Cuando me invitaste al cine fui más que feliz, pero si hubiera sabido que solo me invitabas para ir con Karina y que tu madre no preguntara nada, si tan solo hubiera pensado con las neuronas que aún me quedan después de matemáticas.

Me fui, si, cuando estábamos a mitad de la película me fui, ¿sabes cuanto me duele que la beses?, ¿Cuánto me duele ver esas miradas? Desde que empezaron como novios lo único que quiero es perderme y no saber de tu existencia.

Pero como siempre me las arreglé para que todo fuera de mal en peor, estoy en el hospital, si, lo estoy mientras tu solamente escribes mensajes como idiota preguntando en donde estoy, ni siquiera te importó cuando salí del cine, ni siquiera

Igual no tiene sentido ibas con ella no conmigo, da igual porque soy estúpido y no llego a comprenderlo, no me amas y eso no es malo, al menos no para ti, cuando el auto me atropelló lo único que pude hacer fue pensar en ti, lo único que pude hacer fue quedarme al frente del auto, simplemente me quedé allí mientras me estrellaba, ahora el hombre ruega porque no lo denuncie, en realidad podría hacerlo pero no quiero, solo quiero quedarme aquí y no saber que existes, solo le digo al doctor que me deje quedarme un poco más y ya

'Dónde estás', de nuevo, llevas miles de mensajes y nunca te responderé, porque me cansé, me cansé de rogar, me cansé de esperar y sufrir viendo como la ves, porque jamás me verías así.

Recuerdo dolorosamente cuando me dijiste que ella era tu novia, te veías tan feliz que simplemente sonreí de regreso mientras te felicitaba, los demás lo hicieron igual, Kai era el más feliz de todos nosotros al ver que tu eras feliz, siempre ha sido el más dulce de todos y quisiera ser así.

La noche llegó y uno de los doctores se acercó, es muy guapo en serio, parece agradable pero tiene una novia, me comentó lo bien que se congenian y le comenté lo bien que tu y yo nos llevamos, la forma en que a veces Choi Soobin puede leerme la mente y entender todo lo que hago y pienso.

Me dijo que hablaba de ti como si estuviera enamorado, si supiera que me enloqueces, que me fascinas, solo le dije que me gustabas, hablamos mucho sobre ello, me aconsejó y fue la persona con la que más libre me he sentido de hablar.

Mi celular se dañó, la pantalla del celular esta quebrada de una esquina y apenas puedo ver bien los mensajes me llegó una llamada de Gyu pero como está dañado no pude contestar, luego una de Hyuka, supongo que regaste el asunto y ahora creen que me dio un infarto, me llevaron los secuestradores o mis órganos ya están en el mercado.

Estoy simplemente sentado en la camilla de hospital mientras tratan de contactar a mi padre que por supuesto nunca contestará porque está ebrio en una esquina de la calle o con una mujer cualquiera en un hotel, tampoco quiero que lo haga.

Afuera llueve, dentro también, no de la habitación pero si dentro de mí, cada segundo se repite y no la odio a ella, tampoco a ti sino a mi, me odio porque ni siquiera tengo el valor para decírtelo y lo único que hago es huir, lo único que hago es quedarme en esta camilla de hospital sentado mientras escribo en la libreta de Ryu, esperando no ser encontrado como si tuviera mil problemas de esos que te matarán si no encuentras como arreglarlos.

A mi no me matarán pronto sino lentamente.

Creo que debería aceptar la propuesta de Yeji de irme a final de año a Alemania, creo que a su lado podría estar mejor y ser libre de verte, sería libre de amarte aunque no estes allí y lentamente me olvidaré de tu existencia para siempre.

Me quedaré un rato despierto, me dijeron que la comida llegará pronto así que cuando vuelva a escribir será porque estoy a punto de dormir, aunque tengo sueño simplemente espero la llamada de Yeji aunque quizá debería ser yo quien marque su numero o no podré contestar.

Llamé a Beomgyu, me dijo lo mal que estabas pero le supliqué que no te dijera donde estaba, puede que sea idiota pero Beomgyu sabrá callarse, al menos es lo que pienso porque llevo dos horas y no has aparecido, o quizá ya no te importo, después de todo muchos han hecho eso, juré que nunca te cambiaría por nadie más pero tu nunca lo hiciste.

Desearía que lo hubieras hecho porque así podría reclamarte atención, aunque se que con que me digas un hola ya he caido, con que me sonrías y me preguntes que pasa mi mente se pierde y solo te digo que nada cayendo de nuevo, porque me controlas, me manipulas pero no lo ves.

Te amo pero no lo ves.

Yeji me llamó, hablamos sobre irme a Alemania con ella, me dijo que puede que la próxima semana venga de visita, espero poder recibirla en casa y que no se arme un problema con papá, el siempre pensó que Yeji era la mejor amiga de Ryu, nunca supo nada igual que mamá, yo era quien la escuchaba mientras me contaba lo lindo que era su noviazgo con ella, ahora escucho a Yeji comentarme con emoción lo lindo que era estar con Ryu y conmigo.

Yeji dice que necesito un poco de tiempo lejos, quizá cuando venga nos vayamos a una cabaña a las afueras de la ciudad, al menos así seré libre unos días de todo esto, claramente nunca te lo diría porque si preguntases si puedes ir no te lo negaría sin importar cuanto lo intente.

Soy demasiado débil y no puedo abstenerme a obedecerte, porque eres algo que me enloquece, eres lo que quiero, lo que no puedo pero deseo, mi fruto prohibido pero tan dulce que solo quiero probarlo.

Más no puedo.

Porque la amas, Karina es linda, es dulce, es amable y muy lista, es inteligente y también sabe hablar, yo solo sé escuchar y quedarme con la boca cerrada, las personas suelen pensar que soy mudo, de ella dicen que su voz es preciosa, su cuerpo es de proporciones preciosas, yo no tengo nada.

¿Te gusta su cuerpo?, me dijiste que te encantaba, su cintura pequeña, pechos amplios, caderas perfectas, yo apenas tengo cintura y está mas pequeña de un lado que de otro, mis ojos no son como los suyos, mis labios están mal hechos, me veo como el chiste de un circo terrible, ella es una diosa perfecta.

Siempre dijiste que mis mejillas eran lindas, de ella dices que sus labios te fascinan, no tiene mejillas enormes como yo, no está mal y tampoco habla raro, su vos es femenina, su risa es tan perfecta que solo sabes abrir la boca embobado cuando la ves reír, a ella la celas, a mi nunca me celaste porque siempre estaba para ti, porque siempre fui lo suficientemente estúpido para no apartarme ni cambiarte por nadie un solo segundo.

A veces pienso que necesito encontrar a alguien más, a veces pienso que simplemente es cuestión de que me guste alguien más.

Pero le temo a las personas, temo equivocarme y temo a estar cerca, suelen juzgarme por callar y nadie quiere un chico que no habla bien, que no sabe nunca que hacer y cuya inteligencia es inferior a la de un pez de pecera en un restaurante de comida china.

¿Por qué te sigo pensando Soobin?