Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

capitulo 11

El equipo 3  se acercaban cada vez mas a su objetivo, soló les faltaba recorrer un kilometro. Pero Hikari no estaba pendiente de esto, su mente divagaba en los recuerdos de hacia unas horas.  Rememoraba aquel ardor penetrante en su ojo perfectamente. Había sido un dolor tan intenso que, cada vez que se intensificaba, le quitaba el aliento. Aunque  lo que mas recordaba, era el sentimiento de alivio al dejar de sentir aquel agonizante dolor. También, eso trajo consigo una preocupación enorme para Hikari. La repentina aparición de una punzada en alguna parte de su cuerpo no era normal. Algo debió de haber ocurrido en el momento en que se tiro de la rama, ¿pero exactamente qué?

Media hora  había pasado desde el combate y ese ardor se había echo presente en varias ocasiones. Hikari no dijo ni una palabra al respecto, se lo trago todo mientras divagaba por su mente en un intento de distracción. Aquel  dolor no traía nada bueno, mucho menos cuando no sabia exactamente a que se debía.
Era sumamente extraña toda aquella situación y no hacía mas que aumentar la preocupación de Hikari. Necesitaba un tiempo para ella misma, para poder meditar y ver  que todo se encontraba bien, pero estaba en los exámenes chunnin, no tendría tiempo  hasta que se acabaran. De todas formas había pensado en una excusa para ausentarse algunos minutos. Se separaría de ellos  para poder  llenar las botellas con agua, eso le daría un par de minutos  para meditar y ver que todo se encontraba bien en su cuerpo.

—Hikari…Hikari…¡HIKARI! —le llamó su compañero unas ramas mas adelante que ella. Hikari volvio en si y observó a su amigo a la espera de que siguiera hablando.—Te estuve llamando hace un buen  rato…¿Escuchaste lo que dijo Hayami-chan recién?.

—Ah, no, no estaba escuchando. Lo siento — se disculpó Hikari.

— Ryuk y los demás están a unos 200 metros mas adelante. No se cual es su estado, pero si se les salió el relleno no podre llevarlos hasta el punto de reunión, los tendré que arreglar ahí mismo. Quizás tardáremos un poco mas de tiempo en llegar, eso es todo — repitió Hayami un poco dudosa si debía decírselo. En realidad esa información era mas para Naoki que para Hikari, él era el que haría mas escandalo si no estaba notificado antes de tiempo.

— De acuerdo. No tengo problema si eso era lo que querías saber —respondió en un tono robótico, como si esa respuesta ya hiciera sido insertada en su cerebro para que se repitiera una y otra vez sin césar.
Hikari volvio a ignorar a sus compañeros  para sumergirse de vuelta en sus pensamientos, debía encontrar una solución a lo que sea que le estuviese pasando.


—Esto no se ve muy bien — comentó Naoki al momento de llegar a donde se encontraban los muñecos.

Alrededor de la zona se podían ver pedazos de relleno y una que otra extremidad cortada. Los peluches se encontraban distribuidos por todas partes de la zona y, por suerte, aun se movían. Naoki y Hikari observaron a su compañera, quien no modulo siquiera una palabra, solo salido corriendo a socorrer a sus amigos. Ellos la siguieron y le ayudaron a recoger las extremidades salientes de sus muñecos con sumo cuidado.

—¿Quieres que te ayude en otra cosa, Hayami? — preguntó el de cabellos rojizos dándole las extremidades que él había recogido. Hayami no tuvo que hablar para hacer entender a Naoki que ayudarla no era una buena idea, su mirada lo decía todo.
Naoki se sentó bajo la sombra de un árbol y miro para arriba, la azabache se había subido a una rama y no había mediado palabra con él hacia un buen rato. Naoki estaba preocupado, podía ver y sentir que algo no andaba bien con su amiga, pero sabia que ella no le diría nada hasta pasado un tiempo.

“ Sea lo que sea, en algún momento me lo dirá”

Pensó Naoki apartando la mirada de la Hatake y devolviéndola a Hayami, quien se encontraba sentada cociendo las partes desmembradas de sus peluches. Recorrió con su mirada toda la zona, viendo aun algunos  pedazos de relleno.

—¿Hayami?¿no quieres que te recoja el relleno que falta? —le consultó Naoki preparado para levantarse en el momento en que afirmara la pregusta.

—No gracias, no lo necesito—respondió Hayami con toda su atención en reparar el conejo que tenia en el regazo.

—¿Eh? Pero eso es un desperdicio, puedes volvérselos a poner — dijo Naoki con obviedad levantándose para recoger los pedazos de relleno.

— Volvérselas a poner les hace mal.— le explicó simplemente Hayami al no querer detallar mucho en esa situación.

—¿Por qué? Yo no veo lo que les haría mal por volvérselos a poner — siguió hablando mientras recogía un poco de relleno.

— Respóndeme algo, Tú te volverías a poner la sangre que ya perdiste?.

—¡obvio que no, eso sería muy estúpido! —respondió un poco espantando al imaginarse a él mismo poniéndose en el cuerpo la sangre que habría perdido por una herida.
—Pues esto es lo mismo, es estúpido volver a poner el relleno que ya esta contaminado — hablo Hayami terminando de coser la oreja del  conejo.

El conejo camino unos pasos antes de caer por falta de Vellón en su interior. Hayami la apoyo en ella para lograrla sentar al mismo tiempo que dejaba una bolsa abierta con Vellón en su interior. El roedor comenzó a comer lo que tenia el interior de la bolsa empezando a ganar un poco de relleno, Hayami sonrió y prosiguió a remendar al oso.

—¿Tardaras mucho en terminar de arreglarlos? —consultó de repente Hikari.

— mas o menos, suelen tardar en obtener el relleno necesario para poder moverse bien, ¿porque lo preguntas?¿tienes prisa en llegar al punto de reunión? — respondió Hayami devolviéndole un ataque de preguntas al final.

—para nada. Solo quería saber el tiempo que tardarías para ver si ir a buscar agua o no, las botellas ya se acabaron y hay que llenarlas de nuevo — comentó Hikari llevando la conversación a su conveniencia personal, ella debía ausentarse del equipo por una razón lógica y no así como así.

— aun nos falta recorrer como 5 Km, seria bueno que vayas a buscar — comentó Hayami sacando de su bolsa shinobi su botella y lanzándosela a Hikari, quien la atrapo con suma facilidad.

—  Yo te acompaño — hablo Naoki levantándose del suelo con su botella en mano.

—No. Naoki, necesito tu ayuda en algo — se opuso la de cabellos violetas con un tono de voz mas fuerte de lo usual pero sin llegar a gritar.

— pero recién me dijiste…

— eso que te dije fue antes, ahora necesito tu ayuda — dijo firme la Mikoshi.

Naoki refunfuño mientras le daba a la azabache su botella, ella no dijo nada y partió en busca del agua. El de cabellos rojizos ,un poco disgustado, vio como se iba su compañera, mientras que la otra volvía a centrarse en sus muñecos. Se sentó junto a Hayami y espero a que le dijera que hacer, pero ella no parecía interesada en darle ordenes o siquiera prestarle atención.

—¿para que me necesitabas? —consultó Naoki viendo que su amiga no le hablaría hasta que él lo hiciera.

— Para nada realmente —le respondió.

—¡¿entonces porque…

— Hikari esta rara desde ayer en la tarde. Se que en su momento nos lo dirá, pero ahora creo que ella quiere estar sola — explicó la Mikoshi.

— Lo se, pero no creo que sea bueno dejarla sola, ¡tiene que hablar con alguien!

—  eso ya lo se, pero así es Hikari. Ella nos lo dirá en su momento, solo déjala estar y espera hasta que eso suceda.
— de acuerdo, pero insisto en que no creo que sea buena idea dejarla sola.— dijo preocupadó Naoki.


La azabache se arrodillo en la orilla del rio y miro en su interior, podía ver si reflejo perfectamente. Ambos ojos se encontraban en perfecto estado y no parecía haber nada raro en ninguno de ellos, menos en el que había sentido aquel raro ardor. De todas formas siguió mirando su reflejo por simple seguridad, pero ahora prestaba atención a todas las partes de su rostro. Su piel morena estaba en la misma tonalidad que siempre, sus pómulos aun tenían ese pequeño rojizo que lo caracterizaba, nada parecía fuera de lo inusual y eso le relajaba.

— Quizás me esté preocupando demasiado, de seguro que solo es un problema mas de mi visión… tampoco seria nada nuevo la verdad — hablo sola Hikari.

“Aun así…"

Dejo de pensar de repente por el imprevisto, su ojo si que poseía algo fuera de lo inusual. No se veía muy claramente pero, en el borde del iris, l sepia pasaba a ser un azul casi tan obscuro como el color base. No se notaba casi nada, pero ese cambio de color tan de repente en el iris no era usual. Las personas no cambiaban el color de sus ojos así como así, a menos que sea por un doujutsu. De todas formas Hikari no se sentía segura al ver eso, su preocupación no había sido para nada, de verdad tenia algo realmente extraño en su ojo.

“Esto no es bueno”

Pensó sentándose en el suelo con una sensación de ahogamiento en su cuerpo, ella no sabia como afrontar aquella situación.  Podría ir al hospital, pero se encontraba en mutad de los exámenes y no sabia si su ojo empeoraría hasta que estos terminaran. Sin embargó ella no pensaba abandonar los exámenes, debía convertirse en chunnin y no le importaba dejar de lado toda aquella situación.

Tomo un poco de agua del rio para sacarse esa odiosa sensación de ahogamiento, pero no funcionaba para nada, seguía sintiendo como una fuerza superior oprimía sus pulmones. Era solo una sensación causada por la impotencia de no saber como solucionar aquello y Hikari lo sabia, pero aun así su corazón latía con fuerza por aquel ahogamiento psicológico. Ella se mantenía tranquila aunque en su interior todo estuviera en un desorden total, no va a permitir que algo así la alterara exteriormente.

— Sera mejor volver — se hablo así misma antes de llenar las tres botellas con agua, pero pudo notar en ese momento como su mano temblaba involuntariamente.

Ella se alejo de la orilla y al caminar, sus pierna parecían carecer de casi toda su fuerza. sentía como si en cualquier momento caería al suelo para no levantarse en un largo rato. Por suerte logro llegar hasta la sombra de un roble y respiro con fuerza para relajarse, su cuerpo estaba reaccionando demasiado en aquella situación. Se paso las manos por la cara en modo de relajación, aunque de mucho no había servido. En esos momentos no podía controlar las sensaciones involuntarias de su interior, aun cuando en la academia le hayan enseñado mantener la compostura . Empezaba a darse cuenta que mantener la compostura a situaciones complicadas no era tan fácil como te lo planteaban en la academia.

“Tranquila todo estará bien, solo tienes que volver y hacer como si nada hubiese pasado”

Se calmo mentalmente antes de levantarse y caminar con tranquilidad hasta el lugar en donde se encontraban sus compañeros. Cuando llego vio que Hayami ya había terminado de arreglar a todos los muñecos y que estos ya podían mantenerse perfectamente. Se pregunto cuanto tiempo había estado ausentes, pero sus compañeros no le habían preguntado nada cuando les había entregado su botella de agua.

—Es mejor que partamos, ya se está haciendo de noche y los otros equipos lo aprovecharán para emboscarnos mas fácilmente —dijo Hayami haciendo desaparecer a todo sus muñecos excepto  a Ryuk. Hayami se puso el muñeco azul en la cabeza y partieron hacia el punto de reunión.


El equipo tres entro en el edificio que se encontraba a la mitad del campo y notaron al instante  la gran cantidad de equipos que habían llegado antes que ellos. Siguieron caminando hasta apartarse un poco de la mayoría de los equipos, prefiriendo  estar lejos de los demás para tener mas privacidad entre ellos.

Hayami se arrodillo en el suelo y abrió ambos pergaminos, poco después una bola de humo impregno la zona en que se encontraban. El equipo tocia mientras intentaban disipar la humarada que había aparecido de repente con una de sus manos. Al quedar la zona disipada el equipo 3 por fin pudo ver a la persona que tenían al frente, aunque se quedaron un poco confundidos al no saber el porque se encontraba en ese lugar.

— ¡¿Sensei?! — dijeron los tres al unisonó mientras el nombrado sonreía de oreja a oreja.

— ¡esos son mis alumnos, sabia que lo lograrían! — gritó eufórico el castaño al momento de abrazar al grupo de gennin, quienes se quejaron por la fuerza ejercida en el abrazo.—¡bien echo!

— No fue tan difícil si le ves la lógica a la prueba — comentó tranquila  la de cabellos violetas.

— ¡fue emocionante! En un momento hasta  peleamos contra unos vejetes—hablo Naoki.

Hikari por su parte no tenia ningún comentario para aportar de la prueba, ella solo se limito a asentir a lo dicho por sus compañero. Yuki se separo de ellos sin antes revolverle el cabello a la Hatake para molestarla.

—¡oye! Ya esta suficientemente enredado, no lo empeore Sensei —se quejó la azabache apartando la mano del jounin de su cabeza —… Por cierto, ¿sabe el porqué se nos prohibió abrir los pergaminos hasta llegar a este punto?

— Y yo que creía que preguntarías porque su  maravilloso sensei esta aquí — susurró deprimido el mayor —.El porque es muy simple, en una misión es primordial entregar la información, sin ser vista en ningún momento, a la persona o el lugar establecido. La aldea debe estar seguro  de que a ninguno de ustedes se les ocurriría hacer tal cosa, el pergamino hubiera podido contener información clasificada, por eso es que estábamos nosotros. El pergamino contiene un sello que nos invoca si es abierto y se nos permitió dejarlos inconscientes si era abierto en el lugar incorrecto, descalificándolos al momento.

— ¡Eso es cruel sensei. ¿como sele ocurriría dejarnos inconscientes?! — comentó Naoki un poco alarmado, aunque no lo suficiente para elevar la voz.

— Lo bueno es que no lo hicieron — dijo el mayor revolviendo el cabello del de ojos ónix.

Hikari, mientras el Yagane y el hombre de cabellos castaños conversaban, buscaba con la mirada al grupo de ineptos entre todo aquel  tumulto. Recorrió 3 veces toda la zona que su vista le permitía, pero no pudo encontrar al equipo de su padre y eso le decepciono un poco, tenia muchas ganas de verlo.

“ bueno ¿que se le va a hacer?, es mas que obvio que no iban a llegar tan lejos. Ellos solo tuvieron suerte el la primera etapa, eso es todo, hasta aquí llegaron.”

Pensó con gracia la Hatake, teniendo un poco de lastima por su padre. Él los había entrenado esa ultima semana, se decepcionaría  al saber que su equipo había sido reprobado en la segunda etapa, pero aun quedaba ella. Hikari se encargaría de elevarle los ánimos con su nombramiento a chunnin y, de paso, él se daría cuenta de lo inservible que era su equipo.

“Aunque… ahora tengo algo mas importante de que preocuparte”

Se dijo a si misma cayendo en la cuenta de que su prioridad  en ese  momento no era convertirse en chunnin. Ese cambio de color en su ojo le preocupaba demasiado, ella desconocía la razón de porque sucedía y pensar que era algo malo le aterraba. Su ojo podía   estar teniendo algo peligroso dentro suyo sin que ellos lo supiera y esa era la reacción de su cuerpo para avisarle del problema. De todas maneras Hikari no creía que fuera algo como eso, sino lo hubiera escuchado en algún momento de su vida.

“ esta bien Hikari, relájate. Ve al baño y  respira un poco”

Volvio a decirse a si misma en su mente mientras se dirigía caminó al baño. Su cuerpo se había salido de control una vez mas. Aun cuando sabia que un buen ninja debía mantener la calma a cualquier tipo de situación, ella no podía. A Hikari le daba miedo lo que le estaba sucediendo a su cuerpo en ese momento, mas porque desconocía la razón. Por consecuencia su corazón  latía con mas velocidad cada vez que el problema pasaba por su mente, lo que era muy seguido.

Hikari entro en el baño y reviso cada uno de los cubículos para cerciorarse   de que se encontraba sola, cuando estivo segura cerro la puerta con seguro y se dejó caer de trasero al suelo. Exhaló todo el aire de sus pulmones en un intento de relajarse, aunque su cuerpo se mantuvo tan alocado como estaba anteriormente.

— Quizás me este carcomiendo la cabeza por nada. Vi mi reflejo en el agua, eso pudo haber echo que vea cualquier cosa — se dijo a si misma como consuelo, aunque de verdad creía que eso había podido pasar —Solo tengo que mirarme en el espejo y me daré cuenta de que estoy como siempre.
                            ∆∆∆∆∆∆∆

— ¿Eh?¿a donde se fue Hikari-chan? — preguntó  Yuki al darse cuenta que le faltaba uno de sus alumno.

— Se acaba de ir recién, creo que fue al baño — comentó Hayami  levantando sus hombros para sacarle relevancia al asunto, ella no deseaba preocupar a su sensei.

Hayami se había dando cuenta de que algo le sucedía a su compañera cuando había regresado de buscar agua el primer día. Hikari no le diría nada a nadie si le preguntaban directamente y por eso Hayami no deseaba mencionarle aquello a su sensei, le preocuparía por algo que aun Hikari no estaba lista para hablar. Ella conocía hace un par de meses a su sensei, pero se había dando cuenta de que era una persona muy directa y no dudaría en preguntarle a alguien sobre algún problema.

—¿Sin decir nada? — se extrañó el castaño—,normalmente ella me avisa si se aleja de nosotros.
Hayami abrió la boca para decir una excusa  que su sensei fuera capaz de creer, pero su compañero se adelantó a ello.

— Es que Hikari anda medio rara desde hace unas horas. Es mejor dejarla sola, ¿verdad Hayami? — hablo Naoki recibiendo un asentimiento muy forzado por parte de la Mikoshi, sus planes para no preocupar ni involucrar a su sensei en el problema habían fracasado.

—¿rara?¿Sucedió algo en los exámenes?¿se encontraron con alguien extremadamente extraño?¿parecía como una serpiente? — atacó Yuki con una serie de preguntas que los gennin no fueron capases de comprender a la perfección, ¿porque debía tener apariencia de serpiente aquella persona?.

— No, no nos encontramos con alguien que pareciera una serpiente. Si quiere saber Hikari  comenzó a actuar raro después de buscar agua el primer día, al volver parecía estar impactada por algo — respondió Hayami al saber que era inútil contener la información, su compañero ya lo había arruinado.

— Ya veo… — dijo Yuki — creo que hablare con ella mas tarde.

— No creo que le diga nada, sensei— mencionó Hayami sorprendiendo al jounin, no esperaba esa declaración de su parte —Hikari  suele ser muy reservada con sus problemas, nos suele decir lo que paso semanas después, hasta una vez tardo dos años en decirnos. A veces nos lo suele decir cuando le insistamos, pero no creo que a ti te diga nada aun cuando lo intentes.

— … entiendo lo que me estas diciendo, Hayami, pero es importante que hable con ella e intente que me diga si sucedió algo. No pierdo nada por intentarlo, ¿verdad? — hablo el jounin sonriente debía mantener a sus alumnos lo menos preocupados posible, por eso mismo no les podía decir nada de sus sospechas.

— yo solo le digo que va a perder el tiempo, Hikari no le dirá nada — dijo Hayami.

— es verdad — le siguió Naoki hablando en un tono serio, ni era momento para andar de broma, el asunto era muy importante.

— Si, te he oído  bien Hayami. Pero hay veces en las que las perdonas necesitan hablar con otra persona que no sea amigo o familiar y es ahí en donde entro yo. Como su sensei soy la persona correcta para que Hikari se sienta segura de decirme lo que le ocurre, después de todo soy el jounin encargado de ustedes — comentó Yuki con el pecho en alto dotado de todo el orgullo que su cuerpo podía retener. Hayami lo miro dudosa, ella no creía que su amiga se abriría de tal manera con su sensei.

Hayami no volvio a modular ni una palabra, a su parecer no lograría convencer  a su sensei de no entremeterse en el asunto. Aquél problema era de Hikari y sabia que ella se los diría en  su momento, pero Hayami tenia planeado insistirle cuando ella volviera del baño.  Ella no perdía nada por intentarlo, aunque ya veía que Hikari se rehusaría   a hablar con ella.


Hikari se observaba en el espejo estupefacta, había visto su ojo con anterioridad, pero jamás había notado lo que observaba en ese momento. En su ojo derecho, si prestabas demasiada atención, se podía notar como el color azul se trasladaba muy lentamente por el iris. Aun no se notaba el cambio de color, todavía seguía estando en un azul muy obscuro, pero Hikari predecía que no se quedaría de esa forma por mucho tiempo.

Lavando su cara con agua fría para relajarse, Hikari  salió de baño camino al lugar en donde se encontraban sus compañeros. Ella no prestaba mucha atención a su entorno, pero esta vez no era por estar sumida en su mente, sino que no le interesaba ver a los equipos que habían pasado a la tercera etapa. La apariencia  no era relevante para ella, eso no le daría   una idea de sus habilidades. 

Hikari, entre toda la multitud, pudo divisar a su equipo, aunque ella no fue la única. Hayami, justo en ese preciso momento,  volteo a ver en su dirección. Pudo observar como la Mikoshi  mantenía su mirada en ella por algunos segundos, los cuales le parecieron eternos y muy incomodos. No entendía la razón del porque la miraba de esa manera, pero si sabia que no le gustaba para nada. Cuando por fin dejo de observarla, Hayami miro a su compañero y a su sensei, antes de dirigirse hacia ella. 

— oye, Hikari, ¿podemos hablar? — le preguntó al estar al frente suyo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro