Capítulo 19.

Abrí mis ojos y mire la hora: 10 am.

Ya era 31 de diciembre.

Mire a Angie y sonreí, las veces que me dijo lo feliz que estaba por estar aquí y con migo me hacia sentir felicidad por dentro. Angie era mi mejor amiga desde que tengo memoria, siempre estuvo ahí para mí, en los momentos buenos y malos, como cuando yo me sentía tan mal con migo misma, con mi cuerpo, yo era re tímida e insegura, pero ella me hacía sentir querida, estaba sola al principio, pero ella me eligió a mí para sentarse en el almuerzo cuando teníamos 5 años. Me acuerdo que alguien me había robado el almuerzo y ella me compartió del suyo, y justo ese mismo día teníamos remeras de las Chicas Súper Poderosas, y desde ese momento nos volvimos inseparables.

Me levanté de cama y desperté otra vez a Angie.

- Angie - susurre moviéndola levemente.

- solo 5 minutos más...

- hoy es 31 Angie. Solo faltan horas para año nuevo.

- estoy arriba, estoy arriba - se levanto de repente - quiero disfrutar cada hora de este día - reí.

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- este día no puede ser más perfecto - decía Angie mientras se probaba un atuendo en una tienda.

Habíamos decidido hacer día de compras por lo que quedaba antes de que tengamos de ir a Times-Square para año nuevo.

- me alegra que estés feliz.

- es todo gracias a ti - salió del probador y me abrazo.

- por ser la mejor amiga del mundo - sonreí.

- lo sé, soy la mejor - bromeó y reí.

Termino de probarse lo miles de atuendos que había agarrado, y era mi turno. Pero antes de que entre al probador escucho que Tom y Harrison entran por la puerta de la tienda.

- ¿siguen aquí? Pasaron dos horas - rió Harrison.

- deja de molestar, hombre - se quejó Angie.

Reí y entre al probador.

Me probé un vestido negro que quedaba pegado a mi cuerpo y termina unos dos dedos y medio arriba de mis rodillas.

Corrí la cortina para que Angie me de su opinión pero solo me encontré con Tom.

- ¿y Angie?

- salió por algo de tomar, dijo que ya volvía.

Asentí - sé que tal vez no sepas de esto, ¿pero como me queda este vestido?

Narra Tom.

Las palabras "como me queda este vestido" resonaban en mi cabeza.

¿Que como le queda ese vestido?

Se veía malditamente te preciosa. El vestido resaltaba su cintura y sus curvas. Sus piernas se veían perfectas tal como estaban. Y su pelo lacio cayendo en sus hombros lo hacían aún más hermoso.

¿Que como le queda ese vestido? A la perfección.

- te ves... hermosa - dije.

¿Acaso lo dije en vos alta eso?

Note como Sam bajo su vista y sus mejillas tomaban un color rosado. Se veía tierna.

- ¡te ves hermosa! - gritó Angie al llegar y ver a Sam.

Sam sonrió y se miró en el espejo.

Como se miraba y se tocaba a ella misma mientras inspeccionaba el vestido me daba ganas de derretirme ahí mismo. Quería abrazarla y no soltarla más. Sentía la necesidad de protegerla, sabía que actuaba fuerte pero por dentro es más frágil que un cristal.

Samantha Reedus ¿que me estás haciendo?

Narra Sam.

Me probé unos atuendos más, y después pagamos. Pero lo único que estaba en mi mente era "te ves hermosa" de Tom.

Daba vueltas en mi cabeza como si fuera un juego de solo esa frase.

¿En serio Tom pensaba que me veía hermosa?

Me golpeé imaginariamente a mi misma y volví a la realidad.

Solo faltaban dos horas para año nuevo así que decidimos irnos al hotel paga cambiarnos.

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- ¿que tal este? - Angie posaba delante del espejo.

-ese me gusta más que el otro conjunto.

- entonces este será.

Sonreí y volví a mi maquillaje.

- ¿sabes que faltaría en este año nuevo?

- ¿que?

- el beso de año nuevo.

Yo reí - si quieres te doy un besito en la mejilla si te hace sentir mejor. - dije poniendo labios de pato.

- fácil para ti decirlo - la mire confundida - ¡tienes a Tom!

- ¡no!

- ¿por qué no? Ya se han besado varías veces no haría mal una vez más, además se que quieres besarlo otra vez y él siente lo mismo.

Buen punto.

- por qué no. Besarlo en publico y en año nuevo empezará algo loco entre las redes sociales y no quiero empezar nada que arruine nuestra amistad.

- todos van a estar enfocados en el año nuevo y los globos y el confeti, nadie lo va a notar.

Aunque odie admitirlo, Angie tiene un gran punto y además tiene razón. Nadie se iba a fijar si Tom y yo nos damos un beso.

- no lo sé, cambiemos de tema ¿si?

- como digas enana, pero si pasa algo solo déjate llevar en el momento.

Suspiré y volví a mi maquillaje.

Si solo mi estúpido cerebro me dejara disfrutar y no me haría sentir culpable después, sería perfecto.

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- ¡que linda vista! - dijo Angie mientras miraba la vista desde donde nos encontrábamos.

Sonreí y mire las luces del lugar.

Estaba lleno de gente, pero la decoración lo hacía ver todo más lindo. Había nieve arriba de las carteles y lo hacía todo más navideño.

- ¡y que empiece la cuenta regresiva! - dijo un hombre en un micrófono.

"10
9
8
7
6
5
4
3
2
1
¡Feliz año nuevo!"

- ¡feliz año nuevo! - abrace a Angie y sonreí.

- ¡feliz año nuevo! Gracias por esto enana, te amo.

Sonreí y la abrace más fuerte.

Salude a Harrison y lo abrace.

Abrace a Tom - feliz año nuevo - hable en su oído.

Tom me miró pero todavía no me soltaba, seguía con sus brazos al rededor mío.

Su mirada me transmita felicidad y tranquilidad, sus ojos brillaban por las luces y mostraba una leve sonrisa en su rostro.

- ¿me aceptarías un beso de año nuevo, Reedus?

"si pasa algo solo déjate llevar en el momento." Las palabras de Angie sonaron en mi cabeza.

Y por esta vez mi cerebro se callo y me dejo disfrutar del momento.

Sonreí y junte nuestros labios.