Primero que nada, quiero que escojan con quien se quedara Mikey...

LEONARDO

RAPHAEL

DONATELLO

OTRO?

Si, por si quieren que otro sea su pareja.

En fin les dejare que sigan leyendo, bye bye

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A la mañana siguiente todo había vuelto a la "normalidad", los Hamatos desayunaban tranquilos en una cálida charla. Después de ello fueron a entrenar, claro que esta vez los mayores tuvieron que superar a su pequeño hermano, el cual disfruto aquel simple enfrentamiento. Al terminar meditaron una hora, el primero en dejarlo fue Donatello, por alguna razón, no lograba concentrarse del todo. A los minutos Raphael desistió de su intento y ya completada la hora los otros dos dejaron el do-jo, Leonardo fue a ver su serie preferida y Miguel Ángel decidió que pasaría un rato con el de rojo.

Lo busco por un rato hasta que lo allá en la sala, sin tomarle mucha importancia le invito a dar un paseo por el alcantarillado, en un principio el mayor no quiso ir, pero luego de un pequeño chantaje por parte del menor accedió. Caminaron por un largo rato, hasta llegar a una zona que llevaba a una salida sellada por las rejas, desde allí se podía ver una plazoleta, no era elegante, pero al menos podías ver algo más que simples paredes algo húmedas y grises.

Raphael miro por un momento al menor, deseaba charlar con él, pero no sabía bien de qué. Michelangelo por su parte se sentía nervioso, pues deseaba pedirle algo que quizás no querría darle, por lo cual prefirió quedarse viendo hacia fuera.

Raph: oye –lo mira algo inquieto- lo estuve pensando y... -dudoso-

Mikey: -suave le toma las manos- tranquilo, te escuchare –sonríe-

Raph: -suspira y decidido lo suelta- Mikey, quiero que seas mi novio, se lo que te dije, pero no puedo evitarlo –lo mira- me enamore realmente de ti y no quiero que otro ocupe ese lugar –suave lo atrae y besa-

Aquello tomo por sorpresa al menor, pero gustoso acepto aquel beso, al separarse lo miro unos minutos y sonrió suave.

Mikey: perdóname Raph, pero aunque estés tan clavado en mi corazón, no puedo dejar de lado el cariño que les tengo a ellos dos, pues al igual que tú, ellos están enamorados de mi –le abraza-

Raph: entiendo –corresponde y sonríe- eres increíble y esperare a tu decisión –sonríe y tomándole la mano, lo lleva de nuevo a casa-

Al llegar ya estaban sus amigos, Mikey los tomo a ambos y se los llevo a su cuarto, dejando solo a los tres mayores, en eso su maestro pasaba hacia la cocina.

Yoshi: parece que pronto tendré una buena noticia –sonríe tranquilo-

Los menores se miraron entre si y algo inquietos, trataron de enfocar su atención en sus hobbies. En el cuarto Mikey les contaba todo lo que sus hermanos habían hecho y como era que ahora debía escoger entre ellos tres.

April: bien, aunque sigo creyendo que no lo merecen –suspira- demostraron que en verdad te quieren

Casey: aun no me creo lo que hizo Raph en verdad que es un indeciso jaja

Mikey: lo sé, pero fue lindo y lo aprecio por ello –sonríe- aun así solo puedo escoger entre dos –serio-

April: woo, ¿A quién descartaste de una ves? -sorprendida-

Mikey: obviamente a Raph, no puedo escogerlo después de lo que me hizo y aunque se allá disculpado, mi corazón aun siente ese terrible dolor –suspira tocando su pecho-

Ambos jóvenes le vieron comprensible y le regalaron un afectivo abrazo. Casey sabía que Raphael era brusco y nunca se daba cuenta de lo que hace, hasta que es tarde y pues allí lo que obtuvo. April esperaba que su amigo no escogiera a Donatello pero si lo hacía le apoyaría con todo lo que tiene.

Mikey: bueno –ya más calmado- no sé si tú sientes algo por Donnie? –mira a su amiga-

April: y-yo –sonrojada- s-sí, pero aceptare lo que decidas –sonríe suave-

Michelangelo la miro sorprendido, a pesar de que ella lo amaba se lo estaba entregando. Aunque le gustaba el gesto, su mente solo podía pensar en él. Sin dudas esto era lo más difícil que haría, pero debía decidir al final y quizás así todos podrían vivir en paz.

Pasaron unas hora y ya era momento del patrullaje, las cuatro tortugas y los dos humanos subieron a la superficie, no les tomo mucho hallarse con los maleantes, en este caso estaban los dragones purpuras.

Llevaban consigo unos cilindros de mutageno, aquello les pareció raro, pero fue más raro ver que de un momento a otro los del Pie y Don Vicioso le atacaron de sorpresa, aquello era bastante difícil, pero el grupo les enfentro con mucha astucia, aunque pronto apareció Shredder ataco sin dudar a los tres mayores dejando a los dos humanos y la pequeña tortuga en manos de sus hombre.

Leo: tenemos que sacarlo de aquí –viendo a sus dos hermanos-

Don: n-no sé si podamos -algo agotado-

Raph: tenemos que, es nuestra responsabilidad –les ve molesto-

Los jóvenes se enfrentaron a él, en un ágil movimiento lo mandaron a volar contra Cara de pez y Rahzar. Aun que Rocksteady les envistió mandándolos a ellos tres contra otro edificio.

Aquello aterro a los otros tres, April y Casey fueron derribados por Bebop y Hun, lo cual espanto al menor de los quelonios, el cual evito ser tomado por Garra de tigre, pero no pudo evitar que un dardo diera en su cuello.

El felino sonrió y lo tomo yéndose rápido de allí, los otros tres quelonios, derribaron a los demás, pero aun así no pudieron evitar que lo más importante se le escaparan de las manos.

Lejos de allí, Garra de tigre sacaba al menor de la gran ciudad, siguió al pie de la letra las indicaciones de su maestro.

Flash back

Saki: escúchame bien Garra de tigre, esto es muy importante, se lo inútil que son Xever y Bradford –le ve con seriedad- es por eso que te encomiendo a ti que tomes a la tortuga y te la lleves a esta dirección –entregándole los datos-

Garra de tigre: si maestro –hace una reverencia-

Saki: una vez que estés allí, quiero que lo preñes y le cuides hasta que esa cría allá nacido.

Garra de tigre: si –tranquilo se retira memorizando la dirección-

Fin flash back

Condujo por horas hasta llegar al sitio dispuesto por su maestro, bajo y llevo a la tortuga a uno de los cuartos, donde le encadeno.

Garra de tigre: no es personal, pero ordenes son ordenes –en silencio espera a que despierte-

En las alcantarillas, el grupo curaba sus heridas con bastante tristeza y molestia. Yoshi rezaba por su pequeño niño.

Los quelonios se quedaron allí en la sala, junto a sus amigos, no podían dormir y menos con su pequeño niños en mano de esos cretinos. Donatello no lo pensó mucho y se puso a averiguar en donde podrían tener a su hermano.

Bien les dejo otro caps.

Gracias a los que votaron y comentaron.

Nos vemos ❤