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↝𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 𝟒

-Tienes una muy linda casa, Jin- halago el castaño entrando a la dichosa morado del mencionado.

-Si, la compramos con mi esposo antes de casarnos- puso las cosas dulces en la mesa, listo para tomar el te.

-¿Es el?- señalo una foto en uno de los estantes de la casa.

-Si, Namjoon- asintió el pelirosa.

-Me alegro por ti, hermano- felicito con una sonrisa.

-Cuéntame que hiciste durante estos últimos cinco años- interrogó el hermano mayor -y quiero la verdad, Tae...- advirtió comiendo un pedazo de torta.

Taehyung ya venía venir aquella conversación, por lo tanto estaba preparado, no por nada practico toda la noche con Jimin en lugar de su su hermano mayor.

-Me fui al extranjero como te dije por ultima vez, fui a estudiar y a trabajar, ahí fue donde conocí a Jimin- comenzó a relatar.

-Jimin es tu...

-No, te juro que no, es mi mejor amigo y sabe todo lo que me paso- contesto rápidamente, también sabia muy dentro suyo que malinterpretaría la situación.

-Ah, okey, continúa- le dejo seguir hablando, mientras el volvía a comer.

-Estuvimos tres años fuera de Corea, hasta que Jimin tuvo que volver a Seúl por problemas personales con su familia y me trajo con el- fue explicando mientras miraba su te -el se volvió todo para mi, por lo tanto en ese momento era lo que tenía y nos volvimos juntos- relato detalladamente.

-Estuviste dos años en Seúl y ¿nunca me contactaste?- pregunto el mayor con algo de enojo.

-No estaba listo pata hablar- aclaro de ante mano -fueron años difíciles para mi, tratando de olvidar lo que paso hace cinco años y todo lo que tenga que ver con.. con J-Jungkook- lo nombro con algo se dificultad.

El pelirosa dejo de comer a penas fue nombrado aquel sujeto.

-¿Todavía lo amas?- pregunto sin pelos en la lengua, se podría decir que el mayor de los Kim tenia ese tipo de personalidad, que a veces podía con la paciencia del castaño.

Pero era de esperarse, por lo que miro hacia otro lado, intentando contener las lagrimas, pero casi le era imposible lograrlo.

-S-Si...- susurro.

-Yo que sepa, sus padres siguen con la empresa en Busan, ningún Jeon está por aquí cerca- aseguro Seokjin, mientras veía con cierta lastima al menor.

Y estaba totalmente equivocado, con ese pequeño dato.

-Por eso me quede tranquilo cuando paramos en Seúl, pero no me deja tranquilo estar en el mismo país que esa familia- se seco algunas lágrimas traicioneras.

El mayor asintió en silencio, pensando en como podría ayudar a Taehyung, porque aun que se negara a aceptarlo, este se veía muy mal, no solo sentimentalmente.

-Como no te pude contactar durante cinco años, tengo que contarte lo poco que supe de Jungkook cuando despertó- empezó a hablar seriamente el mayor, no queriendo tocar el tema la principio pero sabia que debía hacerlo.

Taehyung presto absoluta atención, pues el ni siquiera estuvo cuando Jungkook despertó hace cinco años.

-El si despertó, despertó en la madrugada justo cuando todos dormían, menos yo- comenzó a relatar -esa familia no me quería cerca como a ti, por lo tanto me oculte- recordó ese momento.

-¿Entonces?- pregunto ansioso.

-El doctor me contó todo, el golpe fue fuerte, se noto que el puso todo su cuerpo para cubrirte antes y después del impacto, por lo tanto sufrió más golpes, en las costillas, en los brazos y en la cabeza- el castaño se tapo la boca mientras su mano temblaba.

El dolor, el dolor era demasiado, ya que durante estos años nunca supo lo que había pasado con su novio cuando despertó ni en el proceso de curación, por lo que le estaba afectando demasiado la conversación.

Pero aun así, pidió a su hermano que continuara.

-El se despertó con la perdida absoluta de memoria y dijeron que le iba costar recordar todo lo que vivió- finalizo.

Taehyung se quedo congelado, ahora sabe que gracias a el, Jungkook se lastimo mucho más de lo que esperaba.

-Por culpa mía...- murmuró casi ido en sus pensamientos, pensamientos en donde se auto insultaba.

-No lo es, Taehyung- negó rápidamente su hermano -nada de lo que halla pasado fue culpa tuya, los accidentes pasan y eso no era una escusa para irte del país- aprovecho el momento para soltar un ligero regaño, cosas que Seokjin no deja pasar.

-Discutimos, yo comencé la discusión, sus padres no me aceptaban y me dolía tanto que se lo reclame a el... y-y no d-debí hacerlo- cerro sus ojos recordando aquel momento -si no hubiera pensando en mi mismo, n-nada de eso hubiera pasar y-y... y el...

Jin agarro la mano de su hermano por encima de la mesa y la apretó transmitiendo tranquilidad.

-No fue tu culpa, Kim Taehyung, grávatelo en la frente, por favor...- le dijo con seguridad.

El mencionado simplemente negó lentamente con la cabeza tratando con todas sus fuerzas retener el llanto, el sentimiento de culpa era mucho mas grande de lo que recordaba en aquellos años.

-Solo dime, tu no decidiste irte de un día para el otro del país, yo te acompañaba todos los días al hospital e incluso dormíamos juntos esperando respuestas del estado de Jungkook- su hermano lo miro con seriedad -¿alguien te dijo algo para que te vallas de esa forma?- preguntó al fin.

El castaño se quedo pensando, ¿decirle la verdad a su hermano o quedarse callado como lo hizo en aquel momento?.

-Por favor, Taehyung... si lo amas de verdad no lo hubieras dejado- aquel comentario le había dolido peor que una apuñalada.

Fue un completo cobarde.

Entonces el menor comenzó a llorar nuevamente, miro fijamente a los ojos de su hermano y asintió.

-Perdón- se disculpo antes de que el llanto junto a los sollozos lo invadiera inmediatamente.

Jin se paro de su silla y abrazo a su hermano, quien aun sentado se pego a la cintura del mayor mientras las lagrimas corrían.

El siempre lo supo, lo supo desde un principio que su hermano no se fue por voluntad propia, muy dentro suyo sentía que alguien lo había obligado a irse y ahora que esta mas que confirmado, cree saber quien y el porque.

Por ahora no quería preguntar más nada, se notaba que el menor seguía afectado por todo lo que paso.

En eso un celular en la mesa sonó por su presencia.

Taehyung estiro la mano y vio el mensaje de su amigo.

-¿Yoongi?- pregunto Jin con sorpresa.

-Yoongi es otro amigo, que Jimin y yo conocimos en el trabajo, ahora somos casi inseparables, pero el es menos expresivo que una roca- respondió soltando una leve risita.

Jin asintió feliz, aun que sea, supo que el menor no estuvo solo durante tanto tiempo.

-Me tengo que ir a trabajar, Hyung- aviso parándose de la silla.

-¿Los fines de semana estas libre?- pregunto curioso el pelirosa.

-Solamente los domingo en toda la tarde y algunos días libres que me regalan- contestó agarrando su campera.

-Bien, te invito a pasar la tarde conmigo el domingo- ofreció.

El castaño con una sonrisa abrazo otra vez a su hermano.

-Estaré este domingo, te lo prometo- acepto la invitación caminando hacia la puerta.

-E-Espera...- el mayor lo tomo del brazo -¿sabes algo de mamá?- le pregunto seriamente.

Taehyung en cambio borró su sonrisa.

-Pensé que no hablaríamos de ella... n-no...

-Ella se quedo en Busan- prefirió hablar el mayor -todavía se pregunta la razón de tu desaparición y no hablo de solo los años que te fuiste al extranjero- miro con tristeza a su hermanito.

El menor desvío la mirada queriendo evitar que la nombrarían de esa mujer le afectara, tampoco tenia las suficientes ganas de hablar sobre el tema.

Su madre era una persona diferente, con ella se decepcionaron mutuamente, tanto que ninguno podía verse a la cara o al menos, eso creía Taehyung.

-No creo que quiera verme- supuso, restándole importancia al asunto.

-Sabes que no es así- intento explicarle.

-Este tema debe dejar de tocarse, ¿okey?- se deshizo del agarre del mayor -vendré el domingo- sonrió sin dientes.

El pelirosa le abrió la puerta no tan convencido y el menor salió aun despidiéndose con la mano en alto.

Ambos hermanos sonrieron contentos.

Al fin se vieron.

Pero uno se fue con una mala sensación en su pecho.

●●●○

○○○●

Jungkook estaba en su nueva oficina haciendo papeleo, faltaba solo un día para anunciar en todo Seúl la llegada de los empresarios Jeon.

Por alguna razón no se sentía nervioso, si no más bien ansioso.

-¡Hijo!- entro su madre por la puerta y detrás de ella entraba un hombre con bata, deduciendo que se trataba de un doctor.

-Ma, ya hablamos de esto...- comento con algo de molestia.

-No me importa, necesitas un chequeo diario por semana, sin berrinches, te dejo con el doctor- la mujer le tiro un beso al hijo y luego se retiro de la oficina.

-Hola, soy el doctor Choi, déjeme un momento para leer su historial medico- saco unos papeles que la misma madre le entrego.

Jungkook solo asintió y se paro de su silla para ubicarse al lado del profesional.

-Ese choque de auto, te dejo en estado algo crítico, ¿eh?- dejo los papeles en su maletín y fue sacando sus herramientas.

-Fue hace cinco años atrás, según mis padres costillas rotas, brazos casi partidos y cabeza muy lastimada- informó.

El doctor iba anotando cada detalle.

-¿Ibas solo?- interrogo.

-No, con mi ex pareja que me dejo literalmente tirado en medio del hospital y el manejaba- contesto con algo de enojo en sus palabras, viendo como el mayor hacia una mueca de confusión tras escucharlo.

-Que raro... tus lastimaduras y fracturas, según esto, son de tu lado izquierdo del cuerpo- el doctor toco el brazo izquierdo -¿acá fue donde el golpe fue mas fuerte?- preguntó.

-Si, ¿por que?- miro con cierta duda al doctor.

-Si ibas de copiloto en todo caso las fracturas tendrían que haberse hecho del lado derecho, porque en el lado izquierdo esta el conductor- comento algo dudoso el profesional.

Aquello dejo dudas en la cabeza de Jungkook.

-Cambiando de tema, ¿tuviste algunos síntomas cuando despertaste?- cambio de tema algo preocupado, pero no descarto aquella respuesta.

-Si, perdí gran parte de mi memoria, no recuerdo mucho el pasado y me cuesta recordar el rostro de la gente que alguna vez vi años antes del accidente- contesto nuevamente.

El doctor anoto todo en su libreta y miro al chico frente a el.

-¿Alguien o algún momento que no recuerdes?- siguió con el cuestionario, pero esta vez por curiosidad.

-El único rostro que no recuerdo es el de mi ex pareja y todos los momentos que viví con el, como el se fue y no tengo fotos, no pude recordarle- hablo con algo de tristeza.

El doctor Choi se quedo sorprendido, había varias cosas que no cuadraban en lo que le decía el chico, ni los papeles, ni la madre.

Saco una tarjeta de su bolsillo y se la entrego.

-Si necesita ayuda o quieres saber más sobre lo que te paso, ve a mi consultorio- le dijo volviendo a guardar todo.

-Espera, ¿eso fue todo?- pregunto sorprendido.

-Su madre me dio un tiempo y lo tengo que cumplir, por eso le di mi tarjeta- sonrió y se despidió del joven.

El pelinegro solo asintió y vio como el mayor se retiraba de su oficina.

Le resulto rara la actitud del doctor, pero sorprendente también por las preguntas, los doctores que traía su madre normalmente no le preguntaban ese tipo de cosas que drásticamente, despertaron la curiosidad del chico.

Pero en eso se escucho otra vez la puerta, de su oficina, ser abierta.

-Hola, aquí tu mejor amiga- Lisa entro por la puerta con una gran sonrisa.

-Lisa- saludo con su sonrisa aconejada.

Ambos se sentaron en el sillón de la oficina.

-¿El hombre que se retiro era tu nuevo doctor?- preguntó con curiosidad.

-Si, mamá siempre cambia de doctor cada vez que puede, le gusta tener diferentes opiniones- contesto.

-¿Y estas bien?...

-Si, estoy tranquilo, nada nuevo, después de lo que paso hace años prefiero no hablar de eso- el pelinegro intento cambiar de tema, ya que aun se sentía pensativo por el interrogatorio anterior.

-De acuerdo- acepto -me acuerdo cuando tus padres me presentaron contigo, estabas todo envuelto en cintas de hospital- la chica soltó una leve risa que contagio a su amigo.

-Si, estaba destruido literalmente- afirmó su amigo.

-Tus padres me contaron por lo que pasaste y fue ahí cuando me propuse a ser la persona que necesitabas a tu lado- hablo con seriedad.

-Lisa, ya hablamos de esto...- Jungkook sabía a donde se encaminaba la conversación.

-Si, lo se, se que me rechazaste y lo se, pero ahora somos amigos Jungkook y eso me pone igual de contenta- dijo antes que nada.

El pelinegro asintió y desvió la mirada aliviado, sus padres le presentaron a Lisa porque querían que sean pareja, más Jungkook no quería eso, porque no la amaba de esa forma.

-¡Hey!, ¿Qué dices si vamos a comer?- ofreció la rubia sacando la tención del momento.

-Termino el papeleo y vamos- acepto y su amiga aplaudió en el lugar.

Jungkook se apresuro a terminar sus papeles mientras Lisa le hablaba.

-¿Mañana es la presentación de la empresa?- pregunto mirando por la ventana de la oficina.

-Si, saldremos en vivo rompiendo el moño dorado- contesto acomodando su escritorio.

-Suena increíble, tu familia es muy buena- halago la muchacha.

-La verdad que si, mis padres son los mejores del mundo- sonrío firmando los últimos papeles -mañana a la noche se realizara la cena oficial, ¿me acompañaras?- preguntó terminando sus cosas.

-Siempre- Lisa sonrió ansiosa.

Ambos se encaminaron hacía la salida de la oficina, listos para retirarse del edificio.

-¿A donde vamos a ir?- pregunto el pelinegro subiendo al ascensor.

-¿Te gusto al lugar que fuimos la otra vez?- recordó la rubia.

-Si, a pesar del accidente, me encanto la comida- pensó en aquella apetitosa hamburguesa que había comido aquel día.

-Pues, vamos ahí- codeo el hombro de su amigo.

-Me parece bien- sonrió ansioso por comer otra hamburguesa.

Y entonces el par de amigos se dirigieron a comer juntos.

○○○○●

●●●●○

Taehyung y Jimin estaban hechos fuego esa noche, parecía que era otro día de esos donde la gente literalmente colapsaba el lugar.

Cuando lograron terminar con la mayoría de las personas que estaban comiendo, se colocaron detrás del mostrador junto a Yoongi.

-Casa llena, otra vez- comento con algo de desprecio el peligris.

-¿Y sabes, que es lo bueno?- pregunto el rubio con una sonrisita.

-Un glorioso aumento- susurro el castaño y entre los tres rieron un poco.

Era lindo trabajar con amigos.

Hacían los días de Taehyung menos deprimidos.

-El guardia me informo que entro una parejita al ultimo y que no dejara que entren más porque no hay lugar disponible- comentó el pálido, mientras daba un leve escaneo del lugar lleno.

-Bien, ¿quien va?- pregunto divertido Jimin.

-Iré yo, además, en tu mesa numero tres hay una niña que necesita servilletas- el castaño señalo por detrás de su amigo.

Jimin miro detrás de su espalda y divisó a la niña totalmente enchastrada en salsa de tomate y soltó suspiro.

-Tu ganas, tienes suerte de que me gusten los niños- acepto el reto y agarro uno de los servilleteros.

-Nadie te pregunto si te gustan los niños, ve antes de que comience a llorar, odio cuando lloran- lo apresuro el peligris.

Jimin corrió a su mesa, no sin antes pellizcar el trasero de su pareja que casi lo manda a la mierda, mientras que el castaño soltó una pequeña risa y se dirigió a la mesa donde se habían sentado los últimos clientes.

Cuando los ubico les dejo las cartas en la mesa.

-Hola me llamo Taehyung, seré su mesero esta noche linda, y si necesitas algo pueden llamar a mi nombre- sonrió con su típica y reluciente sonrisa.

La chica rubia miro hacia arriba, saludando.

-Si, vamos a ordenar dos pizzas, una vegana y otro especial- ordeno y el castaño anoto todo.

-Esta bien, ¿algo para tomar?- pregunto por último.

-Mmm... ¿tu que dices Jungkook?- la rubia se dirigió a su acompañante.

¿Cómo dijo?.

Taehyung se quedo sin aire al escuchar aquel nombre y con lentitud miro al acompañante de la chica pensando en lo peor, esperando que fuera una simple y jodida coincidencia.

Pero todo se le vino abajo cuando el pelinegro subió la mirada hacia el mesero con una leve sonrisa.

No puede ser.

Y absolutamente todo se congelo a su alrededor, todo paso a ser en cámara lenta y de la nada eran solo ellos dos para los ojos de Taehyung.

-Leí que hacen limonada, ¿puede ser eso?- pregunto como si nada.

Si, era el, frente a sus ojos, justo frente suyo.

Taehyung no dijo nada, se quedo aun congelado en el lugar, mirando fijamente al pelinegro.

Pero rápidamente noto como este no tenia ninguno tipo de expresión asustado cuando se vieron fijamente, ¿acaso el?...

-Emm... ¿paso algo?- interrogó algo confundido -¿no les quedo limonada?- pregunto preocupado, el de verdad quería probarla.

-¿Ju-Jungkook?- susurro sintiendo como picaban sus ojitos, avisándole que si seguía ahí, iba a explotar.

Lo tenía frente suyo, después de tantos años, después de todo lo que vivieron juntos, el estaba sonriendo como si nada, casi como si no lo conociera.

-Si, así me llamo- Jungkook alzo una ceja algo confundido -perdona, ¿nos conocemos?- pregunto dudoso.

¿Acaso el no lo recuerda?.

Yoongi, quien estuvo mirando todo, llamo rápidamente a Jimin quien al ver la escena y de quienes se trataban corrió hacia el lugar donde se encontraba su amigo totalmente temblando ahora en el lugar.

-Hola, soy Jimin- llego el rubio poniéndose en frente de su amigo, asustando un poco a Jungkook y a Lisa.

-Oh, si- sonrió la rubia, quitándole importancia al asunto.

Taehyung quien estaba detrás del rubio sentía como miles de sensaciones se apoderaban de el.

Lo único que pudo hacer al instante fue salir corriendo hacia los vestuarios que quedaban detrás y no moverse de ahí.

Era Jungkook de verdad, ya no era una alucinación.

Mientras que Jeon se quedo pensando en aquel mesero, incluso cuando salió corriendo lo siguió con la mirada, estaba confundido, el chico parecía tener los ojos tristes pero con algo de brillo de esperanza en ellos.

Y por alguna extraña razón, le pareció tierno que se halla quedado congelado frente suyo.

-Yo seré su mesero ahora, si necesitan algo lo hablan a Yoongi- señalo al peligris en la caja para después salir corriendo detrás de su amigo.

-Jungkook, ¿todo bien?- pregunto Lisa, llamando la atención de su amigo, ignorando la escena previa.

-S-Si, todo bien- asintió volviendo en si.

Pero volvió a pensar, aquella voz profunda del mesero, era casi idéntica al chico del cubículo del baño.

-¿Serán la misma persona?- murmuró mirando el pasillo por donde se retiro el castaño.

-¿Que dijiste?- volvió a preguntar la rubia.

-Nada, no me hagas caso- contestó con tratando de aparentar que nada pasaba.

Su amiga solo asintió y volvió a mirar su celular.

Pero Jungkook no se quitaba de la cabeza el rostro de aquel mesero.

Era lindo.

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●●●●●○

Al fin :)

Hasta la próxima

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