Narradora:

De la unión entren Seto y la chica Kisara nació una hermosa niña, la cual llamaron Selina y esta era la viva imagen de su padre Seto mientras que poseía una gran amabilidad.

Mientras que sus padres y su tío trabajaban, siempre  cuidaban de Selina. En una ocasión Mokuba le muestra a su sobrina un regalo que le hizo a su padre cuando estos dos eran niños y en base a eso Selina le dibuja a su padre un cuadro de cuatro dragones blancos de ojos azules representando a su familia.

Desde el día que Selina nació, Seto se ha esforzado para ser el mejor papa del mundo y no cometer los mismos errores que su padre adoptivo había cometido con sus tres hijos y con el mundo.

Pasaron los años y Selina demostró ser una estudiante mejor destacada y su mayor sueño era ser una piloto aviadora. Poseía una gran belleza hereditaria de parte de su madre, incluso conseguía tener muchos pretendientes, pero lamentablemente por esa misma razón era fastidiada por algunas de sus compañeras mujeres; le decían que chicas como ella siempre llegaran solo ser un estereotipo de mujer como se la imaginaban los hombres y que por ser hija de un hombre rico terminaría malgastando su dinero en cosas absurdas o abusando de su poder.

 Selina simplemente quería demostrarles a esas chicas que estaban equivocadas, que no era lo que tenías por fuera lo que te hacían quien eres, sino lo de adentro. Y es por eso que su padre siempre le daba la mejor educación.

Cuando esta ya estaba lista para estudiar, Selina fue enviada a la escuela preparatoria de Domino; la cual su padre fue también, pero al momento de llegar estaba un poco nerviosa ya que lo que se imaginaba es que sin duda llegaría a encontrarse con chicas que según ellas eran feministas. A lo que su papal le dice.

-No importa lo que te digan los demás. No olvides que eres una Kaiba y los Kaiba pueden demostrar que saben cambiar el mundo.-

Ese comentario hizo que Selina se calmara y se despidió de sus padres dando les un abrazo y luego un beso de despedida para finalmente salir de la limusina y entrar a la escuela.

Al entrar a la escuela estaba llamando tanto la atención de los varones que no podían dejar de seguirla, pero también las chicas envidiaban su irresistible belleza. En medio de su búsqueda a su salón una de las chicas que la envidiaban le decía lo que las demás chicas siempre le decían, al escuchar eso Selina recordó rápidamente lo que le dijo su padre antes de bajar de la limusina y siguió con su camino.

Yuki:

Inicia otro día en la escuela, me encontraba jugando duelo de monstruos hasta que llego la hora de la clases. Todo era rutina, hasta que la maestra presento a una nueva alumna. Todos los chicos estaban hipnotizados con su belleza y todas las chicas menos yo sentían mucha envidia por ella ya que por alguna razón ya la conocía. Ella es la hija de Seto Kaiba, uno de los viejos amigos de mi padre y era una chica prodigio tal y como lo era mama, según mi papa.

Cuando intentaba buscar un lugar donde se sentaría Selina todos los chicos querían que sentara a su lado, hasta que le dijo que se sentara a mi lado al igual que lo que paso con Johanna. Las clases siguieron con normalidad hasta la hora del almuerzo donde invite a Selina a que comiera con nosotras. En cuanto vino, note de que dejo de sentirse incomoda, como si alguien o algo la estuviera mirando fijamente, pero supongo que debe ser por las miradas acosadoras de los chicos que están prendidos de su belleza. 

-Gracias chicas, por dejarme unir a su grupo.- nos dice a mi y a Johanna.

-Bueno, siempre habrá espacio para otra chica. De hecho aquí nos falta mas chicas.- dice Johanna.

-Tu debes ser Yukjatzu Mutuo.- me dice al voltear a verme., -Si así es.- le dije., -Exactamente, ¿En que club están tu y Johanna? y ¿Porque solo hay dos chicas?-

-De hecho este club es uno de Duelo de monstruos, pero ninguna chica, ademas de mi y Johanna se ha interesado en entrar por que lo consideran un juego machista y quieren que desaparezca de una vez por todas.-

-Pero ustedes son dos chicas que lo juegan sin ningún obstáculo. Ni siquiera esas palabras las detuvieron de poder jugarlo.- nos dice para levantar el animo.

-Lo sabemos, pero las chicas que se creen feministas nos creen poco femeninas para serlo, simplemente por que tenemos rasgos masculinos.-

Selina no dijo nada, su poder desapareció tras escuchar esas palabras. Nos volteo a ver y luego ella dijo., -Se lo que dicen. Créanme, al igual que ustedes dos he sufrido de esas burlas constantemente. Todas las chicas piensan que por ser bonita estoy destinada al machismo.-

Finalmente fuimos al club de duelo de monstruos, todos los chicos nos reunimos para ver la baraja de Selina, algunos de sus monstruos eran del tipo hada, mientras que otros eran dragones o lanzadores de conjuros. Uno de los monstruos que mas llamo mi atención era uno llamado Kanji, el dragón de la laguna.

Tenía 1200 puntos de ataque mientras que los de defensa eran el doble y si algo me enseño mi padre es que lo que le falta de puntos de ataque a los monstruos, lo compensan con su habilidad especial.

-Selina. Exactamente ¿Que hace esta carta? Nunca antes la había visto.- le dije con mucha duda., -Esa carta lo que hace es que al entrar en modo de defensa se convierte en un vórtice que protege a los monstruos que tengo en el campo.- me explica.

Luego me encontré con una carta mágica llamada "La bendición de los caídos", su efecto era el que tu decidías, podías elegir entre recuperar de tres a cinco cartas del cementerio hasta que todos los monstruos que tienes en el cementerio le den mas poder a todos los que tienes en el campo, pero el primer efecto me recuerda un poco a la habilidad especial de la hechicera de la fe.

-Dime Yuki. ¿Cuales son tus cartas?.- me pregunta,. -Bueno... las cartas que tengo son una mezcla de las que llegaron a usar mis padres y siempre las mezclo para crear una baraja propia, aunque sean dos.- le dije para mostrárselas.

Estábamos a punto de jugar, pero luego se nos acercaron las chicas mas populares de la escuela para entrar al salón y fastidiarnos. Les dije que yo era la presidenta y si solo venían a molestar, entonces que se fueran.

-Por favor, todos aquí que por ser medio hombre. ¿En serio crees que ser la presidenta te hará empoderada niña/niño?- se burla de mi la líder del grupito.

-¡Déjala en paz! Ella no es una chica que busca empoderar se, por que es poderosa al ser buena líder y amiga. No es lo que tienes fuera lo que te hace quien eres, sino lo que llevas dentro y sale a la luz.- dice Johanna para defenderme. Luego Selina se poso para demostrar que ella también estaba de acuerdo con ella. Realmente son las mejores amigas que jamas haya tenido.

-Ya escucharon a la presidenta. Si no vienen a ser parte de este club, les ordenamos que se retiren.- dice Selina. El grupito no dijo nada y mejor se fueron.

Creí que al pertenecer a ciudad Domino me tendrían mas respeto, pero me equivoqué. Y eso no es todo, por nuestro lado masculino; piensan que siempre estaremos en el fondo. Me bajaba el autoestima tan solo escuchar como nos pisoteaba; a veces desearía que los monstruos que tengo cobraran vida para callarlas de una vez, pero no puedo hacer nada.

Las clases continuaron con normalidad hasta la hora de la salida y cada quien nos fuimos a nuestras casas. Selina se acerco hacia mi antes de irse a su casa para decirme algo al oído.

-¿Sabes Yuki? Mi padre siempre me dice que no debo hacerles caso de lo que me dicen. También deberías hacer lo mismo y seguir como lo pide tu padre.-

Las palabras de Selina si que me levantaron demasiado el animo. Tanto que quería invitarla a la escuela de duelo de monstruos a que fuera la nueva estudiante.

-Lo siento Yuki, pero no puedo entrar. Tengo clases de aviación poco después de la escuela. Nunca te lo conté ni a Johanna, pero mi sueño es ser piloto de aviación y poder conducir algún día el jet blanco de ojos azules de papa.-

Después de la charla, ambas nos fuimos las tres directamente a nuestras casas. Todo era rutina, llegue, salude a Frank, luego papa y yo hablamos tomando el te, fui a mis clases de duelo de monstruos. Mi padre noto de lo triste que estaba, pero era por que llegaron chicas a fastidiarnos sobre el juego al que siempre jugaba.

Mi padre me dijo que se va a organizar un torneo de duelo de monstruos, pero iba a ser el último ya que por exigencias feministas harán que desaparezca para siempre. No podía creerlo, por simples caprichos quieren prohibir un juego.

___________________________________________________________________________________________________________________

Hola mi clan de duelistas, estoy de vuelta con esta historia. Perdón por no actualizarla, pero he tenido problemas con el Internet de esta cosa, necesitaba que la historia tuviera mejor continuación y que estaba terminando otras historias que tenía.

Gracias por su paciencia. Espero que les haya gustado el diseño de las carta que yo misma hice.

Yo ya me voy

¡Es hora del duelo!