Capítulo 5: La cita
Mika: *Le cura las heridas* Quédate quieto...
Akiro: ¡Auch! eso duele
Mika: Debes tener más cuidado
Akiro: Lo sé... Tienes razón
Akiro: ¿Ya acabaste? Debo ir al instituto
Mika: *Le coloca una gasa* Tendrás que ir así
Akiro, con una gasa en la mejilla, se dirigió hacia el instituto
Hiroshi: ¡Akiro! ¿Cómo fue tu cita con Rumi? *lo golpea en la espalda*
Akiro: ¡Auch! ¡E-eso duele!
Hiroshi: ¿Qué le pasó a tu cara?
Yumi: *Llega corriendo* ¡Akiro!
Yumi: *Lo abraza mientras llora* L-lo siento
Akiro: Y-yumi, no es nada
Yumi: ¿Cómo te encuentras?
Akiro: Bien, sólo me duele un poco
Suki: *Llega de repente* ¡Akiro! ¿Cómo te encuentras?
Akiro: Bien... No es nada
Mientras Akiro explicaba todo lo sucedido, sonaba la campana para dar comienzo a las clases
Hiroshi: Déjame ver si entendí... ¿Tienes una cita con Yumi? ¡Increible! *lo molesta* eres un héroe
Akiro: Déjame, duele mucho ser un "héroe"
Rumi: ¿Akiro? *lo mira* ¿Qué te sucedió? *ojos llorosos*
Akiro: *Rie sarcásticamente* es una larga historia
Profesor: Tomen asiento, hoy tendremos un nuevo alumno
Hiroshi: ¿Nuevo alumno?
Ryo: Saludos, me llamo Isao Ryo, pero pueden llamarme Ryo
Suki: *Con ojos de enamorada* Es muy guapo
Akiro: *Incómodo* Suki... No digas eso
Ryo: *Se acerca Akiro* Parece que tuviste una pelea, ¿Sabes pelear?
Akiro: Cuando era niño entrené defensa personal
Ryo: Ya veo *rie*
Akiro: ¿De qué te ríes?
Ryo: Sólo espero que nunca te enfrentes conmigo, porque te haré pedazos *se va*
Akiro: ¿C-cuál es su problema?
Luego de unas largas horas de estudio, suena la campana del receso
Suki: *Caminando junto Akiro* Así que... ¿Tendrás una cita con Yumi?
Akiro: La verdad, no lo sé... Se veía muy enojada y luego de lo que pasó no tuve oportunidad de hablar con ella *se sonroja*
Suki: Ya veo, pero cuando te invite a salir, ¿Sabrás que hacer... cuando te invite a su casa?
Akiro: *Se sonroja aún más* ¡S-suki!
Akiro: Eso no sucederá
Suki: *Lo toma de la mano* Ven conmigo
Akiro: *Caminando con Suki* ¿Dónde vamos?
Suki: Bien, aquí no nos ve nadie
Akiro: Suki, ¿Qué sucede?
Suki: Te enseñaré a tocar a una mujer
Suki: *Pone su mano en su pecho*
Akiro: *Sonrojado* S-suki
Suki: *Empieza a mover su mano* Sé que te gusta *sonrojada*
Akiro: *Intenta sacar la mano* P-para, nos pueden ver
Suki: *Le suelta la mano* T-tienes razón
Sin pensarlo dos veces, Akiro corre lejos de Suki
Akiro: Suki... ¡E-es una pervertida!
Pero cuando estaba corriendo, se choca con Rumi
Akiro: *Se toma la cabeza* Auch... Eso dolió
Rumi: *Se cae* Auch
Akiro: L-lo siento *la mira*
Akiro: *Se sonroja*
Rumi: ¿Q-qué sucede?
Akiro: N-nada, se ve muy bonita
Akiro: *La ayuda a levantarse* Lo lamento
Rumi: Fue culpa mía, no te he visto
Akiro: Para nada, yo estaba corriendo *rie*
Rumi: *Le mira la mejilla* ¿Te duele?
Akiro: No tanto
Rumi: Si quieres puedes venir a mi casa, y te ayudaré a que cicatrice más rápido
Akiro: Gracias... Pero hoy no podré
Rumi: ¿Oh?
Akiro: *Inventando una excusa* Tengo que estudiar, estamos en época de exámenes
Rumi: Oh... Cierto
Yumi: *Hace un ruido incómodo*
Rumi: *Se asusta* Como sea, nos vemos... Akiro *se va*
Yumi: Akiro... ¿Cómo te encuentras?
Akiro: Bien, tengo un poco de dolor, pero no te preocupes por mi
Rápidamente, Yumi lo toma de la mano y se va hacia la terraza de la escuela
Akiro: ¿Q-qué hacemos aquí?
Yumi: Ya que estamos solos tú y yo, dime lo que sucedió
Akiro: ¿S-sobre el ladrón?
Yumi: Así es
Akiro: Cuando te fuiste, el ladrón me estaba golpeando en el suelo:
Bandido: *Lo golpea* Esto es para que aprendas a no meterte en mis asuntos
Akiro: *Lo golpea en la pierna y se levanta del suelo*
Bandido: *Se cae* M-maldito
Akiro: Creí que iba a morir, pero en el suelo encontré un palo
Akiro: *Lo golpea con un palo*
Bandido: ¡Me has cansado mocoso! *Saca un arma*
Akiro: Cuando sacó el arma, me dije a mí mismo que era el fin, hasta que...
Se escucha una sirena de policía
Bandido: Te has salvado niño *se va en su moto*
Akiro: *Escupe sangre*
Akiro: Y eso fue lo que sucedió
Yumi: *Se tira al suelo y comienza a llorar* Lo siento... Cuánto lo siento
Akiro: Pero no me ha pasado nada, sólo son unos golpes *rie*
Suena muy fuerte y largamente la campana del colegio
Akiro: Vayamos a clase
Yumi: Antes de que te vayas... ¿Nuestra cita sigue en pie?
Akiro: *Se emociona* C-claro
Yumi: Ok, adiós *lo besa en la mejilla*
Luego de una larga clase, suena la campana y todos regresan a sus casas
Rumi: Akiro, ¿Vienes conmigo?
Akiro: Lo siento, tengo otros planes
Rumi: *Triste* Bueno... Cuídate mucho, Akiro *se va*
Se encontraba Yumi comiendo un helado junto a Akiro, caminando mirando hacia el río
Yumi: Que bonita vista *come helado*
Akiro: Lo es, se que queda un poco lejos del instituto, pero su lindo paisaje vale la pena
Yumi: *Apoya su cabeza en su hombro* ¿Quiéres sentarte?
Akiro: Si, *se sienta*
Akiro: Sabes... Cuando te invité a salir creí que me rechazarías como lo haces con varios, gracias por no hacerlo
Yumi: ¿Por qué?
Akiro: Porque me hubiese deprimido *rie* en cambio, habías dicho que no podías, pero no dijiste que no, esa es una respuesta diferente
Yumi: Oh cierto, y luego te encontré en la feria, y estabas con Rumi, ¿Cierto?
Akiro: Cierto... La crucé en la feria, junto a Hiroshi y Suki
Yumi: Y luego Kiki se extravió *rie*
Akiro: *Rie* Dime, ¿Tú tienes hermanos?
Yumi: Si, mi hermana menor Nana y mi hermano mayor Katsuro, pero no vive con nosotros
Akiro: ¿Vives sola con tu hermana?
Yumi: De hecho, vivo con mi hermana y con mi madre
Yumi: Mi padre nos abandonó cuando tenía 6 *se entristece*
Akiro: Te entiendo, mi madre murió por un accidente automovilístico cuando tenía 5 años, los policías sospechaban que había sido obra de una mafia, por lo que mi padre nos obligó a mi y a mi hermana a entrenar defensa personal, y luego se fue a vivir a otro país por temor de que algo nos pase
Yumi: P-pero que historia tan triste
Akiro: Si, lo sé, es por eso que no soy tan abierto a las personas
Yumi: Creo que es hora de irnos
Yumi: Esta vez puedes acompañarme hasta mi casa
Y dicho y hecho, Akiro la acompañó a su casa
Yumi: Me gustó pasar tiempo contigo
Akiro: A mi igual
Yumi: *Lo besa en la mejilla* nos vemos, cuídate
Akiro: Tu igual
En la oscura y soledad de la noche, se escucha unos pequeños pero grandes pasos
Rumi: Espero que no me haya escuchado
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro