𝕰𝖕í𝖑𝖔𝖌𝖔

Un año después.

Muchas cosas habían pasado desde que Yoongi definitivamente dejó la universidad y había comenzado su maestría.

Cosas como que el divorcio de los Park finalmente había llegado a su fin, la ex señora Park había logrado ganar la mitad de los bienes del señor Park ya que estos se habían adquirido durante el matrimonio.  Pero el juez tomó de referencia todo lo que la mujer se había gastado en sus apuestas y su vida de vicio como la parte correspondiente de ella así que al final prácticamente no le quedó absolutamente nada.

Jimin estaba feliz con su padre y la nueva novia de él y hasta tenían planes de boda futura.

Lee Suji era una mujer de 43 años y era muy risueña, se había llevado bien con Jimin desde la primera vez que lo vio e incluso lo acompañaba a las sesiones de fotos de Jimin con Jisso. 

Sí,  así es.

Park Jimin se había convertido oficialmente en modelo exclusivo de la empresa de Min Jisso. Era la cara principal de las campañas de la madre de Yoongi.

De vez en cuando Yoongi aún modelaba, posaba  y hacía de modelo y salían  juntos en alguna portada lo que hacía que su nuevo club de fans llamadas " Las Yoonmin fans" se volvieran locas. Pero la mayoría de tiempo era Jimin quien hacía ese trabajo.

Jisso se encargaba de pagarle muy bien era muy generosa con ello, tanto que Jimin había comenzado  a ahorrar para comprar su futura casa en la Isla de Jeju.

También se había mudado oficialmente su padre le había regalado su apartamento desde hacía  mucho  pero Jimin se negaba a irse y dejarlo sólo pero cuando vio que la relación entre Suji y él iba más en serio tomó la decisión de irse  y dejarles vivir su vida en privado.

Yoongi tampoco paraba ya mucho tiempo en su casa, ya parecía que vivía más en el apartamento de Jimin y eso hacía que ambos se cuestionaran el siguiente paso.

¿Se mudarian juntos alguna vez?

Yoongi estaba ya trabajando, había obtenido un promedio bastante alto y le habían ofrecido un puesto en una agencia gubernamental de investigación y ganaba muy bien y también estaba haciendo su maestría, Jimin estaba por graduarse de la Universidad. 

Entonces ¿que seguía?

Eso tenia a Yoongi bastante ansioso, pero sabía lo que tenia que hacer.

Así que una mañana se levantó decidido y llamó a sus amigos.

Tenia una sorpresa para su lindo  chico de ojitos miel.

Cuando Park Jimin bostezó por tercera vez en la clase de expresión abstracta esa mañana sabía que el resto del día sería así. Aburrido y monótono.

Tomó los habituales apuntes y garabateó en su cuaderno, a su lado Taehyung dormía  y Jin le dibujaba cosas en su rostro.

Sonrió un poco.

Ya estaban por culminar su carrera, y Taehyung al parecer ya tenía varias ofertas para modelo de pasarela y probablemente viajaría mucho y Jin estaba ansioso por comenzar su carrera como actor una vez que acabase su curso intensivo de actuación que compaginaba muy bien con su carrera. 

Jimin estaba feliz por ambos pero aún no sabía que haría él. Ser modelo de revista era muy bueno, incluso le llegaban ofertas de más revistas del país e internacionales pero por el momento no tenía en la mira establecerse sólo como modelo.

Tenia un sueño y ese era viajar. Quería conocer más del mundo antes de establecer una profesión real porque sabía que una vez se comprometiera a trabajar no se detendría.

Así que eso era lo que deseaba. Tenía 24 años y deseaba viajar. Pero temía decirle a Yoongi porque él estaba feliz con su trabajo estaba estableciéndose bien en su campo y su carrera que no quería arruinarlo, temía eso. Que su relación se rompiera debido a sueños separados.

Soltó un suspiro como por sexta vez hasta que una bola de papel se estrelló en su rostro.

Miró furioso a Taehyung quien también le devolvía una mirada un tanto dubitativo.

     —¿Qué pasa Jiminie?

     —¿A ti que te pasa Tae Tae?

Taehyung señaló con un dedo el aula vacía y luego extendió ambas manos en una expresión de obviedad.

     —No supe que acabó la clase. —Se defendió tragandose las ganas de reír por el rostro bello de Taehyung pintado de pecas de colores.

     —Si si vamonos ya o nos quedamos sin mesa para el almuerzo.  —Refunfuñó Jin.

A ellos les gustaba cuando Yoongi, Hoseok y Nam estaban aún ahí porque su mesa era intocable por ser de los  populares así que tenían mesa segura, pero ya no ahora debían buscar mesa como todos los demás aunque la mayoría de veces Jungkook era quien les apartaba porque solía salir antes.

     —Vamos tengo hambre y me comería una vaca. —Musitó Jimin poniéndose de pie.

Ese día la cafetería estaba repleta más que de costumbre así que les costó llegar hasta la mesa donde estaba Jungkook guardando sus lugares.

     —¿Qué pasa que todos están aquí  hoy? ¿No hace buen clima afuera? —Refunfuñó Jimin.

     —¿Hoy estas de malas Jimin? A todo le encuentras problema. —Refutó Taehyung tomando las patatas de Jungkook quién de inmediatamente protestó.

Jimin negó, no era eso.

Lo que había estado pensando en la clase anterior era lo que lo tenía así, estaba con dudas y miedos sobre que diría Yoongi cuando le dijera que quería irse a vagar por el mundo. 

¿Y si Yoongi no quería? ¿Se conformaría Jimin con un trabajo de modelo y una vida tranquila dejando su sueño atrás?

Podría, por el amor que tenia hacia Yoongi podría intentar.  Esperando que eso no fuera un problema a largo plazo.

     —No Tae solo estoy un poco ido nada más es eso.

     —Bueno no te quiero ido ahora ¿OK?

     —¿Por qué? —Le preguntó Jimin arrugando su nariz.

Taehyung se encogió de hombros mientras señalaba hacia un punto fijo.

Jimin dirigió su mirada hasta ahí y pudo ver que un gran arreglo de globos rojos de corazones  caminaban hacia él.

Su corazón se acelero al ver ese lindo gesto. Sabía que era Yoongi.  Seguro había enviado a alguien a dejarle eso a la universidad. 
Se puso de pie empujado por Jungkook.

     —Ve ya tonto.

Jimin caminó a su encuentro.

Cuando los globos  estaban frente a él y los pudo tomar vio a su portador y sus ojos se abrieron al  ver que era el mismisimo Min Yoongi quien las llevaba y que tenía una gran sonrisa en su rostro perfecto.

     —Yoongi es hermoso pero ¿Qué haces aquí?. —Preguntó Jimin con una bonita sonrisa.

     —Hola mi amor ¿Te gusta? Pensé que eso no seria especial así que tengo otra cosa.

Yoongi tenía una mano escondida detrás de su espalda y sacó un bello ramo de flores.

Jimin se llevó una mano a la boca para tapar su sonrojo y sorpresa y las tomó para olerlas.

     —Yoongi esto es...

     —¿Poco? ¿Insuficiente?

Yoongi sacó de su chaqueta unas entradas para una función de cine y se las entregó.

     —Yoongi es...

     —¿No te gusta eso? Espera bebé...

Yoongi buscó en su otro bolsillo y sacó una caja alargada y la abrió, sacó con cuidado una cadena de oro con el símbolo de infinito igual al de su pulsera.

Los ojos de Jimin brillaban por lo bonito de los detalles de Yoongi.

     —Oh Dios Yoongi esto es...

     —¿Tampoco? —Interrumpió Yoongi a Jimin.  —Espera cariño.

El rubio se rebuscó en sus bolsillos traseros  y sacó un enorme cartel enrollado que decía "Te amo Park Jimin"

Jimin sonrió como bobo pasándole los globos y las rosas a Taehyung y guardó la cajita con la cadena y tomó el cartel en sus manos.

     —Oh Yoon, esto es tan...

     —Seguro no es suficiente, A ver...

Yoongi se giró un momento y luego en sus manos tenía un enorme oso de felpa color blanco con un moñito café en el cuello y un corazón en sus manitas.

     —Ay que hermoso Yoon... —Jimin lo tomó para abrazarlo de inmediato. Olía a la fragancia de Yoongi.

     —¿No es suficiente príncipe? ¿Cómo hago entonces? ¿Qué necesito para iluminar tu hermoso rostro con una bella sonrisa de esas que calientan mi corazón?

Jimin no sabía que responder, no comprendía a Yoongi porque él siempre le sonreía, amaba sus detalles y mucho y estos le habían hecho sonreír genuinamente. Le habían hecho el día aburrido uno muy feliz ¿Entonces?

     —Yoongi...

     —Oh espera quizá... tengo otra idea.

Jin quien era el que estaba más cerca se puso de pie para darle su silla a Yoongi y éste la tomó para subirse a ella.

Yoongi se llevó una vez más las manos sus bolsillos pero no sacó nada.

     —Yoongi. —Habló Taehyung entregando una cajita de terciopelo al rubio. —Con esto será más realista.

     —Quizá si... algo más... —Yoongi se aclaró la garganta y después de ello grito a los cuatro vientos. — ¡JIMIN MARRY ME!

Mientras que todo se volvía un silencio sepulcral esperando una respuesta, todo absolutamente todo hasta las moscas habían dejado de  respirar. 

Park Jimin se limpio una lágrima rebelde y finalmente asintió extendiendo una mano hacia Yoongi.

     —Si Yoongi si acepto. —Dijo con la voz quebrada.

Todos en el lugar gritaron de la emoción y comenzaban a aplaudir. Jin estaba grabando con su celular tal y como hacía aquella vez con Jimin.

Yoongi sintió su pecho calentarse cuando Jimin le sonrió con los ojos brillantes.

A eso se refería Yoongi, una sonrisa que viniera desde el alma y le uliminara la existencia. 

     —Te amo Park Jimin. —Dijo mientras sacaba el anillo de la cajita y se lo colocaba con sus dedos temblorosos.

Jimin sonrió y se abrazó a él tan pronto el anillo estaba en su lugar.  Le besó con ternura y lloro de alegría porque Yoongi le había pedido matrimonio justo en el mismo lugar donde todo comenzó y de la misma manera. 

     —Te amo Yoon te amo tanto.

Yoongi lo rodeó con sus brazos. Finalmente aquello que le faltaba para continuar lo había logrado. Iba a convertir a Jimin en su esposo.  Ese era el siguiente paso importante.

Jimin después de eso le confesó a Yoongi sus deseos de viajar esperando que eso no arruinara la felicidad que ambos tenían.

Para su sorpresa Yoongi le dijo que había pensado en lo mismo. Quería viajar al rededor del mundo por mucho tiempo antes de establecerse como matrimonio y profesionalmente.  Total podían comenzar de nuevo porque sus talentos eran innegables a ambos les llovían ofertas de trabajo. 

Así que aparte de planear una boda debían planear un largo viaje.

Viajaron por todo el mundo conociendo lugares hermosos y guardando cada recuerdo como un tesoro. 

Ahora les quedaba una última apuesta...

Apostar por una vida juntos.

Y así aquella relación que surgió a partir de una tonta apuesta estaba en su mejor etapa... no la mejor etapa vendría después, ¿Verdad?  cuando tuvieran hijos eso era seguro.