°•☆Cita pt2
Yoongi tímidamente acercó su mano para tomar la de él mientras caminaban luego de haber estacionado el auto, estaban tan tímidos porque esa era la primera salida de los dos en una cita como tal. Por eso sonrió nervioso al sentir la cálida mano apretar la suya, era algo bonito.
Luego de haber conocido al señor Park y de que le hizo prometer que cuidaría bien de Jimin el hombre los dejó salir de la casa. Le había agradado el padre de Jimin y al parecer al señor también le agradó Yoongi.
—Tú padre es increíble. —Habló finalmente rompiendo el no incómodo silencio en ellos.
—No es famoso como el tuyo pero es un buen tipo, él me apoya siempre en todo a pesar de que su trabajo le demanda estar mucho tiempo ocupado, es todo lo contrario a mi madre ella... ella solo vive para sus apuestas en los casinos y la bebida, se gasta el dinero de mi padre en eso y se le olvida que tuvo un hijo. Eso a veces me duele pero finjo que no.
Era la primera vez que hablaba de eso frente a Min Yoongi y se sintió culpable por algún motivo.
—Discúlpame por ponerme a hablar de estas cosas en nuestra primera cita Yoongi. —Sus mejillas se tiñeron un poco.
El Rubio platinado se detuvo un momento y colocando sus manos sobre sus hombros negó con una pequeña sonrisa en la comisura de sus labios.
—No tienes que pedir disculpas de nada Jiminie, esta primera cita es para nosotros dos, para conocernos un poco más a fondo así que puedes hablar de todo lo que quieras bonito.
—Eres tan lindo Yoon. —Dijo apenado.
Yoongi sonrió y volvió a tomar su mano ahora con mucha más fuerza y confianza que antes quizá porque poco a poco se volvía real lo de su cita, porque por fin había podido decirle al castaño sus sentimientos y ahora tenía mucha más confianza en sí mismo. Sonrió cómo bobo sin importar las personas a su alrededor. En ese momento solo eran ellos dos.
Al llegar al cinema hicieron la cola para comprar los boletos y Jimin Insistió aunque Yoongi no quería, en pagar él las palomitas, los dulces y las bebidas.
—Ten cuidado donde pisas bonito, no quiero que vayas a caerte.
El lugar estaba ya oscuro porque estaba próximo a comenzar la película.
Una sonrisita por parte de Jimin fue lo que recibió.
—El suelo y yo somos íntimos amigos Yoon así que no te preocupes.
Yoongi sonrió tomando una mano de Jimin para guiarlo por la sala de cine oscura.
Se acomodaron en sus asientos y pusieron las cosas en los reposa brazos y en los porta vasos así quedaron más libres para poder tomar su mano. En un momento de la película Yoongi realizó aquel movimiento "eficaz" utilizado en las citas de cine: Alzó sus manos fingiendo estirarse y así muy sutilmente su brazos se cerró por la espada de Jimin rodeándolo completamente.
Jimin miró aquello y sonrió enamorado, Le gustaba eso pues Min no era de esos que solo están para impresionar, ni te compran con regalos caros. Era algo totalmente cliché pero Jimin adoró eso totalmente. Recostó su cabeza en el hombro de Yoongi y así pasaron el resto de la película, tiempo después los labios de Yoongi buscaron los de Jimin y la película pasó a segundo plano pues el verdadero espectáculo estaba en los labios húmedos y las lenguas juguetonas que se debatían en una guerra interna.
—¿Te gustó la película Jiminie? —Preguntó Yoongi cuando ya habían salido e iban por el auto.
Jimin se sonrojó pues Yoongi sabía perfectamente que la pregunta estaba de más, no habían visto más de la segunda mitad de la película pues se la habían pasado más entretenidos besándose y conociendo cada parte de sus bocas.
—Muy bonita Yoon me gustaría repetirla.
Yoongi sonrió abriendo la puerta del auto para que Jimin entrara.
—En serio Yoon me gustaría repetirla para ver lo que seguía, tus besos me distrajeron un poco. —Admitió avergonzado pero feliz.
—Lo siento la próxima vez te besaré desde el inicio así no podrás verla completa.
Las mejillas de Jimin se tiñeron más rojas aún, y Mientras Yoongi manejaba se permitió observar el perfil perfecto de Min Yoongi, era hermoso y varonil sus mejillas algo redonditas y su nariz también redondita lo hacian adorablemente sexy.
Yoongi condujo un poco más hasta llevar a Jimin a un parque cuyo principal atractivo era un mirador en lo alto. Era hermoso el lugar porque se podía ver parte de la cuidad y de noche era más asombro.
—Wow Yoon este lugar es tan bonito. —Murmuró acercándose un poco a la orilla del pasamanos. La luna brillaba en lo alto con total esplendor y abajo la cuidad iluminada le daba un aire de fotografía de postal.
—Lo es... aunque no le hace justicia a tu belleza Park Jimin.
Jimin perdió la cuenta de cuantas veces esa noche iba sonrojandose, cada cumplido que salía de la boca de Min Yoongi hacía que se elevara alto en el cielo y que las millones de mariposas dormidas en su estómago despertaran de su sueño. Incluso le daban ganas de salir corriendo con las Marry me a sacarles la lengua y burlarse puesto ellas eran las primeras en decir que Yoongi preferiría a una de ellas antes de estar con él.
Que equivocadas estaban todas esas tantas ilusas porque Min Yoongi lo prefería a él por sobre todas, eso lo hacía feliz porque Jimin estaba seguro de que había encontrado al hombre perfecto para su vida.
—Yoongi no digas esas cosas o harás que me las crea.
Sus dedos jugaban nerviosos por la manera en la que Yoongi lo miraba.
—Créelo bonito porque solo hablo con la verdad.
Las manos de Min Yoongi lo rodearon por la cintura y lo pegaron a él, era de las pocas cosas que se había animado a hacer pero sentía que era la mejor actividad para hacer en la vida.
—Park Jimin... Yo tengo algo importante que preguntarte.
Su voz suave pero firme puso alerta a Jimin ¿Había lago malo?
—¿Q-que sucede?
Yoongi sintió el pequeño cuerpo de Jimin temblar Un poco y estaba seguro de que eso no había sido por el suave viento que soplaba en lo alto del parque así que lo abrazó un poco más colocando una mano en su mejilla derecha y haciendo suaves caricias con las yemas de sus dedos.
Pasó saliva pues ver a los ojos al chico que le robaba el aliento era demasiado abrumador.
—Jiminie... Se mi novio.
El corazón de Jimin se derritió en ese instante cuando las palabras de Yoongi salieron así como un suave rumor del viento.
Su estómago se había quedado allá abajo en algún lugar mientras subían hasta la cima del parque tomados de la mano.
—Yoongi Yo... ya soy tu prometido. —Bromeó señalando el anillo de Taehyung que Yoongi aún usaba.
El rubio platinado sonrió mostrando sus bellas encías sin dejar de acariciar el rostro del castaño.
—¿Entonces eso es un si?
Jimin asintió y se estiró lo suficiente para alcanzar los labios de Yoongi y besarlos de nuevo, animandose a dejar una tímida mordida. Yoongi soltó un Gruñido ronco en señal de que aquel atrevimiento le había encantado.
Ahora sus dos manos estaban sobre la diminuta cintura de Park Jimin acariciando ahí mientras se comían la boca con avidez y precisión. Aquello debía parar pues con tantos besos, allá abajo otra era la historia.
Yoongi soltó a Jimin de manera tímida temeroso de que haya notado su erección, y le tomó una mano para besarla con amor, luego lo jaló para ponerse a andar a lo largo de aquel mirador hermoso, sonriendo felices bajo la luz de la luna que era cómplice de ese amor que los dos comenzaban a sentir inmensamente.
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Hola Mandarinas fieles que leen mis historias, pasaba por aquí deseándoles una feliz navidad y próspero año, que la luz les guíe y les ilumine siempre.
Las amo 💖
Viva el Yoonmin.
𝔉𝔢𝔩𝔦𝔷 𝔑𝔞𝔳𝔦𝔡𝔞𝔡
𝔜
𝔓𝔬𝔯𝔰𝔭𝔢𝔯𝔬 𝔞ñ𝔬 2023
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