Capítulo 30:
"Tormenta"

"Te gustaría convertirte en demonio?"

La pregunta se sintió como un balde de agua fría para el joestar, la comprensión lo golpeó de lleno cuando su mente llegó a la conclusión de quien era de verdad warabihime.

"Vaya, parece que el cazador se quedó mudo, ¿qué pasa? Estoy segura de que no te comí la lengua" dijo con diversión y algo de soberbia la demonio.

Después de un largo silencio, johan miro a los ojos a la Oiran, tratando de mantener una una sonrisa nerviosa en su rostro. 

"Esto es una broma ¿verdad?" Pregunto el joestar, mientras su corazón empezaba a latir con fuerza al darse cuenta de que había cometido un fatal error.

"No, ¿qué te hace pensar que lo es?" Cuestiono daki, levantando una ceja pero aún manteniendo su sonrisa divertida.

"Oh..." murmuró el peli azabache, el cual pensó en intentar alejarla de él de forma brusca, pero recordó que ella tenía sus brazos alrededor de su cuello, había la posibilidad de que ella pueda ser lo suficientemente rápida para poder usar sus garras en el cuello del oji café.

Johan empezó a considerar diferentes opciones para poder alejarse de la demonio, pero eran muy arriesgadas, y muchas podrían acabar en muerte, solo podía usar única carta que le quedaba.

"Eso realmente no responde a mi propuesta"

"Eh?" La demonio miró confundida al cazador.

"Warabihime, no me importa si eres una demonio, así que te lo volveré a preguntar, ¿te gustaría irte lejos de aquí?" Johan puso de forma delicada su mano en la mejilla de la demonio, la cual solo abrió los ojos con sorpresa e incredulidad.

"Yo..." Daki empezó a dudar, sintió como sentimientos recién encontrados se estaban mezclando sin control alguno, ella sabía perfectamente que intentar traicionar a muzan era una muerte segura, y desconocía completamente el porque este último quería vivo al Joestar.

Pero las palabras del oji café le parecían demasiado sinceras, sentía su corazón latir de pura emoción y una fuerte sensación de mariposas en su estomago, sensaciones que pensó que sentiría exclusivamente con muzan, pero aquí estaba este humano, desafiando aquello.

Daki soltó un suspiro algo tembloroso, pensando en que hacer.

Mientras tanto, Johan sabía que solo estaba agravando aún más el problema, pero tal vez lo hacía para no romper la promesa que le hizo a Aoi, o tal vez solo quiera encontrar algo de esperanza.

Repentinamente, Daki abrazo el cuello del joestar, el cual solo pudo parpadear confundido.

"Warabihime?"

"Daki, ese es mi nombre" respondió la demonio, cosa que solo aumentó la confusión del peli azabache. "¿Podemos estar así un rato?"

"Esta bien" respondió Johan, el cual correspondió con dudas el abrazo.

La habitación había vuelto a quedar en silencio por un buen rato, hasta que fue abruptamente interrumpido.

"Esto es inesperado, pero conmovedor hasta cierto punto" dijo una voz que daki reconoció al instante, pero para johan era extraña, parecía ronca y lenta.

El cazador giró su mirada de forma rápida hacia la voz, observando lo que obviamente era un demonio, la piel gris, la apariencia demacrada y los ojos de esclerótica amarilla, pero lo que alarmó por completo al oji café fue al leer "luna superior seis" en los ojos del demonio.

- En que momento entró?! -

"¡¿gyutaro?!" Daki se apartó del peli azabache, luciendo sorprendida y dejando libre al cazador por error.

Pero allí no acababan las sorpresas, pedazos de lo que parecían ser tela, se filtraron atrávez de los tablones de madera de la habitación, los cuales se dirigieron a daki, para finalmente ser 'absorbidos' por la demonio.

- ¿Pero que? Estas cosas no deberían estar aquí a menos de que... - Pensó Daki, mientras su cabello negro se volvía blanco con las puntas verdes.

Johan se alejó lo mejor que pudo, manteniendo una distancia moderada entre el y los demonios, lo que captó la atención de estos.

"Daki, ¿es el quien hemos estado buscando?" pregunto el demonio conocido como gyutaro.

"Si, es el" respondió la ya mencionada.

"Han estado buscándome? Se puede saber para que?" Pregunto con seriedad absoluta el oji café, subiendo la guardia y listo para desenfundar su nichirin.

"Solo son órdenes, no te creas tan importante" respondió con calma el demonio, pero empezó a rascarse la mejilla con sus garras, ocasionando heridas profundas que rápidamente se curaban por la regeneración. "Que envidia, eres demasiado atractivo, de seguro las mujeres te coquetean muy seguido, que envidia me das".

"Bro?" Pregunto de forma casi instintiva el joestar, levantando una ceja de paso.

"Posiblemente no tuviste tantas dificultades y has vivido de forma cómoda sin sufrir nada, cuanta envidia!" El demonio se empezó a rascar más fuerte la mejilla, aumentando el daño, el cual se curaba casi al instante.

"Te equivocas" respondió el peli azabache, su mano derecha estaba sobre la empuñadura de su nueva katana, "por cierto, te vez fatal, ¿has comido tan siquiera algo durante un tiempo?".

"Por como actúas, es obvio que vas aprovechar para huir en cualquier momento" comenzó el demonio, sin apartar su vista del joestar, habiendo notado el movimiento se este. "Pero creo que a EL no le importará que tengas unas cuantas heridas!"

"Gyutaro espera!"

Gyutaro atacó a gran velocidad, mientras un par de hoces hechas de hueso y carne se generaban en las manos del demonio.

"Arte de sangre! Rocío de guadaña!".

El joestar de forma inmediata desenfundó su katana, para acto seguido bloquear el ataque, el demonio sonrió de forma desquiciada, para inmediatamente reanudar su técnica, Johan se vio obligado bloquear y esquivar los cortes de las hoces.

El peli azabache tomó una profunda respiración, su mirada fija en su oponente, tan pronto como tuvo la oportunidad, esquivo las hoces, apartándose un lado.

"Tercera postura, Danza de las corrientes". La velocidad del ataque fue tal que para el ojo humano, desapareció para después reaparecer detrás de gyutaro.

Este último abrió sorprendido los ojos, de un momento para el otro, las manos de gyutaro fueron cercenadas, al mismo tiempo que su columna vertebral fue cortada a la mitad.

"Segunda postura, rueda de agua" dijo con frialdad el oji café, mientras daba un giro completo de 360°, aprovechando al fuerza del giro para aumentar el poder del corte, pero antes de tan siquiera poder conectar su katana, los sentidos del joestar le advirtieron del peligro.

Las cuales eran una fajas anormalmente largas, aparentemente controladas por la albina, pero era demasiado tarde, no podía esquivar, solo pudo bloquear el ataque de Daki a duras penas.

El impacto fue lo suficientemente potente para que el joestar sea mandado a volar contra la pared, atravesando esta y unas cuantas más.

Gyutaro en todo ese tiempo se logro regenerar, pero se le veía un poco agitado y sorprendió.

"Que crees que haces?! Casi terminas perdiendo!" Grito molesta la albina, las venas marcándose en su frente hacían obvio su estado de ánimo.

"No te atrevas a gritarme, no creas que no me di cuenta de lo cómoda que te veías con ese cazador" respondió el peli verde, dándole una mirada fulminante a su hermana.

Ambos demonios empezaron a discutir acaloradamente.

Todo mientras johan se levantaba de los escombros de madera, un poco aturdido pero muy vivo.

- mierda, ha pasado un buen tiempo desde que atravesé una pared- El peli azabache miró a su alrededor, notando que estaba en la calle del distrito.

"Hey tu!" Grito una persona, provocando que el joestar se girara para verlo. "¡deja de hacer tanto alboroto a estas horas de la noche!"

Varias personas se estaban asomando a ver, ya sea desde ventanas o desde las puertas de sus casas.

El espadachín negro soltó un suspiro, pero miró seriamente al tipo.

"Mira, estoy en medio de una pelea y realmente esto puede terminar mal si tu y los demás no corren lejos de aquí".

"Me estás amenazando?!" Exclamo furioso el civil.

"Que molestia" comentó daki, la cual miraba todo atrávez de la pared rota.

Johan subió la guardia, su mirada fija en la demonio, aunque no pudo evitar sorprenderse un poco por el cambio de vestimenta de ella.

"Tal vez podríamos llegar a un trato" dijo la albina, con una sonrisa divertida, pero manteniéndose cautelosa. "Te dejas capturar y dejamos a todas estas personas con vida".

"Sensei!" Tanjiro había llegado, vistiendo su uniforme y luciendo agotado.

Johan se distrajo momentáneamente, cosa que fue aprovechada por gyutaro, el cual lanzó un amplio corte con sus hoces directamente al joestar, el cual solo bloqueó los dos ataques.

"¡Tanjiro, necesito que lleves a todas estas personas lejos de aquí!" Grito johan, para acto empezar a bloquear y atacar a gyutaro.

Tanjiro obedeció, sabía que el peli azabache podría luchar con ambos demonios hasta que tengen y los demás fueran a ayudarle.

Gyutaro retrocedió, ya no tenía esa sonrisa sádica, si no una expresión seria, el cazador estaba demostrando ser un oponente duro.

Por cada intento de herir al cazador, resultaba que el ya mencionado cortará diferentes extremidades del demonio.

- debo hallar la manera de que ellos dos solo se enfoquen en mi - pensó seriamente johan, el cual ideó rápidamente un plan. "Sabes, esto es aburrido, pensé que luchar contra una luna superior sería más desafiante".

Aquellas palabras obviamente tocaron un nervio en el demonio mientras Daki frunció el seño con notable enfado.

"Ya sé!" Exclamo alegre el oji café.

"Eh?"

"Ustedes contra mi solo ¿qué dicen?" Pregunto con diversión el peli azabache, mientras extendía los brazos a ambos lados, un acto de extrema confianza.

Daki y gyutaro se miraron entre sí unos momentos, para después dirigir sus miradas al joestar otra vez, el había tocado nuevamente un nervio, esta vez en ambos.

Johan levantó la guardia, listo para luchar contra ambos al mismo tiempo.

CONTINUARÁ...

Buenas noches, tardes o días, les deseo una feliz navidad.