Capítulo dieciocho "Un viejo asunto"
Finamente luego de dejar a Cora nos tomamos unas vacaciones aquí en Brasil , nos estábamos quedando en una casa que tenía la familia de Derek en la playa.
—esto es relajante —me acomodé en la reposera disfrutando del sol.
—¡papá!—gritó Lía —Eli me está molestando.
—¿Decías? —Derek me volteó a ver antes de ponerse en pie para ir con los niños —Elijah deja a tu hermana.
—¿Elijah?
—sip, no pensarías que solo era Eli ¿O sí? —le respondí a Cora acomodando mis lentes de sol.
—la verdad no lo pensé.
—este sol daña mis preciosos ojos —se quejó cierto lobo.
—aún no entiendo por qué estás aquí. —lo miré.
—es Brasil, no me lo iba a perder por nada.
—juraría que eras más de nieve y montaña —me encogí de hombros.
—y yo que tu eras una loba pero me equivoqué, eres un lagarto.
—¿Qué dijiste? —me senté muy molesta.
—Dios, no, no necesito ser mediador de otra pelea —gruñó Derek.
—me llamó lagarto —formé un puchero con mis labios.
—no le des importancia, eres una preciosa loba —besó mis labios.
—mami, ¿Te metes conmigo al agua?
—vamos cariño —me puse en pie y la seguí hasta el mar, estuvimos un rato jugando con las olas cuando vi por el rabillo del ojo a un hombre que se me hacía familiar —no puedes ser...¿Kl...? —una ola me golpeó con fuerza.
—¡mamá!
—estoy bien —dije al ponerme en pie.
—amor —Derek corrió hacía mi y me revisó de arriba abajo —¿Te hiciste daño?
—si así fue, seguramente ya me curé —sonreí.
—estabas distraída...
—lo vi, ha vuelto —realmente me asusté.
—¿Estás segura de que es él?
—no pero...—miré sobre su hombro, Lía estaba hablando con un hombre, el mismo que vi hace rato. —¿Derek? —volteó a ver. —iré a ver.
Me acerqué con cuidado, al estar más cerca pude verlo mejor, era rubio de piel muy blanca y tenía ojos azules como el mar a mi espalda y este tatuaje en su hombro.
—Lía cariño, vamos —estiré mi mano para que la tomara.
—¿Nos conocemos?
—no, lo siento —mentí.
—mmm...juraría que eres tú, Alexia.
Finalmente me atreví a mirarlo a los ojos —aléjate, no necesito más problemas.
—Elijah te extraña —admitió —y veo que tú no te has olvidado de él —observó a mi hijo —¿O sí?
—dejé de ser una Mikaelson hace mucho.
—Derek no lo sabe ¿O sí? —sonrió.
—no —suspiré —linda, ve con papi. —La niña se fue sin chistar.
—bueno, tarde o temprano tendrá que saber... —acercó su boca a mi oído —que tú fuiste y serás por siempre mía.
—aléjate Niklaus, tú y yo no somos nada. —di un paso lejos de él.
—tú sabes que no quieres eso —tomó mi mano —¿o sí?
—amo a Derek —fue lo último que dije antes de alejarme.
Regresé con mi familia e hice como si nada hubiese pasado.
—¿Ese era Mikaelson? —preguntó Peter. —solo nos falta Lucifer y estamos completos aunque pensándolo bien, este tipo es lo más cercano que tenemos al diablo.
—Peter no quiero hablar de él.
Nos quedamos una semana en Brasil que fue relajante, de alguna manera.
Luego de unas cuentas horas de vuelo llegamos a California, más específicamente al condado de Beacon por lo que desde aquí seguíamos en auto hasta Beacon Hills.
Cuando íbamos a medio camino un auto se interpuso, de allí salieron los calavera y tomaron a Peter y Derek.
—¡No! —intenté ir contra ellos, pero otro de los cazadores me retuvo —¡sueltame!
—alto ahí, Winchester —rio —tenemos que ajustar cuentas con ellos y a menos que te quieras sumar, te recomiendo que sigas el viaje a Beacon Hills con tus cachorros.
—Derek —miré a mi novio.
—ve, estaré bien —aseguró.
—Araya —observé a la líder —no seas tan dura con él.
—¿Y qué hay de mi? —preguntó Peter.
—no, contigo puede hacer lo que quiera.
—¡oye!
—no seré dura con tu lobito, si él colabora.
—recuerda que me debes —gruñí antes de subir al camaro para irme de ahí.
—¿Papi va a estar bien? —preguntó el pequeño.
—claro que si, pequeño —intenté sonreír fallando terriblemente.
Cuando llegué al loft, me contacté con una cazadora amiga para que fuera ayudar a Derek y Peter, y luego llamé a los chicos.
—entonces...¿Qué creen que quiera Araya? —preguntó Stiles. —¿Scott? —el castaño estaba profundamente concentrado en mi hijo —¡Scott!
—¿ah? Lo siento, es que Eli es una pequeña copia tuya ¿No crees? —miró a Stiles. —¿hicieron un trío? ¿O Cómo?
—te aseguro que Elijah es hijo de Derek.
—en primero, jamás tendría sexo con Derek y en segundo, cuando estos dos procesaron a los lobitos yo era un niño.
—espera, ¿Tendrías sexo conmigo? —lo miré divertida.
—si, ¡No! —sacudió su cabeza —¿Tal vez?...no le digas a Derek.
—relájate, esto queda entre nosotros.
—hablando de él, si lo tienen los calaveras será difícil que nos lo den —comentó el alfa.
—si, conozco a Araya.
—tendremos que esperar...—comentó el chico de lunares.
—¿Estás bien? Te notó algo cansado.
—no he dormido bien, he estado teniendo pesadillas —admitió.
—lo siento.
—desde que hicimos el experimento para encontrar el nemeton, hemos estado sufriendo alucinaciones, inseguridades, descontrol y pesadillas. —explicó Scott.
—es un lobo alfa verdadero sin control —comentó su amigo.
—si hay algo en lo que pueda ayudar...solo avísenme.
—lo tendremos en cuenta.
—¿Y tú? Tampoco te notó bien —Stiles me miró .
—ya sabes, secuestraron a mi novio.
—no, no es eso. —negó.
—un viejo asunto apareció y... bueno, no he estado con el mejor ánimo.
—¿Viejo asunto?
—¿han escuchando hablar del híbrido? —Stiles asintió y Scott negó. —es mitad vampiro, mitad hombrelobo y un tres cuartos Lucifer.—reí —no enserio, es solo vampiro y hombre lobo.
—¿Es real?
—si, su nombre es Niklaus Mikaelson —asintió — y tiene hermanos, todos vampiros.
—¿Tenías juntas con él?
—¿Juntas? Era su esposa —admití. —soy...no nos hemos divorciado, aun.
—¿Cómo...?
—era un pacto de paz que hizo mi padre con...bueno, con él —suspiré —tuve que hacerlo.
—lo siento —Scott apoyó su mano sobre la mía.
—en fin, lo rompimos o eso creí y huí.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro