❥ Es fácil de doblegar en público...

( Edad, 9 )

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Yugo miraba distraídamente las cajas de pasta, mientras revisaba cada tanto la lista en sus manos. Sintiendo los movimientos a su espalda

-Deja eso donde estaba.

Ordenó tranquilamente a la pequeña peliroja que escondía en su espalda un paquete de Son Jo's de chocolate

-Pero papá-...

-No se discute.

La niña bufó, viéndose obligada a acatar la orden. Yugo revisó por última vez la lista y al ver que ya tenía todo se dispuso a avanzar a la fila para la caja, junto a una amargada niña de cabello rojo como el fuego y pecas cubriendo sus mejillas

-Siguiente por favor.

Yugo avanzó la fila, pero se quedó mudo al levantar la mirada y ver a la cajera que amablemente pasaba cosa por cosa del carrito a la máquina reguistradora

Sin que el contrario tuviera cómo disimular la impresión

-Dinah...

La cajera levantó la mirada, analizando las facciones del hombre por un momento. Hasta que finalmente lo reconoció

-¡Yugo! ¿Cómo has estado?

Los ojos de la mujer se encontraron a la pequeña junto a su viejo amigo del pasado

-¿Ella es tu hija?

El hombre asintió, algo aludido e incómodo

-¿Cómo te llamas?

-Me llamo Tn, ¿Puedes apurarte, por favor?

La niña sintió la mano del adulto

Tn miró de reojo la sonrisa boba y cursi en la cara de ambos y esperó por más de veinte minutos que dejaran de hablar y ponerse al día. Se recostó al carrito, miró sus pies, se puso a hacerle muecas al bebé de la señora de al lado y aquellos dos nada que reaccionaban

La pecosa finalmente se fastidió y decidió ponerse entre ambos para aclarar su garganta

-Oye papá, ¿Recuerdas esa vez que me dijiste que si sacaba una A+ en la escuela ibas a darme un paquete de galletas de chocolate y al salir de la escuela con mi examen calificado me dijiste que te las habías comido todas en el camino?

El hombre se tensó, mientras que la mujer a su lado rió entre dientes disimuladamente

-O cuando estábamos estudiando y dijiste que por cada respuesta correcta me darías una galleta, pero al final lo que hacías era cambiar las respuestas y-...

La pequeña no pudo terminar cuando la mano del mayor cubrió su boca para evitar que lo hiciera

La dependenta miró a su viejo amigo con una sonrisa divertida

-¿Seguro de que no quieres algo más?

El hombre gruñó

-Un paquete de Son Jo's por favor.

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Extra:

Antes de salir del establecimiento, Yugo cargaba todas las bolsas en sus brazos, dispuesto a ir a la salida. Mientras que por su parte la niña dejó de seguirlo para correr de vuelta a la caja y decirle algo a la rubia

Al hombre se le cruzaron un millón de escenarios en su cabeza y ninguno bueno conociendo a su mocosa

Cuando la niña volvió, él esperó hasta llegar al auto para una confrontación

-¿Qué le dijiste?

-Le dí tu número y le dije que sabías cocinar muy rico.

El ceño del mayor se desfiguró

-¡No debes alejarte de mi ni hablar con desconocidos! No sabes qué loco puede estar suelto por ahí

Reprendió

-... ¿Y ella qué dijo?

-Dijo, "El viernes estoy libre."