Capítulo 5
Dean miraba como su hermano se comía el bol de cereales rápido para irse los dos al instituto. Él mientras se acababa su zumo de naranja:
- Sammy escúchame.
Sam paró y lo miró atentamente:
- Creo que le gustas a Gabriel.
Sam parpadeó y siguió con sus cereales:
- No creo Dean, a Gabriel le gustan las chicas.
- Y los chicos.
Sam paró de nuevo con sus cereales:
- Dean, esa es una acusación muy fuerte. Apenas conocemos a Gabriel y Castiel y ya estás diciendo que uno de ellos es gay.
- Es que lo es Sammy. ¿ No te has dado cuenta la forma en que te mira y te sonríe ?
- ¿ Te has dado cuenta tú en la forma que miras a Cass ?
- ¿ Qué ?
- Si, ayer no parabas de mirarlo Dean.
- Eso no significa nada. Además el chaval me va a dar problemas con las chicas.
- ¿ Seguro que solo es eso ? Porque ayer en el coche estabas atontado mirándolo.
Dean miró furioso a su hermano y se levantó a dejar su vaso vacío:
- De todas formas, intenta darte cuenta de lo que he dicho.
- Vale, tal vez esté más atento, pero tú también piensa un poco más en ti y en Castiel.
Le hizo un gesto feo a su hermano y le metió prisa para llegar al instituto. En el coche hablaron poco y una vez llegaron al instituto se separaron. Sam buscó a Ruby pero todavía tenía en la cabeza la advertencia de Dean. Pensó que era una paranoia de su hermano. Dean acudió a las chicas sonriente. Las mañana pasó rápida y ninguno de los hermanos se cruzaron por los pasillos.
Cuando terminaron las clases Sammy se fue a prácticar con su equipo de baloncesto y Dean con su equipo de fútbol americano. Ambos estuvieron entretenidos, pero a veces la conversación de por la mañana le llegaba a las cabezas y se sentían un poco aturdidos.
Gabriel no sabía si sería buena idea ir a ver a Sam prácticar. Durante todo el día había estado intentando no cruzarse con ninguno de los Winchester. Además también estaba Castiel todo el rato detrás de él preguntándole cosas,como que como estaba o preguntas sobre Sam, estaba ya muy harto. En una de esas preguntas, le gritó a su hermanastro fuertemente. Castiel le mando una mirada de enfado mezclada con un poco de pena, luego desaparecio.
Gabe se mojo la cara en los lavabos, no sabía si ir o no. Debería ir, encima de todo Sam había sido muy amable con él ayer. Se secó la cara y se dirigió al gimnasio. Entro para sentarse en las gradas, no era el único. Había bastantes chicas y algunos chicos hablando entre sí. Se sentó y se puso a observar, sobre todo a Sam. Se dio cuenta de que había una chica que animaba más a Sam, debería ser la tal Ruby. La odio desde el principio, le tenía envidia por tener a Sam. Le dieron ganas de ir a donde estaba ella, presentarse y decirle que tenía unas ganas tremendas de follar con su novio, pero eso le metería en problemas así que siguió mirando a Sam.
El capitán del equipo de baloncesto se dio cuenta de la presencia de Gabriel en las gradas. Después de todo el día desaparecido había venido, era un gesto tierno por su parte. Le vino a la cabeza las palabras de Dean. Era imposible que Dean supiera eso con solo 24h conociendo a Gabe. “¿ Y si fuera cierto ?” Él no estaba para nada en contra de la gente que amaba a personas del mismo sexo, respetaba todo aquello. Pero nunca se había dado el caso de que un chico se enamorase de él o al menos el se enterara. Tampoco él había tenido una atracción con otro chico. Pero pensó, que si era cierto lo que Dean decía, Gabriel tenía que estar pasándolo mal. Sam se mordió el labio, ojalá su hermano se equivocase.
Dean practicaba con el equipo en cielo abierto, había un maravilloso día y había que aprovecharlo. Él era uno de los mejores jugadores y el entrenador le tenía aprecio. Jugaba y bromeaba con los de su equipo y de vez en cuando les guiñaba el ojo a las chicas de las gradas. Estuvo atareado por seguir las instrucciones del entrenador, tanto que no se dio cuenta de que Castiel estaba sentado en las últimas gradas observándole. Cuando terminó el entrenamiento tomo una botella de agua. Casi se atraganta cuando ve a Castiel en las gradas con esa mirada azul persiguiéndolo. Cass bajó las gradas mientras que Dean se despedía de sus compañeros. El hermano pequeño de los Novak veía al mayor de los Winchester despedirse. Cass penso que lo había etiquetado mal, parecía que Dean era mejor persona de lo que había pensado:
- Hola Dean.
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