Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

#Alivio

[Hoseok]

No podía parar de caminar de un lado a otro. Ni siquiera había vuelto a la habitación donde Chang y HyungWon estaban quedándose. Necesitaba verlo. Saber que estaba bien.

Una enfermera se acercó tímidamente y no la oí llegar hasta que me tocó el hombro.

—El muchacho ya despertó  —dijo y se alejó por el pasillo dejándome solo con mi ansiedad.

Pasé las manos por mis piernas y respiré hondo. Las manos me temblaban pero no podía seguir perdiendo el tiempo. Toqué la  puerta y su voz, algo rasposa, respondió que pasara.

Su cara era la sorpresa en su máxima expresión. Sus ojos grandes se abrieron al máximo y se llevó una mano a la boca.

—¡Hoseok! —dijo casi en un gritito. Apenas pude sonreír, sólo me abalancé hacia él y lo estreché en mis brazos.

—¡Al fin despiertas! —dije sin poder contenerme. Había estado tan asustado desde que me había enterado que estaba desaparecido que verlo ahí, aunque algo magullado, era toda la tranquilidad que necesitaba.

—Yo... —no lo dejé hablar, sólo me incliné hacia su cara, tomándola entre mis manos y lo besé. Lo besé con todo el miedo contenido y la ansiedad por verlo. Pude notar que lo había tomado por sorpresa porque se quedó congelado y solo suspiró.

Unos segundos después me separé ante su mirada atónita.

—Lo siento —mentí. Lo cierto es que no lo sentía ni un poco. Deseaba hacer eso hacía mucho tiempo.

Sus enormes ojos se clavaron en los míos, juzgándome.

—¿Qué está haciendo usted aquí?
—preguntó con la voz temblorosa.

—Primero quiero saber cómo estás —le dije— hacía casi tres días que no sabíamos nada de ti.

Apartó la mirada y se frotó un brazo. —Yo... ¿cómo está Chang?

—Enojado, asustado, aliviado.

Asintió despacio pero luego volvió a mirarme.

—Aún no me responde qué hace usted aquí.

—Es una historia larga ¿Puedes recordar algo de lo que te sucedió?

—Un poco a decir verdad. Salí con amigos, fuimos a bailar un poco, tomé mucho... —se encogió de hombros—. Me dijo el doctor que había algo en la bebida —me miró.

—Eso es lo que dijeron. ¿Recuerdas si te fuiste con alguien? —aunque le doliera responder, por lo que había pasado, necesitaba saber que él estaba bien.

Negó con la cabeza efusivamente.

—En un momento salí a llamar a Chang —dijo en voz baja— supongo que ya había tomado 'eso' y había un grupo de chicos. Me hablaron pero no entendía mucho lo que me decían ya que estaba algo mareado. No podía marcar bien los números y los chicos seguían gritándome cosas. Me alejé pero me siguieron. Me decían cosas por mi nacionalidad. Insultos, bromas...

—¿Te golpearon? —pregunté enojado. Era increíble que todavía hubiera gente xenofóbica en pleno siglo XXI.

—Bueno, a juzgar por los moretones creo que si. Pero ya le dije que yo estaba mareado y podría haberme golpeado. No recuerdo mucho más.

Suspiré aliviado al pensar que lo que en un principio había sido una potencial situación de abuso había sido otra cosa, no menos grave, pero si suficiente como para quitarme esa piedra en la boca del estómago.

El doctor entró poco tiempo después y HyungWon le relató lo sucedido el día que desapareció.

—Bueno —dijo el hombre— la droga bajó tu tensión arterial, fue una dosis bastante elevada. ¿Cómo te sientes?

—Bien, doctor. ¿Cuándo podré irme?
—preguntó ansioso.

—Bueno, puedo firmar el alta ahora mismo. Ahora que ya aclaramos lo que te pasó y que hay alguien que vela por tu —me sonrió y le hice una inclinación de cabeza.

HyungWon no dijo nada, solo se removió incómodo en la cama y suspiró. El doctor al final nos dejó solos.

—¿Quieres cambiarte? —le alcancé su ropa que estaba en una silla pero solo se limitó a cruzarse de brazos.

—Hoseok —dijo. Me giré y lo miré—. Ya dime que estás haciendo aquí.

—Vine por ti.

—¿Por qué?

—Ya te dije, hacía algunos días que estabas desaparecido.

—Eso no tiene sentido —dijo frunciendo el ceño y apretando más los brazos juntos sobre su pecho—. Chang no tiene su número, podría haber llamado a mi papá o a Joo.

Suspiré y me acerqué a él. Debía decirle lo que le había pasado a su padre.

—Y además —siguió— ¿qué excusa le puso a su prometido para venir hasta aquí por mí? Son más de 8000 km.

—Escucha, hay algo que tengo que decirte.

—¿Sobre qué? ¿Viene a contarme sobre su boda? Si es así, creo que hizo este viaje en vano. No me interesa nada de lo que pase allí.

—Hey —dije en tono conciliador. No quería darle motivos para que se exaltara más.
—¿Puedes escucharme?

—No veo por qué deba hacerlo.

Suspiré y me froté el punto entre las cejas.

—HyungWon... Necesito que me prestes atención. Esto no tiene nada que ver conmigo. O con BaekHo. —Frunció la boca y apartó la mirada—. El día que llamó Chang, llamó a tu padre.

—¿Y él lo mandó a buscarme? No iré. No regresaré. Terminaré mis estudios y me quedaré aquí.

—Tu padre no sabe qué te sucedió —dije.

Sus mirada nuevamente estaba sobre mí.

—No entiendo.

—Déjame terminar, por favor —le pedí. Al final asintió—. El día que Chang llamó, lo hizo al teléfono de tu padre. Atendí yo.

—¿Por qué?

—Tu padre estaba en el hospital.

Se descruzó de brazos y se incorporó hasta sentarse.

— Hoseok, ¿qué le pasó a mi padre? ¿Él está bien? Dímelo, por favor. —Sus manos se prendieron a mi camisa.

-—Tranquilo, tranquilo —dije acariciando sus hombros—. Él está fuera de peligro. Tuvo un infarto. —Las lágrimas se agolparon en sus ojos—. Cuando Chang llamó recién había pasado y yo tenía sus pertenencias. No tuve corazón para decirle a tu madre que no aparecías. Por eso vine.

Asintió y tragó con fuerza. —Es todo mi culpa —dijo limpiándose las lágrimas con el dorso de la bata de hospital—. Necesito ir con él. Debo estar a su lado —se bajó de la cama y trastabilló pero logré sujetarlo por el brazo—. Hoseok, por favor, llévame con él.

—Por supuesto —dije estrechándolo en mis brazos. Sus sollozos se hicieron más lentos y rodeó mi cintura con sus brazos. Nos quedamos en silencio un rato, él con su cara hundida en mi pecho y yo con mis manos en su espalda. —Nos iremos a casa tan pronto como salgamos de este lugar.

Cuando terminó de vestirse, un largo rato después, me tocó el brazo. —Siento haber causado todo este lío, no sé en qué estaba pensando. Estaba algo resentido —hizo una pequeña mueca con la boca—. No quise ser grosero con usted —levanté una ceja.

—¿Grosero?

—Por lo que dije sobre... sobre su compromiso.

—Ah —dije. —No te preocupes por eso.

—Pero es que quiero disculparme. A veces no puedo evitar actuar como un bebé caprichoso. Usted... usted se tomó la molestia de viajar hasta aquí y yo comportándome como un idiota.

—Deja de preocuparte por eso. No tiene importancia.

—Si la tiene. Yo quiero ser una mejor persona —dijo mientras jugaba con sus dedos— y no he actuado bien. Quiero decir, si. Estaba enojado con usted, por lo de su compromiso... Ya sabe —abrí la boca para decirle que estaba bien pero levantó una mano y me impidió continuar—, lo que pasó entre nosotros en Japón... Bien, supongo que yo creí que podíamos tener algo, pero luego lo pensé y bueno. Usted nunca me prometió nada.

—HyungWon... —dije. Movió la cabeza y sonrió apenas.

—No, en serio. Quiero que empecemos de nuevo. Si acepta que vuelva a la empresa. Yo quiero ser un buen amigo. Y decirle de corazón que... bueno, eso. Que sea feliz. BaekHo es un buen hombre.

—Rompimos el compromiso —solté de golpe. Levantó la mirada.

—¿Qué? —preguntó.

—Que ya no estamos juntos. No voy a casarme.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro