Único
Había una vez en un bosque un par de ranitas llamadas Louis y Harry.
Louis y Harry se conocen desde que eran unos lindos y chiquitos renacuajos y crecieron juntos hasta convertirse en unas ranas adultas. Harry nunca hacía nada sin Louis y viceversa, eran mejores amigos y eran inseparables.
Louis y Harry eran unas ranitas solitarias, no tenían manada, ya que cada que consiguen establecerse en un lugar y conocer ranas nuevas, estas migran, ellos no lo hacían ya que no tenían pareja.
Así fue por un par de años cambiaban de manada en manada pero nunca se quedaban en ninguna. Solo Louis y Harry
Era un día nublado en el pantano, Louis y Harry estaban jugando a saltar los nenúfares mientras se perseguían el uno al otro.
-El último en llegar al siguiente lago es una rana muerta- Dijo Harry divertido mientras saltaba para agarrar velocidad dirigiéndose al lago siguiente.
Louis sonrió y lo persiguió, salto más alto tratando de alcanzarlo pero se paró abruptamente al chocar con el cuerpo de la ranita de ojos verdes, la cual se había quedado parada viendo al otro lado del lago.
-¿Que paso Hazz? - Preguntó Louis conmocionado por el golpe que se dio en la espalda de su amigo - ¿Por qué te quedas parado ahí? - Dirigió su vista frente al lago.
-Oh- dijo Louis sorprendido.
Era una ranita hembra y sola en aquel lago, estaba mirando a Harry con el propósito de que se acercara a ella.
-Hazz creo que esta coqueteandote- dijo Louis con los ojos entrecerrados.
-Si... no me interesa, aquí tampoco hay flores- respondió Harry alzando su cabeza, y siguió saltando en dirección a otro lago- Vamos, una carrera al siguiente lago Lou, de seguro ahí si hay.
Comenzó a saltar, Louis detrás de él lo siguió con una mueca confundida en su rostro.
-No lo entiendo Hazz ¿Por que la rechazaste? Pudo ser tu oportunidad de crear una familia ¿Que no quieres eso? - Preguntó Louis mientras Harry empezaba a caminar por el suelo alrededor del Lago.
-Mira Louis ¡Flores! - dijo con los ojos iluminados, feliz por fin, pues era muy raro conseguir flores en un pantano- Y estan lindas- Salto emocionado mientras las agarraba con su patita.
Louis lo miró con una sonrisa en su rostro, pero de pronto volvió a la conversación, sacudió su cabeza y dijo - No me cambies el tema Hazz, dime ¿Por que siempre rechazas a cada hembra que te quiere seducir? - Ahora miraba a Harry con el ceño fruncido.
-No lo se Lou- respondió mientras seguía armando un mini ramo de flores contento - ¿Que pasaría después?
-Cómo que ¿qué pasaría después? Tendrías una familia, pertenecerias a una manada.
-¿Y qué hay de especial en eso? ¿Qué hay de nosotros?.
-¿Nosotros?- frunció el ceño - No pasaría nada con nosotros, seguiriamos siendo mejores amigos, donde tu estes yo estoy ¿Recuerdas?.
-Mejores amigos... Claro- murmuró la ranita ojiverde un poco decaida -Me gusta esta manada- dijo simulando su tristeza.
-Solo somos dos, no es una manada.
-Pues a mi me gusta- respondió la ranita con su ramo ya hecho - Vámonos, ya tengo mis flores.
-Tú y tus flores- murmuró Louis siguiéndolo de vuelta al lago anterior.
...
-¡Mira Harry!- Gritó Louis cuando llegó al lago- La rana hembra, sigue ahí.
-¿Qué? - Preguntó en dirección a Louis, pues no le prestó mucha atención, estaba adornando su ramito con una hoja que encontró en el suelo.
-Y viene hacia acá, creo que piensa que fuiste a traerle flores para cortejarla- dijo Louis mirando el ramo.
Harry se asustó, pues él no tenía planeado hacer esto así, él solo buscaba las flores perfectas y el momento perfecto, y ahora venía esta hembra a arruinar sus planes, genial.
-Vamos Harry, vamos- dijo Louis animando a que extendiera el ramo en dirección de la rana.
Harry solo cerró sus ojos nervioso y respiro, inhalo y exhalo nervioso tres veces y sin pensarlo extendió el ramo.
Pero no fue en dirección a la rana hembra.
Había extendido el ramo al lado suyo, en dirección a Louis.
-¿Qué? - La ranita ojiazul abrió sus ojos, estaba en shock.
-Son para ti Lou- Dijo Harry aun con sus ojitos cerrados.
Louis no sabía qué hacer, vio el ramo y algo dentro de él se removió, así que sonrió y aceptó el ramo con una sonrisita en su rostro. Volteo a ver a Harry para agradecerle pero este seguía con sus ojitos cerrados.
Louis se acercó a él y le dio un besito en la cara.
Harry se sonrojo,abrió los ojos y volteo a ver a Louis; Estaba sonriendo.
La ranita ojiverde se lanzó de un brinquito encima de la ranita ojiazul - Te dije que me gustaba nuestra manada- susurro una vez que estaban ambos tirados en el fango.
La ranita ojiazul río y volteo a verlo - Si, a mi también me gusta nuestra manada- dijo viéndolo a los ojos mientras sonreía.
Fin.
...
Me inspire en esto
Vieron que bonito? Imaginé a los Larry y lo escribí, que cute
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro