Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

03

Jin

— ¿Que hacemos aquí? — Pregunté bajando del auto.

— Vamos a invocar a Satansoo, ¿Qué más?

     Namjoon caminó entre todos aquellos vagones de tren vacíos, ¿Quién demonios busca ahí? Ya está, seguro va a asesinarme dentro y luego le prenderá fuego.

— ¿Te vas a quedar ahí parado? ¿O quieres que vaya por ti otra vez? — Sonrío y hasta ese momento no me había percatado del hoyuelo que se forma en su mejilla.

     Caminé a paso lento y luego lo perdí de vista, así que sólo observaba cada uno de aquellos enormes vagones mientras con mis manos trataba de calentarme los hombros pues el frío comenzaba a hacerse presente, caminé sobre los rieles oxidados y escuché pasos o más bien, alguien corriendo, luego me tomaron de los tobillos y los hombros.

— Qué...

— ¿Un intruso? — Miré a un chico de cabello negro y ojos grandes, ¿Dónde escuché su voz antes? En un dos por tres me encontraba dentro del frío vagón.

— Nadie viene por aquí. — El otro era de cabellos castaños, se acercó y me ¿Olfateó? Genial, drogadictos — ¿Qué haces aquí?

     Ambos chicos parecían ser más pequeños que yo, comenzaron a tocar los mechones de mi cabello y a mirarme extraño. ¿En dónde rayos me vine a meter?

— Yo...

— ¿Qué edad tienes?

     Mejor respondo antes de que me golpeen, quizá se apiaden de mí y me dejen libre.

— Ve- veintidós — Titubee. Qué tristeza Jin, te asustan unos simples críos.

— Suga-hyung, el tío dice tener tu edad.

     Un chico de tez pálida entró de un salto en el vagón, bastante pálido diría yo y con un color de cabello muy... Peculiar.
     Me observó de pies de cabeza mientras se acercaba y me tomó del cuello de la camiseta.

— ¿Y esta princesa de dónde salió? —Habló aún con su lollipop en la boca.

— ¿Pueden dejarlo en paz?

— ¡Namjoon! — Me levanté en seguida y me coloqué detrás suyo mientras dos chicos más entraban.
     Todos reían y poco a poco se fueron acercando a Namjoon mientras yo retrocedía sin soltarlo de su chaqueta.

— ¡Hasta que por fin vienes RapMon! — Le sonrió un chico delegado de cabello negro.

¿RapMon? Sí, estoy viviendo con un demente.

— ¿Me abandonaste y ahora quieres verme? - Se cruzó de brazos y luego sonrió. — Qué tal te va con Tae?

     Solté su chaqueta y retrocedí buscando la fría pared del vagón para luego salir corriendo.

— ¿Quién es tu amigo? — Choqué con un pelirrojo o al menos el intento deslavado de uno — Hyung ¿Es tu novio? Llevas décadas soltero.

     Todos corrieron hacía mí y me sentí más acorralado que nunca con aquellos pares de ojos mirándome fijamente y el estúpido de Namjoon, o RapMon como sea, sólo se limitaba a reír.

— Su nombre es Jin, es mi compañero de alquiler.

— ¿Tú? — El tipo pálido se abrió paso entre todos los demás quedando frente a mí, desde este es más pequeño. — ¿Cuánto tiempo llevas en esa mazmorra?

     No quisiera ni pensar en cómo se veía aquel departamento antes de que yo llegará.

— Alrededor de una semana.

— Tss, me pregunto cómo soportas estar ahí, y encima con el Dios de la destrucción. — Rodó los ojos y luego salió del vagón.

     Cada chico comenzó a presentarse conmigo y después subieron por las pequeñas escaleras llegando hasta la cima de los vagones a excepción Namjoon que comenzaba a subir poco a poco.
Al menos sé el nombre del que me olfateó, Taehyung, el chico con ojos grandes y dientes de conejo era Jeongguk, el ruidoso Hoseok, el semi-pelirrojo Jimin y el de mal genio Yoon Gi.

— ¿Necesitas ayuda? — Estiró su mano en mi dirección. — Vamos, ellos no van a hacerte daño, son mi familia.

    Le di la mano y me ayudó a subir encontrando a todos los chicos sentados en la esquina observando el paisaje, se veían muy amenos con Namjoon ya que siempre reían y hasta se empujaban.
Si pudiera calificarlos como una familia entonces sin duda Namjoon sería el papá.

     Mi teléfono comenzó a vibrar en mi bolsillo así que lo saque disimuladamente y miré la pantalla, un mensaje.

¿Dónde estás?

     Lo eliminé y devolví el aparato a mi bolsillo, debía pensar... No, definitivamente debo cambiar mi número telefónico.
Observe atento al grupo de chicos a mi lado y comencé a reír con sus actitudes.

— ¿Qué pasa? — Preguntó Namjoon.

— ¿Qué es RapMon?

— Ya te lo explicaré luego. — Rasco su nuca, sonreí y mire fijamente a ese tipo extraño que se hacía llamar RapMon.

Está mi oportunidad para empezar de nuevo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro