Típico, típico, típico.

Me disculpe mientras veía un mensaje que Karla me había mandado.

"Los chicos y yo les preparamos una sorpresa en la azotea del hotel de ellos, vengan pronto. XX"

-¿Quien es?- me preguntó Liam.

-Kat, quiere que vayamos a tu hotel porque ella y los chicos nos "prepararon una sorpresa"- dije haciendo las comillas con los dedos.

Pedimos un taxi y nos dirigimos al hotel. Cuando llegamos y fuimos hasta la azotea, todo estaba iluminado como si navidad se tratara, con luces blancas adornando los arboles y arbustos que ahí tenían. Había macetas con flores de muchos tipos y colores, y en el centro del todo había unos tipo sillones y una manta.

El hotel estaba un poco lejos de la ciudad, y hacia posible ver el cielo mas brillante.

-Me encantan las estrellas- dije un poco tímida.

-¿Por que?- dijo Liam mientras me abrazaba por detrás.

-No lo se, supongo que me ponen a pensar y me recuerdan muchas cosas- dije con un poco de nostalgia.

El me dio un beso en la mejilla y susurro a mi oído.

- A mi me gustas tu.

Agarrenme que me desmayo.

Mi respiración y mi corazón se pararon por un instante. Estaba totalmente en shock, no se como explicar mis sentimientos en este momento.

-Ven, vamos a sentarnos- me dice Liam.

-Los chicos y Karla son los mejores- digo mientras caminamos hacia el sillon- no se como hicieron todo esto.

Nos sentamos juntos compartiendo una manta para no tener frío.

-Si lo hicieron fue por algo- me dice Liam con una sonrisa- yo soy de los que piensan que todo pasa por algo, como reencontrarnos.

-Me, ¿me recordaste?- le pregunte sorprendida.

-No podía olvidar tus ojos _____.

-Liam...- dije soltando un suspiro.

Tomo mi rostro entre sus manos y comenzó a acariciarme con sus pulgares.

Esto ya pasa el limite de los sueños, en cualquier momento despertaré.

Pase mis manos por su cuello, acariciando un instante su lunar. Comenzamos a acercarnos, se podía respirar el nerviosismo en el aire, sus manos temblaban un poco, no se si por el frío o los nervios, pero yo estoy igual.

Estaba tan atrapada en aquel momento que sin querer solté un suspiro y dije.

-Te quiero Liam.

Un pequeño brillo cruzo su mirada, sonrió y sin dudarlo, me beso.

Fue el beso mas tierno, tímido y dulce que experimentare en mi vida.