Veía con mucha atención su reflejo en el espejo del baño del bar, sentía como poco a poco se tranquilizaba su respiración acelerada por culpa de un chico de tez morena.
Todo su plan para pasarla bien esta noche se había ido a la mierda, cuando lo vio con aquel oufit tan caliente. Sin duda su enamoramiento con Kim NamJoon estaba tomando rumbos diferentes a los que imaginaba.
¿Cuantas veces pensó que solo era atracción y no algo más?.
Tan solo con sentir poca cercanía, sus mejillas se teñían de un color carmesí, haciéndole ver como una adolescente con su primer amor, y sus manos temblaban como gelatina. Así que su única salvación era huir como un cobarde, y calmar sus revoltosas emociones que lo alteraban.
Sus manos se unieron en un intento vago por atrapar el agua que salía del grifo, necesitaba refrescar su rostro. Últimamente su estado emocional había caído a un grado impresiónante y más cuando veía como los demás chicos se acercaban a NamJoon con intenciones románticas.
Inclinó un poco su cuerpo sobre el lavabo para sumergir el rostro en el agua. Con los ojos cerrados escuchó como la puerta del baño era abierta, y luego se escuchaban pasos acercándose hasta él.
Sin prestarle atención siguió con su labor tranquilamente pero algo lo detuvo, brinco de susto cuando sintió unas manos fuertes y callosas sosteniéndole de la cintura con firmeza.
Asustado se giro con agilidad para enfrentar al pervertido que había osado con tocarlo sin su permiso.
—¡Oh por dios!— exclamó sin poder creer lo que estaba viendo, sus manos se sostuvieron en el lavabo buscando soporte.
—¿Qu-que ha-haces aquí?
Kim NamJoon se encontraba frente a él, con aquella sonrisa que dejaba a la vista sus hermosos hoyuelos.
—Quería ver como estabas, siempre que me ves o estoy cerca de ti, corres a refugiarte en algún lugar.— la voz gruesa hizo que su cuerpo se estremeciera sutilmente.
—¿No crees que eso es de mala educación?
Susurro contra su oído, para después lamer el lóbulo en busca de algo más.
Su mente estaba confundida por el comportamiento extraño que mostraba Jungkook, aveces por el rabillo del ojo podía observar como la mínima cercanía lo hacia huir.
Todas esas veces que se acercó a él era para intentar entablar una conversación con dobles intenciones, siempre fracasaba. Estaba vez no sería igual y decidido siguió al pelinegro cautelosamente.
Una intentó de sonrisa se posó en sus labios al ver como entraba al baño, el lugar perfecto para lo que planeaba hacer. Sin dudar lo imito, al entrar pudo observar como Jungkook estaba inclinado sobre el lavabo refrescándose el rostro con desespero.
Con ansias tomo la cintura del menor entre sus manos. Con agilidad el cuerpo ajeno se giro en un intento de protestar.
—¡Oh por dios!— veía divertido el tono que implementó Jeon al verlo.
—¿Qu-que ha-haces aquí?
—Quería ver como estabas, siempre que me ves o estoy cerca de ti, corres a refugiarte en algún lugar.— fue consciente de que su voz provocó un estremecimiento sutil en el cuerpo ajeno.
Lo que siguió después sucedió tan rápido que no supo como fue que terminaron comiéndose la boca. Lo único que Jungkook tenía claro era que se sentia deseoso de sentir la polla de NamJoon enterrada en su culo, partiéndolo en dos.
—¿Me necesitas?— no sabía con certeza que lo había incitado a decir eso, pero era muy tarde para arrepentirse. Sus fuertes manos sostuvieron los glúteos con firmeza para ayudarlo a subir sobre el lavabo.
Jungkook retrocedía hacía atrás y no era porque no deseará la cercanía que tenían, si no que temía la reacción que tendría su cuerpo si caía a los encantos del moreno.
—Contesta.— exigió con voz ronca, cuando su cuerpo estuvo lo suficientemente cerca del pelinegro, sus brazos se enrollaron en la cintura de este con mucha facilidad.
Su cuerpo se sacudía como una gelatina al sentír el contacto caliente que Nam exigía sobre su cintura.
—¿Por-porque ha-haces esto?
—Te necesito mucho.— la desesperación embargaba su cuerpo, ansiaba de verdad hacerlo suyo.
—Deseo con todas mis fuerzas verte debajo de mi cuerpo, follandote con fuerza mientras gimes mi nombre.
Cuando su piel entraba en contacto con la respiración tibia de Jungkook, sentía que pérdia fuerza de voluntad. No sabía con certeza si podía resistirse más ante los encantos del chico que alguna vez deseo que fuese suyo.
—NamJoon no di-digas eso, te lo suplico.— rogó sin aliento, sin poder evitarlo sus manos fueron a parar en los hombros anchos del mencionado.
Había caído en un posó sin fondo, pero le agradaba la sensación que sentía su cuerpo al estar cerca del moreno.
—Esto no esta bien.— sus manos apretaban los hombros con fuerza, ya no sabía que hacer para fortalecer la mentalidad que tenia de mantenerse alejado.
Acerco su boca a los labios de Jungkook para juntarlos y deslizarlos con ternura.
—No te resistas más y dejame follarte.
Con esas palabras tan sucias no pudo resistirse más, y comenzó a devorar con hambruna los labios que siempre lo hacían huir.
Él lo empuja con fuerza contra el cubículo y Jungkook se agarraba débilmente de su nuca mientras suelta pequeños gemidos satisfactorios. Por la diferencia de altura su rostro esta cerca del mentón de NamJoon, y entonces deja un tierno beso allí.
Sus piernas rodean la cadera de NamJoon y mueve sus erecciones con desesperación. El moreno inclina su cabeza hacia Jungkook, para juntar sus frentes y mirarle a los ojos, empezaba a sentir fascinación por aquel ser, la manera en la que se movía era tan exquisita, sus ojitos entreabiertos siendo acompañados de sus mejillas completamente enrojecidas. Su frente estaba perlada por el sudor y sus labios entreabiertos soltando suspiros y jadeos.
Jungkook sabe que que recibe miradas llenas de lujurias, sabe que que sus ojos tienen un brillo perverso y que esta encantado con su forma de ser.
Y ahí están sus labios que son como un imán para NamJoon, deliciosos y rojos como las cerezas. Succiona y muerde una y otra vez los labios de Jungkook repetidas veces, sin cansarse de hacerlo mientras los gemidos del pelinegro se ahogan contra su boca.
Ambos están ya sin aliento, los dos callan sus gemidos con besos. Las manos del pelinegro se deslizan sobre la espalda del pelinegro hasta su trasero sin saber que lo que se aproximaba les traería muchas consecuencias.
Tales como: confusiónes, desilusiónes y problemas con terceras personas pero estaban listos para enfrentarlos.
—————————————————————
¡Hola!
Recuerden que el primer voto tiene derecho a comentar quien es el siguiente.
Si el primero no comenta el segundo lo puede hacer y así sucesivamente hasta que alguien comente.
Y si nadie comenta escogeré yo.
PD: Si quieren que las tome en cuenta no pongan "Yo" porque no puedo atenerme a esperar a que se conecten y comenten quién les gustaría. Solo pongan el nombre del idol que estará con Jungkook.
Acabo de publicar una historia nueva, es jikook pueden verla en mi perfil, si gustan
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro