CAPÍTULO 4
Doyoung estaba sentado mirando fijamente su teléfono, el plazo para su oferta estaba a punto de vencer y Jaehyun no lo había llamado, pero no quería perder la fe en que tal vez lo haría.
Había algo extraño, Doyoung tenía una extraña corazonada y no le gustaba nada ese tipo de sensación, pero esperaría, era lo mejor que podía hacer.
Por otro lado Taeyong quien le reclamó por abrazar a su novio y estaba hecho una furia, no volvió desde ese día, había estado al lado de Jaehyun.
Johnny, Mark y Jaehyun comían juntos y Taeyong también estaba ahí.
─¿Ya decidiste Jaehyun? ─preguntó Johnny. Jaehyun asintió─ ¿Lo harás? ─Jaehyun negó.
─¿Por qué no? ─preguntó Mark.
Jaehyun suspiró, realmente no tenía ganas de tener esa conversación.
─No puedo, más bien no quiero, ser modelo fue la razón por la cual discutía con Taeyong.
─Jaehyun ─comenzó Johnny ─sé que es difícil, no puedo imaginarme a que punto pero... Taeyong querría que lo hicieras ─Jaehyun apretó los labios.
Taeyong sabía que nadie podía verlo pero aún asi asintió de acuerdo.
─Tómalo como una oportunidad que te estan dando los cielos, el que volvieras a encontrar a Doyoung y él te ofreciera un trabajo así.
Jaehyun meditó.
─No estoy seguro ─se levantó y sin decir nada más se fue a su habitación como siempre.
Mark y Johnny se miraron, estaban muy preocupados y desesperados, tenían y querían ayudar a Jaehyun.
Taeyong lo siguió, Jaehyun tomó la foto que tenia de ellos dos enmarcada en su mesita de noche.
─No tienes ni idea de cuanto te extraño - le susurró a la foto ─Me gustaría que estuvieras aquí... Conmigo...
Taeyong sintió una gran tristeza, Jaehyun se sentía tan mal como el día en que murió, le gustaría decirle que está ahí, con él, que siempre lo estuvo y siempre lo estaría.
─Jaehyun... Siempre estoy contigo ─le dijo a pesar de saber que no lo escucharía.
─Haría lo que fuera por volverte a ver ─Taeyong sintió miedo, Jaehyun no podía estar hablando en serio.
Un golpeteo en la puerta se escuchó, Johnny y Mark entraron en la habitación.
─Jaehyun, vamos a ir al cine ¿quieres ir? ─un alegre Mark lo invitó.
─No, gracias, diviertanse ─Johnny y Mark lo miraron decepcionados.
─Está bien, regresaré a tiempo para que te lleves el auto ─Jaehyun asintió y los vió salir.
Esperó a que se escuchara la puerta, y miró la foto nuevamente.
─Desde que te fuiste... No he podido dormir, no hay un solo día en que no tenga pesadillas, te extraño tanto que siento que me está consumiendo, ya ni siquiera sé quien soy, simplemente no puedo seguir ─su voz se quebró ─Ya no...
Taeyong que aun estaba sorprendido vió a Jaehyun levantarse de la cama.
─¿Qué estás haciendo? ─le preguntó, obviamente no había respuesta. ─Jaehyun no se te ocurra...
─Iré contigo... ─dijo Jaehyun al dejar la foto sobre la mesa de noche.
─¡No! ─gritó Taeyong ─¡No lo hagas!
En cuanto vió a Jaehyun salir de la habitación desapareció, tenía que buscar a Doyoung y traerlo rápido.
Doyoung no estaba en su departamento ni en la oficina, Taeyong estaba entrando en pánico, tenia que encontrarlo si quería salvar a Jaehyun.
Para su sorpresa cuando regresó, Doyoung estaba tocando insistentemente la puerta del que había sido su departamento.
─¡Doyoung! ─el nombrado brincó del susto ─¡Jaehyun va a hacerlo! ¡Tienes que detenerlo!
─¡¿Qué?!
Apesar de su grito Doyoung salió corriendo, tuvo otra corazonada, subió las escaleras corriendo hasta el techo y rogó a los cielos que estuviera ahí, porque si no era así, ya no podría salvarlo.
Doyoung entró corriendo a la azotea de un edificio de cinco pisos y su sangre se heló cuando vió a Jaehyun parado en la orilla del techo con los brazos abiertos.
Jaehyun no se dió cuenta de su presencia y cuando estuvo dispuesto a saltar Doyoung lo jaló con todas sus fuerzas hacia atrás, ambos cayeron al suelo.
─¡¿Estás loco?! ─le gritó Doyoung ─¡¿Qué diablos pasa contigo?! ¡¿Cómo pudiste pensar hacer algo asi?! ¡¿No piensas en lo que haces?! ¡¿Piensas que Taeyong estaría feliz con esto?!
Jaehyun lo miraba con lagrimas en los ojos, él mismo no pudo evitar llorar, una segunda vez Doyoung lo abrazó fuertemente, Jaehyun comenzó a llorar más fuerte.
Doyoung se dió cuenta hasta ese momento cuan necesitado estaba Jaehyun, cuanto había necesitado un simple abrazo, cuan solo se sentía y a que magnitud Jaehyun estaba roto por dentro.
Doyoung se apartó y lo tomó por los hombros.
─Escucha Jaehyun, se que es difícil, lo sé, pero esto no es una solución, Taeyong no querría esto, Taeyong querría que siguieras con tu vida, Jaehyun, hay personas que estamos aquí, a tu lado, quiero ayudarte Jaehyun, quiero que nunca vuelvas a sentirte solo.
Doyoung volvió a abrazarlo y dejar que Jaehyun llorara hasta el cansancio, miró por encima de su hombros a Taeyong que lo miraba aliviado y le sonreía.
─Gracias ─Doyoung asintió en respuesta.
Jaehyun se levantó con cuidado luciendo peor que antes, Doyoung lo sostuvo todo el tiempo ya que parecía que Jaehyun había perdido toda su fuerza.
Entraron al departamento y Doyoung ayudó a Jaehyun a recostarse, una vez que Jaehyun estuvo acostado cayó dormido casi enseguida.
Taeyong se apareció a su lado y lo miró dormir.
─Lo que hizo fue muy estúpido ─dijo enojado, Doyoung asintió.
─Por primera vez en mi vida, sentí que me iba a dar un infarto ─Taeyong sonrió.
─No me vendría mal la compañía ─dijo con una pequeña risa, Doyoung lo miró molesto.
─Jaehyun estuvo a punto de matarse y ¿aún haces bromas asi?
─Lo siento pero, después de hoy, sé que él está en buenas manos ─Doyoung sonrió un poco.
─Eso espero ─suspiró cansado.
Ambos observaron a Jaehyun dormir.
─¿Qué le pasa? ─Jaehyun se estaba moviendo entre sueños.
─Pesadillas ─contestó Taeyong.
Doyoung recordó, cuando tuvo esa experiencia fea en Japón, él tambien tenía pesadillas y cuando lo tomaban de la mano y acariciaban su frente se sentía mejor.
Doyoung tomó la mano de Jaehyun y comenzó a acariciar su cabello.
─Ya está bien Jaehyun, deja que se vaya ─le susurró.
Minutos después Jaehyun volvía a dormir plácidamente.
─¿Cómo hiciste eso? ─preguntó sorprendido Taeyong.
─Cuando tenemos miedo, el aferrarnos a alguien calma nuestro corazón ─Taeyong asintió.
La puerta se escuchó y Johnny y Mark entraron a la habitación.
─¿Doyoung? ─preguntó Mark ─¿Qué estas...
Doyoung se levantó y les pidió que salieran.
─¿Qué sucede? ─preguntó Johnny.
─Se los digo solo porque tienen que saberlo ─hizo una pausa ─Jaehyun intentó saltar del techo.
Ambos estaban sorprendidos en gran manera.
─¡Oh por Dios! ─Mark gritó, Doyoung le tapó la boca.
─Pero pero... ─Johnny tartamudeo.
─Vine a buscarlo por una respuesta y no lo encontre, no se que pasó, algo me dijo que estaría ahí. ─Ambos asintieron. ─No creo que pueda ir a trabajar ¿podrían avisar?
─Yo lo haré ─dijo Mark.
─Y... Si no les molesta, quisiera quedarme aquí esta noche.
─Sin problema, estás en tu casa ─Doyoung les sonrió y regresó al cuarto de Jaehyun que seguía durmiendo pacíficamente.
─Creo que va a ser más difícil de lo que pensé ─admitió Doyoung.
─Lo sé, pero... Puedes hacerlo ─Taeyong le sonrió.
Doyoung centró su atención en Jaehyun, tenía que pensar como iba a lograr que al menos, esta persona que estaba cansada de la vida y del sufrimiento, volviera a sonreír.
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