Multiverso. [one shot]
Volví jajajajajaja. se me ocurrió luego de delirar por un rato y acabar pensando en el spideyverso hace ya un tiempo 👁️👁️JAJA. no esperen mucho, no es 100% igual a como funciona el multiverso de marvel fjrksk tomé más como referencia tokyo revengers y la peli de Phineas y ferb🤙🏻
😩anygays, no esperen mucho de mí dkdks soy de las que cree en los tres Spidermans en NWH. 1% de probabilidad, 99% fe (👀)
—Yoongi-hyung —llamó el más joven de todos, sentado en una silla con unas estilistas arreglando su cabello húmedo por el sudor.
—¿Mh? —dijo simplemente, sin mover su cabeza ni un poco ya que su maquillaje estaba siendo retocado. Jungkook jugueteaba con su celular, parecía estar leyendo algo.
—¿Crees que existan más universos a parte de este? —el mayor pudo reconocer la emoción en su voz, lo que le hizo enternecer un poco. —o muchos de nosotros viviendo simultáneamente en una misma línea temporal. ¡Cómo con los vengadores!
Yoongi comenzó a reír, sin embargo tomó enserio la pregunta y comenzó a analizarlo. Era egoísta como humano pensar que eran el único universo, la única forma de vida y los únicos viviendo en ese momento. Probablemente la vida era como un bucle.
—Es probable que ambas cosas existan —respondió simplemente, dejando con eso satisfecho al menor. Lo que restó del descanso, Jungkook se mantuvo concentrado leyendo lo que sea en su celular. Yoongi no preguntó ni dijo nada más, cuando el menor entraba en su mundo no había quien lo hiciera cambiar de idea.
Yoongi lo observaba de reojo de vez en cuando, solo para verlo ensimismado en lo que sea que estuviera leyendo.
—Hyung —llamó luego de unos minutos más.
—¿Sí, Kook-ah? —respondió, finalmente caminando hacia él al haber terminado con su maquillaje.
—¿Te gustaría ver otras realidades?
Yoongi lo pensó un momento, mientras se sentaba al lado del menor y ojeaba el celular de este. Tenía abierto un foro de teorías sobre los multiversos de Marvel.
—Me gustaría más ver el futuro —respondió, besando su mejilla suavemente. El menor se sonrojó y asintió. —Aunque...
—¿Sí?
—Ahora que lo pienso bien, sería interesante saber si hay otros de nosotros que también estén enamorados —Jungkook lo observó avergonzado, riendo junto a las noonas que habían presenciado toda la situación.
Pronto, ambos dejaron sus ocios de lado y se dirigieron a seguir trabajando. Tenían muchas horas de grabación todavía.
Ambos estaban ahora en la habitación de Yoongi, listos para dormir. Duchados y frescos, viendo su celular y laptop.
—¿Hay algo más que quieras preguntar, Jungkook? —lo observó de reojo, notando la insistente mirada de su novio sobre sí.
—Mhm.
—Pregunta.
Jungkook se reacomodó, colocándose en una posición en la que pudiera ver el perfil de mayor correctamente.
—¿Crees que podamos viajar a otros universos por nuestro simple deseo?
—No lo creo.
—¿Eh? ¿Por qué no? —un tono triste se coló en las palabras del menor. Yoongi suspiró y rascándose un ojo, cerró su laptop.
—Porque si fuese así, probablemente cambiaríamos de universos a cada rato. Probablemente haya alguna explicación científica para eso.
—Oh... Tienes razón. Pero, ¿te puedes imaginar lo que otros nosotros serán? ¿Personajes de anime? ¿O de manhwas? ¡Mujeres tal vez! O niños, o animales.
Yoongi sonrió ante la emoción de su novio y asintió, acariciando su cabello.
—Seríamos buenos personajes de algún manhwa BL, ¿no?
—¡Sí! ¡Me gustaría que fuéramos los de "Como atraer a ese alfa" o "Yakuza está enamorado".
Yoongi asintió, de acuerdo con su novio.
—Con tal de no ir a "Pintor Nocturno", estoy bien. Seungho es una pesadilla.
—¡Cierto! Yo terminaría odiandolo si fuera Nakyum. Pero ¡Nakyum también es demasiado inocente!
—Son un desastre, a decir verdad.
—Síp síp. Tampoco me gustaría que fuéramos Heesoo y Dojun. Aún duele.
—Cierto, cierto.
—Sería lindo ser Haebom y Taesung.
—Son de las parejas más adorables, sí. Estoy de acuerdo —cruzó sus brazos, apoyándose en el respaldo de la cama. —Estar en BJ Alex también sería interesante, ¿no?
—¡No! DG sufrió bastante por culpa de Jiwon —se queja, acostándose completamente en la cama. —Tal vez como Chanwoo y MD.
—Oooh, kinky.
—¡Hyung!
Yoongi comenzó a reír mientras se acomodaba al lado de su novio una vez apartó su laptop. Abrazó su cintura y besó su mejilla.
—Es broma, es broma. Hora de dormir, pequeño soñador.
—¡Buenas noches, Yoongi hyung!
Y no mucho después, ambos se durmieron.
Luego de estar tantos años siendo parte de BTS, Yoongi se había acostumbrado a vivir diariamente siguiendo una agenda. Levantarse a las 5, grabación a las 6, reunión con el jefe a las 10, almuerzo, ensayos lo que resta de la tarde, regresar a casa a eso de las 11.
Pero, ciertamente, eso no estaba en ningún lugar de su agenda.
Dejando de lado el hecho de que Jungkook seguía a su lado, todo a su alrededor había cambiado. Parecía estar en un cuarto típico de adolescente pobre de película yanqui.
Aunque lo más preocupante era el dolor punzante en su brazo. Tenía agujeros levemente morados y su cabeza le daba vueltas. Estaba vestido solo con calzoncillos, así que se puso de pie y dio una pequeña vuelta por aquel pequeño cuarto descuidado.
Pronto entendió lo que sucedía.
—¡¿Soy un maldito drogadicto?! —exclamó, jaloneándose los cabellos. Caminó hacia su novio y notó primero las mordidas y chupetones en su piel. Incluso una marca de mano en su cuellos. —Ay dios...
Probablemente, lo menos sorprendente fue la manga de tatuajes que tenía Jungkook.
—¡Santa mierda! —exclamó, lanzándose a la cama vieja, despertando a su novio en el proceso.
—¿Eh? ¿Yoongi hyung? —murmuró el menor, tallando sus ojos. Yoongi se preguntó si ese era su Jungkook o el Jungkook de ese nuevo mundo. —¡OH! ¡HYUNG, MIRA!
El menor alzó su brazo tatuado, haciendo sonreír a su novio. Era su Jungkookie.
—Oh, pero, ¿qué hacemos aquí?
—Eso mismo me pregunto.
—¡Sí pudimos viajar a otro universo!
—Pero, ¿por qué a este? —Yoongi se quejó, mostrándole su brazo lleno de marcas de aguja. —En comparación a esto, "Pintor Nocturno" me parece mejor idea.
Jungkook rió y besó la mejilla de su novio.
—Anda, hyung. Debemos averiguar cómo salir de aquí.
Yoongi bufó y asintiendo, ambos comenzaron a vestirse con la poca ropa gastada que había en el lugar. Tomaron sus manos y caminaron fuera de aquel minúsculo departamento desordenado. Al parecer, vivían en un viejo edificio que parecía que colapsaría en cualquier momento.
Ambos salieron de ahí para encontrarse con calles poco transitadas, paredes manchadas y grupos de adolescentes en las esquinas, con caras de matones y humo de cigarrillo a sus alrededores.
—¿A qué mierda nos vinimos a meter? —masculló Yoongi, caminando lado a lado con Jungkook hacia el lugar que menos daba miedo. Se movieron por un rato, hasta que se encontraron con lo que parecía ser una calle central.
—OOOOH, ¿crees que haya un Dr. Strange que nos haga volver?
—Todo es posible —respondió, medio irritado. Ojalá todo eso fuera imposible. Probablemente, si hubiesen llegado a un lugar menos lamentable estaría de menos mal humor. Vamos, que incluso El Señor de los Anillos en plena guerra le parecía mejor.
Ojalá pudiesen ir a Hogwarts en ese estúpido viaje entre universos.
De pronto, Jungkook se detuvo, casi congelado viendo hacia el cielo.
—¿Qué sucede, amor?
—¿Es eso normal? —preguntó, señalando a un pequeño portal, del estilo de Dr. Strange.
—No, no en absoluto.
Jungkook rió suavemente y se encogió de hombros.
—Bueno, es mejor si nos vamos. ¿Qué tal si intentamos desear ir a algún lugar?
—Bueno, que sea al universo de Harry Potter, por favor.
—¡Ohhhhh! ¿Te imaginas ser su compañero?
—Sería interesante. Solo quiero salir de aquí —lloriqueó. No tenían ni idea de cómo todo eso funcionaría, pero debían averiguar tan pronto como pudieran como salir de ahí. De verdad no quería seguir con ese insoportable dolor en el brazo.
Caminaron hasta llegar a una plaza central que tenía varios puestos de comida. Ambos compraron un hotdog y comieron en silencio.
Al menos estaban juntos dentro de esa pesadilla.
—También quiero ir a Hogwarts. Quiero vestir un verdadero uniforme Hufflepuff.
—¿Crees que exista un universo así?
Jungkook lo pensó por un momento y luego asintió. —Alguien lo creó, ¿no? Existe. Quizás desde que lo escribieron, quizás desde antes. Quién sabe.
Yoongi sonrió y besó su mejilla.
—Sigues siendo un soñador. Anda, termina de comer y sigamos explorando. Ya caminamos bastante de donde despertamos.
Yoongi parpadeó varias veces, confundido. Miró hacia el frente y vio a un hombre medio extraño, viéndole con el ceño fruncido.
—Así que, ¿Señor Min? —cuestionó. Su tono levemente fastidiado.
—¡Ah! L-lo siento, estaba distraído... —aclaró, bajando la mirada avergonzado. En su mesa vio una varita; dando un trago pesado, la tomó y la observó con cuidado.
—Bien.. La clase ha finalizado por hoy. No se les olvide estudiar los pasos de la poción vista hoy. No quiero accidente durante la evaluación.
¿Poción?
—Ay no... —murmuró Yoongi, siendo capaz de entender lo que estaba pasando. Más o menos.
Tomó todas sus cosas y salió corriendo del lugar. Paredes que se veían conocidas, cuadros que se movían. Sí, lo había visto todo en una serie de películas. ¡¿Estoy en Harry Potter?!
Tomó su cabello de forma desesperada, mientras buscaba por su novio por algún lado. Observando brevemente su ropa a través de un espejo, sonrió.
—Ja, sabía que soy Slytherin —mencionó en un murmullo. Su ánimo subiendo considerablemente.
—Eh, ¿Yoongi? —llamaron y el volvió a ver a sus espaldas. Ahí estaba Park Jimin, vestido de Slytherin, con cabello negro y un poco más alto de lo normal. No era el Jimin que conocía.
—Sí... —respondió únicamente, sin saber que decir para no delatar su comportamiento extraño.
—¿Qué haces por aquí? ¿No ibas a esperar a que Jungkookie saliera de su clase de DCAO?
—¡Ah, sí! Es que, estoy un poco mareado y me confundí. ¡Gracias! —respondió y rascó su nuca.
—Ah... Anda, te acompañaré a buscarlo.
Yoongi agradeció a todos los cielos y con una sonrisa lo siguió. Caminaron en silencio por varios minutos hasta que llegaron a la sala donde se impartía aquella clase. Jimin se despidió y el mayor se quedó ahí, esperando.
Minutos después, Jungkook salió, tan confundido como lo estaba él. Agradeció que su Jungkook hubiera llegado a su lado también.
—Eh, ¿hyung? —llamó en un murmuro. Yoongi asintió. —Ah, gracias al cielo. ¡Mira, te dije que soy Hufflepuff! Otro Hoseok hyung también está en mi casa.
—Ah, yo conocí al Jimin de aquí. Es un Slytherin.
—Jajaja, como se esperaba —sonrió dulcemente y asintió varias veces. —¿Nos quedamos aquí por siempre, hyung?
—Me gustaría, pero no podemos hacer magia. Probablemente si hay alguien en nuestro lugar, canta terrible y no se sabe ni una coreografía.
—Eh, tienes razón —Jungkook dijo en un puchero, al mismo tiempo en que comenzaban a caminar. —Pero aquí es están divertidooooo.
—Mhm —asintió, de acuerdo con él. —Pero no somos los Yoongi y Jungkook hechos para estar aquí.
Jungkook simplemente se quedó en silencio, aún con el puchero en sus labios.
Caminaron un poco más, viendo finalmente la entrada al comedor.
—Hyung —llamó de repente el menor, haciendo que el mayor dirija su atención a él. —¿Por qué no vamos a ver al director? Estamos en un mundo mágico, deben saber algo sobre todo este asunto.
—¡Cierto! Amor, eres un genio —besó su mejilla varias veces, haciéndole soltar una adorable risita. —Pero vayamos luego del almuerzo. Quiero irme habiendo probado la comida de Hogwarts —Jungkook solo asintió de acuerdo, y ambos caminaron hacia dos sillas vacías.
Comieron y disfrutaron tanto como pudieron, admirando cosas banales como el techo del lugar, los fantasmas y el hecho de que la comida aparecía de la nada. Era un paraíso mágico.
Una vez juntos, se tomaron de las manos y se dirigieron en busca de la oficina del director.
—Uhm... Según el libro... —murmuró Jungkook, ambos detenidos frente a la estatua. —Esta es la entrada.
—¿Y ahora?
—Abracadabra, ¿no? —Yoongi lo miró, incredulidad plantada en su rostro. Al notar que su novio iba enserio, comenzó a carcajearse, incluso doblándose de la risa.
—No, amor, no.
Jungkook solo dibujó un puchero, mientras pensaba en que era lo que se debía hacer para entrar.
—Mhm, ¿queremos ver al director? Jeje —habló Jungkook hacia la estatua y llevó toda la voluntad de Yoongi el no darse una palmada en la frente.
—¡Eso no va a func-!
Y la estatua comenzó a girar, dando paso a una serie de gradas. Yoongi observó la situación incrédulo. Ambos comenzaron a subir, llegando a la puerta del director. Llamaron una vez y finalmente entraron, Jungkook feliz con los resultados increíbles que había obtenido.
—¡Já, funcionó!
—En realidad, yo les abrí —respondió una voz desde el fondo de la oficina. Yoongi comenzó a reír una vez más mientras Jungkook se sonrojada de vergüenza. —Esperaba a que vinieran, visitantes.
—Así que, ¿sabe que no somos de aquí?
El hombre apareció frente a ellos, asintiendo.
—Y, ¿sabe cómo podemos regresar a nuestro universo? —preguntó esta vez Jungkook.
—Sepan que nuestra magia es, lo que se llamaría, antigua. Somos gente de hechizos y pociones, pero sé las coordenadas para llegar a un universo donde tienen una máquina que lleva a cualquier lugar.
Ambos asintieron, finalmente acercándose a él. —¿Sabe cómo llegamos aquí? Y, ¿sabe por qué?
—El multiverso es un término complejo. Por lo mismo es que no se habla de él realmente; algo debe haberse alterado en algún universo, que causó la movilización e intercambio de lugares. Hasta donde estoy enterado, cada realidad tiene a alguien que altera el espacio y tiempo.
—Oohhh, Yoongi, ¡como un Dr. Strange! —el mayor asintió, revoloteando el cabello de su novio.
—¿Cómo supo que estamos aquí?
—Los ustedes de este mundo los vieron de lejos y se desmayaron.
Ambos se sorprendieron por un momento.
—¿Eh? ¿No era una especie de intercambio?
—No, ustedes son los únicos que se movilizan. Tienen el puesto de los otros ustedes debido al proceso de acoplamiento. Pero son como copias. De todas formas, el universo es increíble y es difícil de reunir a dos iguales.
La pareja asintió, anotando en el fondo de su cabeza toda aquella información.
—Bien, las coordenadas llevan a Musutafu, en Japón —antes de que pudiesen decir algo más, el director sacó algo parecido a un giratiempo, que tenía agregadas algunas piezas extra, y pronto se vieron rodeados de un banco infinito antes de desmayarse.
Ambos estaban ahora frente a una gran escuela, hecha una increíble fortaleza. Jungkook analizó por unos segundos su alrededor, hasta que sus ojos obtuvieron un brillo inigualable que hizo a Yoongi suspirar y sonreír al mismo tiempo.
—Yoongi... —llamó, volviendo a verlo. —¡Estamos en el universo de Boku no hero academia! —mencionó, chillando emocionado. —¿Crees que Izuku sea estudiante de UA ya? ¡Estamos frente a la escuela!
—Solo espero que no estemos en el arco actual del manga —masculló el mayor, aunque por la pinta de las instalaciones, parecía ser que en realidad si estaban ahí.
Ambos se apresuraron a acercarse, topándose con uno de los maestros en patrulla. Gracias al cielo, era Present Mic.
—¡Ah, Present Mic! —llamó Jeon, corriendo hacia el mientras agitaba su brazo en el aire.
El rubio los volvió a ver, frunciendo el ceño tan pronto como reconoció sus rostros.
—Jeon, ¿qué hace aquí fuera?
—¿Eh? —preguntó confundido Jungkook, olvidando repentinamente la razón por la que están ahí.
Yoongi suspiró y se acercó hacia ambos.
—No somos quienes usted conoce —respondió al instante.
—¿Toga Himiko?
—¿Cree que somos villanos estúpidos?
—¡Yoongi!
—Mire. Vinimos de otro universo, estamos de paso en busca de volver a nuestra realidad.
El profesor los observó con desconfianza por unos segundos, antes de finalmente asentir y pedirles que le acompañaran.
Tan pronto como fue posible, estaban frente a Nezu, comentando la situación y pidiendo su ayuda para finalmente volver a casa.
—¡Asombroso! —exclamó el director. —Claro que los llevaremos a su realidad, síganme por favor. El Jungkook de nuestra realidad también está interesado en el multiverso y ha creado una máquina para viajar a través de ellos.
Jungkook chilló emocionado. Finalmente se vería a sí mismo en otro universo.
—¿Qué hay del yo de aquí?
—Eres de la clase 3-B, uno de los mejores estudiantes y de los mejores futuros héroes.
Min no pudo evitar sonreír. Tal vez ese universo no era tan malo.
—Oh, ¡una pregunta!
—¿Sí?
—¿Por qué está vez no reemplazamos a los nosotros de este universo?
—Es debido al dispositivo que utilizaron para venir de aquel mundo mágico. En lugar de venir como reemplazos, vienen como visita.
Ambos asintieron, anotando esa nueva información en sus cabezas. Caminaron todos juntos hasta la sala del curso de apoyo, donde se encontraron con un Jungkook sucio, trabajando en lo que parecía ser un traje.
—Señor Jeon, tenemos visitas.
Yoongi solo pudo reír ante la escena. El Jungkook de ese mundo pareció alzar su cabeza en cámara lenta, su rostro poco a poco deformándose en una expresión de sorpresa.
—¡Otro yo! —le apuntó entonces a Jungkook.
—Hola, yo de este mundo —apuntó Jungkook de regreso.
—Necesitan volver a su realidad —intervino Nezu. Jungkook de ese universo al instante asintió, quitándose los guantes y acercándose a ellos.
—¡Otro yo, trabajemos juntos para encontrar tu hogar!
Jungkook asintió emocionado y juntos comenzaron a buscar, en un listado parecido al catálogo de Netflix, el universo que pareciera ser el de ellos.
Yoongi sólo los observó en silencio, notando el infinito número de universos existentes. Estaba aliviado de que, al menos, no había sido demasiado tonto para negar la existencia del vasto catálogo de realidades.
Claro que no se esperaba enfrascado en esa aventura poco realista, pero definitivamente había sido divertido.
—¡Oh, es esa!
—¿Eres el cantante de un grupo?
—¡Síp! Esa es nuestra banda, estoy seguro.
El Jungkook de ese universo asintió, presionó algunos botones y una pequeña puerta se abrió.
—Bien, entren aquí y dentro de poco volverán a su hogar.
La pareja se miró, sonriendo luego a Jungkook, al director y a Present Mic.
—¡Muchas gracias por tu ayuda, otro yo! Estamos felices de volver a casa —Jungkook abrazó a su idéntico. —Fue un gusto conocerte.
Agradeciendo una vez más, se despidieron y entraron a aquella cabina, abrazados por el poco espacio. La compuerta de cristal se cerró suavemente y, al mismo tiempo en que Jungkook presionaba un botón y ellos comenzaban a desaparecer a ojos de los demás, un Yoongi agitado, golpeado y con una traje de héroe medio destrozado ingresaba a la sala.
Fue el tiempo suficiente para que ese Yoongi pudiese ver a su igual desaparecer.
Yoongi despertó, finalmente en su habitación. Revisando la hora y fecha, notó que era la mañana del día siguiente y por un momento se preguntó si todo aquello había sido un sueño demasiado realista.
—¡Hyung, fue genial! ¡Quiero ver más nosotros en un futuro! —al menos, hasta que el menor se lanzó contra su cuerpo a abrazarlo.
Había sido una aventura divertida.
Al fin lo terminé aaaaa quería subirlo antes que saliera NWH pero ni modo ajdjska espero lo hayan disfrutado, disfruté de escribirlo. Aunque mi versión del multiverso está medio confusa, me gustó 👍🏻
Y bueno, eso es todo por hoy. Espero traer otras publicaciones por navidad.
Y ya saben, la fe mueve montañas😉
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