La cámara grababa el sofá vacío de la habitación del general peliverde mientras se escuchaban gritos de fondo.
-¡Ya suficiente tuve con la vez anterior! ¡No te atrevas a hacerme algo así de de nuevo!
-¡Oh, vamos! ¡Quieren que te presente en condiciones y saber de ti!
-¡Esto es un circo, Zarbon! ¡No quiero formar parte de est- !

La cámara se tambaleó unos momentos por culpa del temblor que provocó Dodoria al caer estrepitosamente en parte sobre el sofá y en parte sobre el suelo.
-¡Deja de hacer el tonto! -recriminó el príncipe sujetando el trípode para evitar que se cayera -. Será divertido.
El ser rosado refunfuñó sentándose bien y cruzándose de brazos.
-Espero que al menos no estés mintiendo y no resulte una tortura.

Dodoria resopló torciendo el gesto y miró con desagrado el objetivo. No le hacía nada de ilusión hacer aquello, fuera lo que fuese que Zarbon tuviese planeado.
-¿Y bien? ¿Con qué vas a hacerme de sufrir hoy? -preguntó al ver que el peliverde rebuscaba tras el apoyabrazos de su lado del sofá.
-Deja de quejarte, Dodo -Zarbon le miró con cierta tristeza -. Esta vez va a ser completamente distinto, ya lo verás.
Puso una caja naranja en sus piernas y sonrió a la cámara para comenzar.
-En el último vídeo pude ver que os gustó mucho la colaboración que hice con mis compañeros -un gruñido del rosado llegó a sus oídos, pero hizo caso ajeno -. Y además hubo gente que se mostraba interesada en saber más sobre Dodoria, así que después de un forcejeo, he conseguido traerle.
Dodoria miró la mano derecha de Zarbon señalándole y suspiró con resignación. No le quedaba de otra.
-Hola.
La sonrisa desapareció del rostro del hermoso hombre, que no tardó en darle una mirada severa a su pareja.
-¿Qué modales son esos? ¡Saluda como es debido!
Sin embargo, torció el gesto y desvió la mirada hacia el lado contrario. No estaba allí por voluntad propia, no se lo pensaba poner fácil. Aún estaba resentido con la humillación anterior.

Un suspiro se escapó de Zarbon. No iba a ser precisamente sencillo convencerle... Hasta que se enterase de sus verdaderas intenciones para el vídeo. Una sonrisa traviesa se le escapó al imaginar qué cara pondría, pero enseguida recobró la compostura.
-Bueno... -carraspeó ligeramente y agarró a Dodoria por el brazo para acercarle a él mientras sonreía abiertamente -. ¡El vídeo de hoy lo haré junto a mi marido! Es un poco cascarrabias cuando está tenso, no se lo tengáis en cuenta.
El rosado frunció el ceño aún más. Así no iba a conseguir que cambiara de actitud. Más le valía que aquello fuera algo bueno de verdad.

-¿Qué tal si comenzamos, Dodo? -inquirió Zarbon con una sonrisa implícita en sus dorados ojos abriendo la tapa de la caja en dirección al obturador y poniéndolo frente a su sonriente cara para que los espectadores vieran bien el contenido.
Conectó sus orbes con los del rosado, que a diferencia de él solo mostraban hastío.
-Tomaré tu falta de respuesta como un sí -añadió con una leve risa dándole la vuelta a la caja y agarrando uno de los tantos cilindros que había cuidadosamente colocados en el interior.

Los oscuros ojos del rosado observaban con cuidado cada movimiento que pudiera hacer Zarbon para poder salir corriendo en cualquier momento, pero aquella idea se congeló totalmente cuando el cilindro fue destapado.
-¿Eso es... Carmín?
-Ajá -asintió el príncipe aplicándoselo con delicadeza -. Con sabor a melocotón, pruébalo.
Dodoria se quedó mirando la expresión de su compañero unos instantes, tras lo que bajó la vista a sus labios brillantes, llenos de aquel producto de apetecible olor...
Sin pensárselo mucho más, se acercó con decisión hacia Zarbon y prácticamente se abalanzó sobre él, sosteniéndole las mejillas y dándole un ansiado beso que no tardó en ser correspondido.
Sólo cuando se separaron pareció que Dodoria se acordó de que estaban grabando aquello y miró con una gran vergüenza al otro.
-Ésto luego lo cortas.

Zarbon sólo pudo reír ante eso y darle un breve pico. Por supuesto que no lo iba a cortar, no el momento en el que había conseguido convencerle.
-¿Qué tal si pasamos al meollo del asunto? -cuestionó volviendo a sentarse recto y alcanzando un nuevo tubito -Haremos una "ensalada de frutas" entre los dos. Tenemos bastantes sabores y veremos qué combinaciones quedan mejor.
Los dos pares de ojos se quedaron inmóviles en el brillo del par contrario mientras el rubor se extendía por sus rostros.
-¡Ya sabía yo que aquí había truco! ¡Pretendes usarme de cobaya! -exclamó de repente Dodoria, que finalmente había descubierto las verdaderas intenciones de su esposo.
-Si quieres puedes marcharte... Pero vas a perder una gran oportunidad para obtener multitud de experiencias afrutadas conmigo...

Dodoria se estremeció ligeramente al imaginar aquella situación. No quería ceder ante los tejemanejes de Zarbon pero...
Así, en apenas unos segundos, la cámara les inmortalizaba en una situación tan embarazosa como agradable para la "víctima" de aquel vídeo. Zarbon le había tomado por la mandíbula y le estaba aplicando el producto directamente con las yemas de sus dedos, a lo que él no podía hacer mucho más que intentar controlar el terrible sonrojo que se esparcía por sus mejillas.
Al menos era un sacrificio que iba a disfrutar...

881 palabras
13-04-2021

Buenas genteeeee!!!
Cómo creéis que habrán terminado estos dos? 🤭 Capaz que luego les duelan los labios de tanta "ensalada" que van a hacer 🤣🤣
Esperemos que su experimento al menos les sirva a los suscriptores a la hora de elegir sabor 😂
Os dejo una idea preliminar que tuve con todo esto y me marcho!

Zarbon: después del bálsamo hidratante lo mejor es un poco de color con olor a fruta...
Dodoria: en serio ésto es necesario?
Zarbon: por supuesto que lo es! No pretenderás aspirar a lo mejor con los labios en mal estado, verdad?
Dodoria: ... Aspirar a lo mejor?
Zarbon: ... Nada

Byeeee~