https://youtu.be/R7fiQU0kFHs

-¿Así que también le entras a la música?- Pregunto Kazu mientras charlaba con la hermana rockera de su amigo-. ¡Eso es genial! De seguro has de ser una gran guitarrista.

-Bueno, no soy la mejor, pero tampoco la peor.- Dijo Luna-. Pero, ¿Cómo adivinaste que toco guitarra?

-Veras, señorita... Tengo poderes Psiquicos-. Dijo el joven asiático-. ... Nah es broma, tienes una uña de guitarra en el bolsillo de tu camisa, además de que Lincoln ya me había hablado de ti.

-¿Ah sí? ¿Me pregunto qué barbaridades habrá dicho de mí en mi ausencia?- Dijo la chica rockera al bajar la cabeza.

-En realidad me comento muchas cosas buenas de ti y la gran persona que eras antes del embrollo de la suerte.- Dijo Kazu-. De verdad es un gusto ver que Lincoln te haya perdonado.

-Créeme, para mí también lo es.- Dijo Luna-. Por cierto, ¿Dónde está Lincoln?

-Está en el almacén de la tienda junto con Ronnie-. Dijo el chico asiático-. Pero se están tardando mucho... Espero que no estén intentando hacer bebes de nuevo allí atrás, por que dudo que el jefe les crea de nuevo que estaban jugando al Twister.

La chica rockera solo ríe ante eso, quien diría que su hermano no era tan inocente en esta nueva vida.

-A propósito, Luna... Al ser tan fanática del rock, supongo que tienes una banda ¿No?- Pregunto Kazu.

-Bueno... Solía tener una.- Dijo La castaña-. Éramos los mejores de la secundaria, hay quienes decían que éramos como el PXNDX norteamericano... Pero ...

-Pero...

-Pero empezaron las tensiones dentro de la banda, llego un punto en el que Chuck ya ni se podía ver con Sam sin que hubiera una discusión, pues ella quería dirigir a la banda a algo más... Prefabricado, mientras que Chuck y yo queríamos algo más a lo clásico, como Judas Priest o Iron Maiden... Finalmente renuncie, y una semana después Chuck me siguió.- Relato Luna.

-Oh... Eso sí que es malo.- Dijo Kazu-. ¿Y no has intentado formar una nueva?

-¿Una nueva banda?

-Claro, ya que estas temporalmente aquí, es buen momento para iniciar una nueva y así demostrar que no te quedaste estancada.- Dijo Kazu.

-Pues, no suena tan mal... Pero, ¿De dónde voy a sacar músicos?- Pregunto Luna.

-Bueno... Yo podría ayudarte un poco.- Dijo Kazu-. No soy buen cantante, pero si soy excelente con el Bajo, y mi novia es una excelente tecladista.

-Jum... Nada mal.- Dijo Luna-. Pero me falta un baterista y un guitarrista secundario.

-Déjame pensar un poco... No por algo me dicen el Pibe ingenioso- Dijo kazu-. ¡Ah! Claro, ¿Qué acaso no le enseñaste a Lincoln a tocar la guitarra?

-Lo básico... Aunque admito que el chico tiene mejor voz que yo.- Dijo Luna.

-Allí esta.- Dijo Kazu-. Podrías usar a Lincoln como guitarrista secundario, y si aún tienes contacto con ese Chuck, podrías invitarle, aunque claro, Reyna, Lincoln y yo seriamos músicos provisionales, así que luego tendrás que buscar unos nuevos.

-Pues... No es mala idea.- Dijo Luna-. ¡Sí! De hecho ahorita más tarde le llamare, seguramente se me unirá sin problemas...

-Si, además también hay una manera de que te hagas con un poco de reconocimiento.- Dijo el chico asiático.

-¿Cómo?

-Bueno... Veras, en la Plaza Central hay un escenario de uso libre.- Dijo Kazu-. Muchas bandas de principiantes suelen ir allí para divertirse un rato y así darse a conocer, incluso varias veces es frecuentada por Cazatalentos.

-Ya veo, entonces me sugieres que haga una presentación allí, y con eso nos damos a conocer, ¿No?

-Exacto, y si tienes mucha suerte puede que un cazatalentos te vea y te de un jugoso contrato.- Dijo Kazu.

-Bien... Me agrada esa idea, solo déjame hablar con Chuck y te aviso a ti y a Lincoln para que se preparen, ¿Vale?

-De acuerdo... - Dijo Kazu-. Ahora si me disculpas, iré a ver que hacen este par de conejos...

Luna ve con gracia como ese chico asiático va hacia la parte de atrás de la tienda, y pensar que los amigos de Lincoln aquí la recibirían de mala gana, pues seguramente él les habrá contado todo lo sucedido con lo de la superstición .

Ese día, después de desayunar y ayudar a Lori con sus episodios depresivos por lo sucedido con Bobby, se dispuso a ir directito a la tienda de música en donde trabajaba su hermano, al llegar fue recibida por Kazu, al parecer este ya esperaba su presencia allí pues ya sabía su nombre y que venía a hacer allí.

A parte de visitar a su hermano, Luna también estaba allí para ver si había algo que le llamara la atención, pero nada fuera de lo común.

-Ah, Hola hermana.- Dijo Lincoln al salir y abrazar a Luna.

-¿Qué estabas haciendo allá atrás, loquillo?- Dijo Luna con una sonrisa picarona.

-¿Huh? ¡Oh, Vamos! – Dijo Lincoln al ruborizarse-. No pienses mal, solo estaba organizando unas nuevas cuerdas de bajo nueva que trajeron hoy, y Ronnie anda desayunando en la sala de descanso.

-Hehe, está bien.- Dijo Luna para golpearle el brazo suavemente-. Hare como que te creo.

Lincoln solo suspira... Iba a ser un día largo, pero al menos lo iba a pasar junto a sus amigos, novia y hermana recién perdonada.

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Leni y Bobby se hallaban en una cafetería cercana a los apartamentos, desde el día de ayer, la chica rubia le estaba ayudando a aclarar su confundida mente, Leni podía ser conocida por ser la menos espabilada de la casa Loud, pero en este tipo de cosas, Leni sabía lo que hacía, después de todo no era la primera vez que aconsejaba a alguien, lo hizo en el pasado muchas veces con sus amigas.

-Bueno... Admito que mi hermana como que algunas veces suele ser muy impulsiva.- Dijo Leni-. Pero a final de cuentas es una buena chica con un gran corazón.

-... Y con un gran temperamento.- Dijo Bobby.

-Eso no te lo niego.- Dijo Leni al reír un poco-. Pero ten en cuenta que ella tuvo que adaptar ese temperamento para poder mantener bajo control la casa Loud, somos muchos y el orden no se mantiene si no se pone mano dura en algunas ocasiones.

El chico latino mira a Leni con algo de duda. Aquella chica rubia era muy diferente a como Lori le había pintado...

-Leni, eso lo se.- Dijo Bobby-. Sé que ella es así por ser la mayor en la casa y la que debe mantener el control en la casa, pero hay límites, ¿O me vas a decir que eso justifica sus acciones en el embrollo de la suerte?

En esa parte el chico tenía razón, durante el caos de la mala suerte, Lori sobrepaso la línea de disciplina a maltrato por creces, La Rubia aun recordaba los insultos fuertes que le daba Lori al peliblanco, los golpes fuertes que le daba.

Lucy, Lana y ella podían dar fe de la brutalidad de esos golpes, cuando curaban a su hermano, los hematomas más visibles no eran de los golpes de Lynn jr, si no de Lori.

-Leni...- Dijo el chico de tez morena mientras miraba su taza de café-. Entenderás que me siento decepcionada de ella, no lo puedo entender ¿Cómo es que alguien que me demostraba tanto cariño puede hacer tales calamidades?

-Bobby...

-Y no solo eso, míralo de este modo.- Dijo el chico latino sin percatarse del llamado de la rubia-. ¿Y si eso hubiera pasado con los hijos que pensaba tener con ella en el futuro? ¿Qué pasa si este llega un día mintiendo que da mala suerte? ¿Ella hará lo mismo o actuaria con madurez?

-Roberto.- Dijo la rubia, captando al fin la atención del moreno-. Comprendo tus miedos, de verdad... Pero conozco a Lori más que nadie, y estoy segura que todo esto la ha hecho cambiar de mentalidad de algún modo u otro.

-Entonces... ¿Qué me sugieres, Leni?- Pregunto Bobby.

-Bueno, podrías analizarla bien a ver si ha cambiado y si de verdad merezca una oportunidad.- Dijo Leni.

-¿Y si no ha cambiado nada?

-Pues... Supongo que será momento que de mires hacia otro lado.- Dijo Leni.

Bobby mira de nuevo hacia su taza de café, la idea de Leni era muy buena, demasiada para venir de la "Tonta" de la familia.

-Bien, tendré en cuenta tu idea, Leni.- Dijo Bobby-. De verdad te agradezco que te tomes el tiempo para hablar conmigo, ayer me ayudaste bastante a aclarar mi mente y hoy me diste una idea.

-No es nada, Bobby.- Respondió Leni con su característica sonrisa-. Si alguna vez necesitas hablar con alguien, puedes buscarme.

-Y ten por seguro que lo hare.- Dijo el chico moreno-. Pero bueno, déjame pagar por el café y luego vamos a caminar un rato, ¿Te parece?

-Claro.- Respondió Leni-. De todos modos no tengo nada que hacer hoy.

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Lincoln estaba aún en la tienda de música, ya había terminado su turno hace dos minutos, solo estaba esperando a que Ronnie y Kazu terminaran de ordenar unas cosas en la registradora y dejarle la nota de quehaceres a los empleados del turno de la tarde, mientras tanto el peliblanco charlaba con su hermana rockera mientras ella veía unas guitarras eléctricas edición limitada.

-Bro, entiendo que las demás tengan que ganarse tu perdón, pero ellas aún tienen dudas en cómo hacerle.- Dijo Luna-. Tienen miedo de hablarte y regarla de nuevo.

-Pues mira, Luna.- Empezó el peliblanco-. Es más que obvio que no voy a ceder con regalitos ni nada de esas cosas clichés, si de verdad quieren mi perdón, demuéstrenme que están arrepentidas, pueden hablarme cuando quieran... Yo no hago daño.

-De acuerdo.- Dijo la chica castaña-. ¿Y qué hay de Lynn jr?

-Ah... Ella.- Dijo Lincoln con un semblante apagado-. Ella también puede redimirse ante mí, pero de todas, es la que más le va a costar... Y por lo visto, si sigue comportándose como lo hizo aquel día en el parque, le va a costar tres veces más.

-¿Tanto rencor le tienes, bro?- Pregunto Luna.

-No es rencor, Luna.- Dijo el peliblanco al sentarse en un amplificador-. Es solo que me siento decepcionado de ella... Además ella fue la que empezó todo ese embrollo de la suerte.

-Pero tú también le diste cuerda al asunto al mentir.- Dijo Luna.

-A ver, Luna... Deja te explico.- Dijo Lincoln al suspirar pesadamente-. En primera instancia yo mentí porque quería tiempo para mí, ¿No se dieron cuenta que prácticamente me las pasaba ayudando a ustedes y no tenía ni un poquito de tiempo para mí?

-Bueno, eso lo comprendo... Pero, ¿Por qué simplemente no decías que no y ya?- Pregunto Luna.

-¿Sera por qué si lo hacía ustedes me obligaban de todas formas o me amenazaban?- Respondió Lincoln.

-Cierto...

-Y en segunda instancia, yo pude haber mentido, eso lo acepto y pido disculpas por eso... Pero ustedes no estaban obligadas a creerme o a llevar las cosas tan lejos ¿Oh si?

-Claro... - Dijo Luna-. Si no te hubiéramos creído, nada hubiera pasado, o quizás todo hubiera sido muy diferente.

-Pero bueno, de nada sirve vivir en rencor.- Dijo Lincoln-. Ellas tienen su oportunidad de redimirse, ya es decisión de ellas si hacen algo con esa oportunidad o no...

-Claro...

-Oye Lincoln.- Dijo Kazu al acercarse-. Disculpan que me entrometa en su conversación, pero ¿Si escuchaste el rumor que hay en el gimnasio?

-¿Qué rumor?

-Al parecer van a hacer un Torneo de Wrestling para principiantes.- Dijo Kazu-. El ganador se lleva diez grandes.

-¡Diez mil dólares¡- Exclamo el peliblanco.

-Así es.- Respondió el chico asiático-. Pero claro, es un rumor, nada confirmado aún.

-Ah, vale.- Respondió Lincoln.

-¿De verdad entrarías a ese torneo?- Pregunto Luna.

-Son diez grandes, servirían de a mucho.- Dijo Lincoln-. Además necesito un evento así para probar si de verdad estoy aprendiendo.

-De todos modos no estarás solo, pues si es cierto yo también entraría.- Dijo el chico asiático.

En eso llega Ronnie, tenía su sudadera purpura amarrada en la cintura.

-Todo listo, así que vámonos que ya quiero cerrar la tienda.- Dijo Ronnie.

-De acuerdo, vamos al apartamento, así tú lo conocerás y además también conocerás a Reyna.- Dijo Lincoln-. Créeme, te caerá muy bien.

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En el hotel, Lynn Sr y Rita se debatían el cómo hacer que Lincoln volviera, ellos no estaban absueltos de culpabilidad, pues su negligencia provoco graves estragos en la familia.

-Bien, Lynn... ¿Qué es lo que vamos a hacer?- Pregunto la mujer de cabellos rubios-. Porque, al parecer, Lincoln aún tiene bastante rencor hacia nosotros.

-Yo no diría que es rencor.- Dijo el patriarca-. Más bien diría que es decepción...

-Creo que tiene muchos motivos para estar decepcionado de nosotros.- Dijo la mujer al bajar la cabeza.

-No te mortifiques, amor mío.- Dijo el hombre de pocos cabellos al abrazar a su esposa-. Aún tenemos oportunidad de ganarnos su perdón... Aunque andaba pensando.

-¿Qué tienes en mente?

-Bueno, se supone que somos la autoridad ante Lincoln, ¿No?- Dijo el patriarca-. Entonces, si le obligamos a volver a Royal Woods, nos será más fácil allí ganarnos su perdón.

-¿Estás seguro de eso, corazón?- Pregunto la Mujer Rubia.

-Por supuesto, Rita.- Dijo el Patriarca-. Debemos ser autoritarios, quizás nos odie temporalmente, pero es lo que debemos hacer como padres.

-Bien... Espero que sepas lo que haces, amor.- Dijo la Matriarca.

-No te preocupes, funcionara.- Dijo Lynn Sr para después darle un beso a su mujer en los labios.

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Al día siguiente, Luna, Lincoln, Ronnie y Kazu estaban en el parque, Kazu y Luna estaban hablando con uno de los vigilantes mientras que Lincoln y su amada latina estaban charlando un poco alejados de la chica rockera y el chico asiático.

-... Así que mama se quedó viendo la tele en el apartamento con Bobby.- Dijo Ronnie-. Se quedó viendo un programa de RT que habla de las nefastas consecuencias de una intervención militar en Venezuela.

-Que obsesión de los americanos de invadir países.- Dijo Lincoln-. Quizás sea su fetiche.

-He, puede ser...- Dijo Ronnie-. A propósito, conejito... ¿Cómo te sientes?

-Bueno... - El peliblanco se lleva una mano hacia atrás de su cabeza-. A veces me cuesta dormir en la noche, pues tengo pesadillas... Pero supongo que me siento bien... Mientras sigas a mi lado, no tendré nada a que temerle.

La chica de piel de canela se sonroja con lo que dijo su amado peliblanco, así que lo rodea entre sus brazos y acerca su linda carita hacia la de su guapo noviecito.

-Aww... Linky.- Dijo Ronnie al besarle la frente-. Eres muy lindo conmigo...

-Por qué lo mereces, corazón.- Dijo el peliblanco al besarla.

La muchachita de piel de bronce se sonroja y deja que su amado siga besándola en las mejillas y labios, era tan lindo, tan adorable...

-Recuerda esto, mi amor.- Dijo el chico pecoso al acariciarle suavemente la mejilla a su amada latina-. Yo te quiero por la confianza que me has cedido, por lo que hemos construido juntos... ¿Acaso crees que Jordán, Cristina o la Hija de esa señora que vendía Taquitos de chicharrón en la esquina de la escuela se atrevería a escapar conmigo a lo desconocido? Solo tu... Mi amada...

... Tu eres mi Fuego, Mi locura, Mi manto de luz en el que me acobijo cuando la oscuridad parece rodearme.

Ronnie sonríe ante las palabras de su amado peliblanco, quizás el solía ser algo torpe, inocente y terco, pero ella l quería por el gran corazón que tenía, el cariño que le ofrecía y el cómo aguantaba todas sus niñerías.

Ella sin dudarlo lo besa apasionadamente, sentía que quería abrazarlo con todas sus fuerzas y jamás soltarlo, ¡Jamas!

-¿Aun lo recuerdas, corazón?- Pregunto el peliblanco mientras veía a su amada de piel canela-.¿Recuerdas la primera vez que nos conocimos?

Ronnie sonríe, ¿Cómo iba a olvidar el cómo conoció a su querido conejito?

-Lo recuerdo perfectamente, mi amor.- Dijo Ronnie-. Ese era mi primer dia en la escuela, estaba aburrida y sin amigos... Y al verte a ti, en mi misma situación de soledad, supuse que no estaría mal si tuviera una pequeña charla contigo ya no parecería una perdedora...

-Claro, yo también recuerdo ese maravilloso día, cariño.- Dijo Lincoln-. En ese entonces ya los que consideraba mis amigos ya estaban intentándose ganar la redención por lo de la mala suerte, pero algo que nunca perdono son a los traidores, las únicas excepciones serian mis hermanas, pues son mi familia, pero fuera de ese círculo, a nadie, sin excepción...

-Que radical eres a veces, Linky.-Dijo la chica de tez morena.

-Pero hay que ser así, cometí el error de ser muy "Blando" y mira lo que paso.- Dijo el peliblanco al mirar al suelo-. Como sea, ese día estaba en mi pupitre viendo fijamente mi cuaderno, hablando con migo mismo.

-Hehe, si.- Dijo Ronnie-. Parecías un loco, es por eso que pensé que nadie se te acercaba-. Dijo la chica de piel de bronce-. Eso hasta que me contaste lo sucedido con... Bueno, ya sabes.

-Si.- Dijo Lincoln-. Estaba allí quejándome de esos hipócritas, sumergido en mi cólera, hasta que levante mi mirada y te vi acercarme... No sé realmente que sucedió, pero al verte, sentí que había visto a la criatura más hermosa que dios haya puesto sobre esta tierra.

-No mentiré, corazón.- Dijo Ronnie-. Cuando te vi de lejos pensé que eras una versión joven y blanca de AMLO, pero cuando me acerque más y te vi... Me di cuenta que eras muy lindo, un chico poco común... Un ángel en vida, o al menos en la mía.- La chica se sonroja y desvía un poco su mirada-. Pase por momentos de tristeza, frustración, enojo y decepción, pero en todos ellos, tu estuviste a mi lado, dándome el apoyo que necesitaba cuando todos parecían darme la espalda... Aun cuando te metiste en varios líos por eso, siempre estuviste allí para mí.

-... Y siempre lo estaré, amor mío.- Dijo el peliblanco al tomarle las mejillas-. No me arrepiento de haberte conocido, de haberme ensuciado las manos por tu bien y seguridad. Eres muy especial para mí, Ronnie... Más de lo que piensas... No hay día en que no agradezca a la vida por haberme permitido conocerte... Yo de verdad te quiero, te querré y te seguiré queriendo mi amor. Aun cuando la suerte infiel me abandone y la muerte me llame, desde el mas allá te seguiré amando con la misma intensidad con la que lo hice en vida.

La chica de piel de bronce simplemente lo abraza con lágrimas de felicidad bañando sus delicadas mejillas, aquel peliblanco era todo lo que ella había deseado, un chico que la trataba con el cariño que aquel hombre que es su padre nunca le dio.

-Gracias Lincoln.- Dijo la belleza latina con la voz entrecortada.

-¿Por qué me agradeces, corazón?- Pregunto el peliblanco al mirar a su amada.

-Por enseñarme a amar.- Dijo la chica morena-. Por haber estado allí siempre para mi... Por darme tu corazón y cariño... En pocas palabras... gracias por amarme.

El chico sonríe y sin decir nada más simplemente la besa con la misma pasión y cariño con el que se dieron su primer beso de su relación...

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Al rato ambos decidieron caminar un poco por el parque mientras que su mejor amigo y su hermana terminaba de hablar con el vigilante del parque, ambos se sientan en una banca que estaba bajo la sombra de un árbol, allí Lincoln decide sacar su teléfono y poner algo de música.

-¿Qué quieres escuchar, corazón?- Pregunto el peliblanco.

-Pon algo de Mago de Oz.- Dijo Ronnie.

-A chirreon, Estas nostálgica, ¿no?- Dijo el peliblanco-. ¿Luego que viene? ¿Me vas a pedir que Ponga a My Chemical Romance? ¿A Nikki Klan? ¿A PXNDX?

Ronnie solo rie ante lo dicho por su amado

-Cuando lleguemos a casa, me pondré a escuchar a Nikki Klan mientras veo videos Loquendo del GTA San Andreas de JetAirliner1986 para luego ver videos de apariciones de duendes reales ¿Te parece que haga eso?- Dijo Ronnie al sonreírle.

-Dios, eso sonó tan... 2008.- Dijo Lincoln.

Ambos rieron, era un momento bonito de pareja, pero detuvieron sus risas cuando vieron que Rita y Lynn Sr. Venían acercándose... Lincoln suspira, el presentia lo que venían a decirle... He, si tan solo supieran que tiene un arma secreta...

... Una que puede colocar en jaque a toda la familia Loud.

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(Continuara...)