Cap 2: Reconocimiento
Al día siguiente, sábado, José María iba caminando por las calles de la ciudad o pueblo en un día soleado, cuando hacía un calor de la madre y él todavía con suéter de color negro y un pantalón de mezclilla. Caminaba tranquilo mientras veía de una lata de Coca-Cola. Este wolf llega al parque de ayer, en donde sienta para después estar en su celular, estando debajo la sombra de un árbol; en donde chateaba por Discord con un chico de nombre Samuel.
Y llega nuestro antisocial protagonista, quien, al igual que José, tenía un suéter de color rojo y unos jeans azules. Este tenía la mirada seria y mira a lo lejos a José, al frente, sentando en la banca y, como sabía que era alguien de confianza, se le acerca y le habla.
Cristóbal: H-hola...
José: Oh, hola, Cris, qué bueno volver verte. ¿Necesitas algo?
Cristóbal: N-no, solo vine a...saludarte - sonríe nervioso.
José: Venga, colega, siéntate conmigo :)
Cristóbal: Mmm... Bueno.
José le hace campo para que Cristóbal se siente con él y entonces Cristóbal se sienta al lado del otro. Después comienzan a platicar; platicaron durante un buen rato, bien a gusto estaban en aquel hermoso día en España. Reían (más el José María), cotorreaban y hablan sobre lo que Cristóbal expresa, cosas que para algunos, de los que se creen normales, les parecería "raro".
Entonces Cristóbal decide invitarlo a su casa.
Cristóbal: Oye y...
José: Dime...
Cristóbal: ¿Te gustaría ir a mi casa?
José: Mmmm...
Cristóbal: ... (A lo mejor no acepta....)
José: Claro.
Cristóbal: ¿Enserio? Pensé que dirías que no.
José: Claro ¿Por qué no? No te preocupes, no creo que pase nada ir a tu casa, a pesar de que apenas te voy conociendo...
Cristóbal: -Sonreir- Bien...
Ambos tíos van a la casa de Cristóbal, que, como se mencionó anteriormente, era un edificio militar y su departamento era el 1404. Uff, un poco alto. Cristóbal, como cortesía, invitar a pasar primero a José María. José pasa mirando que era un poco lindo, en donde la luz del día alumbra por dentro el departamento, y toma asiento.
José: Vaya.... Lindo lugar.
Cristóbal: ¿Gustas tomar algo?
José: Mmm.... Una Pepsi estaría bien.
Cristóbal: Está bien...
Cristóbal va a la cocina y le sirve un vaso de copa de cristal a José María, guarda la Pepsi, va con su amigo y le da el vaso a este.
José: ¿Y vives aquí? Súper...
Cristóbal: Es un condominio militar por mi padre quien tiene su trabajo aquí en España desde antes de que yo me mudara aquí. Aunque mis padres siempre están fuera así que no les importa. De hecho me han dicho que puedo invitar a un amigo si quiero y cuando quiera. Ya sabes, lo típico que le dicen los padres a sus hijos antisociales.
José: Ya... ¿Qué más me cuentas?
Cristóbal: Nada, aquí con mi nuevo amigo. -lo abraza-
José: Aw, qué bien, amigo :) -corresponder-. Oye y... ¿Cómo es tu papá? -dice este para sacarle plática-
Cristóbal: Igual a mí, pero musculoso y serio.
José: Vaya, qué suerte tienes - dice este al escuchar la palabra "musculoso".
Cristóbal: De hecho no, es demasiado serio.
José: Ya veo... Me imagino que debe de ser como esas fursonas cerradas.
Cristóbal: Sí.
José: Vaya... Lo lamento, amigo.
Cristóbal: Gracias. ¿Y tú? ¿Cómo son tus padres?
José: Pues normales, aunque también tienen su defecto.
Cristóbal: Pues los míos son solo trabajadores, solo trabajadores. Cuando mi madre no trabajaba, era cariñosa... Pero ahora ya trabaja.
José: Oh... ¿Lo mismo pasó con tu padre, no?
Cristóbal: No, él siempre ha sido trabajador y muy serio.
José: Oh... Qué mal padre te tocó. Yo no entiendo por qué existen padres como ellos.
Cristóbal: Se preocupan por mí, pero no saben cómo demostrarlo.
José: Vaya, se notan que son más o menos inútiles en el caso de crianza.
Cristóbal: Concuerdo :v
José: Oye ¿Qué tal si vemos una película?
Cristóbal: Claro ¿Cuál peli?
José: Mmm... La de Zootropolis ¿Te parece?
En eso ambas perras ponen la película de Zootropolis (Zootopia en América), una película furra de Disney. Y la película hasta la santa tarde.
Cristóbal: Estuvo chida la película. Aunque no me gustó tanto el castellano en la película, fue una mierda.
José: 😮 Cállate, eso es un insulto para mí.
Cristóbal: Jsjsjs
Ya en lunes, estaba el Cristóbal en el baño de la escuela a gusto. Tenía su gorra puesta como siempre, estaba en el baño cagando a gusto y cuando sale además de haberse lavado las manos...
Cuando sale del baño, este se va hasta el comedor de la escuela, en donde lo esperaba Balam, aquel gato del mal, quien al verlo se le acerca y se sienta con él después de que Cristóbal se sentara en la mesa de la esquina de la zona, junto con su colegas, un zorro con aspecto de uke y un lobo de color negro que era buenísimo.
Balam: Vaya ¿pero qué tenemos aquí? Hola ¿qué tal, ratito? ¿Por qué tan solito? Mira, no nos tengas miedo, no mordemos si que nos haces caso.
Cristóbal: ¿Q-qué quieren? - pregunta este un poco nervioso, incómodo y asustado.
Lobo: Pues... Hemos estado pensando que tú seas nuestro esclavo -dice el lobo negro que se había sentado a su lado izquierdo, quien, a su vez, le toca ahí bajo con su mano derecha-.
Al sentir eso, Cristóbal quedó inmóvil, no sabía si moverse o quedarse y, por ende, se dejaba agarrar por ahí, dejando pensar que era un "facilote" para ellos. Entonces estaba algo incómodo más porque había fursonas presentes, quienes no se dieron cuenta de lo que lobo negro le hacía.
Cristóbal: ¿Q-qué quieren... que haga?
Pero no todo estaba perdido, ya que en ese momento había llegado un husky de color amarillo, quien había notado que le tocaban por ahí y no dudó en defenderlo.
???: ¡Eh, vosotros! ¡Dejadlo en paz! ¿Y qué se supone que hacéis? Debería daros vergüenza hacer esa cosa tan indebida.
Lobo: Uy, ya llegó el niño que se cree mayor jajaja
Zorro: Venga, mejor vámonos, de todos modos ya tenemos de sirviente a ese idiota -dijo refiriéndose a Cristóbal-
Balam: Vale...
Aquellos desgraciados se van, dejando solos a ambos lobos. Entonces el otro husky, de color amarillo, que vestía una camisa blanca y un pantalón de mezclilla, se le acerca a Cristóbal.
???: Hola ¿qué tal? Mi nombre es Dilan, mucho gusto. (^^)
Cristóbal: El gusto es mío.
Dilan: ¿Tú has de ser Cristóbal, el chico del que dicen que es alguien aislante, no?
Cristóbal: Sí, soy yo. ¿Qué te han dicho?
Dilan: Pues, si piensas que me dijo alguien, yo solo he escuchado entre las habladurías que se hace la gente, pero nunca me han llegado a mí a hablarme de tí.
Cristóbal: Okey.
Dilan: Y estoy dispuesto a ser tu amigo para que no estés solo.
Cristóbal: No estoy tan solo, ya he hecho un amigo, se llama José María.
Dilan: Ya...
Cristóbal: Pero okey, sé mi amigo. Entonces creo que serías el segundo.
Dilan: Jeje
Pasa el tiempo y dan la hora de volver a entrar, ambos van al salón, ya que a José María le tocaba estar de ayudante o accesoria en el mismo salón que Cristóbal.
Maestra: A ver, atención, estúpidas -dice una perra Gran Danés de buen cuerpo al estilo CiproShow-. Después de 2 semanas más se va a ver un campamento y váis a tener que que ahorrar 3000,0000 euros. Sí, ya sé perras, es caro pero si todos cooperamos vamos a llegar esa cantidad. Me váis a tener que pagar 5000 euros. Y es obligatorio, no seáis alcahuetas en un nido como cama. Jajaja.
Cristóbal: Wow... ¿Habrá campamento? Súper.
Maestra: See, a va a ser fuera del país que está bien desunido, precisamente en México. Así que allá ya no será la paella y el flamenco, sino habrá otra cosa distinta.
José: Ahí va, en México, guay.
Maestra: Por cierto, ahí vamos a durar cuarto días. Además ahí vamos a utilizar una carreta de tacos y no paella, a parte de que vamos a bailar Reguetón por la noche y no flamenco. Por lo tanto, le llevaréis estos recados a vuestros padres a acerca de esta mamada que ocurrirá en un Splash Club -les da a cada uno un recado-.
Cristóbal: Bueno, iré a lo mejor me va bien.
Pasaba el tiempo y se seguía esperando aquel día en la irían a acampar al país más rico de Hispanoamérica, sin duda ese país es una belleza, no estaría mal ir allá. Llega la hora de salida, y Cristóbal seguía pensando en aquel campamento llevando consigo un recadito acerca del campamento. Entonces Cristóbal se comenzó a echarse la cantidad que debería pagar en algunos días, sin la supervisión de sus padres.
Tres días antes del campamento, se les entregó camisas de hilo que eran parte del campamento, como rojas, azules, verdes y amarillas, pues iban a formar 4 equipos. A Cristóbal le tocó la roja, al igual que José María.
En la hora del primer receso, ambos lobos estaban platicando sobre el campamento.
José: Me tocó contigo, qué bien.
Cristóbal: Sí, qué coincidencia. Ya quiero estar en ese campamento.
José: Pues ya falta bien poquito... Hagamos un reto, uno se tiene que quedar despierto toda la noche y el que se rinda tiene pierde. El gane obtendrá un premio; más bien, uno podrá hacerle lo que el ganador le pueda hacer al perdedor.
Cristóbal: Suena bien jejeje
En eso Cristóbal, sin resistir más, tiene en su cabeza pensamientos lujuriosos hacia José, raro pero cierto. Y con tanto pensar se empieza a calentar un poquito, sin darse cuenta que su parte en la que Balam le había visto se le comenzara a...
José por un momento lo nota la muy perra, cosa que le dio un poco de gracia y un poquito de pena ajena.
José: Como que alguien quiere unirse a la plática.
Cristóbal: ¿Quién?
José ahí sí no le dice complemente, por sí solo Cristóbal se da cuenta que su zonita se había despertado, entonces se cubre avergonzado y sonroja.
José: Jajaja ay, Lobito. ¿Y a qué vino ese incidente?
Cristóbal: Es complicado.
José: ¿Bien?
En ese mismo instante, viene Dilan y los encuentra a ambos. Este estaba más alegre.
Dilan: Eh, hola chicos, ¿cómo estáis?
José: Bien, aquí hablando con mi amigo sobre el campamento que vamos a tener.
Dilan: Eso suena bien, me gustaría ir pero no puedo yo porque no pertenezco al mismo salón que vosotros.
Cristóbal: Vaya... Yo sé si ir. Bueno, la verdad sí quisiera pero a la vez no, por temas de la privacidad ya que no podría andar bañandome en los baños como si fuera mi casa, estar desnudo y toda la cosa, menos si no es Chile, un país de donde soy y nací.
Dilan: Anda, un chileno, guay.
José: ¿Eres chileno? Qué bien, tío.
Dilan: Pero vamos, no necesariamente tienes que estar en tu país para que te bañes...
José: No pasa nada, colega. Para eso estamos los maestros para cuidarte.
Cristóbal: Bueno, supongo que está bien. Y bueno, me aburro ¿qué quieren hacer?
José: ¿Qué tal si jugamos a ese juego de rol?
Dilan: ¿Juego de rol?
Cristóbal: Esta vez no lo traje.
Skiptime...
En fin, horas y horas después, el pendejo de nuestro protagonista salía de la escuela, siendo la bendita hora de salida. Caminaba de nuevo a la par de José María por la calle.
Cristóbal: Tengo hambre.
José: Ya... ¿Te parece si vamos a un puesto de comida?
Cristóbal: Claro.
José: Vale, yo conozco el lugar perfecto para ir; yo te llevo. Aunque tendrás que esperarte hasta las 8 de la noche...
Ambos vatos se ponen a jugar en el parque por un buen rato hasta caer la noche. Al caer la noche, por fin van a tragar a un restaurante antes de que fueran las 8. José María lleva a nuestro perro amigo a un lugar llamado "La Cepa", ahí venden comida para tragar.
Al llegar al lugar, estos se sientan al fondo y comienzan a pedir....
José: ¿Qué gustas comer?
Cristóbal: Sepa la bola. Mmmm.... -se pone a mirar el menú- Eligo la tortilla española.
José: Vale, yo quiero Croquetas :3
Cristóbal: Vale.
Piden lo que se van a tragar, esperan el tiempo que se supone que se dura en servir todo y, pasado ese tiempo, comienzan a tragar.
José: Y vamos a ver quien gana lo del reto en el campamento.
Cristóbal: A lo mejor yo gano :)
José: Eso lo veremos... Bueno, si yo gano... Mmmm... Serás mi esclavo dos semanas.
Cristóbal: Pues yo...
Cristóbal pensaba en algo por si él ganaba, pensaba y pensaba, hasta le llegan ideas sexuales. Le llegó la idea, principalmente, de hacerle el "Yaoi". Pero luego se quita esas ideas de la cabeza por un momento, aunque luego la estuvo pensando sobre si valdría la pena.
Cristóbal: Es complicado; bueno, no lo sé, no se me ocurre nada.
José: Vale...ya se te ocurrirá algo.
Estos aún seguían comiendo. Cristóbal comía con cubiertos, mientras que el mentado José María comía como comen perros de la vida real sin importar si la gente le estaba viendo. Y sí había fursonas mirando a José por como comía; estaba haciendo el ridículo, aunque sinceramente se veía hermoso estando así.
Pasa el tiempo, y estos abandonan La Cepa y ambos van hasta el departamento de Cristóbal. Mientras caminaban hasta llegar ahí, estos platicaban un rato. Cristóbal estaba del lado izquierdo y José María del lado derecho...
José: ¿Sabes algo? Me caes bien, eres un chico genial.
Cristóbal: ¿Enserio? Vaya qué bien amigo - decía este mientras tenía la gorra del suéter puesto.
José: Claro, eres el mejor amigo que haya podido ver en toda mi puta y miserable vida. (^^) -abraza a Cristóbal-
Cristóbal corresponde estando un poco pensativo. En fin....llegan hasta el departamento de Cristóbal...
José: Bueno, fue un placer estar contigo. Agur.
Hasta aquí el capítulo perras. Talvez me haya salido mal, pero hice lo que puede (;u;). Bye.
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