Salimos a comprar unas cuantas cosas al supermercado más cercano, Yeji sonrió cuando me vio vestido, me veía bien eso no lo niego, salimos a comprar como si nada, entonces cuando llegamos a la tienda lo vi.

Era tan lindo, sus ojos marrones eran divinos, no eran tan extraordinarios pero no pude despegar mi mirada de su presencia, lo notó y me regaló una sonrisa, por un momento me sentí extraño, me gusta tanto que ni siquiera puedo pensar bien.

Trabaja en la tienda con una chica, ella es su hermana, lo sé porque son demasiado similares.

'no te había visto por aquí' me dijo, si escuchara su voz de nuevo la grabaría en mi mente para siempre.

'Es que... estamos una semana nada más' pude decir, los labios me temblaban horrible, ahora creo que lo notó y me da vergüenza

' Entonces no podré verte de nuevo ¿cómo te llamas? Al menos así no solo recordaré al chico lindo que pasó por aquí'

Le dije mi nombre y dijo que era tan lindo como yo, mi cara se tornó roja, lo sé porque se calentó y Yeji me dijo que se notaba a kilómetros, pidió mi número y ni siquiera podía darle mi celular para que anotara el suyo, las manos me temblaban horrible.

Yeji le dio mi celular y le dijo que lo anotara, sonrió y lo hizo diciendo que era muy lindo y tierno, a veces creo que debería aceptarlo, debería intentar ser su novio quizá, creo que puedo hacerlo y olvidar a Soobin.

Mientras volvíamos Yeji me molestó un rato con lo guapo que me veía y que rompería corazones.

Creo que lo único que hago es que me rompan el corazón.

Luego de llegar de comprar fuimos a buscar nuestros trajes de baño, me quedé con una camiseta aunque Yeji me dijo que me la podía quitar porque nadie me vería así que lo hice, ella llevaba su traje de baño y corrió a lanzarse al agua, hice lo mismo con un salto cayendo y hundiéndome un poco profundo pero fue increíble.

Pasamos un buen rato en silencio hasta que luego ella comenzó a lanzarme agua, jugamos un rato hasta que nos cansamos, nadamos y luego fue por un flotador en donde nos acomodamos a dormir un rato bajo el sol.

Cuando desperté de nuevo ella dormía aún, al menos era lo que suponía, le dije que Ryu tenía razón en amarla porque era le mejor persona del mundo.

Me asustó cuando me dijo que la haría llorar.

Cai al agua, pero me ayudó a subir de nuevo, al salir nos quedamos en la orilla un rato, preguntó como me sentía, algo que en años nadie había hecho.

Nunca lo pensé pero desde que Ryujin murió el mundo se volvió tenebroso, me asusta mucho todo y no suelo expresarme porque temo repetir todo de nuevo, a veces solo quiero irme y otras veces estoy feliz, nunca tuve a quien decírselo ni alguien con quien pudiera hablar hasta que Yeji llegó, cada día se volvía una forma de terapia pero a veces creo que necesitamos una terapia más cercana para mejorar, luego de hablar creo que necesito alejarme de los recuerdos.

Acordamos no hablar mucho del pasado a menos que fuera necesario y me comentó lo mucho que le costó superar la muerte de Ryu, ella estaba muy mal pero lo expresó, encontró ayuda profesional y pudo superarlo pero le preocupaba mi salud así que comenzó a llamarme.

Solía hablar con un amigo suyo que es psicólogo y este le decía que hacer o decir, ahora entiendo por qué siempre me sentía bien cuando hablaba con ella.

'A partir de ahora tú y yo seremos amigos mientras logras superar esto, no seremos la novia de Ryu y el hermanito de Ryu sino Yeji y tú Yeonjun ¿si?'

Acordamos dejar el pasado un rato y actuar como si fuéramos amigos desde hace mucho, como si ella me hubiera conocido por cuenta propia y dejar un poco la melancolía, creo que esta tarde fue de mis favoritas.

Al llegar la cena comimos afuera, Yeji preparó huevos y algo de carne en la fogata, yo solo me dediqué a escuchar sus historias de como es Berlín, creo que quiero irme mas de lo que pensaba.

Quizá pueda armar una vida increíble en berlín.

Soobin se quedó en silencio, vio de nuevo hacia el baño, desearía dejar de leer pero simplemente no podía, hojeó de nuevo buscando una hoja con exactitud aunque no lograba encontrarla, se detuvo en cualquier hoja, una en específico que le llamó la atención porque recordaba ese día, tal como si hubiera sido el día anterior y pudiera repetir cada palabra exactamente entre labios.

Aunque para el significaba una cosa para Yeonjun era algo completamente distinto.