El día que les narraré hoy era muy especial para nuestros protagonistas chinos.

Ustedes se preguntarán, ¿por qué autora-chan? Les responderé inmediatamente eso mis pequeñas pajuas. Bueno verán, ese día, dos chicos hablaban con sus amigos nerviosamente, primero leamos al más marico de ellos dos.

—María no sé, Yoongi en serio me gusta y quiero, decirle... Pero él es tan machito, bueno, kike machito. —Frustrado se lanzó en la cama y observó dolorosamente el techo.

—Ay, los chinitos quielen lomance.

—Vete de mi casa.

Lamentablemente a él no le estaba yendo bien, mantenía una guerra mental si debía declararsele al que en un principio odiaba con cada molécula de su insignificante ser. Era realmente increíble como de un momento a otro pasas del odio al amor, exactamente como dice el dicho, y de alguna manera para nuestro pequeño Jiminie era frustrante por el simple hecho de que... Lo odiaba, era egocéntrico, flojo, egoísta, abusivo, lindo, no lindo no, o quizás si, pero no, no.

Pasemos al siguiente chino.

—Naguevoná causa, ¿es en serio? ¿Te gusta el mariquito?

—Ah vaina, deja tu guevonada, que si nojoda. —Le respondió bruscamente Yoongi a Emmanuel.

—¡NAAAAH! ¡¿ENTONCES ERES SENDA JEVA?! —Apareció Javier por la puerta con una taza llena de ruffles y doritos.

—Que coño decís, si tiramos seguro seré el activo, cállate esa jeta.

—Si tenes cuerpo de niña.

—¿Eso que tiene que ver con que lo puedo poner en cuatro? —Preguntó fastidiado, esta situación era jodida para él.

—Bueno te le vas a declarar o que.

—No marico, que te pasa, a ese bollo ni cagando.

—Si eres el macho te toca, que más Suga. —Los tres se tiraron en el sofá y Yoongi solo quedó pensando.

¿Declararse? Complicado. Él era muy orgulloso y todavía le sorprendía que se hayan hecho amigos, cuando se odiaban a muerte, porque ese niño era tan malcriado, princesa, irritante, pero muy adorable, y eso le estresaba el doble.

Ambos confundidos, se citan, y antes de que ustedes se den cuenta (porque si, hay que narrar esto rápido), ellos estaban frente a frente, nervioso y un poquito sonrojados.

—Ehm... H-Hola. —Habló Jimin, tímidamente bajando la vista.

—Hola, te ves, lindo... hoy... 

—¿Lindo, es en serio? ¿Es lo mejor que puedes hacer Min Yoongi? —Susurró María detrás de un poste de luz.

—¿Qué esperas de Yoongi, María? —Le dijo Javier.

—Bueno no sé guevón, algo más como, "papasito rico te chupo todo".

—Ordinaria, puro tierrua es lo que eres tú.

—Que vas a hablar tú, farandulero el coño.

—¿Javier? ¿María? —Preguntaron Jimin y Yoongi al mismo tiempo.

—Ups, ya nos íbamos, nos vimos de casualidad, y el marico este se estaba haciendo muy machito.

—Uy, culo e' loca, sale pa' ya agua mala.

—BUENO MAMAGUEVO DAL-

—Ehem... —Tosió Jimin.

—Si, ya, esto, si, adiós. —Dijo María jalando del brazo a Javier, sacándolo de allí.

—Uh, bueno, quieres, ya sabes ir a donde íbamos. —Habló Yoongi.

—S-Sí...

El ambiente era, como decirlo... Jodidamente incómodo, los dos llegaron rápidamente a donde querían sin decir una palabra, y ellos naturalmente hablaban demasiado, de todo y nada, pero esta vez...

—Yoongi, tengo algo importante que decirte... —Nerviosamente Jimin encaró a Yoongi.

—¿Te jodieron el culo?

¿En serio ese ser le gustaba a Jimin?

Y sonrió.

Pues sí, si le gustaba.

—Sabes... Sé que soy un poquito ladilloso, y al principio te odiaba porque eras un idiota, pero... Ahora tú...

—Aquí están sus pedidos, tres hamburguesas triple carne, sólo veo dos de ustedes, ¿para quien es la tercera? —Habló la (salía) tipa que los atendía.

—Ah dos son de este niño, Jimin, es gordo, tiene problemas alimenticios.

—Oh... Pobresito, bueno adiós.

—¿Qué decías? —Dijo Yoongi mordiendo su hamburguesa.

—Que tú ahora eres el mamaguevo más grande del mundo.

—Lo sé, pero soy el mamaguevo más enamorado del mundo.

Jimin en ese momento sintió que perforaban su pecho, llegó muy tarde, y, ahora, no sabía que hacer, es su primera decepción amorosa.

—O-Oh... ¿Si? ¿Q-Quién es la afortunada? —Desanimado, dejó sus hamburguesas, allí, sin siquiera ser tocadas.

—Bueno es complicado, porque es afortunado, con o, bien afortunado porque soy bien criminal, quien no me ama.

—¿Eres gay? —Preguntó sorprendido, lo hacía 100% heterosexual, y él pensaba intentar cambiar eso.

—La verdad no lo sabía, lo descubrí por tu culpa, porque me encantas, bollo.

—OH POR DIOS SI, LA PEGUÉ NOJODA, SOY ES YO, MAMAGUEVO MADURO, ¿NOS BESAMOS YA O QUÉ?

—En mi vida nunca deseé tanto compartir saliva con una persona, bollo.

人 人 人

Dios siento comenzar a subir esto tan tarde pero ya les daré unos más para tirarme a mimir, lo siento mucho aaaah):

Saben me pidieron una foto mía, exactamente lectoras de esto, pero me da penita ponerles unas, les daré cancersito no sé;///;