Capitulo 8
Taehyung cargo a Jungkook como koala y lo llevo a la recámara.
Taehyung recuesta con mucho cuidado en la cama,se sube encima de el sin hacer mucha presión,toma la barbilla de Jungkook con mucho cuidado y le da un beso apasionado.
Sus lenguas jugaban al compás de cada movimiento, Jungkook mete sus manos por debajo de la ropa de tae acariciando su ancha espalda, mientras que Tae baja una mano y apretaba los glúteos de Jungkook, sacándole un pequeño jadeo
–Jungkook eres tan hermoso,–Decia taehyung mientras iba bajando los besos hacia el cuello de Jungkook
–Tus besos me encantan –jungkook hablaba entre jadeos mientras sus ojos se cerraban
Taehyung se movía y hacia que sus pollas se tocaban entre la ropa.
–Se sienten duras ya, quieren salir de nuestros pantalones,–Dijo taehyung entre risas coquetas
Tae volvió a besar los labios de Jungkook mientras sus ropas iban saliendo poco a poco sus pollas estaban erectas y con un poco de preseminal por la excitación.
Jungkook se movia y rozaba las pollas sacándose jadeos de ambas partes.
Taehyung baja la mano a los glúteos de Jungkook y empieza a acariciar la zona para poder prepararlo.
–Asi...tae mmmm,– jadea Jungkook
Taehyung introdujo un dedo en la zona anal de Jungkook , empezó a moverlo lentamente mientras su prometido se movía al tacto e
introdujo otro dedo
–Ah~~... Tae -gemia Jungkook
Mientras Tae con su otra mano empezaba a masturbarlo, Jungkook acercó a tae hacia el y lo volvió a besar.
–Creo que estás listo mi amor, mojadito para mí– Dijo taehyung mientras le daba una pequeña mordida en los labios.
Acomoda bien su miembro y empezó a introducirlo lentamente para no dañarlo
–Ah~~.... T~Tae tu polla me hace sentir lleno–Decia Jungkook entre gemidos
–Que rico que te guste bebé
Tae tomo la cintura de Jungkook y empezó a embestirlo más rápido haciendo que su polla entrara toda con cada estocada
–Estas tan apretadito cariño, mi polla es ideal para tu bello trasero
–Se siente tan rico
Jungkook enrrollo las piernas en la cintura de tae para que entrara más, ambos se movían al mismo momento disfrutando
Tae saco las piernas de Jungkook y las puso en su hombro y empezó a moverse más rápido, mientras que una mano la puso en el cuello de Jungkook dándole un pequeño apretón.
Jungkook miraba a taehyung con una exitacion su cara era una obra de arte, sus mejillas todas rojas y sus labios hinchados, para Jungkook era exactamente lo mismo ver a su prometido con sudor era lo más sexy para el.
Así estuvieron hasta que ambos llegaron al climax, Tae salio de Jungkook mientras lo pone boca abajo en posición de perrito y vuelve a introducir su polla.
Lo empieza a embestir más duro y lo levanta del cuello apegando la espalda de Jungkook a su pecho, se sigue moviendo mientras acariciaba los pezones de Jungkook en movimiento circular.
Así pasaron su noche de pasión entregándose mutuamente.
...
Taehyung y Jungkook habían pasado la noche juntos, disfrutando de la compañía mutua, sin preocupaciones. Sin embargo, la paz se rompió cuando el teléfono de Taehyung empezó a vibrar insistentemente sobre la mesita de noche.
Taehyung se incorporó, con el ceño fruncido, y tomó el teléfono. Al otro lado de la línea, la voz de su segundo al mando cuando el no está, Seokjin, sonaba urgente.
—Jefe, necesitamos que vengas al cuartel inmediatamente. Hay una situación que requiere tu atención.
Taehyung suspiró, sabiendo que no podía ignorar su deber. Miró a Jungkook, que dormía plácidamente a su lado, y sintió una punzada de culpa. Pero esto era algo que no podía posponer.
Con movimientos cuidadosos, se levantó de la cama y se dirigió a la cocina. Sabía que Jungkook tenía una sesión de autógrafos esa mañana y quería asegurarse de que tuviera un buen desayuno antes de irse. Preparó tortitas con frutas frescas y un batido de proteínas, sabiendo que a Jungkook le encantaban.
Mientras terminaba de poner la mesa, Taehyung escuchó a Jungkook moviéndose en la habitación. Poco después, apareció en la cocina, con el cabello desordenado y los ojos aún medio cerrados.
–Buenos días, Kookie —dijo Taehyung con una sonrisa, acercándose para darle un beso suave en los labios–. Te he preparado el desayuno.
Jungkook sonrió y se sentó, agradecido.
—Gracias, Tae. ¿Por qué estás despierto tan temprano?
Taehyung se sentó frente a él, su expresión se volvió seria.
—Tengo que ir al cuartel. Ha surgido algo importante. Pero no te preocupes, he dejado a dos de mis mejores hombres aquí para que te vigilen. No quiero que te pase nada.
Jungkook asintió, aunque no pudo evitar sentir una punzada de preocupación. Conocía el mundo en el que Taehyung se movía y sabía que no era precisamente seguro.
–Entiendo. Solo cuídate, ¿sí?
Taehyung sonrió y tomó la mano de Jungkook, apretándola suavemente.
–Siempre lo hago. Y tú también, por favor. Nos vemos luego.
Después de desayunar, Taehyung salió del apartamento, dejando a Jungkook con dos de sus hombres, Minho y Jisoo, quienes se aseguraron de que estuviera seguro. Jungkook se preparó para su sesión de autógrafos, tratando de ignorar la sensación de inquietud que había comenzado a formarse en su estómago.
El evento estaba lleno de fans emocionados, y Jungkook se esforzó por mantener su mejor sonrisa. Sin embargo, en el fondo de su mente, no podía dejar de pensar en Taehyung y en lo que podría estar ocurriendo en el cuartel.
De repente, el caos estalló. Un grupo de hombres enmascarados irrumpió en el lugar, creando una confusión total. Minho y Jisoo reaccionaron de inmediato, tratando de proteger a Jungkook, pero fueron superados en número.
Antes de que Jungkook pudiera comprender completamente lo que estaba sucediendo, fue rodeado y llevado a la fuerza fuera del edificio. Intentó luchar, pero sus captores eran demasiado fuertes. Lo metieron en una furgoneta y, en cuestión de segundos, desapareció de la vista.
Mientras la furgoneta se alejaba, Jungkook podía sentir el miedo apoderándose de él. No sabía dónde lo llevaban ni qué querían con él, pero una cosa era segura: Taehyung haría todo lo posible para encontrarlo y traerlo de vuelta.
.....
En el cuartel, Taehyung estaba en medio de una reunión de emergencia cuando su teléfono sonó de nuevo. Esta vez, la voz al otro lado era la de Jisoo, y sonaba desesperada.
📱
–Jefe, se lo llevaron. Se llevaron a Jungkook.
El mundo de Taehyung se detuvo por un momento. Su corazón se aceleró y su mente comenzó a trabajar a toda velocidad. No iba a dejar que nadie le hiciera daño a Jungkook. No importaba quiénes fueran sus enemigos ni qué tan lejos tuvieran que ir, Taehyung sabía que haría todo lo que estuviera en su alcance
El silencio en el cuartel fue palpable mientras Taehyung procesaba las palabras de Jisoo. Su rostro se endureció con una determinación fría y feroz.
–¿Dónde fue la última vez que lo viste? —preguntó Taehyung, su voz baja pero cargada de autoridad.
–En la entrada principal del salón de eventos. Los atacantes se movieron rápido, jefe. No pudimos detenerlos —respondió Jisoo, con la culpa evidente en su voz.
–Está bien, Jisoo. Vuelve al cuartel y asegúrate de que Minho esté bien. Vamos a necesitar a todos para esto
Taehyung cortó la llamada y se dirigió a su equipo, que ya había sentido el cambio en su líder. Seokjin lo miró con seriedad.
–¿Qué vamos a hacer, jefe?
–Nos vamos a mover rápido. Quiero saber quién está detrás de esto y dónde tienen a Jungkook. Activen todos nuestros contactos y recursos. No dejaremos piedra sin mover.
El equipo se dispersó, cada uno con su misión clara. Taehyung se quedó un momento en silencio, mirando el mapa de la ciudad en la pantalla frente a él. Su mente trabajaba en todas las posibilidades. Sabía que sus enemigos aprovecharían cualquier debilidad, pero no contaban con la furia y el amor que él sentía por Jungkook.
.....
Mientras tanto, en un lugar desconocido, Jungkook estaba atado a una silla con su rostro todo golpeado en una habitación oscura y húmeda. Podía escuchar voces lejanas, pero no podía distinguir lo que decían. Su corazón latía con fuerza en su pecho, pero intentaba mantener la calma, recordando las palabras de Taehyung. Sabía que su prometido vendría por él.
De vuelta en el cuartel, los informes comenzaron a llegar. Seokjin entró en la sala de operaciones con una expresión de alivio y determinación.
–Tenemos una pista. Un viejo almacén en las afueras de la ciudad. Parece que ha habido actividad reciente allí.
Taehyung asintió, ya en modo de acción total.
–Bien. Formemos dos equipos. Uno irá al almacén para el reconocimiento y el otro estará listo para la extracción. No vamos a cometer errores.
El equipo se movió con precisión y rapidez. Taehyung lideraba el equipo de extracción, su mente enfocada solo en una cosa traerá de vuelta a Jungkook sano y salvo.
Al llegar al almacén, el equipo de reconocimiento confirmó la presencia de varios guardias y una estructura cerrada en el centro del lugar. Taehyung dio las órdenes con calma, pero con una intensidad que sus hombres rara vez habían visto.
–Nos dividimos. Seokjin, tú y tu equipo tomar la entrada principal. Yo llevaré al resto por el flanco. Nos reencontramos en el centro.
La operación fue rápida y silenciosa.
Los guardias fueron neutralizados uno a uno, y pronto Taehyung y su equipo llegaron a la estructura central. Con un golpe certero, la puerta se abrió y Taehyung encontró a Jungkook atado a la silla, sus ojos llenos de alivio al verlo.
—¡Tae! —exclamó Jungkook, apenas conteniendo su emoción.
Taehyung corrió hacia él, desatando las cuerdas con manos firmes pero suaves.
–Todo está bien ahora, Kookie. Te tengo.
Antes de que pudieran celebrar su reunión, un grupo de hombres armados irrumpió en la habitación. Taehyung se giró, su cuerpo protegiendo instintivamente a Jungkook.
....
Les dejo un nuevo capítulo
Espero les guste
Que lo disfruten 🥰
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