Paso el rato, ya se había derretido el hielo en su boca, en la mesa de noche junto a su cama tenia el vaso vació manchado con un poco de sangre, su lengua ya había dejado de sangra; estaba acostado en su cama acariciando al gato a su lado, este ya estaba dormido. Su madre toco la puerta y después de oír el ''pase'' entro, cerro la puerta detrás de ella y se acerco a la cama de su hijo, sentándose en la orilla.

Marci: estas bien? -pregunto de manera suave-

Zed: si. Y usted?

Marci: estoy bien. Escucha, se que lo que Eduar iso estuvo mal, pero que tu lo golpearas también estuvo mal.

Zed: yo le deje las cosas clara. Ademas, le dijiste, que Issac no murió por mi culpa.

Marci: lo se, pero entiende, Eduar solo esta triste...

Zed: y ebrio -interrumpió a su madre mencionando la ebriedad de su padrastro-

Marci: lo se... pero, hay que seguir adelante.

Zed: no es como si tuviera otra opción.

Marci: -suspira- que voy a hacer contigo? -dijo y le dio un beso en la frente a su hijo, para después levantarse de la cama- buenas noches Zed -le dijo con una sonrisa-

Zed: buenas noches -viendo que su madre salia de la habitación-

Zed se acostó de lado y se dispuso a dormir. Al despertar, vio que eran las 5:00 de la mañana, busco con la mirada al gato y no lo encontró, miro a la ventana y la vio abierta, recordó que el se levanto a medianoche para abrir la ventana por el calor, otro recuerdo le vino a la mente, había soñado con lo mismo que soñó en el hospital, intentando olvidarse de eso, se levanto para irse a bañar, no sin antes quitarse los vendajes y el parque blanco de su ojo. Después de bañarse se puso nuevos vendajes y su uniforme para bajar a la cocina a desayunar, vio a su madre y se sentó en la silla.

Zed: buenos días -dijo y después bostezo, aun tenia sueño-

Marci: buenos días -dijo poniéndole el desayuno frente a el. Un sandwich con queso jamón y salsa de tomate, Zed lo vio y sintió como su estomago se revolvía un poco, extrañamente no tenia hambre, bueno, al menos no tenia hambre de sandwich-

Zed: no tengo hambre, lo puedo guardar para después? -Marci lo vio confundida debido a la falta de hambre de su hijo, pero no le dio importancia-

Marci: claro -dijo con una sonrisa-

Guardo la comida en un envase y después en su bolso. Se acerco a la puerta y la abrió llamando la atención de su madre.

Marci: te vas tan pronto? -mirando a Zed- no abren la escuela hasta las 5:50.

Zed: descuida, solo me adelantare antes, hasta luego -dijo y salio de la casa para dirigirse a la escuela. Su madre estaba confundida ante la aptitud de su hijo, pero decidió hablar con el después de la escuela-

El pelinegro empezó a caminar hasta la escuela, cuando llego se sentó en un muro cerca de su escuela para ponerse a dibujar, el día seguía nublado como los días anteriores aunque, no le daba mucha importancia. Siguió dibujando hasta que abrieron la escuela y se dirigió a su salón, una vez ahí cruzo sus brazos poniéndolos sobre la mesa para acostarse en ellos y descansar un poco mas, pero al poco tiempo llegaron otros alumnos y vio de entre ellos al chico con el que peleo hace unos días, sino se equivocaba se llamaba Sam, aun tenia un par de raspones en la cara de la pelea que tuvieron, decidió ignorarlo cuando este lo llamo pero, este se acerco a el, lo tomo del hombro y lo iso pararse de manea brusca de su asiento para que lo mirara.

Sam: sigues vivo, pero aparentemente no ileso -dijo con una sonrisa, viéndolo de pies a cabeza-

Zed: que quieres ahora? -pregunto yendo directo al punto-

Sam: pensé que podríamos terminar la pelea de la ultima vez, pero fuera de la escuela, para que no tengamos problemas y nadie nos interrumpa -dijo con una sonrisa arrogante- que opinas?

Zed: que que opino? -Sam solo asintió- je, te diré lo que opino -dijo con una sonrisa- prefiero aclarar las cosas aquí y ahora.

Sam: sabes que nos meteros en problemas si lo hacemos de esa manera, verdad? -pregunto empujándolo levemente con un brazo-

Zed: eso no te importo la ultimas vez que me molestaste. Pero escucha, que solo te lo diré una vez -lo tomo del brazo, lo iso girar quedando Zed en su espalda doblandole el brazo haciéndole imposible a Sam hacer algo, dejando a sus compañeros asombrados por el movimiento tan rápido- la próxima vez que vallas a joderme, te juro que te voy a romper la maldita cabeza. Esta claro? -dijo con una sonrisa, aumentando la fuerza con la que le doblaba el brazo. Sam solo asintió repetidas veces con una expresión de dolor- y para que veas que hablo enserio -Zed con su mano libre tomo la cabeza de Sam y la golpeo fuertemente contra una mesa que tenia al lado, para después empujarlo con fuerza haciendo que cayera al suelo, Sam lo miro con una pequeña expresión de miedo, tenia la frente roja del golpe que Zed le dio contra la mesa. Sam pudo ver una expresión que nunca vio antes en su rostro, tenia una sonrisa a su parecer como la de demente y sus pocos compañeros anonadados por lo que iso, normalmente su paciencia era mucha, nunca lo habían visto reaccionar de esa manera, ni ser el quien diera el primer golpe-

Profesor: que pasa? -el profesor entro al salón y al escuchar su voz todos los alumnos lo vieron-

Zed: nada profe, Sam se cayo, es todo -le extendió una mano a Sam y este temblando, la tomo y Zed lo ayudo a levantarse para después acercarse a su oído y susurrarle- si dices algo, te mato -se alejo dándole una sonrisa y volvió a su asiento, Sam iso lo mismo, con la diferencia de que el estaba asustado-

El resto de la mañana transcurrió normal, nada interesante que contar, solo que el director llamo a Zed a la dirección con la única intención de saber como iba su recuperación, a lo cual el contesto que ''bien''; salio de la escuela junto a Eiden, iban hablando de un monto de cosas pero, el tema que ambos evitaban tocar era el de Lucas, mientras iban caminando vieron un monto de gente mas adelante en la calle, habían policías y una ambulancia, ambos se acercaron con curiosidad para saber lo que pasaba, aun que cuando se acercaron uno de los chicos se arrepintió por eso.

Eiden empezó a sentir nauseas, había un cuerpo casi descuartizado, lleno de mordidas, y aparentemente aun desangrándose, parecía que sucedió recientemente, Eiden se cubrió la boca, el olor para el era horrible, pero Zed no se sentía de la misma manera, ni siquiera se inmuto al ver el cuerpo, estaba completamente calmado, como si hubiese visto cosas peores, y el olor... Zed cerro los ojos y respiro profundamente, el olor que desprendía el cuerpo extrañamente le agradaba, en especial la sangre, era un olor embriagante para el, una vista y olor que realmente disfrutaba. 

Un policía se acerco a ambos y les pidió que se retiran, cuando el policía se fue Eiden planeaba obedecer la orden pero, noto que Zed ni siquiera había dado un paso, ni siquiera había dejado de ver el cuerpo, Eiden lo tomo del brazo y se lo llevo con el alejándose del lugar.

Zed: sabes que?

Eiden: um? que? -pregunto curioso mirándolo-

Zed: ahora me dio hambre -le dijo con una sonrisa-

Eiden: Zed, no inventes. A mi se me quito el hambre con solo ver ese cuerpo -dijo sorprendido por lo que dijo su amigo y Zed se echo a reír al ver su reacción, aun que no mentía, ahora si tenia hambre. Eiden se quedo pensando un momento, no estaba seguro de lo que iba a decir, pero lo quería preguntar- crees que lo iso Lucas? -Zed dejo de reír al oír la pregunta de su amigo y lo pensó por un momento-

Zed: sinceramente, no estoy seguro -dijo y siguieron caminando. Al llegar a casa de Zed, Eiden se despidió y se fue a la suya-

Cuando entro a su casa se dirigió al sótano para revisar que había ahí, ya no estaba inundado así que no hubo problema, se puso a revisar las cajas y los estantes, hasta que en el ultimo estante encontró algo que le llamo la atención, y mas porque no espero que su madre tuviese algo así en la casa; una daga, reviso la funda y saco la daga de esta, oyó que abrieron la puerta de la casa volvió a guardar la daga en la funda y subió a la cocina encontrándose con su madre, ella lo saludo y el iso lo mismo.

Zed: mama, y esta daga? -se la muestra a su madre que dejaba las bolsas de compras en la mesa-

Marci: donde la encontraste? -tomando la daga-

Zed: en el sótano -su madre guardo silencio por un momento revisando la daga-

Marci: era de tu padre. Le gustaba mucho estas cosas, incluso tenia una coleccione, la mayoría esta en casa de su madre, solo dejo una aquí -dijo nostálgica-

Zed: todo bien? -pregunto al ver la expresión triste de su madre-

Marci: si, estoy bien -le sonríe- sabes que? quedatela -dijo entregándole la daga-

Zed: enserio?

Marci: si.

Zed: ok. Gracias.

Marci: oye, en un rato hablamos, tengo cosas que hacer.

Zed: ok -dijo y se fue a su cuarto-

Se acostó en su cama viendo la funda de la daga, la saco de su funda y reviso el filo de esta, noto que en un costado tenia una inscripción y lo miro de cerca, este decía ''SANGUINE ITER'', lo pensó por un momento y se sentó ''camino de sangre, si no me equivoco'' fue lo que pensó, hace tiempo aprendió latín, pero por la falta de practica se le olvidaron algunas palabras, quería aprenderlo ya que le llamaba mucho la atención a pesar de ser una lengua muerta. Dejo la daga a un lado y tomo su teléfono, escribió lo que había en la daga y la traducción fue ''camino de la sangre'', lo pensó y prefirió decir ''camino de sangre'', guardo la daga en la funda y fue a un librero que había es su cuarto, todos los libros que habían ahí eran de Issac, solo había 4 o 5 libros que eran suyos, busco una libro que tenia que estaba escrito en latín se sentó en la silla junto a su mesa y empezó a leer el libro.

El rato paso, hasta que su madre lo llamo para comer, dejo el libro de lado y bajo al comedor, una vez ahí noto que Eduar aun no llegaba, no le dio importancia y empezó a comer junto a su madre, los minutos pasaron y había un silencio casi total, hasta que...

Marci: ... -viendo a Zed que no había comido casi nada- te sientes bien?

Zed: si, por? -moviendo su comida-

Marci: es que no has comido casi nada -preocupada-

Zed: estoy bien. No tengo hambre -el hambre que sentía hace rato se le quito, o bueno, mas bien tenia mucha hambre, solo que lo que le servio, lo vio y perdió el apetito-

Marci: seguro. No has comido en todo el día, Eiden me dijo hace rato que no comiste en la escuela. Debes comer algo Zed -Zed la miro por un momento y volvió a dirigir su vista en el plato aun lleno de comida, tenia el codo apoyado en la mesa y su mejilla apoyada en su mano, y con su otra mano solo movía la comida de un lado a otro con el tenedor. Marci se acordó que Eiden le contó las cosas que pasaron hoy, el no la llamo, ella lo llamo para saber como estaba Zed en la escuela, este le contó que no comió, y que había golpeado a un compañero que lo estaba molestando en el salón, que lo destacable de eso era la aptitud que tenia, fue lo que le dijo, excluyendo el cuerpo casi descuartizado que vieron de camino a casa, ella estaba preocupada, tenia la idea de llevarlo al hospital al siguiente día para que lo revisaran- no sera que tienes hambre de otra cosa. Si es así, dime de que tienes hambre -Zed la volvió a mira y solo alzo los hombros en señal de no saberlo-

Zed: puedo irme a mi cuarto? -pregunto, su madre asintió, se paro de la mesa y subió a su cuarto para dormir-

Estaba caminando por el bosque con la daga hasta llegar aun rió donde encontró a 2 personas sentadas en la orilla, se acerco corriendo a ellos, a uno le clavo la daga en la cabeza provocando su muerte y a otro lo golpeo, el chico intento escapar, pero Zed tomo la daga de la cabeza del otro chico y se lo clavo en el abdomen tirándolo al piso, solo podía ver la expresión de miedo que tenia en el rostro, saco el cuchillo y se lo clavo repetidas veces en el pecho y una ultima vez en la frente, Zed quedo manchado de sangre. 

Acerco su mano al cuerpo muerto debajo de el, le saco los ojos y se los comió, se levanto, tomo la mano del cuerpo y con ayuda de la daga se la arranco y la empezó a comer, después se acerco al otro cuerpo, igualmente le saco los ojos y se los comió, le subió la camisa, se acerco a su abdomen y empezó a comer esa parte. Se levanto y se lamió los dedos cubiertos de sangre de los 2 chicos, puso un cuerpo encima del otro, les puso hojas secas encima, saco un yesquero de su bolsillo y quemo los 2 cuerpos cubiertos de hojas, se acerco al rió para limpiar la daga cubierta de sangre, después se lavo un poco la boca; se sentó frente a la hoguera y espero a que el fuego se extinguiera, una vez se apago completamente, tomo los cuerpos calcinados y los tiro al rió, se limpio un poco la sangre y se fue del lugar.