Luego de unas largas horas en el fantasioso mundo de los sueños, despertar era entrar a una realidad que JungKook aún consideraba un sueño, el frío que tiempo atrás lo tenía atrapado en su interior, se había desvanecido, siendo reemplazado por una reluciente llama, era tan cálida que ni el invierno del exterior podía molestarlo.

Esa abrumante llama solo se extendía al sentir a Taehyung, cuando despertaba y observaba sus ojos avellana; diciendo buenos con una espléndida sonrisa, mientras hablaba de su nuevo día y el trabajo, los almuerzos con amigos, cuando reía, cuando era serio, cuando parecía estar triste, cuando era él mismo y tenía la fortuna de verlo.

Entendió que, abrir los ojos también era despertar de esa ensoñación que lo ataba a un pasado que debía quedarse donde estaba, aprendiendo a vivir con ello pese al dolor que en algún momento le causó.

El movimiento de la cama llamó su atención, sintiendo el peso del peliazul a su lado.

ㅡHmm, buenos días... ㅡ pronunció con voz ronca.

ㅡBuenos días, mi cielo.

JungKook ya estaba sentado y recargado en el respaldo de la cama, había encendido la televisión manteniéndola con un volumen bajo, un juego de béisbol estaba en la pantalla, Taehyung se sentó a su lado y recargó si cabeza en el hombro contrario, conectando cada uno de sus cables para poder decir algo coherente.

ㅡQue buen gol.

JungKook soltó una risa nasal, besando su cabeza antes de contestar ㅡ. Eso fue un jonrón, en realidad.

ㅡAh, con razón no usó los pies.

ㅡ¿Cómo te sientes, alguna molestia?

Taehyung soltó un suspiro antes de voltear hacia el rubio, perdido en la dulzura que los ojos de JungKook transmitían, incluso esas caricias que le otorgaba en la cadera eran tan suaves.

ㅡNinguna en realidad, me siento muy bien JungKook. Oh ¿Preparaste el desayuno?

ㅡLa señora Yeo llegó hace un momento y le pedí que lo hiciera, está caliente todavía si quieres empezar, yo voy a acompañarte.

Taehyung le agradeció el detalle y tomaron el desayuno en la cama, sin importar que alguna migaja cayera en las sábanas. Las características risas de ambos podían escucharse hasta la cocina, donde la anciana se encontraba limpiando, para ella esa sensación se había vuelto aún más común, le llenaba el corazón ver a la pareja siendo lo que eran, especialmente, ver los sentimientos brotar con sinceridad, nada forzado y fluyendo como una cascada.

Incluso parecía que la casa también había cambiado su tono gris y apagado, a uno más vivo como el beige y blanco, como una buena temporada de invierno.

ㅡJungKook, cariño ¿qué piensas de acompañarme a Londres? Para la colección.

La tostada de JungKook se quedó en su boca al escuchar al moreno, el cosquilleante impacto deteniendo sus movimientos, de inmediato tomó su cintura para besar repetidamente su mejilla a lo que Taehyung solo podía responder con risas ㅡ. El poder de las palabras es impresionante, por favor, dime así cuando quieras, yo le he cambiado el nombre al cielo.

Las mejillas del menor se encendieron en un adorable rubor, la intensidad que la mirada de JungKook transmitía aún le hacía temblar, aún más al recordar la electricidad de sus toques y los mareos que sus labios provocaban cuando estaban sobre su piel. Oh mierda, debería retener sus pensamientos.

ㅡCariño, me encantaría que puedas acompañarme a Londres.

ㅡPermíteme hacer unas llamadas y reunirme con Hoseok, porque más que encantado iré a acompañarte.

ㅡEntonces será mejor que nos demos prisa porque hay muchas cosas que planear para estos díasㅡ susurró contra los labios ajenos antes de besarlos, su intención era que se tratara de uno casto, pero el aroma del rubio y su habilidad lo detuvieron, porque en un segundo ya estaba bajo su pecho siendo aprisionado por sus labios.

ㅡ¿Cinco minutos más, Sr. Kim?

Taehyung no debió aceptar porque esos cinco minutos se multiplicaron, aunque estaba complacido y satisfecho de haber extendido el tiempo.

Efectivamente llegó tarde a la empresa, pero debido al movimiento dentro de la misma debido al ya establecido orden, nadie se dio cuenta, a excepción de YoonGi que no dejaba de verlo con una mirada que parecía examinar cada uno de sus átomos.

ㅡ¿Sucede algo YoonGi? Oh ¿Te gusta mi nuevo color de cabello? A los demás empleados les fascinó, no dejaban de decirme halagos.

ㅡAy, mi querido pastel de arándano, por supuesto que te vez precioso con el azul. Solo que parece que has tenido una buena mañana, tu carita me dice muchas cosas.

ㅡAh eso... verásㅡ el calor subió hasta su rostro, sabía que estaba avergonzado. Mierda, YoonGi se había dado cuenta seguramente, aunque no sabía exactamente cómo ㅡ. JungKookie me mostró su gimnasio, así que decide probar algunas máquinas antes de venir y se nos hizo tarde.

El pálido soltó sonrisa de lado, pensando en la creatividad de su amigo para mentir ㅡDebería ir con JiMin al gimnasio también, trabajar con las sentadillas y las caderas.

En ese momento Taehyung se ahogó con su propia saliva, disimulando lo más que podía su vergüenza para cuando YoonGi salió de su oficina, indicándole que debían verse después del almuerzo. 

ㅡPerfecto Taehyung, sigue actuando así y será muy evidenteㅡ con un suspiro caminó hacia el escritorio, se aproximaba una nueva experiencia en su vida, un acontecimiento que marcaría un antes y un después en su camino laboral. Comprendía que el lanzamiento se había retrasado porque no eran fechas para lanzar una colección de invierno, esto debido a su intervención en ese universo.

Por eso mismo iba a esforzarse y dar lo mejor de sí mismo, porque quería probar que podía hacerlo por sus habilidades y talento oprimido por acontecimientos que no le permitieron arriesgarse, sin embargo, ahora lo estaba tomando; el riesgo de llevar una vida nueva más allá de lo conocido.

ㅡVamos Taehyung, es hora de tomar una decisión. 

Aeropuerto Internacional de Gimhae

14 de diciembre, 4:00 pm

La bota del moreno podía crear un agujero en el suelo en cualquier momento si continuaba con ese insistente movimiento, pero simplemente la desesperación lo estaba angustiando. Había llegado el día en que viajarían a Londres, en el avión privado que en un principio había sorprendido al peliazul, para enterarse después que el mismos Jeon lo había adquirido para esa ocasión, no obstante, la causa de su angustia era que debió reunirse con JungKook hace media hora, el mismo rubio le había asegurado que estaría allí incluso antes, hasta YoonGi junto a JiMin estaban dentro del avión cuando llegó. Cada cierto tiempo observaba su celular, los mensajes parecían no llegar y en unos minutos debían despegar según instrucciones.

ㅡVamos cariño, apresúrateㅡ murmuró con su vista hacia el edificio del aeropuerto.

ㅡTaehyungie, deberías entrar para acomodarte, indicaciones del piloto. No te preocupes que en cualquier momento llega.

ㅡCuando esté aquí será una Barbie con tres pelos en la cabeza, nunca avisó que sería un imputualㅡ dijo el pálido, acomodándose sus lentes de sol ㅡ. Estaré adentro, JiMin ¿Vienes amorcito?

El menor le sonrió antes de asentir ㅡEn un momento Yoonieㅡ el mencionado se dio la vuelta y caminó hacia el avión, dejando al peligris con el moreno ㅡ. Seguramente hay algo de tráfico o se presentó algo en la empresa  Taehyungie, ciertamente JungKook no suele ser impuntual, sus maletas ya están aquí así que no te preocupes demasiado. Él vendrá.

ㅡTienes razón, gracias JiMinㅡ el mencionado le dio unas palmaditas en la cabeza antes de ir con su novio, dejando nuevamente al peliazul solo, con un par de guardaespaldas a una distancia considerable. Con un último vistazo hacia el frente, estaba por darse la vuelta y adentrarse.

ㅡ¡Taehyung!

Inmediatamente se dio la vuelta para encontrarse con JungKook, el mismo que venía corriendo hacia él con un bolso en sus manos, un pequeño suspiro con humo salió de sus labios al tenerlo frente a él, recuperando el aliento que parecía haber perdido en el trayecto.

ㅡComo lo siento Taehyung, hubo un pequeño retraso cuando venía hacia aquí y después tuve que correr unas calles hasta el aeropuerto porque no había ningún taxi y el señor Lee se quedó en el tráfico. Dios, la ciudad parecía una bestia.

Las palabras que salían de JungKook se perdían en el aire; porque mientras hablaba su pecho subía y bajaba, el sudor hacía brillar su rostro más el entrecejo fruncido y la lengua humedeciendo el labio inferior después de cada palabra dicha, santo cielo, pero lo que terminó de alarmarlo cuando alzó un poco más su mirada fue sin duda el tono negro de su cabello, atado en una pequeña coleta que dejaba libre su demás cabello. JungKook se dio cuenta de que no estaba siendo escuchado y llamó su atención pellizcando sin mucha fuerza su mejilla.

ㅡ¿Qué pasa? No estás escuchando lo que te digo ¿Cierto?

ㅡTu cabello... ahora es negroㅡ dijo con voz baja, llevando su zurda hasta un mechón para verificar que era real y no una ensoñación.

ㅡOh, tuve una pequeña idea en la mañana y por eso no pude comer contigo ¿Qué tal se ve?

ㅡSe ve increíble en ti, luces guapísimo JungKook. No importa qué uses o tengas puesto, siempre te verás hermoso ante mis ojos...

El corazón de JungKook recibió un gran empujón, casi podía verlo saltar de su pecho como en las caricaturas, por lo que inmediatamente sonrió como un pequeño niño feliz y tomó la mano del moreno para transbordar el avión, sorprendiendo a los presentes con su nuevo cambio, incluso YoonGi le había dicho que ahora ya no era Barbie, si no Raquel. Las risas explotaron, tomaron asiento en sus lugares correspondientes y en ningún momento parecía que sus ojos terminarían la conexión que compartían.

Serían unas quince horas, llegarían por la mañana para comenzar a medio día, pero mientras tanto, JungKook incitó al moreno para que observara el perímetro, el precioso atardecer al que ascendía. Taehyung estaba pasando por alto sus nervios y emociones, puesto que era su primera vez viajando en avión y a otro país, el ahora pelinegro lo comprendía así que durante su acompañamiento se encargaría de que fuera una experiencia inolvidable.

Quería darle todo porque sabía que sería recíproco. 

ㅡLos atardecer son preciosos, son mis favoritos y verlo desde aquí parece irreal.

ㅡ¿Por qué son tus favoritos, cielo?

ㅡPorque solía decirme que había conseguido terminar el día, aunque con pesares, sabía que podría despertar y continuar al siguiente día. Me daba fuerza.

El pelinegro lo escuchó con atención y tocó ligeramente su bolsillo ㅡLo hiciste increíble Tae.

El peliazul alzó los hombros, sonriendo antes de llevar su atención hasta el hermoso panorama que tenía enfrente.

El viaje, tan largo como cansado, nunca antes se había sentido de esa forma, pero agradecía las atenciones del pelinegro que le ofrecía masajes o caricias, pues él tenía cierta costumbre a la hora de viajar.

El cansancio atrajo al moreno a un sueño profundo, todo parecía ser un recuerdo pasado que se enredaba con una canción que había puesto de fondo, como todo sueño, supuso, pero cuando los planos cambiaron a una habitación parecida a la suya se sorprendió, haciendo una leve mueca entre sueños.

Ahora veía el universo original, al que pertenecía, con sus paredes grises agrietadas y la cama de resortes, confundido por el recuerdo empezó a divagar, aparentemente descalzo y con un frío que sentía vívidamente, al momento de colocarse frente a un espejo se dio cuenta que su cabello era nuevamente negro, rizado y largo, como siempre lo había tenido, al bajar su mirada para inspeccionar su atuendo que no era más que la tenía antes de llegar, volviendo su mirada al frente el reflejo había cambiado.

Quién estaba del otro lado del vidrio era Vante; con una mirada filosa que transmitía veneno a través de sus ojos esmeralda, los labios fruncidos y la cabeza inclinada, vistiendo un atuendo de tonos oscuros, se veía enojado, pero también débil, entonces, Taehyung se dio cuenta del tono pálido de su piel y el claro temblor de su cuerpo, aún más notable cuando su zurda lo apuntó directamente.

Una de sus manos cubrió su boca, sorprendido.

Los labios de Vante se abrieron y pronunció su nombre, junto a otra inaudible, Taehyung se dio cuenta que en su muñeca había una pulsera que oprimía su piel, sintiendo de forma inmediata una similar en la propia, pero más brillante y floja.

Taehyung se acercó al reflejo, podía ver la habitación destrozada atrás y Vante se veía aún más enojado con cada paso que daba, gritó, gritó tanto que el espejo obtuvo grietas, de inmediato se cubrió porque sentía que sus oídos podían reventar o incluso el espejo podría romperse, al no escuchar nada volvió su atención al reflejo de Vante, seguía parado y ahora con sus brazos sueltos a sus costados, la mirada dura había cambiado a una desorientada.

Esa mirada temblorosa se clavó fijamente en él, pronunciando las mismas palabras y esta vez fue capaz de escucharlas con claridad.

Despierta.

Despierta Taehyung.

ㅡTaehyng, despierta ya estamos aquíㅡ le avisó el pelinegro. Taehyung despertó agitado, parpadeando más de una vez para centrarse en la realidad  ㅡ¿Tuviste una pesadilla?

ㅡCreo que... no lo sé, fue muy confuso.

ㅡAhora que bajemos iremos al hotel, podremos desayunar y recuperar energías.

El moreno volteó hacia la ventanilla y en efecto, habían aterrizado y las maletas ya estaban afuera, siguió a JungKook que le recomendó colocarse su abrigo y así lo hizo, el frío de Londres era casi tan similar al de Seúl. YoonGi también estaba afuera con JiMin, se saludaron y esperaron el auto.

ㅡEstamos en Londres Taehyungie, dime que estás emocionadoㅡ amenazó el pálido acerándose al moreno.

ㅡClaro que lo estoy YoonGi, viajar ha sido tan emocionante y conocer Londres es una maravilla.

JiMin se acercó soltando un par de risas ㅡ. Lo dices como si fuera tu primera vez aquí Tae.

ㅡAmorcito, tal vez no lo recuerda todavíaㅡ le recordó YoonGi ㅡHay que seguir creando memorias, como si fuera la primera vez de Taehyungie.

ㅡEl auto está aquí ¿nos vamos ya al hotel?ㅡ preguntó el pelinegro.

El lugar era amplio, atractivo debido a sus decoraciones sutiles que no llegaban a exagerar, porque toda la atención debía estar en las telas elaboradas minuciosamente. Taehyung inspeccionada cada rincón y actividad, sería un evento nocturno y pronto comenzarían a llegar los artistas invitados y la prensa ya se encontraba afuera, YoonGi dirigía a las personas en acompañamiento de Hyunjin que le pasaba reportes cada cierto tiempo, las modelos se mantenían en su camerino junto a los estilistas que terminaban de ajustar detalles pequeños.

ㅡDeberías ir y arreglarte también, tienes que saludar a los invitadosㅡ le dijo una voz detrás suya. Taehyung volteó para encontrar a su novio, vistiendo de negro y su característica coleta.

ㅡ¿Qué pasa si lo llego a arruinar? Es la primera vez que hago algo tan grande y significativo.

ㅜNo lo harás Tae, considera esto como el comienzo, el gran inicio de todo lo que te espera. Hoy más que nunca confía en ti en todo tu esfuerzo, estaré aquí apoyándote.

Taehyung rodeo al pelinegro en un abrazo que buscaba seguridad, misma que fue otorgada al momento de corresponder, todas las personas que estaban allí los veían con asombro, ternura y sorpresa. Con un beso en la frente JungKook se despidió del menor, ya que fue arrastrado por YoonGi para que se vistiera como correspondía. El pobre peliazul iba temblando hacia el escenario y él no era quien iba a modelar.

Los periodistas se acumulaban a las afueras del edificio, los fotógrafos a cada segundo tomaban una fotografía del artista invitado, pronto el enorme salón de fondo negro se llenó de personas que esperaban con entusiasmo el inicio de dicho evento, especulando aquí y allá sobre Vante, sobre JungKook y la colección. Repentinamente, las luces se habían apagado causando que todos guardaran silencio, hasta el más inofensivo suspiro.

Una fila de luces armó la pasarela, la primer modelo salió entre la multitud para mostrar el atuendo, un elegante saco de botones que le complementaba una falda hasta las rodillas, seguida de una segunda modelo, luciendo el negro junto a unas botas altas de punta, sumándose un modelo más con el saco sin botones y mostrando parte de su pecho. Las personas alrededor alzaban sus celulares para grabar, haciendo comentarios diversos, resaltando que la temática de esa ocasión era el negro que resaltaba, mostrando elegancia y sutileza, de pronto los trajes comenzaron a ser más extravagantes, con una esencia singular, el cambio se había marcado, porque ahora los modelos llevaban consigo grandes prendas de cuero, dejando el negro atrás para avanzar hacia el rojo y jugar con el blanco, tres colores que se fusionaron espléndidamente.  

Todo estaba saliendo bien.

Era un éxito.

La pasarela estaba concluyendo con una melodía al fondo, entonces YoonGi que estaba junto a Taehyung, lo motivó a ponerse de pie para agradecer, a lo que tímidamente se acercó a la pasarela para hacer una reverencia, teniéndola todas las luces sobre él, la atención y los aplausos. Lo había logrado.

ㅡMuchas gracias por estar aquí, por apreciar el arte y la expresión plasmada en la elaboración de cada prenda. Por favor, un aplauso para todo el personal que estuvo detrás de esto, a cada modelo.

Todo el mundo se sorprendió por sus palabras, no obstante, aplaudieron grandemente, entre esas personas estaba JungKook esperándolo con un ramo de flores, todas diferentes y hermosas y sin pensarlo se acercó a él.

ㅡLo hice JungKook, realmente lo hiceㅡ dijo con una gran emoción, sus ojos color miel llenándose de lágrimas.

ㅡLo hiciste increíblemente bien, cielo, eres maravilloso, felicitaciones.

Y Taehyung no podía sentirse mejor, no había nada de ahora en adelante que pudiera bajarlo de su enorme nube de ilusión y alegría.

¡Actualización! Muchísimas gracias por leer, intenté ver vídeos y cosas de moda para guiarme un poquito, ese fue el resultado. Espero que el capítulo sea de su agrado, solo puedo decir que se preparen para los siguientes 💗

Kim Taehyung

Jeon JungKook