
CAPÍTULO 3
—¿A dónde vamos? —preguntó Taeyong mientras salían de la oficina donde Doyoung trabajaba.
Habían pasado un par de días desde que se le apareció y lo había puesto al día sobre todo lo que sucedió con Jaehyun.
—Tu iras a averiguar donde están Johnny y Mark —Taeyong frunció el ceño.
—Es a Jaehyun a quien tienes que ver —Doyoung puso los ojos en blanco.
—Eso ya lo se, pero dime mi querido Taeyong, ¿quién me dijo que moriste? —Taeyong meditó, tenía razón —Alguien que esté vivo me tiene que decir que ya no estás.
Taeyong asintió y desapareció, minutos después estaba a su lado en el auto.
—Van a ir de compras, al súper mercado, escuché decir a Mark que el refrigerador está casi vacío.
Doyoung asintió y se puso en marcha.
—Ahora...—dijo Doyoung mientras esperaba en el estacionamiento a que Johnny y Mark aparecieran —¿Debería... Chocar mi carrito con el de ellos? Eso es muy cliché —admitió asi mismo.
—Es muy de drama —Taeyong arrugó la nariz.
—¿Tomar el mismo producto? —preguntó Doyoung.
Taeyong negó.
—Creo que has visto muchos dramas —le contestó Taeyong divertido.
—Culpable —Doyoung alzó las manos.
—Solo, pasa junto a ellos y espera a que te reconozcan —Doyoung asintió.
Quince minutos más tarde, Johnny y Mark estaban frente a la tienda.
Ellos tambien habían cambiado mucho, Doyoung se sentía feliz de verlos después de años.
Taeyong y él entraron y los siguieron hasta que casi terminaban sus compras, entonces Doyoung pasó muy lentamente junto a ellos.
—¡Oh! —exclamó sorprendido Mark.
—¿Qué? —Johnny preguntó mientras miraba en la misma dirección.—¿Doyoung?
—Si, estoy seguro que es él.
Mark se acercó mientras él disimulaba leyendo la etiqueta de una lata de atún.
—¿Doyoung? —el nombrado volteó al escuchar su nombre. —¿Eres tu verdad? Kim Doyoung.
Doyoung sonrió.
—Si tu eres Mark, si —el nombrado sonrió y lo abrazó fuertemente —¿Dónde te metiste todos estos años?
—Japón, no tiene mucho que regresé —contestó sonriendo.
Johnny se acercó y tambien lo abrazó.
—Tenemos que decirte algo —dijo Johnny serio. —¿Quieres ir a nuestro departamento? Mark hace un café delicioso, a ti te gusta mucho el café.
Doyoung sonrió grandemente.
—¿Ya se casaron y me lo perdí? —preguntó inocente.
Taeyong le había dicho su situación de siempre pero tenia que fingir que no.
—¡¿Qué?! ¡No! —dijeron ambos al mismo tiempo.
—Ufff pensé que me había perdido la boda —dijo tratando de sonar aliviado.
—No no, ya sabes, solo somos amigos —dijo Mark, Johnny asintió.
A estas alturas ya a ninguno le dolía.
—¿Cuándo van a dejar de hacerse tontos? —ambos desviaron la mirada.
—No sé de que hablas —dijo Johnny —Vamos a pagar y te llevaremos a nuestro departamento.
Una vez en su auto, mientras seguía al auto de Johnny y Mark, Doyoung volvió a hablarle a Taeyong que había estado parado a su lado todo el tiempo.
—¿Lo hice bien? —Taeyong asintió
—Deberías ser actor, hasta yo me la creí —Doyoung rió.
Una vez que llegaron, Doyoung se estacionó detrás de ellos y subieron a su departamento.
Una vez adentro, Doyoung vió maravillado las fotos que había por toda la sala de estar, incluso él aparecía en un par, eran fotos de su adolescencia, los buenos y hermosos tiempos que pasó a su lado antes de irse a Japón.
Doyoung se sentó en el sofa junto con Johnny mientras Mark hacia el café.
—¿Como está Jaehyun? —preguntó sonriendo —Y ¿Taeyong?
Ante su última pregunta, Johnny agachó la mirada, se estaba preparando para responder.
—Doyoung —Johnny lo llamó —No tenías como enterarte —comenzó Johnny —Hace tres años... Hubo un accidente, desafortunadamente perdimos a Taeyong.
Doyoung trató de parecer sorprendido, incluso se obligó a derramar un par de lagrimas.
—¿Pero... —Dijo con voz entrecortada —No... No puede ser... —Siguió llorando.
Frente a él, Taeyong lo miraba divertido.
—Si fueras un actor, estoy seguro que ganarías un Oscar —Doyoung trató de no sonreír, el comentario le había causado gracia.
—Fue muy duro para todos, pero él y Jaehyun eran pareja, y desde el día que perdimos a Taeyong, también perdimos a Jaehyun —Doyoung se secó las lágrimas y asintió.
—¿Dónde está él? Quiero verlo.
—No está aquí, está tomando tiempo extra en el trabajo —Doyoung asintió. - Solo trabaja y duerme, a veces ni siquiera come.
—¿Podrías decirme donde trabaja? —Johnny asintió gustoso.
Mark llegó con su café y siguieron hablando de lo que había pasado y todo respecto a Jaehyun.
Doyoung se retiró cuando se hacia tarde y salió de ahí prometiendo visitarlos seguido.
Desde el asiento del conductor se quedó mirando a la nada, aun no se sentía seguro de hacer eso, de volver a ver a Jaehyun y ayudarlo.
—No te estás arrepintiendo ¿verdad?
La voz de Taeyong lo regresó a la realidad.
—No pero, no se si estoy seguro de ver a Jaehyun así de mal —suspiró.
—Vamos, puedes hacerlo —Taeyong lo animó.
Estuvo cerca de veinte minutos en el auto afuera del restaurante ideando como acercarse a Jaehyun o que decirle. Después de no conseguir nada, decidió que improvisaria.
Entró al restaurante y se sentó en una mesa, no muy lejos de él, Jaehyun estaba parado recibiendo una orden.
Taeyong tenia razón, Jaehyun estaba mal, nunca lo había visto tan delgado y demacrado, incluso parecía solo forrado en piel, su una vez guapo y brillante rostro estaba decaído y parecía incluso ensombresido, su quijada estaba fuertemente apretada y aunque tomaba una orden, su mirada parecía perdida.
Era un humano que tenia como única meta en la vida, seguir respirando y esperar la muerte dejando la vida pasar.
El corazón de Doyoung se estrujo de dolor y tristeza.
—¿Lo ves? —Volteó a ver a Taeyong que estaba sentado frente a él. —¿Ves a lo que me refiero?
—Si, nunca imaginé eso —contestó Doyoung casi en un susurro.
Jaehyun fue a dejar la orden y el chico de la barra lo señaló, Jaehyun se dirigió hacia él.
—¡Oh Dios mio! ¡Viene hacia acá! —Doyoung volteó a todos lados nervioso, Taeyong rió.
—Tranquilo, solo es Jaehyun, el que aún es tu amigo —esas palabras lo tranquilizaron en gran manera.
—¿Puedo tomar su orden?
Cuando la voz grave de Jaehyun llegó a sus oídos el levantó la cabeza y se encontró con sus ojos.
Esos ojos que antes parecían idos, se llenaron de sorpresa, una muy pequeña sonrisa que era casi imposible de ver se formó en sus labios y por un segundo, Doyoung volvió a ver al Jaehyun que conocía.
—¿Doyoung? —preguntó sorprendido.
—Hola Jaehyun —lo saludó con una sonrisa.
—Han... han pasado años... ¿Cómo has estado? —Jaehyun parecía genuinamente interesado.
—Bien Jaehyun, no tiene mucho tiempo que regresé de Japón, hoy me tope con Johnny y Mark y corrí a verte.
El rostro de Jaehyun decayó de nuevo.
—Entonces... Ellos...
—Casi termina tu turno ¿verdad? —Jaehyun asintió —¿Porqué no me traes un café y espero a que termines?
Jaehyun lo miró inseguro pero terminó por asentir, fue por su café y se lo trajo.
Esperó nerviosamente unos minutos mientras veía como Taeyong estaba atrás de Jaehyun mientras limpiaba la barra.
Jaehyun se metió a la parte de atrás del restaurante y salió ya cambiado.
Jaehyun se sentó frente a él y lo observó.
—Cambiaste mucho —comentó, Doyoung sonrió.
—No solo por fuera, créeme, pero no vine a hablar de mi, si no de ti.
—Estoy bien —Doyoung negó.
—No, no lo estás, ¿qué hay de malo en no estarlo? —Jaehyun desvió la mirada —Escucha, escuchar sobre Taeyong realmente me afectó, sobre todo porque ya pasarón tres años, pero Jaehyun, realmente estoy preocupado por ti.
—No tienes porque —Jaehyun negó —Estoy perfectamente bien —su rostro parecía aburrido, cansado de todo.
Doyoung suspiró.
—Si estas tan bien como dices, tengo una propuesta para ti —los ojos de Jaehyun se posaron en él de nuevo, tal vez él tambien estaba desesperado por buscar una salida. —Mira Jaehyun, logré cumplir mi sueño de ser diseñador, ahora tengo la oportunidad que tres de mis diseños sean parte de una colección de hombres jóvenes —Jaehyun asintió sin entender —Quiero que seas tú quien los modele.
Era jugar con fuego, ya que el que Jaehyun modelara y Taeyong pensaba que lo engañaba fue la razón de la gran discusión que tuvieron antes de que Taeyong muriera.
Jaehyun negó instantáneamente.
—No volveré a hacer eso nunca.
Doyoung reunió todo el coraje que tenía y habló.
—Pensé que dijiste que estabas bien —Jaehyun se mordió el labio nervioso —Piénsalo Jaehyun, es una buena oportunidad.
Doyoung sacó una tarjeta de negocios y la deslizó sobre la mesa, Jaehyun la tomó y la leyó con cuidado.
—Solamente puedo darte un par de días para que respondas, mi número está ahí, solo llámame —Jaehyun suspiró y asintió.
—No te prometo que lo haré —dijo sincero.
—Lo sé, pero yo se donde encontrarte —Jaehyun asintió.
Doyoung se levantó y Jaehyun junto con él.
—¿Quieres que te de un aventon? —preguntó, Jaehyun negó.
—Johnny vendrá por mi —Doyoung asintió.
No quería sonar pegajoso, tenia que darle su espacio y tiempo a Jaehyun.
Doyoung lo miró y después a Taeyong que estaba a su lado, sonrió y susurró muy bajito sabiendo que solo Taeyong lo escucharía.
"Lo siento"
Dicho esto Doyoung abrazó a Jaehyun fuertemente, Jaehyun parecía no corresponder pero después de unos segundos sintió como palmeaba su espalda.
—Me dio mucho gusto verte Jaehyun, espero verte seguido —se apartó y vió el rostro enojado de Taeyong pero lo ignoró —Espero tu llamada.
Se despidió de Jaehyun con la mano y salió rumbo a su auto con un Taeyong furioso detrás de él.
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