Al ser medio en Chile, el guapo se va a España con su novio y su hijo a Donostia, aquella ciudad española con la que se contó en la historia por lo general. Volver allá fue una alegría para José después de tanto tiempo. Precisamente, llegaron al siendo allí las 7 en España, se fueron a la casa de José y ahí se establecieron. Ah, dulce hogar.

José: Jiji como te he extrañado Donosti querida ^^.

Cristóbal: Sí, yo también la extrañé, me dejó muy marcado esta ciudad.

Sam: Igual yo...

José: A ver si nos encontramos con los demás ¿os acordáis?

Sam: Sí, pero no los extrañé :)

Cristóbal: x2.

José: Jejeje venga pues, a descansar un rato.

José María se había puesto a desempacar todo, ordenándole ayuda tanto al chico como al feo. Estos desempacan y guardan todo; aunque con la ropa de Cristóbal fue distinto, pues se decidió que no desempacaria nada y esa ropa iría directo al Sesto de la ropa sucia. En fin, cuando terminan de ordenar todo, posteriormente, se dispone a la normalidad. Entonces nos vamos a la costumbre del principio de esta historia.

Un rato más tarde, siendo las 8 de la noche, se disponen a salir como siempre, volviendo a La Cepa. Se pusieron a cenar pizza y, posteriormente, se dedicaron a hacer lo suyo.

Cristóbal: Es bueno volver a España...

José: Sí, sobre todo para mí lo es.

Cristóbal: Jeje me alegro de eso amor. Te amo -lo besa en la mejilla-.

José: ☺️. Y yo a ti.

Sam: >:|

José: -abraza al chico- Te quiero mucho a ti también, mi niño (^^). Tú también eres lo que más aprecio aunque pareciese otra cosa.

José María se puso a jugar un juego por un rato y el chico se puso a ver Wattpad un rato, mientras que Cristóbal se puso a dibujar en la sala de casa; y un rato se disponen a dormir.

José: Vale, ya está. Chicos, a dormir.

Sam: Tengo sueño, papi (unu) -se recarga en el lobito lindo-.

José: Venga, pues, a ponerse la pijama :) -lo carga-. Jejeje tenerte en brazos en muy guay.

José María viste al chico, poniéndole la pijama, y luego se acuesta con él en brazos. Para el lobito lindo le parecía muy hermoso, ya que, pese a ser un travieso, lo quería mucho (ojalá fuera así :v). En eso, el lobo feo se pone detrás del Lobito lindo, estando por encima de él.

Cristóbal: Amor, ahora sí podemos tener todas unas vacaciones para nosotros solos.

José: Sí... Más bien, un tiempo muy largo. Vete a dormir al otro cuarto ¿va?

Cristóbal: Hagámosla esta noche.

José: Pero tengo al niño aquí y no debe de ver eso.

Cristóbal: Bueno...

José: -le besa en el hocico- A dormir. Lo bueno es que tu papá me dejó a cargo de ti.

Cristóbal: O. Vale.

En fin, Cristóbal se va al cuarto del hermano cagón de Josema y el guapo estaba en la suya con el chico que estaba muy dormido, había quedado rendido. Al ser de día, el chico fue el primero en levantarse siendo las 8 de la mañana, habiendo dormido todo el día, pero luego le entró el sueño en los ojos así que se volvió a mimir (aunque una vez despierto no vuelve a dormir). Siendo así, el lobito ahora fue el primero en levantarse, quien se puso a calentar lo que les sobró de cena como desayuno. Mientras el guapo estaba en la estufa, viene el feo, quien lo abraza por detrás tocando su pito con sus manos, para después insertarle un beso derecho.

Cristóbal: Buenos días, amor.

José: Jejeje buenos días ☺️.

Cristóbal: ¿Cómo amaneciste?

José: Bien.

Cristóbal: ¿Y el niño?

José: Dormido, al parecer tenía muchísimo sueño. Es una lindura ese niño, pese a que es molestín.

Cristóbal: Empecemos un día para nosotros.

José: Mmm... Me parece bien -mueve la colita feliz-.

Cristóbal: Ya que volvimos a España, entonces nos volveremos a encontrar con nuestros amigos.

José: Esperemos que sí.

Cristóbal: Y creo que ya sé quién puede ser nuestro hijo como pareja.

José: ¿Sam...?

Cristóbal: Sí, exacto.

José: Jejeje ese siempre me dice papá, pero igual me alegra muchísimo.

Cristóbal: Lástima que a mí no me quiera.

José: Sí, soy su Lobito a quien más aprecia, aunque no debería de caerte mal.

Cristóbal: ¿Enserio lo adoptaste?

José: Pues se suponía que lo cuidaría mientras sus padres estaba de vacaciones, pero nunca volvieron, y encima pasó un año. Eso es triste, ya que no estuvo con sus familiares en navidad, menos en su cumpleaños. En fin, creo que lo adoptare de verdad.

Cristóbal: Sí, debería ser duro, pero creo que no le importa teniéndote a ti.

Unos minutos más, el chico se levanta y se dirige a la cocina, mirando lo que hacían ambos ahí.

Sam: Papi, ya tengo hambre.

José: -Hace a un lado a Cristóbal y le quita la mano de su miembro- Ahora deja ahí, el chico está aquí -mira al chico-. Sí, ya voy hijin (😊).

Cristóbal se quita y se sienta en el comedor de la casa al igual que el chico; el lobito lindo había terminado de calentar, para luego servirles a los dos.

José: Provecho jejeje.

Cristóbal: Vale -empieza a comer-.

Sam: -También empieza a comer-

Terminan de comer y entonces el guapo se va a jugar en su celular un rato, mientras que el chico se acuesta en sus muslos.... Después de una hora de juego, al Lobito Lindo le da sueño, bostezando lo más lindo posible, y se pone a abrazar al chico como el lobito cariñoso que se supone que es. Se acuerda enseguida que tenía que bañarse, así que se fue al baño a hacerlo.

José: Bueno, a bañarse ¿vale?

Sam: Bueno, Lobito lindo.

José: Jejeje venga pues -lo carga con amor-.

Tanto el lobito lindo como el chico se fueron a bañarse, y el Cristóbal estaba en su celular a gusto. Estando en la tina, José y el niño se relajaron un buen rato, estando 5 minutos. Después de esos minutos, se salen del baño, se secan y se visten. El lobito lindo se pone la camisa roja de manga larga y un pantalón de mezclilla y el chico lo mismo.

José: Venga, Cristóbal, a bañarse.

Cristóbal: Qué flojera.

José: Fuchi.... Al baño, por favor.

Cristóbal: MMM.... Vale. .

José: Más tarde saldremos a pasear.

Cristóbal: Oh, vale.

Tiempo más tarde, el lobito lindo, junto con su novio y hijin, fueron a pasear por Donostia como siempre, viendo la playa de la concha. Vieron frente al mar; todo estaba perfecto. Estaban el feo y el guapo agarrados de la mano, hasta que, finalmente, se encuentran con sus amigos de siempre.

Alicia: MASCOTAAAAAAA :D -abraza a José María-.

José: Jejeje Alicia, al fin nos vemos.

Dilan: ¿Y para cuándo el patrimonio?

José: ¿Cuál patrimonio?

Alicia: Cristóbal nos ha dicho sobre un patrimonio entre tú y Cristóbal.

José: ¡Ah! Sí. ¿Os dijo?

Alicia: Obvio, microbio. ¿Por?

José: Emm... Nada.

Dilan: A que te dio pena decírnoslo.

José: Sí jeje.

Sam: Españoles...

Alicia: No pasa nada, acabo que eso es normal.

Dilan: ¿Cuándo os vais a casar?

José: En noviembre.

Alicia: Guay. Volvamos a hacer lo de antes. ¿Os acordáis?

José: Sí, ya extrañaba todo eso.

Cristóbal: Juguemos al juego de rol.

Alicia: Vale.

José: No quieres jugar, hijin :)

Sam: No sé jugar a eso.

José: No importa, juega, te enseñamos.

Sam: Okey.

José: Jejeje -le da un besito en la mejilla derecha- (uwu).

Estos se van al parque de siempre, en donde Cristóbal había sacado su juego de rol, comenzando a jugar por media hora hasta que cae el atardecer. Como era atardecer, Josema decidió irse a casa, ya que aún Martha estaba en vigencia.

José: Bueno, un placer estar con vosotros nuevamente.

Alicia: No hay de qué, Lobito lindo -le da un besito en la mejilla izquierda-.

José: Jejeje ☺️.

Cristóbal: Adiós.

Dilan: Bye.

José María y Cristóbal estaban corriendo muy rápido, ya que temían que la Llorona les hiciera algo, corriendo lo que sus patas le permitían.

José: -Con el chico en brazos- Venga, hay que apurarse.

Cristóbal: Se me olvidaba que la Llorona también estaba por aquí.

Ambos canes se encontraban corriendo hacia la casa de José María lo antes posible, y después de correr mucho ya pensaron que Martha no les iba a salir, pero la realidad fue otra. A medio correr, efectivamente se aparece la Llorona frente a frente, quien les suelta un grito de espanto, mira al niño y tenía pensado llevárselo otra vez.

José: No, ni creas lo que estás pensando, escoria. Nadie se va a llevar a mi niño.

Cristóbal: Se lo puede llevar porque es fantasma.

José: No me importa.

La Llorona, con sus poderes, lanza a José María teniendo al chico en brazos, logrando que el chico ya no estuviera en los brazos del Lobito lindo: lo que le da a lugar de que lo tome ella. La Llorona toma al niño, con decisión de llevárselo, pero el lobito lindo toma el valor suficiente para afrontarla, así que, pese al dolor intenso del suelo, se levanta con unas ganas de estirarse por el dolor y entonces se enfrenta al monstruo como un lobo feroz.

José: -Se le encima como un perro- ¡¡NO, TÚ ME LO DEJAS; NI SIQUIERA ES TUYO!!

Martha: -lo voltea a ver con ojos del infierno- ¡¡AHHHHHH!! -suelta al niño-

José: ¡¡IHHHH!! -gemía del aturdimiento- ¡ANDA, LLORA MALDITA ENFERMA, QUE NO ME IMPORTA!

Martha: ¡COMO CHINGAS IMBÉCIL! -le da una patada dura en los testículos-

José María recibió un golpe sobrenatural por ahí abajo, que al sentirlo no tenía ganas de pensar en otras cosas; quedó en suelo tirado con las manos sujetadas en su miembro y puso carita de perrito triste: casi llora 🙄.

Cristóbal: Amor, ¿estás bien?

Sam: 🙁.

José: Eh, no, no os preocupéis. Estoy bien, luego se me pasa jejeje.

Martha: ¡¡AAAAAHHHH!!

Sam: ¡Shade, yo te eligo! >:v

Shade: ¿Qué?

Sam: Peleate con la Llorona.

Shade: Okey.

Martha: ¡AAAHHHH!

José: Venga, vámonos -carga al chico pese al dolor que se le extendió hasta el estómago-.

El guapo y el feo se pusieron a correr nuevamente, mientras que eran perseguidos por aquella mujer, quien solamente los correteo, pero en eso Shade se interpone y se enfrenta a la Llorona... En fin, gracias a Dios, no les pasó nada, pudiendo llegar a casa sanos y salvos. Al estar en casa, cada quien se pone a hacer lo que quisieran, José se puso a jugar en la PC, el chico estuvo acostado con el lobito lindo y el Cristóbal se pone a comer.

Sam: Papi, tengo hambre.

José: Vale, no creo que aguantes hasta las 8...

Cristóbal: ¿Ya no sientes dolor, amor?

José: Aún me duelen, pero ya...

Al ser las 8 de la noche, el feo y el guapo, junto con el chico, volvieron a salir a la mentada Cepa, el cual que iban a cenar a veces. En ese lugar se pusieron a cenar hasta quedar sin hambre. Luego de eso, se de vuelven a casa y, en otro rato más, se disponen a dormir, no sin antes lavarse los dientes.

Cristóbal: Oye amor ¿qué tal si tenemos una noche para nosotros solos? Ya quiero estar contigo a solas disfrutando de nuestro amor.

José: Vale, solo espera a que nuestro niño se duerma.

Sam: -abraza al Lobito Lindo- Tengo sueño, papi (-w-)

José: Vale, entonces a la cama -le da un besito en la frente al chico-.

Sam: Zzz...

José: Jeje se durmió rápido y eso que no duerme y duerme tan lento. Ahora sí tendremos una noche para nosotros, amor.

Cristóbal: Vale...

José: Déjame llevarlo a la cama -carga al niño-.

El lobito lindo lleva al chico hacia su cama, donde lo pone con cuidado para no despertarlo, lo cubre con la cobija, le da un besito y le acaricia un poco la cabeza. Después de llevarlo a la cama, se va con Cristóbal, pensando en ir a la cama de sus padres: ahí es donde harían el Yaoi tranquilamente.

Al estar en la cama de mierda, Cristóbal se dispone a manosearle el pantalón al Lobito Lindo, a tal punto de comenzar a desnudarlo.

José: Mmm... Mejor cambiemos de posición 🙂.

Dicho esto, José María se pone arriba del feo, decidiendo tomar, esta vez, el rol de activo. Con este plan, introduce con cuidado su pene dentro de la "cola" de Cristóbal, dándole suave en primer lugar, en el segundo lugar le da de forma leve y, después de 2 minutos, en el tercero le da recio. Esto hizo que Cristóbal sintiera mucho placer. Al sentir todo ese placer, el feo la gozaba de maravilla, lo que hizo que su pija, sin querer, entrara en erección. Se besaron, embistieron y todo, para después quedar satisfechos los dos. Después de hacer el Yaoi, se van a tomarse un baño. José fue el primero y el último fue el feo.

Una vez saliendo, al Lobito Lindo le entra un sueño de esos que quisieras ir rápido a la cama al no poder más, teniendo su pijama puesta.

José: Ahora sí, vámonos a dormir. Yo me iré a la cama, ve a la cama de mi hermano cagón. A ver si mañana tenemos un tiempo para nosotros. Buenas noches, amor -le da un besito en la frente al feo-.

Cristóbal: Okey.

Cuando terminan de desayunar, se alistan para salir a pasear entre los tres, estando en un día de verano en Donosti, ahí es cuando pasan por el refrescante mar. Se compran un helado y se van al parque, en donde tanto el feo como el guapo se sientan en una banca a observar al chico jugar con el duende a las atrapadas, estandose abrazos entre los dos con la "cogida" de manos.

Cristóbal: Espero casarme muy pronto contigo. Sé que lo dije muchas veces, pero es algo que no podré evitar decir.

José: ¿Y cuál es?

Cristóbal: El que nunca pensé que un amigo, que había conocido en la escuela y siendo un empleado de ahí, un cuidador mío… iría a ser una pareja mía. Te juro que no lo puedo creer que hubiera llegado más allá con él.

José: Jejeje lo sé, amor, yo tampoco me lo esperaba.

Cristóbal: Quiero que sepas… que te amo AMOR.

José: Jejeje ya lo sé y yo a ti -le da un besito en la mejilla izquierda-.

Hasta aquí el capítulo, furros lindos. Nos vemos.