En cuanto observan a su alrededor se encuentran con una habitación oscura, a duras penas son capaces de ver con claridad.

En el cuarto hay un sofá, un mesita pequeña con una especie de lámpara encima, una cómoda con gabinetes y cajones con un televisor apagado, otro mueble parecido con más gabinetes y cajones, pero con un teléfono de esos antiguos con cable, y finalmente lo que parece ser un closet de dos puertas de más o menos la altura de Jimin.

—Llegas a tener problemas de visión y acá te queres morir.

Asegura Jimin causando que Jungkook empiece a reír a carcajadas.

—Empecemos a buscar pistas.

Propone el mayor, así es como ambos empiezan a abrir todos los cajones que pueden, revisan debajo de los muebles, encima, adentro, en todos lados.

Luego de unos minutos dejan sobre el viejo sofá todo lo que encontraron.

Una linterna y fotos quemadas y destrozadas con fechas y lugares escritos detrás.

—¿Y ahora qué?

Pregunta Jungkook observando con una sonrisa la concentración en el rostro de Jimin.

—Mira, las fotos, en la parte de atrás tienen fechas, hay algunas que tienen la misma, pongamoslas en grupo.

Propone el menor causando que Jungkook obedezca sin dudarlo.

Así es cómo terminan con 4 grupos de dos fotos cada uno.

Dos fotos de 1941, dos fotos de 1939, dos fotos de 1943 y dos fotos de 1937.

Jimin las pone en orden de año ascendente, quedando como primera el grupo de 1937 y cómo última el grupo de 1943.

—Y ahora ya no se.

Admite el chico causando que Jungkook vuelva a reír mientras toma el grupo de 1941 y las observa con curiosidad.

—Eu, sí las pones así una sobre la otra parece un 3.

Advierte el mayor causando que Jimin enseguida haga lo mismo con el resto, y una sonrisa enorme se forme en su rostro.

—¡7235!

Exclaman al mismo tiempo, miran a su alrededor y se encuentran con fácil diez candados, 2 en los gabinetes del televisor, 2 en los cajones de ese mismo mueble, otros 4 en el otro mueble, 1 en el gran closet y otro en el cajón de la mesita con la lámpara encima.

—Ya fue, pongamos los números en todos los candados.

Jimin asiente ante esas palabras, empiezan a probar candado por candado hasta que...

—¡Lo abrí!

En cuanto Jungkook dice esas palabras y abre uno de los gabinetes del mueble donde se encuentra el televisor, es que fuertes golpes se empiezan a escuchar en las paredes.

Literalmente Jungkook y Jimin:

—No me digas que dicen que es de terror por algunos golpecitos en la pared porque me mato, yo vine a que me hagan mear encima del miedo, no a esto.

Se queja Jimim, sin imaginarse que la sala esta llena de cámaras y micrófonos y los empleados del lugar los están mirando así:

—¿Habrá gente que se asuta con esto?

Pregunta Jungkook mientras saca los papeles y la caja que se encontraba dentro del gabinete.

—A Hobi lo metes en un cuarto oscuro y ya empezó a gritar.

Asegura Jimin mientras Jay ríe ante esas palabras, sabiendo que Jin es exactamente igual.

—¿Qué dicen?

Pregunta el mayor refiriéndose a los papeles que le dió al chico, mientras él se dedica a investigar la caja.

—Hay una lista de número y letras, y una palabra arriba de todo. Cada letra debe estar relacionada a un número...hay algo que no estamos viendo.

Asegura Jimin observando a su alrededor, hasta que ve los cuadros colgando en la pared.

—¡Los cuadros!

Exclama acercándose a uno de ellos con la linterna, observando que cuando los alumbra con ella aparece una letra acompañada de un número.

—U-3, A-9, N-1, H-4, Y-7.

—Asumo que la palabra es "Huyan" así que el orden sería 43791 ¿No?

—Exacto, Jay hyung, somos buen equipo en el lol y también en los scape room.

Afirma Jimin causando que el mencionado asienta completamente de acuerdo con sus palabras, esta vez no es necesario ir candado por candado, porque se habían dado cuenta de que hay uno sólo en la habitación que permite 5 números, es Jimin quíen se encarga de abrirlo, para esta vez sacar más papeles y una llave antigua.

—Antes de mirar esto...ya abrí la caja esta.

Avisa Jungkook dándosela a Jimin.

—Ah, era uno de esos juegos de ingenio ¿No?

—Si, igual yo empece a mover así nomas hasta que se abrió sola.

Confiesa el mayor causando que su acompañante ria a carcajadas.

—¿Que hago con esto? Se lo meto en el culo a Yoongi.

Afirma Jimin sacando una especie de palo según él, causando que Jungkook caiga al piso de rodillas debido a la risa.

—Te voy a empezar a cobrar por risa, en dólares, no soy barato yo.

Amenaza el menor intensificando la risa del chico.

—Es una luz UV, Mimi.

Advierte Jay causando que el mencionado entienda y finalmente empiece a reír también.

—Me lleve educación fisíca, cualquier boludez que salga de mis labios esta justificada.

Jungkook se toma la panza de la risa, al escuchar las palabras del chico, realmente le resulta increíble la facilidad que tiene para hacerlo reír.

Finalmente, luego de uno minutos de risa y conversaciones sin sentido, ambos recuerdan dónde estan y qué están haciendo, y se ponen a investigar sus nuevos descubrimientos.

Logran abrir otro cajón, y sacan más cosas, las pocas luces que había en la habitación se apagan por completo, dejándolos completamente a oscuras, Jungkook se encarga de encender la luz UV, y en cuanto lo hace vuelven a aparecer los golpes en la pared, sólo que esta vez son lo sucientemente fuertes como para tirar los cuadros y repisas de la pared, y aún así no logra ninguna reacción de parte de los chicos que parecen sentirse como en casa.

La lus UV causa que se puedan leer frases cómo "Huyan mientras puedan", "Ella esta acá", "Los mato a todos" en las paredes.

Ignoran absolutamente todo, logrando que los empleados que los veían por las cámaras los empiecen a odiar.

A Jimin se le ocurre mirar el cable del telefono, tira de él y encuentran una especie de lazo atado, manchado con lo que parece ser "sangre"  con una combinación númerica escrita en él.

—Espera ¿Y esta llave?

Pregunta Jungkook mientras Jimin se encarga de abrir el último gabinete que les faltaba.

Si, se habían olvidado de abrir el armario, los empleados del lugar estaban así:

Esperando a que los chicos abran el maldito closet, ya habían golpeado las paredes varias veces, es más, le pusieron más fuerza de lo normal, hasta los cuadros se cayeron y no lograron ninguna reacción de parte de los chicos, ni un susto, nada, tenían esperanza en que el armario les iba a sacar aunque sea un grito chiquitito.

—Uh te imaginas, no salían más porque se olvidan de abrir un armario, que miedo, mira si sale Yoongi de aca adentro.

—¿Yoongi?

Pregunta Jungkook confundido.

—Es que le gusta salir del closet.

En cuanto Jungkook entiende el absurdo chiste, se vuelve a carcajear doblándose de la risa, mientras Jimin coloca la llave en la cerradura, y la gira con tranquilidad.

—Sos genial ¿Te gustaría salir conmigo?

Esa es la pregunta que le hace Jungkook, causando que Jimin gire su rostro en su dirección confundido, y cuando lo hace termina de abrir el armario, causando que una trampa plantada en el lugar caiga sobre él.

Si, un escoba vestida con un vestido blanco y una peluca negra cae sobre el.

Jungkook fingiendo estar sorprendido:

Jimin mirando a Jungkook:

Los empleados del lugar que estan viendo y escuchando todo:

Literalmente la escoba:

—¿Es una broma no?

—Eso espero, es una trampa demasiado obvia, osea, era sabido que esto iba a pasar desde el momento en el que vimos el armario.

Responde Jungkook con tranquilidad.

—Me refiero a la pregunta que me acabas de hacer.

Aclara Jimin mientras se saca la escoba de encima y la deja apoyada contra la pared.

—Ah, si, fue sólo una broma.

Asegura Jungkook despeinando el cabello del menor con una sonrisa en el rostro.

—Uh que idiota, me había asustado.

Confiesa Jimin empezando a reír, relajándose por completo nuevamente.

—¿Asustado? ¿Tan feo soy?

Pregunta Jungkook haciéndose el dolido.

—No me refiero a eso. Algunos chicos me invitaron a salir diciendo que soy más lindo que muchas mujeres. Tengo traumas, hyung.

Afirma el menor causando que la sonrisa desaparezca del rostro de Jay, realmente Jimin tiene problemas con su apariencia, no pareciera tener mucha autoestima.

—No te preocupes, jamás te pediría que salgas conmigo sólo por ser lindo.

Aclara Jungkook, deseando que Jimin entienda la indirecta de que no es ese el mótivo por el cuál se lo acaba de preguntar, pero al mismo tiempo convenciéndose a sí mismo de que fue en broma. Una broma entre amigos, sólo eso.

Finalmente vuelven a los suyo, siguen resolviendo acertijo tras acertijo, hasta que finalmente pasa algo que los sorprende.

La parte de atras del armario se cae, dejando ver una habitación escondida, en la que entran sin dudarlo.

Se encuentran con el famoso pozo de la llorona y cuando miran dentro de él, se dan cuenta de que es un tobogan por el cual se deben tirar.

—Ah, buenas noches, perdón por entrar sin permiso ya nos estamos yendo, no robamos nada.

Asegura Jungkook en cuanto siente una presencia detras suyo, y en cuanto se voltea se encuentra a una persona disfrazada de la llorona.

Jimin gira su rostro al escuchar al mayor hablando con alguíen, y sonríe...SONRÍE al ver a la mismisíma llorona adelante suyo.

—Si no hubiese dejado el celu en el locker te pedía una foto.

Asegura el chico negando con la cabeza con decepción.

—Te espero abajo, hyung.

Es lo único que dice para finalmente tirarse por el tobogan y pararse en cuanto llega al final.

—¡¿Llegaste?! ¡¿Ya saliste?!

Pregunta Jungkook, que no quiere golpear al chico con sus pies al bajar.

—¡Si!

Responde Jimin, causando que Jungkook se tire por el tobogan luego de despedirse de la amable llorona.

—Genial, nos secuestraron.

Eso es lo primero que escucha Jay en cuanto llega al final del tobogan, y se encuentra con Jiminnie mirando a su alrededor.

Están en la entrada de lo que parece ser un laberinto, podían jurar que ya se había terminado el juego, pero parece que aún falta.

—Yo me se un truco para pasar laberintos.

Afirma Jungkook, quíen sin preguntar toma a su acompañante de la mano, y empieza a caminar sin soltarlo ni siquiera por un instante.

Jimin simplemente se deja llevar por el mayor, pero nota que hay algunas piedras en el camino con números escritos en la parte de arriba, así que se toma el trabajo de mirar cada una atentamente y recordar el orden en el que las encontró.

Se siente un campeón cuando llegan al final del laberinto y se encuentran con una reja con un candado.

—No entiendo.

Afirma Jungkook quíen creía que lo último que les faltaba era pasar el laberinto, el cual hicieron con tanta facilidad que los empleados del lugar están empezando a transpirar.

—Es 7033159.

Asegura Jimin causando que Jungkook, sin soltar su mano, coloque la combinación en el candado y finalmente lo abra.

—¡F-felicidades por completar la sala de la llorona!

Escuchan por los parlantes del lugar, y ambos se miran con decepción, la verdad se esperaban algo más complicado.

—¿Cómo sabías la del último candado?

—Mientras vos nos sacabas del laberinto, ví piedras con números escritos encima, así que los memorice.

Explica Jimin causando que el mayor sonría y despeine su cabello, finalmente atraviesan la reja que acaban de abrir, caminan por el pasillo oscuro y en cuanto doblan en la esquina se encuentran al hombre que los había llevado a la sala observándolos con una sonrisa incómoda.

—¡Felicidades por completar la sala de la llorona, hicieron un tiempo record de 45 minutos y 33 segundos!

Los felicita sin muchas ganas de hacerlo, osea, no pueden decir que alguíen lo resolvió en tan poco tiempo y menos que no se asustaron ni un poco, sería lo contrario a marketing, sería desmarketing.

—Miranos, a los burros de la escuela resolviendo esto en tiempo record.

—Me llevo educación fisíca, pero tan idiota no soy, esta es la prueba.

Ahí esta de nuevo, Jungkook ya había perdido la cuenta de la cantidad de veces que Jimin lo hizo reír.

Son llevados de nuevo a la zona de recepción, agarran las cosas que habían guardado en el locker, y salen del lugar sin siquiera sacarse fotos con el mural de la Scape Room, a ver, estuvo buena la experiencia y fue interesente, pero esperaban algo de terror, no una escoba disfrazada de la llorona, o un televisor que lo único que hacía era prenderse y apagarse aleatoriamente.

—¿Y ahora?

—No se, hyung, yo creí que íbamos a estar ahí adentro hasta las nueve de la noche, estoy tan confundido como vos.

Nuevamente Jungkook es incapaz de aguantarse la risa.

—Caminemos un rato.

Pide el mayor, causando que su acompañante asienta con tránquilidad.

Así pasan el tiempo, hablando y mirando las tiendas del centro, observando a la gente y riendo.

—Yo te juro que los huevos del profesor de historia saludan, te lo juro por mi mamá.

Asegura Jimin causando que Jungkook ria a carcajadas mientras camina a su lado.

—Es increíble, encima es muy obvio que se los corre hacía la izquierda, y siempre para la izquierda, nunca a la derecha.

El mayor se ve obligado a detener sus pasos de la risa, Jimin sonríe sintiéndose todo un comediante al ver al chico reírse tanto, pero su estomágo empezando a rugir le hace saber que va siendo hora de comer algo.

—Tengo hambre.

Pronuncia el menor pensando en qué hacer, cuando observa la hora se encuentra con que son casí las nueve de la noche, decide llamar a su mamá para preguntarle qué hacer.

—Ma ¿Ya comieron?...no...dale ahora vamos a casa y cocino algo rápido y cenamos todos...hay pure y pollo en la heladera, calentalo en el microondas pero no mucho y dale de comer a Roona, pobrecita...si, dale ahora vamos.

—¿Tenes que volver?

Pregunta Jungkook, sabiendo que sonó más decepcionado de lo que quería.

—Si ¿Te quedas a cenar? Tae hyung se queda a dormir, si queres te quedas vos también.

Esa invitación hace que los ojos de Jungkook vuelvan a iluminarse.

—Sisi, me quedo.

Afirma sin dudarlo, así es como ambos empiezan a caminar devuelta al auto.

Antes de volver a la casa de Jimin, pasan por un supermercado, donde compran algunas cosas para la cena y para comer a la madrugada, y finalmente vuelven a emprender el viaje.

—No tenías que pagar vos.

Se queja Jimin, ya que cuando estaban en el supermercado, Jungkook básicamente empujo al chico y pago todo él.

—Vos me invitaste al scape room, es lo justo.

Afirma el mayor causando que Jimin refunfuñe ofendido, pero sabiendo que no puede decir nada al respecto porque él habría hecho lo mismo.

Cuando finalmente llegan a la casa de Mimi son casi las diez de la noche, literalmente son recibidos como dioses que llegaron a salvarlos del hambre.

Jungkook ya conocía a In Na y al abuelo Song, así que sólo se presenta con Dong Wook, quíen le da una cálida bienvenida.

Realmente no estaba acostumbrado a eso, era demasiada gente.

In Na y Dong Wook jugaban a las cartas contra Yoon y Tae, el abuelo Song se encargaba de darle de comer a Roona haciendo avioncitos y cualquier truco para que la niña coma, mientras Jimin cocina con tranquilidad.

Jungkook no lo dudo, se quedo junto a Mimi sintiéndose fuera de lugar.

—Es difícil acostumbrarse, pero cuando lo haces el silenció se vuelve incómodo.

Asegura el menor causando que Jungkook lo mire con una sonrisa en los labios.

—Siempre fuímos sólo mi papá, mamá y yo, así que no estoy acostumbrado a tanto ruído, cenamos a las 8 de la noche como tarde y nos damos las buenas noche. Me parece increíble que sean más de las diez y hasta la bebé este despierta.

Asegura Jungkook, quíen por el tono de voz que utiliza, es obvio que lejos de parecerle una locura, le agrada.

—Hobi también, cuando vino a casa por primera vez no lo podía creer, se la paso en silenció, ahora es uno más del montón. Ya te vas a acostumbrar hyung, pero mientras lo haces ayudame a cocinar, cortame esas papas.

Pide Jimin causando que el mayor ría y tome una cuchilla para empezar a cortar las papas como puede.

—Veo que la falta de habilidades culinarias no es hereditaria por suerte.

Jimin esperaba escuchar una risa ante esas palabras, pero solo recibe una media sonrisa y papas perfectamente cortadas.

—No sabría decirte, mi mamá no es mi mamá biológica así que no heredé nada de ella.

—En eso no estamos de acuerdo, es la mujer que te crió, hyung, tal vez no lo notas pero seguro tenes muchas cosas de ella. Por ejemplo, cuando casi me muero en tu casa, antes de la crisis pude darme cuenta de que sostenes los palillos igual que ella, lo recuerdo porque me pareció rara la forma en la que los sostenían.

Afirma Jimin evitando hacer cualquier tipo de pregunta al respecto, después de todo Jungkook ya le había dicho que era algo complicado, asume que no quiere hablar de ello.

—Realmente sos genial ¿Sabias?

—La verdad que si lo sabía, me lo viven diciendo.

Jungkook ríe ante el claro sarcasmo del chico, y asi pasan el tiempo cocinando entre los dos.

—¡Pongan la mesa!

Pide Jimin cuando esta empezando a sacar todo lo que preparo, causando que las hienas hambrientas (su familia y Taehyung) se muevan con rapidez y preparen todo en menos de 1 minuto.

Empieza a dejar todas las guarniciones sobre la mesa con ayuda de Jungkook, y finalmente deja el plato principal de la noche en el centro, su famoso ramen.

Todos babean al ver la comida, el reloj marca casi las once de la noche, estan muriéndose de hambre.

En cuanto se sientan es un salvese quíen pueda, todos empiezan a servirse comida y a comer como cerdos, incluso Taehyung que luego de pasar todo el día allí ya había entrado en confianza, Jimin se tiene que encargar de servirle a Jungkook ya que el chico no se había animado a servirse sólo.

—Acá si no sos rapido no comes, espabila.

Le pide Jimin causando que ría a carcajadas.

Ahí esta, por primera vez en su vida sentándose en una mesa con otras siete personas, y lo único en lo que puede pensar es en que le encantaría pasar el tiempo suficiente en ese lugar como para lograr acostumbrarse.

Realmente Park Jimin no dejaba de sorprenderlo.

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2/3 💛  En unos minutos subo el último de hoy 🫂 💛