You.🌟
✦capítulo uno.

—¡Honnie oppa!— y ahí estaba otra vez la pequeña Wonyoung, de solo quince años, intentando conquistar a Sunghoon, de último año.

—Wonnie, ¿qué tal?— la castañita lo abrazaba fuertemente al punto de dejarlo sin poder respirar.

—Estoy bien, oppa, ¿cómo está usted?— era estresante, sí, pero era solo una niñita para el gran alfa pelinegro, de dieciocho años recién cumplidos.

—Bien. ¿Te vas a tu casa?— descolgó a la menor de sus hombros.

—¡Sí! ¿Me quiere acompañar?— preguntó, emocionada.

—Claro, dame tu mochila, te la llevo—. Dijo para luego, los dos, caminaran a la residencia de Wonyoung.

Llegaron a la enorme casa de la menor. Estaba pintada de colores claros, como el blanco y el beige y según lo que él contó, tenía tres pisos.

—¿Quiere pasar? Por lo que sé, no hay nadie en casa—. Sunghoon tragó saliva, ¿era acaso aquello una declaración explícita? Podía ir a prisión si era así.

—Mmm, claro, pero solo por unos minutos—.

La omega abrió la puerta, lo dejó pasar y chismosear a gusto la propiedad.

Escuchó unos pasos atrás suyo y giró sobre sus talones para ver quien era.

¡Oh dios santo!
¿Estaba viendo bien?
¿Era aquél ser un ángel?

Frente al atónito pelinegro se encontraba un omega de hermosos rasgos; bajito, con grandes mofletes y una cintura de infarto.

El rubio captó su presencia y ambos se analizaron por unos cuantos minutos.

—¡Ey! ¿Me escuchan?— preguntó, un poco enojada, la castaña.

el menor fue el primero en cortar el contacto visual y miró a su hermana.

—¿Qué pasa, wonnie?" preguntó.

—Le presento a Park Sunghoon, va a mí escuela. Y Sunghoon oppa, el es Sunno, mí hermano mayor—.

《O también llamame el amor de tu vida.》 Se dijo a si mismo el rubio.

Ambos se dieron las manos y se sonrieron cómplices.

—Bien, como ya se conocen y todo... ¿Ya se va, hyung?"— le preguntó a su hermano.

—Eh, no. Es más, quiero hablar unos minutos con Sunghoon a solas, ¿me dejas?— el mencionado lo miró extrañado pero prefería ser retado por aquel encantador chico que estar encerrado con la menor acosándolo.

—Bueno, solo unos minutos—. respondió la omega y subió las escaleras hacia su cuarto.

—Bien...¿Qué querías decirme?—

—¿También lo sentiste?—Park le miró confundido.

—¿Qué cosa tengo que sentir?—

—Tu lobo, idiota, escuchalo unos segundos y verás de que hablo—.

Sunghoon obedeció y cerró sus ojos, llamó a su lobo interior y volvió a abrirlos, ahora tenía sus pupilas inyectadas en fuerte color rojo.

"Mi omega." fue lo único que pudo escuchar del animal.

Sus ojos volvieron a la normalidad y él se daba una idea acerca de todo lo que le estaba pasando.

—¿Qué te dijo?— preguntó.

— 'Mi omega' fue lo único que oí—. Sunno sonrió ampliamente por lo dicho.

—Entiendes que sucede, ¿verdad? Tu lobo está diciendo lo mismo que el mío; somos destinados—. el mayor asintió, la teoría le parecía bastante acertada. —Oye, sé que no quieres estar con mi hermanita intensa por lo que, si quieres ir a mí habitación...— ofreció y el alfa asintió, emocionado.

El omega entrelazó su mano con la del mayor y subieron ambos las escaleras.

Entraron al cuarto y el rubio cerró la puerta detrás de sí.

—Bueno, esta es mi ha...—