño. Entra y cierra la puerta de tras de él, escucho como le pasa seguro y muerde su labio inferior.

– ¿Qué haces? – pregunto en un murmuro, cuando sus ojos se fijan con intensidad en los míos

– ¿Por qué me miras así Jake? – pregunta en voz baja, su tono es ronco y este causa que mi piel se erice

– ¿Cómo estoy mirándote?

– Como si desearas tenerme muy cerca – murmura dando un paso hacia mí, mi corazón late desbocado al notar el poco espacio que entre ambos y como poco a poco está acortando la distancia entre ambos – creo que te gusto Jake – suelta sin más y no puedo evitar soltar una risa, niego con la cabeza y bufo

– crees mal – lo veo de arriba abajo, conteniendo el impulso de morder mi labio porque si, Zero Evans esta jodidamente bueno, es un puto Dios Griego que sabe muy bien como luce – puedes tener un cuerpo de muerte pero jamás me gustaría un idiota como tú – le aclaro y el ríe

– gracias por el cumplido Jake, ojala pudiera decir lo mismo de ti – dice con seriedad y el nerviosismo que sentía por su cercanía acaba de transmutar en rabia

– ¿entonces qué haces aquí encerrado conmigo? – le suelto entre dientes, él sonríe y suspira

– Es divertido molestarte – agrega sin más, pongo mis ojos en blanco y echo andar hacia la puerta, pero me sujeta del brazo deteniendo mi apresurado andar, me gira con cuidado y pega su cuerpo a mí.

Inhalo con fuerza y su perfume embriaga mi sistema, abro los ojos para verlo, pero me topo con esos labios rojos, atrapados entre sus dientes, ocultando una media sonrisa, sus ojos tan distintos entre sí, brillan con diversión y me odio por dejarlo ponerme nuevamente en esta situación, por ponerme nerviosa y por desear saber qué demonios se sentirá besarlo.

– además me gusta como tus ojos me retan constantemente – susurra, su aliento mentolado con un ligero toque a cigarrillo se entremezcla con el mío – eres un jodido grano en culo, irritante y detestable casi todo el tiempo, pero por alguna extraña razón que me retes constantemente me divierte – bufo y el ríe, eleva una de sus manos y acaricia mi mejilla con cuidado – quizás solo estas buscando lo que todas las chicas quieren de mi – susurra pegándose más a mí y coloco mis manos sobre su pecho desnudo para detenerlo.

En cuanto nuestras pieles entra en contacto siento como se tensa, sus ojos se cierran por un instante pero vuelve abrirlos para mirarme con frialdad, toma mis manos y las aparta de su pecho, se acerca un poco más a mí y susurra a escasos centímetros de mi boca

– Te recomiendo que no le des alas a Kyle si lo que quieres es terminar en mi cama – ese comentario aunado a su arrogante tono es justo lo que necesito para explotar, elevo mi mano hasta su mejilla y la cruzo con un fuerte bofetón.

Su rostro se gira hacia un costado por la fuerza del impacto y le espeto con toda la ira que estoy sintiendo.

– No quiero terminar en la cama de alguien como tú, eres una basura Zero – digo entre dientes y el ríe suavemente con ironía

– no quieres, pero ya has pasado por ella dos veces, irónico ¿no? – lo empujo pero toma mis muñecas y me acerca a su cuerpo, quedando ambos demasiado cerca – estás jugando con fuego Jake y vas a quemarte – murmura pegado a mi boca.

– en serio crees que me intimidas – susurro, sonríe apenas un poco y se acerca más a mí.

Sus labios rosando ligeramente los míos, provocando que un escalofrió recorra todo mi cuerpo, ese característico calor que el deseo despierta entre mis piernas me hace contener un jadeo, estoy muy tentada a besarlo, pero finalmente es el quien termina estrellando sus labios contra los míos.

La sensación de inmediato en mi cuerpo es de puro jubilo, placer y un inexplicable sentimiento que nunca había sentido en mi vida, no es que haya besado a un millón de chicos, o que no haya estado con alguno, pero lo que estoy sintiendo sencillamente me hace perder la razón.

El frio metal de la argolla sobre mi labio envía una descarga de emociones a mi sistema, mi corazón late deprisa y mis manos se desplazan con desesperación hasta su cuello sus labios se mueve sobre los míos con avidez, como si hubiese estado deseando esto hace mucho. Un jadeo escapa de mis labios cuando atrapa mi labio inferior entre sus dientes y los arrastra hasta soltarlo, y vuelve atacar mi boca con brusquedad, con furia, como si no pudiera controlarse.

Nuestros labios chocan con intensidad, mientras su lengua se mueve a tientas explorando el interior de mi boca en busca de la mía, cuando se encuentran, todo mi cuerpo tiembla, mierda esto es demasiado intenso, sus manos sujetan mis mejillas manejando el beso a su antojo dejándome completamente sin aire, sus labios se separan de los míos finalmente y abro mis ojos para verlo, sus parpados se encuentran cerrados, su ceño esta fruncido y su pecho sube y baja con rapidez al igual que el mío, sus fascinantes y distintivos ojos se abren y me miran con intensidad.

Se han oscurecido varios tonos, el azul ahora es un pozo que fácilmente puede compararse con el océano y el verde brilla con una intensidad que me desarma por completo, mis labios están entreabiertos al igual que los suyos para hacernos más fácil respirar, mis ojos se desvían a los suyos y están rojos, de inmediato se da cuenta de lo que veo y reprime una sonrisa mordiendo su labio.

– ¿Por qué hiciste eso? – murmuro con la respiración agitada, el me ve un instante mas pero luego simplemente aparta su mirada y se separa de mí, alejando el calor que desprende su cuerpo y el mío se queja por la distancia, me sentía parte de el mientras permanecíamos así de cerca, respira profundamente y sin más se gira y sale del baño con rapidez.

Me quedo recostada de la pared con la respiración echa un lio y mi corazón latiendo a mil, no he entendido que ha pasado, porque me ha besado, porque su ceño estaba así de fruncido y porque mi cuerpo ahora echo un manojo de hormonas alborotadas anhela una vez más tenerlo cerca y tocándome con su duro y musculoso cuerpo.

Cierro mis ojos y echo mi cabeza hacia atrás para intentar devolverle la tranquilidad a mi corazón y a mi agitado y caliente cuerpo, porque si, ese beso me ha dejado muy caliente, sería estúpido negarlo, niego con la cabeza mientras muerdo mis labios con fuerza.

– mierda Brooklyn ¿pero qué demonios estás haciendo ahora? – murmuro en voz baja, haciéndome fruncir el ceño por cómo suena mi propia voz.

Me despego de la pared y me observo en el espejo, mi reflejo solo denota lo agitada que estoy, un rubor intenso se ha instalado en mis mejillas y mis labios están rojos, los muerdo un poco porque no voy a mentirme el jodido y sexy Zero Evans besa como un Dios.

Después de algunos minutos en el baño tranquilizándome, salgo del mismo y me topo con Kyle que viene bajando las escaleras silbando una canción, al verme sonríe ampliamente y mi corazón late deprisa, ¿mierda que se supone que estoy haciendo?

– listo, déjame tomar un poco de agua y te llevo de regreso al campus ¿de acuerdo? – pasa junto a mi directo a la cocina y mis ojos se pierden en su trasero.

Hay que reconocerlo Kyle también esta jodidamente bueno, pero es completamente distinto a Zero. Suspiro y le sigo hasta la cocina donde lo observo beber un vaso de agua sin hacer pausa, lo deja en el lava vajillas y luego toma sus cosas me sonríe ampliamente y camina hasta a mí, se detiene a escasos centímetros y frunce el ceño

– ¿te encuentras bien? – pregunta observándome con detenimiento.

– Sí, es solo que... – hago una pausa recordando el intenso beso en el baño con Zero y muevo mi cabeza a ambos lados – no es nada tranquilo, ¿nos vamos ya? – el me observa un momento más y después asiente como si no estuviera del todo convencido de mis palabras.

Salimos del enorme departamento, Kyle conversa conmigo animadamente, pero honestamente no le presto mucho atención, lo que ha pasado con Zero me ha dejado demasiado confundida, demasiado intrigada.

– ¿Brook, en serio estas bien? – pregunta Kyle después de algunos minutos en silencio donde solo he mantenido la vista hacia un costado, reviviendo una y otra vez la forma en que las manos de Zero se apoderaron de mis mejillas y la manera tan intensa en que controlo el beso.

– Sí, lo siento, estoy algo distraída – él sonríe y me guiña uno de sus ojos y le devuelvo el gesto

– ¿iras a la fiesta en Madness? – pregunta con interés y suspiro

– no lo sé Kyle, después de lo de ayer estoy muerta, pero quizás lo haga – lo veo estacionarse cerca de mi auto, apaga el motor de la camioneta y se acomoda en el asiento para verme mejor.

– escucha, quiero que vayas, no será como ayer porque en serio quiero que me des una oportunidad, me pareces una chica muy interesante, divertida y sumamente hermosa, sé que quizás no me veas como un tipo de confianza después de lo que paso ayer pero, todos nos volvemos un poco locos cuando hay demasiado alcohol en nuestro sistema – sonrió al escucharlo, lo hace ver tan normal.

– Kyle en serio me alagas, un chico como tu interesado en mi vaya es increíble, pero creo que no es muy buena idea – hago una pausa y lo observo – no voy a decirte que no me pareces un chico atractivo porque es evidente que lo eres, pero no creo que – dios esto siempre se me hace tan complicado

– Tranquila, entiendo – me interrumpe Kyle con una media sonrisa en los labios – no te gusto – finaliza y yo suspiro, niego con la cabeza y luego continuo

– No de esa forma, si quieres podemos ser amigos – él sonríe y suspira

– tenía la esperanza de ser algo más, pero quizás quien sabe más adelante las cosas cambien – sonrió y el suspira – en fin, tengo que irme, tengo una cita con un cliente en un par de horas y quiero ir al estudio a ver cómo van las cosas allí – sonríe una vez más y luego se inclina hacia mí y deja un sonoro beso en mi mejilla como de costumbre – nos vemos hermosa – sonrió y asiento

– Nos vemos Kyle – desciendo de la camioneta y camino hasta mi auto, siento sus ojos en mí hasta que finalmente entro al auto y lo enciendo, en ese momento él se va.

Suspiro en el interior de mi auto y vuelvo a ese baño a ese momento en que nuestros labios se encontraron

– joder, ¿por qué no puedo dejar de pensar en ese beso? – muerdo mis labios y sonrió con picardía.

Comienzo a entender porque todas las chicas están detrás de Zero, no solo es endemoniadamente guapo, es sexy y es un Dios besando, sino fuera por esa personalidad de mierda seria perfecto. Cierro mis ojos y muevo la cabeza de un lado a otro, es hora de regresar a casa y olvidar lo que paso, no deja de ser el idiota, pesado, arrogante y odioso de Zero Evans.

Zero.

Kyle no pierde la oportunidad de acercarse a Jake, una vez más en cuanto la vio en la distancia, sin decirme nada y se largó detrás de ella y para mi puta desgracia después de lo que paso ayer cuando fui a buscarla no he podido sacarla de mi cabeza, la forma en que sus jodidos y sexys labios se entreabrieron para respirar mejor cuando quedamos a escasos centímetros, la forma en que sus grandes ojos me observaron, cuando sus manos se posaron sobre mi pecho, mierda, no sé qué demonios está sucediendo pero nunca me había sentido así con una chica.

Pero lo que más me molesta es que en serio no la soporto, por ese instante en que estuvimos tan cerca mi cuerpo simplemente reacciono a ella, como si se reconocieran de algo, sé que suena loco y quizás estúpido, pero sentí que ella y yo ya habíamos estado cerca, como si esa cercanía fuero lo normal entre nosotros, como si fuera necesario.

Paso mis manos por mi rostro con frustración, tengo que sacarla de mi cabeza, Kyle va en serio con ella, después de que la llevo a casa, me dijo cuanto le gustaba y lo mal que se sentía por haberla dejado por irse a revolcar con esas chicas. La puerta de atrás se abre y suelto molesto

– joder, ¿Por qué te tardaste tanto? Muero de hambre – giro mi rostro para ver porque demonios ha abierto la puerta de atrás y me topo con esos grandes, expresivos y hermosos ojos cafés mirándome llenos de sorpresa – ah ya – se escapa de mi boca al verla – otra vez con ella – no puedo evitar ver mal a mi mejor amigo porque en serio, entiende que le guste, pero hombre déjala respirar ¿no? – ¿en serio? – le espeto sin poder contenerme y el solo sigue sonriendo ampliamente, se encoge de hombros mientras Jake sube al asiento trasero, vuelvo a fijarme en ella y niego ligeramente con mi cabeza, no sé qué demonios hace aquí, luego de unos segundos escucho la voz de Kyle agradeciéndole no sé porque.

Sin poder evitarlo la observo por el espejo retrovisor, sus gruesos labios llevan una ligera capa de labial, en serio es hermosa, porque no lo note desde el primer día, luego recuerdo exactamente cómo fue que nos conocimos y sin poder evitarlo sonrió un poco.

– ¿segura que es por Kyle? – pregunto sin apartar mis ojos de ella, mientras Kyle rodea la camioneta,

– ¿disculpa? – suelta sorprendida y sin comprender mi pregunta en el momento en que mi mejor amigo abre la puerta y entra.

Sus labios se sellan una vez más y no dice nada, pongo mi atención una vez más en mi teléfono y continuo revisando el contenido del Instagram, después de algunos minutos en silencio, Kyle enciende la radio y comenta en tono serio.

– ¿Cómo te ha ido con la maqueta? – a la mención de la bendita maqueta me tenso, es uno de los trabajos que más me ha costado terminar y honestamente ya estoy harto de ella.

– Ha salido bien, pero seguirán estudiando las opciones de los paneles solares que propuse – Kyle sonríe mirándome y luego se fija en Jake.

– ¿y a ti que te ha parecido la universidad? – sus carnosos y rosados labios se ensanchan en una dulce sonrisa que acelera los latidos de mi corazón.

– Pues es increíble, todo aquí es sumamente grande y competitivo, pero me encanta – Su voz es suave y melodiosa, cuando habla con Kyle no está llena de rabia como cuando suele dirigirse a mí.

Sé que está mirándome, siento el peso de su mirada en mi nuca, involuntariamente mi derecha se mueve hacia mi cabello para despeinarlo, cuando llego a mi cabeza y no consigo lo que busco me frustro un poco, hacia demasiados años que no llevaba el cabello tan corto por lo que aún no me acostumbro a no tenerlo.

– ¿Brook?

– ¿si?

– ¿estás bien?

– sí, lo siento pensaba en otra cosa, disculpa – no puedo evitar reír, porque mi mejor amigo la ha capturado observándome, por cosas de la vida, en mi pantalla aparece la foto de una rubia que esta jodidamente buena y comento ignorando por completo su presencia en el auto.

– Joder, esta tía esta re buena – digo girando la pantalla hacia Kyle y enseñándosela, mi mejor amigo sonríe con picardía al verla

Sin apartar los ojos del espejo retrovisor y viendo la reacción de Jake, vuelvo a reír cuando sus ojos curiosean la pantalla de mi teléfono.

– mierda, es un mujeron – concuerda Kyle riendo – ¿Quién es? – los ojos de Jake están fijos en la pantalla y vuelvo reír, es divertido en serio molestarla

– una jodida loca que me agrego al Instagram – Kyle vuelve a reír y observo como observa a Jake a través del espejo y le guiña un ojo.

Pongo los míos en blanco porque está actuando como un idiota con ella, en fin es su puto problema, el resto del camino ellos entablan una conversación a la cual le presto poca atención, solo escucho cuando su dulce voz responde alguna de las preguntas de mi mejor amigo.

La observo en algunas ocasiones a través del espejo y me pierdo en su sonrisa, joder es sumamente hermosa, su piel brilla de una manera que me hace querer verla, pero luego recuerdo lo irritante que suele ser y vuelvo a fijarme en mi teléfono.

Cuando llegamos a casa, me pierdo hacia mi habitación mientras ellos van directo a la cocina, en cuanto entro dejo caer mi bolso a un lado en el suelo y me dirijo al baño, de camino saco la franela que llevo puesta y la dejo en el cesto de ropa sucia, lavo mi cara y después de unos minutos regreso a mi habitación.

Me dejo caer en la cama mirando el techo, ha sido una larga mañana, esa entrega de la maqueta me ha consumido estos días, desvió mis ojos al estante que está enfrente que continua medio vacío, después del arranque que me dio el otro día por culpa de la odiosa e irritante chica que justo ahora se encuentra con Kyle en la cocina no he vuelto colocar las fotografías.

Siguen todas apiladas en el mismo lugar, la Sra. Rinaldi casi sufrió un infarto cuando entro a mi habitación y vio el desastre que había causado, se preocupó tanto por mí que llamo a mis padres y tuve que lidiar con ellos un par de días. Por suerte su insistencia en venir aquí y confirmar que todo estaba bien finalmente ha disminuido.

Sonrió un poco ante el recuerdo de la Sra. Rinaldi esa noche.

– mi pequeño no puedes romper todo lo que consigues en tu camino cada vez que tienes un mal día, mi filio debió detenerte – comento mirando mal a Kyle que simplemente nos ignoraba a ambos.

La Sra. Rinaldi es la nana de Kyle, nos vio crecer prácticamente y una vez que decidimos mudarnos a New York no dudo un instante en seguirnos aquí, Kyle es como su hijo y pues a donde fuera mi mejor amigo ella seguro lo seguiría para cuidar de él, por lo que termino también cuidando de mí y Nico.

Al recordar a mi hermano la característica punzada se apodera de mi pecho y cierro mis ojos apartando los muchos recuerdos que tengo con ellos dos y la Sra. Rinaldi. Suspiro y me pongo en pie, lo mejor será salir de estas cuatro paredes y molestar un poco a Kyle y su adorable visita.

Una vez comienzo a descender los peldaños de la escalera el delicioso aroma de la salsa que prepara Kyle inunda mis sentidos, joder el bastardo cocina como un puto chef italiano, camino hacia la cocina y en cuanto entro el olor se hace aún más intenso, huele a tocino y ajo.

– Huele a gloria – me acerco al sartén y curioseo – prepararas carbonara ¿verdad?

– Aja – dice Kyle – ¿tu cocinas? – pregunta mirando a Jake que no aparta sus ojos de mí, abdomen y no ha notado que yo también la estoy viendo.

– sí, tienen que probar mi sopa de agua es una completa exquisitez – su comentario aunque tonto, no deja de sorprenderme porque acaba de incluirme en la conversación sin siquiera notarlo, Kyle ríe al escucharla y yo solo sonrió un poco – soy pésima en la cocina, por más que mi mama haya intentado enseñarme no se me da – la conversación entre ellos es fluida y hasta cierto punto me incomoda.

Joder Kyle siempre tiene la facilidad de entablar conversaciones con las chicas, supongo que a mi simplemente no se me da mucho eso de conversar con extraños, aunque debo admitirlo, Jake me ha sorprendido bastante. No aparto mis ojos de ella mientras continúan hablando sobre cocina, por supuesto mi mejor amigo no pierde la oportunidad de ofrecerle unas clases privadas y es allí cuando decido retirarme.

– Avísame cuando esté listo – desvió mis ojos de ella y salgo de la cocina ignorándola por completo.

Mientras camino hacia el área de la piscina para fumarme un cigarrillo, sigo pensando en esos gigantescos y expresivos ojos, no entiendo que tiene su mirada que me cautiva tanto, que no me permite simplemente apartar la mirada, al principio no lo note porque bueno estaba demasiado ocupado pensando en su pequeña confusión y en el cabreo que sentí cuando me comparo con Nico.

Mientras exhalo una bocanada de humo la curiosidad se apodera de mí, donde demonios se habrán conocido ella y mi hermano y porque nunca me hablo de una chica como ella, porque estoy seguro que Nico habría caído por esa sonrisa, esa forma tan intensa de mirar y esa actitud de no dejarse pisotear por nadie pero al mismo tiempo esa apariencia de niña buena.

No hay que negarlo, Jake luce exactamente como una chica buena, de esas que se la pasan estudiando, son educadas y les encanta ayudar a los demás, justo como era Nico, entiendo porque le gustaba y porque se emocionó tanto cuando me vio.

Porque esa fue una de las razones que más me cabreo del momento, su puñetero entusiasmo al llamarme como mi hermano, respiro frustrado sintiendo como la ira poco a poco comienza a adueñarse de mi sistema, siempre que pienso en ese día, por alguna extraña razón me cabreo. Apago el cigarrillo lo dejo caer hacia afuera, me giro y decido regresar al interior deslizo la puerta corrediza y justo allí en medio de la sala se encuentra ella, riendo animadamente mientras sostiene su teléfono en su oído.

No es la típica risa que le he visto soltar mientras esta con Sarah o Kyle, no esta es una cálida, dulce y una que honestamente me hace vibrar y acelera mi corazón, mi ceño se frunce y finalmente nuestras miradas se encuentran. Joder ¿en serio tiene que mirarme así? Sus ojos reflejan una mezcla de altanería y curiosidad que sencillamente me pone.

Recorro su cuerpo detallándola, deteniéndome en cada una de sus curvas, no tiene un cuerpo de muerte, como las chicas con las que suelo follar pero en definitiva tiene un lindo cuerpo, su pequeña cintura y su baja estatura en serio la hacen lucir hermosa. Ambos nos estudiamos unos segundos, soy consciente de cómo sus ojos descienden por mi abdomen y no puedo evitar sonreír al verla atrapar su labio inferior entre sus dientes, gesto que comienza a volverme loco. Echo andar lejos de ella ignorándola por completo una vez más, de alguna forma después de lo que paso ayer ambos nos sentimos atraídos.

Subo una vez más a mi habitación mientras Kyle termina con el almuerzo, debo revisar mi mail, Ethan dijo que me enviaría unos planos para que los revisara con calma, después de aquella pelea en su casa, lo único que hemos hecho es hablar de trabajo, por lo que me dejo caer una vez más en mi cama con mi iPad, mientras reviso los planos.

Son para un complejo deportivo, para uno de esos barrios en New Jersey, es un proyecto que está siendo llevado a cabo por la empresa de mi padre, pero va de la mano con el gobierno. Papa me pidió opinión sobre algunas áreas, ya que no está muy seguro de si a los niños y jóvenes que irán podrían gustarle las instalaciones.

No soy de los que participa mucho en este tipo de proyectos, aunque Nico seguro hubiese estado encantado con ello. Mientras analizo los espacios que me parecen bastante amplios y bien distribuidos comienzo a teclearle una respuesta rápida a Ethan para que no siga con el tema.

La puerta de mi habitación se abre y Kyle asoma su cabeza al interior

– hey, está listo – dice encaminándose hacia mí, me observa un instante y luego suspira – será que puedes ser un poco menos pesado con Brook – agrega, desvió mis ojos del iPad y elevo una de mis cejas

– ¿Brook? – Kyle pone sus ojos en blanco y caigo en que está hablándome de Jake y los piratas – ah, ya Jake...– hago una pausa para reír un poco y él sonríe negando con la cabeza – no soy un pesado, de hecho ni la tomo en cuenta – digo encogiéndome de hombros y poniéndome en pie – tu chica no me interesa en lo absoluto Kyle – digo parándome frente a él, sonríe y mira al techo.

Cosa que me hace saber que algo le preocupa

– ¿Qué pasa? – suspira y después de unos segundos responde algo inconforme

– ayer arruine mi oportunidad con ella, si tenía una haberme perdido con esas chicas lo arruino todo – comienzo a reír y le doy un empujón para sacarlo fuera de mi habitación

– en serio te gusta ¿no? – él sonríe rascándose la cabeza y asiente

– no sé qué hay en ella que me gusta tanta la verdad, aun no descifro lo que es, pero en serio me gusta – suspiro porque creo entender que es lo que le pasa.

Cuando descendemos las escaleras la vemos entrar a la cocina, Kyle la sigue de cerca y soy el último en entrar, no puedo evitar ver como sus piernas se mueven al caminar, insisto me gustan sus piernas. Mientras mi mejor amigo comienza a servir la pasta, me dirijo hacer lo que hacemos por costumbre cuando comemos pasta, la acompañamos con pan, mientras lo corto bajo la atenta y curiosa mirada de Jake. Una vez termino dejo el plato con los trozos de pan en la encimera y me dejo caer en el banco.

– Se ve buena – comento mirando a Kyle

– Buen provecho – susurra Jake mirándonos ambos y no puedo evitar sonreír, es todo una buena niña.

Los escucho conversar sobre música, le gusta el jazz, el pop y aunque no es de escuchar mucho rock comento que le gusto como sonaba Nightmare, no puedo evitar reír cuando menciona que odia esas bandas como Slipknot que lo único que hacen es gritar. Comento un par de cosas a los comentarios halagadores de Kyle a la banda y luego me limito a escucharlos o mejor dicho a escucharla.

Por alguna razón su voz aunque al principio se me hizo sumamente irritantes, justo ahora se me antoja dulce y melodiosa, sigue siendo la voz de una niña buena pero supongo que esa es la principal razón por la que comienzo atraído hacia ella. Después que finalizo mi plato, lo dejo en el lava vajillas, ignorándola por completo, aunque no me pasa desapercibida la forma en la que sigue comiéndome con los ojos.

Antes de salir empujo la cabeza de Kyle hacia adelante y lo escucho reír, es hora de tomar una ducha e ir hacer ejercicios, no soy un fanático de los deportes, pero si disfruto mucho haciendo ejercicio. Una vez en la ducha, pienso una vez más en Jake y en lo cerca que estuve ayer de sus labios.

– ¿joder Zero que es lo que tiene esa niña buena que ahora no puedes sacártela de la cabeza? – termino de ducharme y salgo, me coloco un bóxer y mientras termino de secar mi cuerpo, la puerta de mi habitación vuelve a abrirse

– Z iré a ducharme, luego llevare a Brook al campus ¿necesitas que te lleve algún lado o pasaras la tarde en casa? – niego con la cabeza

– no voy a ningún lado, gracias bro – digo extendiéndole mi puño en su dirección el cual choca con el suyo y luego bromeo con el – ¿dejaste a la niña buena sola? – el ríe y asiente

– sí, estará en la sala no vayas a molestarla – me dice señalándome con uno de sus dedos y comienzo a reír a carcajadas

– ¿me crees capaz? – eleva una de sus cejas y ambos reímos.

Una vez lo veo salir de mi habitación, busco un pantalón de chándal para bajar al gimnasio, pero se me ocurre una maravillosa idea, abro la puerta y desciendo las escaleras en bóxer, de inmediato la encuentro en el sofá con la vista fija en su teléfono, la sonrisa en sus labios se me antoja tierna y sin poder evitarlo dejo escapar una risa, ella en cuanto me escucha posa sus ojos en mí, camino hacia la cocina sin dejar de sonreír.

Sé muy bien como luzco en bóxer, muchas chicas me han dicho infinidad de veces que les gusta lo que ven y estoy muy seguro que Jake también está disfrutando justo ahora de la vista. Mientras camino hacia uno de los gabinetes, donde solemos dejar nuestras vitaminas, mi teléfono comienza a vibrar.

En la pantalla pone Lily, sonrió y cojo la llamada sin demora

– Hola manzanita – la escucho bufar al otro lado

– Deja de llamarme así Evans – rio

– ¿Qué pasa?

– ¿tienes planes para la tarde? – frunzo el ceño, es viernes y en teoría estoy libre

– no ¿Por qué? – pregunto con curiosidad

– genial iré para allá, mi hermana está volviéndome loca y la verdad ya no quiero estar aquí, nos vemos al rato ah y dile a Kyle que llevo las cuerdas para la guitarra – y sin esperar si quiera que responda alguna cosa finaliza la llamada

– Jodida loca – murmuro divertido.

Cuando salgo de la cocina en busca de Jake, para molestarla un poco no esta en el sofá, mi ceño se frunce porque sus cosas siguen en la cocina, ¿Dónde podrá estar? Camino hacia la puerta corrediza que da al área de la piscina, pero no está afuera, luego me giro y veo el brillo de la luz detrás de la puerta del baño que está debajo de la escalera y sonrió con malicia.

– Veamos qué tan niña buena eres después de todo

Camino hasta la puerta y me detengo frente a ella mientras escucho como cae el agua del lavado y unos segundos después la puerta se abre sus ojos se abren como platos al verme frente a ella, no puedo apartar la mirada, me encantan sus ojos.

Doy un paso en su dirección y ella responde igual, solo que da un paso atrás, no puedo evitar sonreír, cuando sé que quiere mantener la distancia de mí, sus ojos se desplazan hasta mis labios, sobre mi argolla, la veo humedecer sus labios y ese pequeño e inocente gesto en su expresión de sorpresa se me antoja divertido.

– Podría jurar que te gusta lo que ves – suelto con arrogancia

– Pues te equivocas – responde sin dudar y allí está el reto en su voz, sin poder evitarlo doy un paso más hacia ella y la veo tensarse pero no se mueve.

Joder me encanta que esta chica me rete, aunque luzca frágil o indefensa, su actitud no tiene nada que ver con ello, está retándome con la mirada y es algo que sencillamente me pone. Sin dudarlo coloco una de mis manos sobre su abdomen y la empujo un poco hacia atrás devolviéndola al interior del baño, ella no ofrece resistencia, cosa que me gusta todavía más.

Cierro la puerta detrás de mí y veo como sus manos se mueven con nerviosismos una vez más en busca de que tomar para juguetear con ello, saber que mi cercanía la pone nerviosa no hace más que aumentar mis ganas de acercarme más a ella, observo sus labios, sus carnosos y rosados labios se entreabren ligeramente provocando que sea yo el que muerda los míos ahora, dios esta chica me está haciendo perder la cabeza.

Una vez más muero por besarla, por saber a qué saben sus labios, por confirmar si son realmente así de suaves como se ven o sin son una promesa de un placer inigualable.

– ¿Qué haces? –murmura, cuando vuelvo a fijarme en sus ojos, que brillan con intensidad

– ¿Por qué me miras así Jake? – susurro

– ¿Cómo estoy mirándote?

– Como si desearas tenerme muy cerca – doy un paso en su dirección, tratando de acortar la distancia que separa nuestros cuerpos, por alguna inexplicable razón quiero volver a sentirla junto a mí, justo como ayer – creo que te gusto Jake – ella comienza a reír con nerviosismo aunque noto un poco de burla en su expresión

– crees mal – recorre mi cuerpo con sus curiosos ojos y por como tensa sus labios soy consciente de que está evitando morderlos, puto gesto, me quedo embelesado observando sus labios esperando el momento en que lo haga pero nunca llega – puedes tener un cuerpo de muerte pero jamás me gustaría un idiota como tú – escupe haciéndome reír, en serio cree que engaña a alguien con ese discurso barato, solo hay que verla para saber que está conteniéndose, pero hasta cierto punto sus palabras me han dolido y no logro entender por que

– gracias por el cumplido Jake, ojala pudiera decir lo mismo de ti – digo sin pensar, con la intensión de herirla y hacerla sentir inferior

– ¿entonces qué haces aquí encerrado conmigo? – suelta conteniendo la ira, esta chica es tan explosiva como yo, su humor cambia rápidamente y eso me divierte.

– Es divertido molestarte – susurro sin dejar de sonreír, ella pone sus ojos en blanco y echa andar hacia la puerta, no la dejo seguir, ya que tomo su brazo y con suavidad la pego a mi cuerpo.

Sus ojos se cierran de inmediato y la siento inhalar profundamente, sonrió, porque sé que esto le está gustando, aprovecho el instante para ver sus labios, jodidos labios que estoy muriéndome por probar, inevitablemente muerdo mi labio inferior, conteniéndome, porque aunque esto es divertido y lo estoy pasando en grande, en serio quiero besarla.

– además me gusta como tus ojos me retan constantemente – agrego después de unos segundos – eres un jodido grano en culo, irritante y detestable casi todo el tiempo, pero por alguna extraña razón que me retes constantemente me divierte – ella bufa molesta y rio, muevo una de mis manos hasta su mejilla, quiero saber que se siente tocarla, si mi corazón latirá tan deprisa como ayer cuando sus manos tocaron mi pecho – quizás solo estas buscando lo que todas las chicas quieren de mi – susurro sin dejar de verla y pegándome más a ella, sus manos salen disparadas a mi pecho y justo como ayer, mi cuerpo se tensa, mi corazón late desbocado, cierro mis ojos para sentir la calidez de sus manos sobre mi piel y ese leve contacto me hace sentir completo, en paz y esa sensación jamás la había sentido antes.

Eso me sorprende y me cabrea a partes iguales, porque demonios tengo que sentirme así con una chica como ella, porque demonios tengo que sentirme de esta manera solo porque sus manos estén tocándome. Abro los ojos y la veo con frialdad, sea lo que sea que ella me hace sentir es algo que no logro comprender y por algún extraño e inexplicable motivo me incomoda. Retiro sus manos de mi pecho y acorto aún más la distancia que nos separa.

Pienso en una forma rápida de herirla y de evitar que este momento se convierta en otra cosa que luego yo no pueda manejar, esto que sentí, simplemente no puedo sentirlo, ni por ella ni por nadie

– Te recomiendo que no le des alas a Kyle si lo que quieres es terminar en mi cama – sus ojos se abren como platos y sin más me abofetea.

El contacto es tan fuerte que no solo me sorprende sino que me hace girar la cara hacia un costado. Joder menuda fuerza tiene esta chica – sus ojos destellan pura furia y justo es ese sentimiento el que buscaba, porque hasta hace unos segundos había mas que curiosidad en su mirada.

– No quiero terminar en la cama de alguien como tú, eres una basura Zero – suelta entre dientes haciéndome reír por su comentario, porque venga, ha estado ya un par de ocasiones en mi cama

– no quieres, pero ya has pasado por ella dos veces, irónico ¿no? – me empuja con fuerza una vez más, haciendo que la rabia en mi interior crezca, esta jodida niñata cree que puede gritarme, pegarme y simplemente voy a permitírselo, la tomo de las muñecas y la pego aún más a mi cuerpo.

– estás jugando con fuego Jake y vas a quemarte – murmuro a escasos milímetros de sus labios, mis ojos fijos en los suyos

– En serio crees que me intimidas – suelta con sorna haciendo que mi cuerpo se tense nuestros labios se rosan apenas un poco y noto como sus labios se abren ligeramente, no me resisto más y sin más asalto sus labios.

Joder, la sensación que experimento al sentirla es abrumadora, sus labios son tersos y suaves, carnosos y lo mejor de todo es que están moviéndose sobre los míos de la misma intensa y desenfrenada manera en que yo estoy besándola.

El deseo y las ganas de perderme en su boca aumentan conforme sus labios se mueven contra los míos, muerdo su labio inferior y arrastro mis dientes sobre él, un jadeo cargado de deseo escapa de sus labios, haciéndome participe de cuanto está disfrutando de esto y siento como todo mi cuerpo reacciona a ese simple y maravilloso sonido, dios adoro como se siente su boca, sin más vuelvo a devorar su boca con necesidad.

Sus manos viajan a mi cuello mientras la beso con más intensidad, soy brusco y apasionado porque nunca en mi jodida vida me había sentido de esta manera con una chica, nunca me había sentido así de completo, ese maldito vacío que me acompaña desde que Nico murió, acaba de llenarse por completo con solo tocar sus labios. Saberlo me cabrea aún más y el beso se vuelve aún más apasionado, cargado de rabia y deseo, porque si justo en este instante ambos estamos cabreados por lo que despertamos el uno en el otro y ninguno de los dos logra comprenderlo.

Nuestros labios chocan con intensidad, mi lengua irrumpe en su boca buscando hacer del beso aún más intenso y en cuanto choca con la suya, mierda siento que mi cabeza da vueltas, siento como un escalofrió recorre todo mi cuerpo y siento que en cualquier momento todo mi cuerpo va explotar.

Tomo sus mejillas, acunándolas entre mis manos, manejando el beso a mi antojo, finalmente me obligo a dejar de besarla porque necesito respirar el puto oxigeno que he perdido por dejarme llevar en este jodido beso que me acaba de hacer perder la razón por completo. Permanezco con los ojos cerrados, respirando el aroma que desprende su piel, dejándome llenar por este absurdo sentimiento de plenitud.

Cuando los abro está mirándome con detenimiento, sus ojos brillan, están parcialmente humedecidos, sus mejillas están completamente sonrosadas y sus preciosos, perfectos y deliciosos labios están ligeramente abiertos, para hacerle más fácil respirar, esta agitada, tanto como yo. Sus ojos se desvían hasta mis labios y reprimo una sonrisa mordiendo mi labio, joder luce increíblemente hermosa justo ahora.

Maldita sea, como puede verse tan jodidamente bella después de un beso como este, después de toda la mierda que acabamos de decirnos.

– ¿Por qué hiciste eso? – su voz es apenas un murmullo ronco, cargado de deseo.

En cuanto la pregunta abandona sus labios, me doy cuenta del terrible error que acabo de cometer, maldita sea es la chica que le gusta a mi mejor amigo y acabo de besarla, mierda, mierda, mierda.

¿Qué demonios está mal conmigo? Agitado como estoy, me obligo a apartar la mirada de sus hermosos ojos, me aparto sintiendo como si me estuviera separando de algo que mi cuerpo necesita para volver a moverse, para volver a sentir, para volver a sentirse vivo.

Respiro profundamente y sin más salgo del baño, maldiciendo para mis adentros, porque acabo de besar a la chica de mi mejor amigo, acabo de besar posiblemente a una ex de mi hermano y para completar no solo me ha gustado, me ha fascinado.

Nota del autor: hola mis linduritas, como estan??? capitulo EXTREMADAMENTE LARGO jajajajaja es el primer capitulo tan largo que escribo, pero bueno tenia que dar la version de los hechos desde el punto de vista de ambos, me encanta esta pareja. En serio son tan dispares y tan intensos el uno con el otro que diooos. espero lo hayan disfrutado y pues poco a poco las cosas se ponen interesantes! Besos les amoo, muchisimas gracias por el apoyo y por sus votos, no se olviden de comentar y compartir!