⊹ ࣪ ˖ ꒰ঌ ♡ ໒꒱ ⊹ ࣪ ˖

El jodido partido se había retrasado. Los estudiantes de la preparatoria de Gyeongju comentaban que algunos integrantes de su equipo habían llegado tarde. Ahora, a la una de la tarde, Jungkook, Hoseok y Yoongi paseaban por el campo donde se llevaría a cabo el encuentro. Jungkook escudriñaba el lugar con la mirada, intentando localizar a Taehyung o a su hermano. Mientras tanto, las gradas comenzaban a llenarse; tras casi dos horas de espera, el partido estaba finalmente a punto de empezar.

Se colocaron en el centro de todos, rodeados de pancartas y carteles de apoyo para el equipo local. Había muchos, la mayoría diseñados y elaborados por las chicas del salón.

Y Jungkook no pudo evitar sentir celos, porque algunas tenían escrito el nombre de Taehyung descaradamente, si, ya sabía que era guapo y llamaba la atención de muchas chicas, pero al menos ellas podían hacerlo sin sentirse mal.

Porque Jungkook era un chico y nadie podía enterarse de su "relación"

—Jungkook —Yoongi le llamó a su lado—. Ignoralas.

—¿Eh? ¿Por qué? —fingió demencia.

—Sientes celos, no vas a poder negarlo.

—No, claro que no, me alegra que Taehyung tenga admiradoras, después de todo, son solo eso.

—¡Eso! Reclama lo que es tuyo —Hoseok exclamó.

El partido comenzó tal como lo esperaba: el equipo local tomó la delantera rápidamente. No pudo contener su emoción y se puso de pie para animar junto a Hoseok, quien le seguía el entusiasmo. En contraste, Yoongi permanecía en su lugar, con una sonrisa discreta que delataba su disfrute del momento.

Taehyung, con ese uniforme que le hacía destacar, el movimiento de su cabello con el aire fresco de la primavera, su sonrisa con sabor a victoria cercana, cautiva el corazón de Jungkook .

Nunca había sentido tanto, nunca antes su ritmo cardíaco había deseado tanto a otra persona con tanta intensidad, con que así era como se sentía el amor, ¿no?

Pronto, a Jungkook ya no le importaron las burlas que probablemente recibiría por sus compañeras y se encontró animándolo con tanta euforia. Estaba orgulloso de él.

A poco más de medio tiempo, el equipo local seguía en la delantera, Seokjin le pasaba el balón a Taehyung, quién no dudo en correr libremente hasta encestar, una vez más, estaban a punto de conseguir la victoria.

5 minutos antes del final, las cosas iban de mal en peor para la preparatoria de Gyeongju, todo iba a favor del maravilloso equipo de Kim Taehyung.

Con una velocidad insuperable, tan rápida que ningún jugador podía alcanzarlo, Taehyung atravesó la cancha como un rayo. Driblando el balón con precisión y sin perder el enfoque, dio un salto directo hacia la canasta, haciendo que esos últimos cinco segundos parecieran detenerse. Su movimiento aseguró la victoria para el equipo local.

Todo el equipo se reunió y comenzaron a celebrarlo, toda la gente vitoreaba y aplaudian, incluso algunas personas de la escuela de Gyeongju, puesto a que los chicos guapos de su equipo llamaron muchísimo más su atención.

—¡Eso! ¡Tenemos la victoria! —Hoseok abrazó al menor igual de emocionado.

—Ya sabía que íbamos a ganar —Jungkook declaró, porque con alguien tan increíble como lo era Kim Taehyung, su victoria ya estaba asegurada.

El equipo derrotado, salieron de la cancha rechistando e insultando, mientras que los ganadores se quedaron, el micrófono se le cedió a Jeon Seokjin, el capitán del equipo, diciendo unas cuantas palabras, después de eso, Jimin le pidió el micrófono y éste se lo dio a Taehyung.

Seokjin miraba atentamente sus movimientos, no quería que su amigo Namjoon tuviera la razón.

—¡Esperen! Aun no se vayan, tengo algo preparado que definitivamente no querrán perderse —Taehyung anuncio através del micrófono.

Retrocedió un poco e hizo una seña con la mano, como si estuviera llamando a alguien, todos se quedaron en sus lugares, mirando con atención a los chicos que salían

—Está canción, se la dedicaré a una persona muy importante en mi vida. —Declaró y enseguida comenzaron los cuchicheos.

—¿Para quien será? —una chica de baja estatura le dijo a otra más alta, Jungkook las escuchó y giro a verlas.

—Es obvio, será para su novio.

—¿De verdad es Gay?

—Dicen que es Bisexual, realmente, así que aún tienes oportunidad, Lia.

—No las escuches... —Hoseok le dijo-. ¡Es obvio que es para ti, Jungkook! —exclamó sin cuidado, ganándose miradas desaprobatorias por el grupo de chicas.

—Hoseok... no grites.

—¡Es la verdad.

—Ésta persona —Taehyung continuó hablando y sonríe cuando los chicos del club de música salen con sus instrumentos como trompetas, tambores, flautas y bocinas grandes, posicionandose en medio de la cancha—. No diré su nombre, pero sabe muy bien que se la dedico.

—You're just too good to be true
I can't take my eyes off you...

—¿Cree que estamos en la jodida película de 10 Things I Hate About You? —Yoongi se burló y por fin se levantó de su asiento.

Jungkook no podía creer lo que sus ojos estaban apreciando.

—...You'd be like heaven to touch
I wanna hold you so much

—No puede ser... —Huening Kai, tampoco podía creerselo, pensó en su amigo Beomgyu y en lo furioso que se pondría si estuviese ahí, así que, disimuladamente, avanza hasta las gradas y toma su bolso para comenzar a grabarlo.

—At long last love has arrived
And I thank God I'm alive

—¿Entonces era verdad? —Seokjin le susurró a Namjoon.

—Lo es, capitán —Jimin le tomó del hombro respondiendo en lugar de Namjoon.

La orquesta comenzó a tocar, los de esa escuela, gritaban y bailaban con alegría, mientras que su escuela local, no podía creer que Kim Taehyung estuviese cantando con esa voz grave tan maravillosa que tenía.

—I love you baby,
And if it's quite all right
I need you baby
And if its quite alright
I love you baby
To warm the lonely nights

Jungkook sonrió por inercia, mientras su corazón late a mil por hora. ¿Era real? ¿Kim Taehyung estaba cantando Can't Take My Eyes Off You después del partido? ¿Por qué ningún entrenador lo detenía? ¿Y de verdad... se la estaba dedicando a él?

Las chicas gritaban como locas, pero eso ya no importaba. En el fondo, Jungkook sabía muy bien la devoción que Taehyung sentía por él. Era un sentimiento puro, profundo y completamente recíproco. Nada ni nadie podría interponerse entre ellos.

—I love you baby
Now trust in me when I say its okay.

La escena le trajo a la memoria aquel momento en el baño, cuando Taehyung, sin dudarlo, comenzó a cantar Here Comes The Sun solo para animarlo. Jamás habría imaginado verlo cantar frente a tanta gente. Aunque sentía un ligero atisbo de celos al pensar que otros pudieran disfrutar de su preciosa voz, comprendió que ya no había razón para ocultarla. Taehyung tenía derecho a brillar. Era asombroso cómo destacaba en tantas cosas, no solo en el baloncesto.

—Espera... esos son... ¿los chicos del club de música? ¿Qué hacen aquí? —Jungkook le preguntó a Yoongi y éste le responde con una sonrisa ladeada.

—Digamos que es como el "examen" del club, como soy el líder, Taehyung me pidió que hicieran todo este show, obviamente sin mi, así que... si, es para ti —Yoongi terminó de confirmarle

—Oh pretty baby
Don't bring me down I pray
Oh pretty baby
Now that I've found you stay
And let me love you, baby
Let me love you...

Cuando la música terminó y los chicos del club dejaron de tocar, todos comenzaron a aplaudir, como si esa fuese la verdadera victoria.

—¡Te amo! —gritó al aire, Jungkook se sentía avergonzado, pero su sonrisa no podía borrarse por nada del mundo.

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—Jungkook —Taehyung se acercó a el trío de chicos luego de haberse ido a cambiar de ropa.

—Todo un espectáculo, ¿Eh? —Yoongi se burló.

Taehyung le dedicó una mirada asesina—. Jimin te estaba buscando, creo que es importante.

La cara llena de burla en Yoongi se esfumó e hizo una mueca de incomodidad y dejo a ambos solos.

—Wow, cantas muy bien, hyung —Jungkook no pudo ocultar su sonrisa.

—¿Tienes planes para al rato que volvamos a Busan?

—Sí que eres directo, ¿Eh? —Taehyung río en respuesta.

—¿Tienes planes o no?

—No, ¿Por qué?

—Bien, tú, yo, mi auto y una cita a las 7.

Jungkook apenas podía procesar todo lo que estaba diciendo, Taehyung le guiño un ojo y volvió con los chicos del equipo.

¿Estaba invitándolo a una cita formalmente? Joder, ¿Qué había hecho para merecer a una persona tan maravillosa como lo era Kim Taehyung?

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—Entonces supongo que ese espectáculo era para ti, ¿no? —Seokjin le llamó cuando estuvo a punto de abrir la puerta para salir.

—¿Qué? No, claro que no.

—Irás con él ahora, ¿es así? —le cuestionó.

—Si... pero solo como amigos, no pienses mal las cosas.

—Jungkook, literalmente los vi besándose descaradamente en tu cama mientras él estaba encima de ti, puedes engañar a los demás, pero a tu hermano mayor jamas.

—Oye... —sus mejillas se ruborizaron—. No fue así, él solo estaba... besándome el rostro y ya, no seas exagerado.

—Bien, ¿eso es lo que hacen los "amigos" según tú? —Seokjin ríe ligeramente al verlo avergonzado.

—Sí... somos amigos y ya.

—Pero te gusta.

—¿Ya puedo irme? Está esperándome.

—Te irás hasta que me digas la verdad —a Seokjin le encantaba molestarlo.

—¡Somos amigos, hyung! Mamá aun está molesta conmigo, así que dile que fui con unos amigos —Jungkook sigue con su camino y cierra la puerta.

Seokjin esbozó una sonrisa ladeada al ver a su hermano tan emocionado, sabía que estaba mintiendo, así que, con cautela, se acercó para apartar ligeramente las cortinas de la ventana y confirmar lo que sospechaba: Jungkook iba a una cita con Taehyung, quién lucía impecable, vestido con elegancia, y no tardaron en subir al auto. La felicidad de Jungkook era evidente; no dejaba de sonreír, y Seokjin podía adivinar que, en su corazón, Jungkook había encontrado el amor.

Afortunadamente, su padre no estaba en casa. Si lo hubiera estado, seguramente habría arruinado la magia del momento, reduciendo a polvo la alegría de su hermano con comentarios que lo obligarían a enfrentar la dura realidad. Seokjin lo odiaba, tanto a él como a su madre, por su ceguera ante el daño que aquel hombre infligía a su familia día tras día.

Solo esperaba a que no volviera nunca.

Mientras tanto, Jungkook intentaba mantener a su corazón estable, porque incluso podía creer que Taehyung lo escucharía.

—¿A donde vamos?

—Ya te dije, es sorpresa, es un lugar al que siempre voy.

—¿El planetario? —intentó adivinar.

—No, pequeño Jeon.

—Mmm, ¿el bosque donde hacías trabajo comunitario?

—Ya, deja de recordar mis momentos humildes.

—Pero para mi, ese día fue genial, hyung.

«Omitiendo la paliza que me dieron al regresar, claro»

—Para mi también, pero no iremos ahí, ¡no trates de adivinar! Le quitas la emoción.

—Ha pasado poco más de 40 minutos, ¿iremos a la playa o algo así?

—No, pero, ¿Recuerdas que te dije que yo vivía del otro lado de la ciudad? —el menor asintió—. Es ahí donde vamos.

—¿Es en serio? ¿Iremos a tu casa de antes?

—¡No! Ya, deja de tratar de adivinar, no vas a lograrlo, Jeon.

—Perdón, suelo ser desesperado —dijo Jungkook con una sonrisa burlona, riéndose de sí mismo.

Poco después, llegaron al otro extremo de la ciudad, un lugar que Jungkook casi nunca visitaba. Sin embargo, estaba seguro de algo: no era para nada comparado a donde vivía.

Taehyung llegó al estacionamiento y ambos se bajaron del auto.

—¿Un restaurante? Eres muy original, Kim.

—Ya sé que no es la gran cosa pero, no sabía a donde más llevarte —se rascó el cuello.

—Perdón, no quise decirlo de mala manera, era solo una broma-

Taehyung comienza a reír ante su torpe explicación—. Ya lo sé, Jungkook, deja de preocuparte tanto, andando.

Entraron y se acomodaron donde el mesero les indicó, el ambiente era agradable, parecía ser un lugar muy caro, Jungkook casi nunca o más bien, nunca iba a lugares como esos, según su padre era muy costoso y no tenían suficiente dinero para pagar algo así.

Eso era una mentira, porque su madre ganaba lo suficiente; el problema era que su padre gastaba gran parte de ese dinero en bares o en alcohol.

¿Por qué dejar que los pensamientos sobre su familia disfuncional arruinaran su cita? Aunque intentaba evitarlo, no podía apartarlos de su mente. Tal vez porque Taehyung era completamente diferente a él en todos los sentidos.

—Espera, en un momento vengo, no me tardo —Taehyung le indicó y salió del restaurante, Jungkook no le tomó mucha importancia, tal vez solo se le había olvidado algo en el auto.

Taehyung era maravilloso ante sus ojos, era perfecto en todos los aspectos incluso su voz al cantar era magnífica, pero nunca creyó que las luces se apagaran y solo quedarán algunas de color dorado adornando las paredes del restaurante.

Una tonada muy especifica comenzó a sonar a través de las bocinas del restaurante, ¿podría ser que...?

—Sé que ahora no tengo a todos los chicos del club de música, pero tengo que hacer esto —era la voz de Taehyung, entró al restaurante y volvió a cantar Can't Take My Eyes Off You.

Jungkook no podía creerselo, entonces todo era verdad, esa canción era para él.

Le causó mucha gracia, la gente aplaudía y murmuraban cosas como: "quisiera un novio así"

Cuanto más se acercaba a la mesa, sus nervios crecían exponencialmente. Pero su ansiedad alcanzó su punto máximo cuando vio a Taehyung sosteniendo un ramo de flores, con esa sonrisa tan característica curvando sus labios. Sus ojos, cálidos estaban fijos únicamente en él, mientras, con una voz suave, citaba la letra de la canción, «Eres demasiado bueno para ser verdad».

Cuando estuvieron frente a frente, dejó de cantar para comenzar a decir:

—Iba a hacer esto en Gyeongju, pero creí que te sentirías incómodo si todos en la escuela se enteran de nosotros, así que... pensé que sería mejor idea declararme frente a un montón de personas desconocidas que serán testigos de muestro amor.

«¡¿Declararse?!»

Jungkook, en ese momento, pudo saber que Taehyung no conocía la vergüenza.

—Así que, ¿Puedo tener el honor de ser tu novio, Jeon? —hizo la pregunta con una sonrisa sincera en sus labios.

El corazón de Jungkook latía con fuerza, como si fuera a salirse de su pecho. Se levantó de su asiento justo cuando Taehyung le extendía un ramo de flores. Pero no era un ramo cualquiera, no eran las típicas flores que la gente regalaba sin pensar; eran flores de lavanda, cuidadosamente elegidas, cargadas de significado.

Nunca antes se le habían declarado, y mucho menos de una forma tan especial. Se sintió realmente afortunado, al darse cuenta de que alguien como Taehyung había puesto su mirada en alguien como él.

Bendito sea el día en que aquella pelota se desvió hacia su dirección.

—Pero claro que quiero que lo seas, Taehyung —exclamó mientras se lanzaba a sus brazos con emoción. Al instante, los presentes estallaron en gritos y aplausos llenos de alegría—. Gracias... por quererme.

—Gracias, por tu existencia, Jungkook.

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Que bonito, estoy llorando POR FIN SON NOVIECITOSS 💞💞💞

¿Les gustó? Espero que puedan decirme ✨️✨️

Gracias por leer 💓