Pueblo Amura
Gracias a su nueva bici, Victor llegó a Pueblo Amura con varios días de sobra.
Ya en el pueblo, Victor descansó un poco en el centro pokémon y después salió a dar una vuelta por el lugar. Antes de avanzar demasiado, encontró a Rose y a Berto hablando.
Rose: Entonces, ¿qué tal te va con las estrellas deseo?
Berto: Lo siento señor, no he encontrado ninguna.
Olivia: No quiero ofenderle señor presidente, pero igual deberíamos de haber escogido a un trabajador capacitado para esta tarea.
Berto intentó mantener una expresión seria, pero se notaba que no le había agradado mucho ese comentario.
Rose: Tranquila, Olivia. Este chico está más que capacitado - le da unos golpes en el hombro a Berto -. Tú no te preocupes, es muy difícil encontrar estrellas deseo simplemente caminando por ahí. Estamos buscando alguna manera de facilitarte el trabajo, en cuanto lo logremos te avisaremos.
El ego de Berto ya había vuelto a su estado natural gracias a las palabras del presidente Rose.
Berto: Muchas gracias, señor.
Rose: No son necesarias tantas formalidades. Sólo llámame Rose.
Berto: Está bien... Rose.
Olivia: ¿No sabes qué es de mala educación escuchar conversaciones ajenas - refiriéndose a Victor -?
Victor no sabía que hacer o responder, pero tampoco tuvo mucho tiempo para pensarlo.
Rose: ¡Hombre, pero si es el aspirante recomendado por el campeón! ¿Cómo te va?
Victor: Eh... Bien, señor.
Berto y Victor cruzaron miradas en un silencio muy incómodo.
Rose: ¿Ya os conocíais - al ver el cruce de miradas -?
Berto: Se podría decir que sí.
Olivia: Bueno, tenemos que hablar de asuntos importantes. Así que si no os molesta, nos retiramos.
Rose: Mira que eres fría, aunque tienes razón - empieza a alejarse con Olivia -. ¡Que os vaya bien!
Berto: - asiente - ¡Muchas gracias, señor!
Victor: ¡Vale, gracias!
Cuando ya se había alejado lo suficiente, Berto miró a Victor con una mirada de odio en su estado más puro, y después se marchó.
Victor se pasó el resto del día observando el pueblo. También se paró en un mercadillo donde compró bayas y alimentos. No hizo mucho más ese día, así que, como le sobraba tiempo, preparó curri para él y para su equipo.
El pan tostado junto con la salsa picante hicieron de este un plato que todos disfrutaron, incluso si Victor no es fan del picante. Tanto entrenador como pokémon quedaron saciados y fueron a dormir al centro pokémon.
Al día siguiente Victor se despertó algo tarde. Salió del centro pokémon y escuchó de fondo a una muchedumbre gritando. Nuestro protagonista no tardó mucho en llegar al lugar del ruido gracias a su bici. Allí había un montón de gente, como era de esperar, alrededor de algo. Victor no sabía que era, lo único que lograba ver era el faro que se alzaba por encima de la multitud.
Gloria: ¿Qué pasa aquí?
Victor: Hola, Gloria. Lo siento, pero no lo sé.
Gloria: - saca su SmartRotom - Voy a mirar a ver si encuentro algo, tú intenta ver a través de la multitud.
Victor: Vale.
Mientras ellos intentaban averiguar qué estaba pasando, se podía ver como alguien intentaba salir de la multitud pero no lo lograba. Victor vió esto y a base de esfuerzo y algunos empujones, logró alcanzar a la figura y la agarró de la mano para sacarla de ahí. Al final ambos salieron de la multitud.
???: Muchas gracias, Victor - en un tono demasiado seco para estar agradeciendole a alguien.
Victor: No hay de que - levanta la vista y ve que es Roxy -. Ah, hola Roxy.
Roxy: Hola.
Gloria: Bueno que, ¿has descubierto qué es lo que pasa?
Victor: No, lo siento.
Roxy: Cathy está haciéndose fotos, supongo que para una revista.
Gloria: Vaya - algo decepcionada -. Pensé que sería algo más interesante.
Victor: ¿Cathy no es la modelo superfamosa?
Roxy: Sí, y también la líder de gimnasio de este pueblo.
Gloria: Pues poco más podemos hacer aquí - caminando en dirección contraria a la multitud.
Victor: ¿A dónde vas?
Gloria: Sinceramente no lo sé, pero cualquier lugar es mejor que estar aquí sin hacer nada.
Victor: Supongo que tienes razón.
Gloria: - suspira - ¿Quieres venir?
Victor: Vale - camina hacia Gloria y ve que Roxy se queda quieta -. ¿Quieres venir tú tambien?
Roxy: - ligeramente sorprendida pero manteniendo una expresión neutra - Vale.
Aunque Victor ya había visto casi todo el pueblo, no le molestó verlo de nuevo. Roxy se mantuvo bastante callada todo el camino, pero igualmente disfrutó de la compañía de Victor y Gloria.
Gloria: ¿Sabías que Victor es muy bueno cocinando?
Roxy: ¿A sí?
Victor: Yo no diría eso, solo se me da buen hacer curri.
Gloria: Vamos no seas tan humilde.
Victor se ofreció a cocinar curri, pero lamentablemente no tenía bayas suficientes para 3 personas y a esas horas las tiendas ya habrían cerrado. Al final todos fueron a dormir al centro pokemon y allí se despidieron.
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