(5 años después)

A pasado tiempo, Yoongi y yo nos hemos hechos grandes amigos, Taehyung también se ha unido más a él al igual que Jimin.

Irene fue cambiada de colegio y no volvimos a saber más de ella, Hyunwoo no le volvió a tocar en la misma sección que nosotros y tampoco podremos estar juntos pues nos enteramos que repitió el año.

Para cuando estábamos cursando el tercer grado de secundaria ya nos tocó en la misma sección a todos juntos, a Taehyung, Jimin, Yoongi y yo.

Mi papá fue a parar a un trabajo mejor, es administrador de una pequeña empresa de panes, mi hermana se mudó a otra ciudad por sus estudios, lo cual un tiempo después dejó y nos enteramos de que estaba embarazada, fue todo una sorpresa.

— ¿Qué piensas baboso? — preguntó Yoongi dándome un golpe en la cabeza

— Auch, no seas bestia Yoongi — dije sobando mi cabeza

— Eres muy delicado — dijo mientras abría un chupete — me sorprende que no seas omega — dijo burlón

— Tú eres muy bajito y yo no digo nada — dije burlón al igual que él

— Pues tú eres muy escuálido — dijo tocando mis brazos

— Tú no tienes abdominales, yo si mira — me alcé mi polo

— Oye bájate el polo descarado — dijo cubriéndose los ojos

— ¿De qué hablan tontos? — preguntó Taehyung llegando

— De quién es mas alfa — dijo Yoongi alzando su pecho

— ¿Y quien ganó? — preguntó divertido

— Nadie — dije riéndome

— Eso tiene lógica — dijo él viéndonos a los dos — ambos son muy delicados, yo si soy un verdadero alfa — dijo mostrando sus brazos — soy todo un semental — dijo orgulloso

— Uy sí, deja que me de la pubertad y verás como voy a crecer más — dijo Yoongi viéndolo mal

— Quiero ver eso, pues en estos momentos pareces una tabla —

— Ya cállate — dije sin poder evitar reírme

— De hecho ya me voy, mi novia ya vino y pues tengo que complacerla — dijo guiñándome el ojo

— Mostrar tus abdominales no complace a nadie — dije con asco

— Su novia tiene once año y él catorce, pero con cerebro de cinco, ¿Qué estabas? —

— Me voy tortolos — dijo Taehyung riéndose

— No entiendo por qué nos dice así — dijo Yoongi parándose — bueno me voy, Jimin dijo que estaría practicando a esta hora y no quiero perdérmelo — dijo con una mirada perversa

Yo sólo me quedé ahí sentado viéndolo irse, a pasado mucho pero mis sentimientos por él no han cambiado. Nunca hablamos de ese beso cuando eramos niños, Taehyung siempre me repite que me confiese, pero yo estoy bien como estamos.

Escuché el timbre sonar, dándo así el inicio de las vacaciones de invierno. Me voy, solo, ya no tengo a nadie con quien ir pues por un lado está Taehyung y su novia, están ocupados, y por el otro Yoongi junto a Jimin que son inseparables.

— ¡Ey tonto! — gritó alguien atrás mio

— ¿Yoongi? — pregunté volteando, algo extraño por eso

— Espérame, vamos juntos — dijo sonriéndome

— Tú no vives por aquí —

— Ya lo sé tonto, voy a ir a buscar a mi hermanito a su colegio — dijo sonriendo — ese mocoso es llorón, si llego tarde llorará a mares —

— Al igual que tú — dije burlón

— Qué chistoso Jung — dijo sarcástico

— ¿Tu mamá aún no vuelve? — pregunté viéndolo preocupado

— Que no vuelva nunca más, no nos hace falta a ninguno de los dos — dijo él con indiferencia

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— Bueno, ya te traje a tu casa bello omega — dije tratando de no reír

— Qué chistoso Min — dijo sarcástico

— Adiós — dije para dar media vuelta e irme

Mi mamá se fue cuando tuvo a mi hermano, se fue al darse cuenta que era omega y lo dejo con tan solo unos meses de nacido, mi papá no le dio importancia y me encargó a mi hermanito diciéndome si lo podía apoyar. Desde ese entonces cuido de él, mi hermanito ya tiene cuatro años de edad y es una dulzura, por él debo ser un alfa, debo protegerlo, es mi deber.

— Buenas, vengo por mi hermanito señora — le dije a la auxiliar del inicial

— Claro Yoongi, ahora lo traigo, espera — dijo ella agarrándome las mejillas — eres tan tierno, serías un buen omega, tengo un sobrino al que seguro le gustarías — dijo para ir por mi hermano

— Soy un alfa señora, no diga barbaridades — dije con algo de disgusto

— Aquí está el chiquitín — dijo abriendo la reja para que él salga

— Yuungi — dijo sonriendo cuando me vio

— Mi bebé — dije cargándolo — ¿Haz comido toda tu lonchera? — pregunté sonriéndole

— Sí, comí todo lo que mi helmano hizo — dijo asintiendo mientras me veía fijamente

— Es muy obediente e inteligente para su edad — dijo la señora sonriendo — parece más bien un niño de seis años, si no fuera por su carita de bebé y su tamaño lo creería — dijo riéndose

— Bueno señora Choi adiós, dile adiós bebé —

— Aliós —

— Esperen, tengo algo para ustedes — dijo la señora Choi para entregarme una bolsa amarilla — son bolsas de leche y un poco de pan para que puedan comer, también tiene avena para que puedas preparar —

— Muchas gracias señora Choi, no sabe cuanto se lo agradezco — dije sonriendo

— De nada niño, si te falta algo, incluso un techo dímelo y veo que puedo hacer por ustedes —

Cuando mi mamá se fue no fue un golpe duro para nosotros, pero al mi papá ser padre soltero, con dos hijos y un trabajo de albañil no era muy beneficioso. En unos años más mi papá no va tener trabajo pues la edad limite para ese trabajo es de cuarenta y cinco años y solo le faltan cuatro años para eso.

La señora Choi fue de gran ayuda, ella desde que conoció a mi chiquitín nos a ayudado mucho, nos da ropa o un poco de comida.

— ¿Papá ya está en casha? — preguntó abrazándome del cuello

— Tú sabes que él sale muy tarde, cuando él llega tú ya estás dormido — dije dándole un beso en la cabeza

— Yo quielo velo — dijo formando un puchero con su boquita — lo extlaño mucho —

— Él también, pero viene cansado y a la justas come, luego se va muy temprano a trabajar — dije palmeando su espalda — bebé ya me cansé, vamos a tomar un bus para que nos lleve a casa — dije para dirigirme a un paradero cercano

— ¿Yuungi tú tienes novio? — preguntó mientras lo sentaba en las bancas del paradero

— ¿Cómo es que tú sabes de novios? — pregunté riéndome

— Es que la señora Choi dijo que un niño bonito como Yuungi debe tener novio —

— Esa vieja metiche — dije riéndome — tengo a alguien especial para mí, eso es todo lo que diré —

— ¡Pero Yuungi! — exclamó quejándose

— No Jungkook, eres muy chiquito para eso —