
🐾 | C h a p t e r F o u r t e e n
──¡No, no es lo que crees! ──Trató de excusarse la fémina, antes de que tropezara por el resbaloso piso y aquella cebra saliera corriendo de allá ──¡Oye, espera-!
──¡No hay tiempo! ──Pina se levantó, tomando de forma rápida la ropa de la mujer, tirándoselo ──Necesitamos volver al club.
──¡P-pero-...!
──Escucha, no importa mucho tu reputación ahora. Con simples excusas y palabras no lograrás que un vaso de cristal roto se repare. Entiende, ya todos creen tanto una mentira que es imposible que dejen de creer ello. Ahora, tenemos asuntos más importantes que atender.
──... Vale ──dijo, algo decaída, mientras se empezaba a vestir ──. Supongo que me lo tengo merecido...
──Demasiado.
Le miró, poniéndose la blusa del uniforme y medio acomodando su pelaje ──Vamos. Debemos decirle a Legoshi acerca de Rizz.
🐾
──¡Vamos a empezar las practicas! ¿Las luces están preparadas?
──¡Sí!
──¿El sonido está bien?
──¡Todo bien!
──... No puedo creer que hayas hecho eso sólo para salvar el pellejo de Pina ──dijo Misha en un susurro, para que no las oyeran ──. ¿No tenías una mejor idea?
──Mi mejor idea era llamar a Legoshi ──dijo ____, mordiendo su pulgar ──. Pero... Si lo llamaba... El resultado sería peor, dado que estamos en la escuela, y en hora de clases. Sin contexto, todos verían a Legoshi como el malo del cuento, y nadie me creería a mí...
──¡A mí sí! ──La gata tomó las manos de la menor, y posteriormente las posó sobre su propio pecho ──Siente mi corazón, ¡estoy nerviosa! Yo con gusto testifico si es necesario.
──Dijiste que no querías involucrarte ──dijo la can, mirando a los ojos a su superior ──. No quiero meterte en problemas, Misha.
──No quiero morir, pero si de casualidad ellos dos llegaran a pelear, llama a la policía y me encargo del resto ──La tomó por las mejillas ──. Ahora tu reputación va a ser peor...
──Estaré bien ──Sonrió, y sujetó la mano de la felina que estaba en su rostro ──. Que raro se ve todo esto ──rió a lo bajo.
──Lo sé ──Sonrió la mayor.
──¡Pina, no pareces estar bien! ──le regañó Juno al verlo distraído ──¿Te pasa algo? ¿Recuerdas tus lineas?
──¿Hm? ──El albino miró a la loba, sonrió ──. Sí, estaré bien...
──Pina probablemente estuvo despierto toda la noche con una chica ──dijo Shira, mientras se acercaba a Misha y ____ ──. Él tendrá la apariencia, pero en cuanto a actuación... No es tan bueno como Louis.
──Ni que lo digas ──dijo ____, abrazándose a si misma...
Bueno, Louis no es tan guapo como yo pensó Pina, acomodando su ropa ... Creo que estoy empezando a sentirme mejor con todo eso.
──¡Actuación en tres... ──____ se acercó a los reflectores en la parte superior, encendiéndolos y poniendo un filtro tenue ──dos... Uno...! ¡Ya!
──... Soy Adler, la parca. Quien ha llegado esta noche para llevarme tu alma ──dijo Juno, entrando en su papel, y con una expresión seria ──. Si tienes unas ultimas palabras... Entonces, ofrécelas a esta guadaña...
Pina guardó silencio unos momentos, con un semblante serio. Todos prestaron atención, sobretodo la zorra quien se apoyó en el barandal para ver mejor.
──Si suplicara por mi vida... ¿Eso satisfacería a la parca?
──¿Qué? ──Juno siguió su papel, aunque algo sorprendida.
──Incluso si mi vida no ha tenido sentido, ¡mi vida es solo mía! ──La zorra presto atención, hipnotizada por la buena actuación del carnero ──y... Mi miedo a morir, ¡también es solo mío! No daré un testamento, sino una declaración sincera. En cambio, ¡puedes quitarme la vida! ¡Pero no te tengo miedo...!
Ella miró impresionada todo, tocando su pecho justo donde estaba su corazón.
Un leve rubor se apoderó de su rostro, y después miró a Rizz. Sabía que esa actuación era dedicada a él, y sólo a él.
──¡Ay! Me derrame la pintura, lo siento ──Bill tiró una cubeta de pintura, dado que se había distraído ──¿Podrían traer un poco de agua acá...?
──¡Debemos dejar de practicar por ahora!
──¡Pina! ──Le gritó Juno, algo alterada ──¿Qué te pasa?
──Hice mi actuación ──dijo de manera seria, mientras bajaba del escenario ──. Iré por un balde de agua...
La zorra bajó desde arriba de un salto, cayendo a cuatro patas acercándose a donde el carnero, justo cuando el mismo le palmeó la espalda a Rizz.
──¿Ves eso...? ──Susurró. Los dos siguieron caminando.
──D-d-dios mío, Pina ──dijo ____, moviéndose alrededor de él ──. Sé que las palabras iban hacia Rizz... P-p-pero... Joder, se sintió tan real... Es como si... Te metieras en el papel del personaje.
──No te emociones demasiado ──dijo el carnero, mientras ambos entraban a la bodega y Pina tomaba un balde ──. No corremos la suficiente suerte para decir que mi actuación será igual de espectacular al mostrar la obra... Porque, ni siquiera sé si apareceré vivo para el día de la actuación.
🐾
Gracias a la ayuda de Juno, la zorra había llegado a la guarida de los shishigumi.
Ni Legoshi ni Pina tenían forma alguna de comunicarse con ella. Todo sería improvisado, y ninguno sabría si ____ saldría viva de ello. Era un plan demasiado arriesgado, pero si había una oportunidad, valía la pena.
──¡Alto allí! ──La zorra levantó sus manos en son de paz cuando varias pistolas le apuntaron. Tragó saliva, dando media vuelta de manera lenta ──¿Qué carajos vienes a buscar en nuestra guarida?
Eran varios leones. Todos machos.
Uno en particular estaba a lo lejos sin hacer nada, tenía lentes y fumaba un cigarrillo.
____ analizó todo, suspirando de manera lenta, decidida a dar su respuesta.
Porque si a Juno le dieron oportunidad de ver a Louis, a ella igual le dejarían.
──Vengo a ver a Louis ──dijo, alzando la mirada a ver a los leones ──. Por favor, necesito verle...
──¿Qué hace una zorra como tú en el mercado negro? ──Uno de los leones se acercó aún amenazándola con la pistola ──¿Vienes por carne? Los puestos quedan del otro lado.
──... Vuelvo a repetir. Vengo a ver a Louis.
──¿Quién eres y de qué lo conoces? ──El león de lentes tiró el cigarro, acercándose de manera lenta. Anteriormente estaba apoyado en una limusina ──Será mejor que nos digas, antes de que ordene disparar.
──... Mi nombre es ____ ──dijo, aun sabiendo que decir su verdadero nombre era una estupidez ──. Fui compañera de Louis en la escuela. Necesito hablar con él seriamente. ¿Me darían la oportunidad...?
──¡Sabía que esa loba nos iba a-...! ... No-...
──Dejenla pasar ──dijo aquel peculiar león, mientras quedaba frente a frente con la protagonista ──. No es la primera en venir por el jefe...
Los ojos de la fémina brillaron. No creyó que le iban a dejar pasar de esa manera tan sencilla.
Calmó su respiración, y con dificultad, su cola, que estaba queriendo moverse de la emoción.
──Pero debes dejar esa cámara afuera ──condicionó el mayor, señalando la cámara que tenía. La menor la miró, y todavía tenía las manos alzadas aunque ya no le apuntaban.
──Entiendo que se sientan en desconfianza conmigo, y yo con ustedes ──bajó las manos de a poco ──. Pero, con gusto dejaré mis dispositivos modernos como mi reloj, celular, entre otros. Incluso puedo regalarles mis halajas... Pero les ruego, no me dejen entrar sin mi cámara.
──¡Te han dicho una orden-!
──Cállate ──El león que parecía ser el líder calló al que tenía un peinado bastante peculiar ──. ¿Puedo saber por qué no quieres dejar la cámara acá afuera? Disculpa si hago demasiadas preguntas, pero debo asegurarme de que el jefe esté seguro.
──Prometo no tomar ninguna fotografía ──dijo, tomando su pecho ──, e incluso les doy permiso de asesinarme y comerme si de casualidad llegara a tomar fotos. Pero, la cámara fue un regalo dado por su actual jefe y antiguo compañero mío Louis. Es especial para mí...
──... Vale. Pero no tomes ninguna fotografía ──dijo, a la vez que le ofrecía la mano. ____ la tomó algo dudosa.
──Gracias.
Todos caminaron hacia adentro, abriendo aquella reja y posteriormente la puerta.
Fue un camino no tan largo hasta el piso más alto, donde la mujer se sentía más emocionada y tensa. Ya estaba por llegar, solo era subir un ascensor. Y entraron.
──¿Le importa si muevo un poco mi cola? ──Preguntó al mayor, quien le miró confundido ──Disculpe... Pero, estoy emocionada.
──Adelante ──Miró al frente ──. Sé que es común entre canes hacerlo. No voy a juzgarla, señorita ____.
Agradeció mientras empezaba a mover la cola.
Quería llorar, pero aquello sería demasiado.
Tras cruzar la puerta del elevador cruzaron el pasillo hasta llegar a aquella puerta. Dudó mucho en entrar, pero el león antes tocó la puerta y abrió, dando paso a que la mujer entrara.
──Ah, Ibuki... ¿Qué demonios se te ofrece ahora-...?
──¡LOUIS! ──El ciervo se sorprendió cuando sintió unos brazos rodearle. No correspondió, y solo se limitó a mirar atónito a aquella zorra que lo abrazaba sin ningún tipo de remordimiento.
──... ____-san...
──¡T-t-te había extrañado! ──dijo. Tenía la cabeza en el pecho del superior, y su cola de movía de manera demasiado acelerada ──¡No sabes cuanta falta hacías!
──¡Cuanto tiempo sin vernos! ──dijo el ciervo, tomando las mejillas de la zorra, sonriéndole ──Siendo honesto, ha sido pesado pasar este tiempo solo...
──¡No sabes cuanto anhelé verte otra vez! ──abrazó a Louis, quien correspondió.
Eso esperaba la menor que ocurriera. Un encuentro emotivo y posiblemente romántico.
No fue así.
──Pequeña tonta, no deberías estar acá ──Louis la empujó, mientras que se dirigía a la gran ventana ──. Puedes morir, ¿cómo carajos entraste?
──Yo le otorgué permiso ──El león entró, haciendo una reverencia. Louis le miró con el entrecejo fruncido ──. Disculpe, creí que era alguna amiga suya, y creí adecuado que hablara con ella para que usted pueda sentirse mejor.
──No es mi amiga ──dijo, dándole la espalda a la zorra ──. A duras penas es una conocida... Dime ahora a que mierda has venido, o te echaré a patadas.
──Quisiera un momento a solas ──Rogó, reverenciando ──. Louis, déjame conversar contigo...
El momento fue arruinado cuando el estomago de la menor sonó.
Se sonrojó, tapando su rostro, dado que el ruido había sido fuerte.
(...)
──¡Filete de carnero a la parrilla! ──dijo uno de los leones mientras servía el plato a la zorra ──Que buen festín nos daremos hoy. ¡Umh! ¡Provecho!
──... Provecho ──dijo Louis, antes de morder un trozo de carne, sorprendiendo a la zorra ──... Disculpa mi pregunta, ____, y perdonen, chicos. Pero, quisiera saber... ¿Hay alguna novedad en el club de teatro...?
La menor miró su comida con miedo y asco. Solo una vez en su vida probó carne, por su tío. De allá, prometió no comer más...
Sin contar que la carne era de la misma especie que la del chico que le gustaba.
──... Hay... Un nuevo actor estrella ──dijo, y lo miró a los ojos ──. No es tan bueno como tú pero se ha lucido en las actuaciones...
──Ya veo. ¿Algo más?
──Esta será la ultima obra en conjunto de carnívoros y herbívoros ──dijo, y Louis dejó de comer ──. Ha... Ocurrido un a-a-accidente... Y... L-l-la escuela cree mejor que nos separemos. El club de fotografía cerrará por falta de miembros.
──Oh... Qué mala suerte.
──Niña, ¿por qué tartamudeas tres veces? ──Preguntó el león de melena curiosa mirando a la chica ──No estarás nerviosa por estar junto a nuestro apuesto jefe, ¿verdad?
──¡No, claro que no! ──Gritó. Calló de inmediato.
──... Come, ____ ──dijo Louis, dando otro mordisco de carne ──. No seas maleducada...
──... No, gracias. Me provoca vomito la carne ──fingió una sonrisa ──. Me gusta, sí, pero después lo tiro. Me asquea.
Louis frunció su ceño.
Se levantó de la mesa después de dar un último mordisco y dirigió la mirada a la mujer, quien le miró intrigada.
──____-san. Dijiste que querías hablar conmigo al privado ──Su mirada era penetrante, indescifrable. Misteriosa ──. Si no vas a cenar, no perdamos demasiado tiempo ──acomodó su sacó, saliendo al pasillo ──. Acómpañame y dialoguemos como animales civilizados.
____ se levantó de la mesa, apoyando sus manos sobre la misma y dejando el plato en el centro, ofreciéndoselo a quien quisiera.
Sonrió a los leones, haciendo una reverencia, y agradeciendo por la comida (aunque no haya ingerido nada).
Pidió permiso antes de salir, y acompañó al ciervo.
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