¡Y llegamos al capítulo final de esta Primera Temporada!

¡Si señor!

¡Aplausos!

Fue un largo camino debido a lo vago que soy y estoy agradecido con todos aquellos que me han acompañado hasta aquí.

Continuaré con los comentarios al final de la historia.

De momento les dejo con este último capítulo.

...

-Narrador normal-

Los chicos pudieron continuar su camino hacia el muelle sin tantos problemas, los zombies se habían concentrado más en aquel chico que ahora no debería ser más que huesos y algunas entrañas.

Iban sigilosamente, pues en el camino pudieron escuchar ruidos provenientes de los edificios que les rodeaban, era prueba segura de que había zombies en el interior de estos.

Lo que menos querían era tener que enfrentarse en un territorio demasiado desfavorable, pues no había muchos lugares a los cuales huir, estaban completamente rodeados.

Algunos chicos, como los de primero, estaban aún demasiado asustados por la escena que habían visto antes.

Kei estaba seguro de que no era la primera vez que veían algo así, pero tal vez habían quedado con ciertos traumas, de hecho se sorprendía de que los chicos que le acompañaban no sufrieran de lo mismo, pues habían visto cosas mucho peores en todo el camino que tuvieron que recorrer por tantos días.

En el camino, Kei siempre fue muy pensativo, iba al frente todos, acompañado por Yuiji y Takashi.

-Narrador Yo-

Desde mi llegada, toda la historia cambió.

Salvé a personas que deberían estar muertas, superé y evité situaciones que si o si estaban destinadas a pasar y sobre todo, cree vínculos que nunca me imaginé.

Pero por algún motivo, siento que ya no podré hacerlo, al menos no como antes.

No pude salvarlos a todos

En realidad me pesa mucho ver morir a personas cercanas a mi o que se supone estaban a mi mando.

Siento que sus muertes fueron completamente por mi culpa.

Pero ya están muertos, el destino lo quizo así.

Creo que poco a poco comienzo a comprender que no todos podrán ser salvados, y de ahora en adelante mucho menos. La historia que conocía de este mundo terminará después de esto.

Cambie mucho la historia, pero no sé si fue para bien o para mal, no creo completamente en la existencia de Dios, pero no tengo nada más a qué aferrarme, rezo porque todo salga bien de ahora en adelante.

Ahora la historia que pasará es producto de todas mis acciones y desiciones, sin duda es un gran peso por llevar.

Algo si tenía seguro.

Saya... Saeko... Mio... Alice... Y a todos, los protegeré sin importar que pasé, incluso aunque tenga que morir por ellos.

-Narrador normal-

Todo el camino fue en completo silencio, la mayoría estaban demasiado nerviosos y asustados como para atreverse a hacer el mínimo ruido.

Pronto llegaron al muelle, tuvieron que caminar tres cuadras para llegar y por fin lo consiguieron, el problema era que solo había un bote.

El muelle se encontraba en una zona algo abierta y alejada, de cualquier modo no podían hacer mucho ruido.

-Supongo que la mayoría de los zombies está concentrada en las autopistas o zonas residenciales-, murmuró Kei, lo suficientemente alto como para que todos lo escucharán, después de todo nadie hacía ruido y solo dieron un asentimiento.

Incluso el pequeño Zeke dejo de ladrar, parecía entender la situación a pesar de ser solo un pequeño can, Kei pudo pensar que incluso era tan inteligente como una persona.

Inspeccionó el bote con ayuda de Kohta, era un bote de remos, algo mucho mejor.

El problema era el aguante de este.

-Pueden ir sin problemas 10 personas abordo-, Kohta mencionó al verle pensando.

Kei lo miro y asintió mientras miraba a los demás que se encontraban a la espera.

Eran Rei, Himiko, Yuzuriha, Kyoko, Hisashi, Takashi, Yolzin, Saya, Saeko, Mio, Shizuka, Alice, el pequeño Zeke, Yuiji, Hibiki, Ryouta, Yuu, Naho, Leika, dos chicas y un chico de primer año.

Eran 23 contándolos a ellos dos y 24 si contaban al pequeño Zeke como otra persona, aunque claramente no es así.

-Considerando que se tiene que remar y eso sin duda agota muchas energías...-, Kei se encontraba pensando el como se irían evacuando. -Irán 12 personas por viaje-, dijo suponiendo que con dos personas más, no habría problemas.

Kohta estaba de acuerdo.

Entonces comenzaron a evacuar tal y como dijo Kei.

En realidad el plan de evacuación en este momento también incluía otras cosas.

Eran 12 personas, pues 10 serían transportadas además de los suministros y 2 se encargarían de remar de ida y de regreso.

Al volver, esos 2 que remaron descansarán y otros 2 más ocuparían su posición, así sucesivamente, hasta terminar de evacuar a todos.

Los primeros seleccionados para evacuar fueron Saya, Saeko, Takashi, Mio, Alice, Reí, Shizuka, el herido Hisashi, Kyoko, Yolzin y el pequeño Zeke. Quienes remarian en esa primera vuelta, serían Kohta con Hibiki. Todos ellos llevarían además, todo el alimento que traían consigo y algunas armas por si llegara a ver zombies en el lugar.

Aunque Kei estaba algo seguro de que no era así.

-Nos veremos allá-, Kei dijo dándole un pequeño beso a Saya y Saeko, además de un cálido abrazo a su querida hermana.

Entonces ellos partieron sin más contratiempo.

-Por eso confiamos tanto en tí y tu juicio-, Yuiji mencionó con una sonrisa.

Kei también sonrió mirando a los lados.

En realidad no había ningún alma viva.

-¿Será que somos las únicas personas en la ciudad?-, se pregunto al aire.

Los demás lo escucharon y no supieron que contestar, de hecho la pregunta era retórica, por lo cual no exigía respuesta, pero ellos también tenían la misma duda.

Pronto Kei nego con la cabeza, sin duda no eran las únicas personas en la ciudad, estaba seguro de que habían muchas más, lamentablemente todo era propenso a qué serían hostiles.

Era sorprendente como cambio rápidamente todo.

A partir de ese momento vivirían una nueva realidad. Estaban en un apocalipsis, lo más valioso eran los alimentos y las armas, además de sus propias vidas, sin duda lo que se viene es un mundo lleno de violencia.

Minutos después llegaron Kohta y Hibiki muy cansados. Se procedió con el último viaje. Está vez, lo que resta del grupo evacuaria de una vez. Estos eran Kohta, Himiko, Yuzuriha, Yuiji, Hibiki, Ryouta, Yuu, Naho, Leika, dos chicas y un chico de primer año y Kei, en total eran 13 y se llevarían todo el equipamiento que quedaba. Los encargados de remar serían Kei y Yuiji.

Así, el escape de la ciudad fue un éxito, una vida se perdió, pero se pudieron salvar muchas más.

-En la Isla-

Una vez llegaron, vieron que los chicos se habían instalado en una pequeña casa que había en el lugar.

En realidad no era una casa, era una tienda de trajes de baño.

Vio como Takashi y Yolzin estaban sentados afuera junto al pequeño Zeke que jugueteaba un poco con la área, mientras que varias voces se podían escuchar desde el interior.

-¿Qué paso chicos?-, pregunto Kei llegando junto a los demás.

-Las chicas se están cambiando-, Takashi respondió algo apenado.

Apenado porque todos le miraban directamente.

Incluso Kei, que minutos después no pudo soportarlo más y comenzó a reír.

-¡JAJAJAJAJA!-, era la risa de todos los recién llegados, incluso Yolzin que estaba a su lado no evito comenzar a reír.

¿El motivo?

Takashi llevaba puesto un traje de baño demasiado ridículo para todos, parecía una tanga, pero demasiado graciosa.

-¡FUE LO UNICO QUE ME QUEDO!-, grito el chico completamente rojo de vergüenza.

Los chicos siguieron riendo mientras Naho, Leika, Himiko, Yuzuriha y las dos chicas de primer año entraban para alistarse junto a las demás.

Kei no dijo nada al respecto, consideraba que un buen momento era bueno después de todo lo vivido.

-¿Están ahí o hay una habitación aparte?-, pregunto el rubio después de unos minutos de risas.

Takashi lo miro algo molesto.

-Están en una habitación aparte-, dijo y Kei asintió para después entrar junto a los demás y dejar todo el equipo acomodado, al día siguiente se lo llevarían todo, también se encontraron que había algunas botellas de agua extras, eso sin duda era muy bueno.

Vieron a Hisashi acostado sobre una sábana a un costado del establecimiento.

-¿Ya estás mejor?-, pregunto acercándose a él.

-Takishima-san...-, Hisashi mencionó mientras asentía. -Si, solo que sigo demasiado aturdido, la doctora dice que descanse un poco más-, dijo con una sonrisa.

-Espero que pronto estés muy bien...-, Kei dijo sonriéndole.

-Si, la verdad lamento ser una carga en este momento...-, el chico herido dijo con cierta pena.

Kei se agachó un poco más a su altura.

-No lo eres para nada, amigo, eres una de las personas a quien más confianza les tengo...-, Kei dijo con una mirada sería y finalizando con otra pequeña sonrisa.

Hisashi solo asintió de igual manera, mientras murmuraba un pequeño "Gracias" y se disponía a seguir descansando.

En ese momento Kei se dirigió afuera con los demás chicos.

-Las chicas tardan demasiado...-, dijo Hibiki algo ansioso.

Pero Kei noto algo.

-¿Y Kohta?-, pregunto al no verlo con ellos.

-¡Aquí estoy Takishima-san!-, escucho la voz entusiasmada del mencionado.

Volteo al igual que los demás chicos y todos se llevaron una... Sorpresa.

Resulta que Kohta había entrado y se había puesto un traje de baño, algo... ¿Adorable?... Pero que por alguna razón les hacía sentir un poco de pena ajena.

-Kohta... ¿Por qué te pusiste eso?-, pregunto Kei algo incómodo.

-¿No es lindo?-, pregunto haciendo una pose "adorable".

Aquella pena ajena se incrementó demasiado al verlo hacer eso.

-Para nada...-, murmuraron los chicos mientras temblaban un poco.

Takashi se sentía un poco mejor por ahora no ser él único "ridículo" a su opinión.

Pero después puso una sonrisa perversa mirando a los chicos quienes aún no se habían cambiado para nada.

-Oigan...-, llamo sonriendo perversamente, los chicos le miraron con curiosidad. -A ustedes les hace falta un buen traje de baño...-, dijo sonriendo al saber que los únicos trajes de baño para hombres que quedaban eran parecidos a los que traían el y Kohta.

Kei pareció ponerse pálido por un momento, al igual que los demás chicos.

-¿Por qué no...?-, Takashi iba a seguir hablando, pero una nueva voz interrumpió.

-¿Por qué tanto alboroto?-, era la voz de Saya quien se paró a un detrás de Takashi quien dió un pequeño brinco al escuchar su voz.

Kei la miro y se quedó con la boca completamente abierta al ver lo hermosa que se veía con el traje de baño que había escogido.

Ella pareció captar su mirada y solo se sonrojo un poco, pero sonrió, estaba orgullosa de que a su pareja le gustará su apariencia y su cuerpo.

Kei iba a decir algo al respecto, pero en ese momento alguien más llegó.

-Que bueno que pudimos cambiar las prendas que traíamos antes, ya estaban un poco sudadas...-, era la voz de Saeko quien vestía un traje de baño blanco y al igual que Saya, había cambiado su peinado para la ocasión.

-Saeko...-, Kei murmuró sintiendo que había muerto y en ese instante estaba viendo a dos ángeles delante suyo.

Pronto llegaron Shizuka, Kyoko y las demás chicas, incluida a la pequeña Alice que traía un adorable traje de baño y a su hermana quien también lucía muy hermosa. Todas las chicas, menos Rei quien se había quedado dentro de la tienda junto a Hisashi.

Los hombres no pudieron evitar hemorragias nasales al ver a todas las chicas.

Claro, exceptuando a Kei, que se enojo un poco por como veían a su hermana.

Pero solo suspiro mientras sonreía.

-Se ven hermosas-, dijo de forma general, pero estaba mucho más enfocado a sus chicas quienes se sonrojaron mientras apartaban un poco la mirada.

En realidad no es que fueran tímidas, solo que al estar con Kei no podían evitarlo.

Las demás chicas le agradecieron el cumplido con una sonrisa.

Pronto los demás hombres se recuperaron y comenzaron a elogiarlas. Todos se enfocaban mucho en Shizuka y Kyoko.

Kei solo rio por ello, pues las mayores solo agradecían con sonrisas que hacían que los chicos babearan más y parecieran perros en celo.

Una vez calmada la situación, vieron como Takashi entraba y poco después salía de la tienda con algunas bolsas llenas de trajes de baño masculinos y se dispuso a proponer lo que estaba diciendo antes.

-¿Por qué no se prueban uno?, Les hace falta ¿No?-, pregunto con una sonrisa burlona.

Los chicos se miraron algo nerviosos.

-En tus sueños me pondré algo así...-, dijo Kei mientras solamente se comenzaba a quitar la camisa para gusto de sus chicas y de las demás que tampoco perdieron detalle al ver cómo los demás hacían lo mismo. Kei continuo y doblo sus pantalones para que parecieran una bermudas.

-¿Eh...?-, Takashi se quedó parado sin hacer nada al haber quedado en ridículo nuevamente.

Kei tenía un cuerpo algo trabajado debido al ejercicio y todos los deportes que practicaba antes del apocalipsis.

De igual manera, los demás chicos no tenían cuerpos para nada malos, eso fue algo que la mayoría de chicas apreciaron.

Aunque sin duda Kei era quien ganaba, después le seguía Yuiji siendo el mayor de ellos.

Todos pasaron a dejar sus prendas dentro de la tienda.

Para después salir y ver cómo todas las chicas ya se encontraban disfrutando del mar y la playa.

Los demás fueron, exceptuando a Kei quien tomo a Takashi y a Kohta antes de que se fueran.

-Chicos, ustedes me ayudarán en otra cosa...-, dijo con una sonrisa muy amplia, una sonrisa que prometía hacerles trabajar, motivo por el cual se desanimaron, pero aún así no le desobedecerian.

-¿Que haremos?-, pregunto Kohta.

-Vamos por comida-, Kei respondió mientras se adentraba con ambos y sacaba algunas cosas del equipo que habían traído.

Los otros dos hicieron lo mismo, aunque tenían una duda.

-¿Porque hacer esto?, Ya hay mucha comida-, Takashi dijo algo confundido.

-Quisiera guardar y ahorrar lo más que se puedan esos suministros-, contesto mientras sacaba un cuchillo de combate, una pequeña soga y una bolsa.

Kohta entendió rápidamente, el también saco su equipo, Takashi no sabía muy bien que llevar y era algo orgulloso como para preguntar, por lo cual copio lo mismo que ellos llevaban consigo.

Una vez listos, salieron de la tienda para dirigirse a la pequeña jungla que había.

Los demás chicos no pudieron evitar mirarlos.

-¡Oigan!-, Yuiji llamo su atención.

-¡Vamos por comida!-, grito Kei lo suficientemente alto para que todos lo escucharán.

Algunos se confundieron un poco, pero Saya, Saeko, Yuiji y alguno que otro sonrieron al entender.

-Siempre es así-, dijo Saya sonriendo un poco junto a Saeko.

Ella le miro y también sonrió, en realidad no se había equivocado al escogerlo a él.

-Con Kei y los demás chicos-

Mientras todos se divertían en la playa, ellos tres habían decidido encaminarse a por alimentos, se habían decidido separar y volver en unas tres horas.

Tres horas era mucho tiempo, pero era lo que calculaban antes de que llegara el atardecer.

Kohta fue directamente al mar, era muy bueno en las habilidades supervivencia debido a que recibió entrenamiento de un miembro de las fuerzas especiales británicas en un viaje que hizo para allá.

Kei por su parte, fue en medio de la pequeña jungla, estaba seguro de que podrían encontrar algunas frutas, sus habilidades en supervivencia en este tipo de entornos no eran del todo asombrosas, se especializaba más en el entorno urbano, pero las habilidades que tenía le servirían para buscar alimento entre tantos árboles y hierba.

Takashi por su parte, no tenía ninguna idea de cómo buscar comida o algo por el estilo, pero haría lo posible.

-Tarde-

Las tres horas pasaron muy rápido, demaisado rápido para los chicos que pasaban una agradable tarde en la playa, pero debido a tanto entretenimiento, el hambre se comenzó a sentir.

-¿Dónde está Kei?-, pregunto Shizuka sentándose en la orilla junto a los demás.

-No deberían de tardar-, dijo Saeko.

Y efectivamente, no lo hicieron.

Una vez termino de decir esa frase, vieron a tres siluetas acercarse a lo lejos.

Todos se alegraron.

Mientras con los chicos, ellos venían hablando entre sí.

-Wow Kohta, conseguiste una muy buena pesca-, elogió Kei al ver el racimo de pescados que traía el gordito de lentes.

Kohta solo sonrió con orgullo, sus dientes brillaron mientras le daba un pulgar arriba.

-Y Takashi...-, volteo a ver al otro chico que fue con ellos.

El chico en cuestión venía muy decaído y desanimado, no había conseguido ningún alimento, en sus manos solo llevaba madera y algunas hojas secas.

-Lo siento...-, dijo mirando al suelo.

-En realidad fue una muy buena idea-, Kei dijo felicitándolo.

A pesar de que no consiguió alimento, llevo madera para hacer una fogata, con eso era suficiente.

Kei llevaba una bolsa llena de varias frutas que encontró, había plátanos, mangos y algunos cocos, los cocos eran más que nada para él, pues le gustaba el agua que tenían. Y en el otro brazo tenía algunos huevos de algún ave que encontró por ahí.

Alimento era alimento, eso nunca lo debería olvidar.

Sin duda habían encontrado lo suficiente para la cena del día.

-Takashi, te sugiero tirar las hojas-, dijo Kei recordando algo.

El castaño le miro algo confundido, pero acato la orden y tiro las hojas, ahora solo llevando la madera.

Al llegar fueron recibidos por todos con gran entusiasmo, aunque la doctora Marikawa se pasó un poco, pues casi mata a Kei con sus pechos.

Algo que puso celosos a muchos hombres y a sus chicas.

Después se dispusieron a crear la fogata con la madera que Takashi llevó consigo y comenzaron a preparar los pescados y los huevos que habían traído.

Además de comenzar a comer algunas frutas en el proceso.

Algunos incluso pensaron que comieron mejor de lo que hubieran comido con la comida enlatada.

Y tenían toda la razón.

Pronto la noche cayó y todos comenzaron a caer dormidos debido al agotamiento.

Se refugiaron en la tienda para no quedar expuestos en el exterior, no sabían si los zombies podrían nadar y comérselos cuando entren durmiendo.

Mientras todos permanecían dormidos, solo cuatro personas permanecían despiertas, estás eran Kei, Yuiji, Saya y Saeko.

Todos estaban sentados afuera del refugio, mirando a las estrellas.

Saya estaba sentada a un lado de Kei mientras lo abrazaba y recargaba su cabeza en el hombro de este.

Por otro lado, Saeko estaba en las piernas del mencionado, está vez Saya le había dado su lugar, la pelimorada estaba algo apenada, pero feliz.

Yuiji se encontraba algo separado para no interrumpir.

Por alguna razón Kei los había llamado, aunque se había quedado en silencio por un momento, hasta que decidió comenzar.

-Creo que ha quedado claro que después de esto nos dirigiremos a mi hogar-, dijo mientras disfrutaba del calor y la suave piel de ambas chicas. Los demás asintieron, era algo que se había acordado en la Mansión de los Takagi. -Después de mi hogar...-, Kei se quedó pensando unos momentos. -¿Alguien tiene un plan?-, dijo sorprendiendolos.

Por primera vez Kei les preguntaba cuál sería su próximo paso.

Los chicos se quedaron en silencio.

En realidad Saya deseaba volver después con sus padres y asegurarse de que están bien, pero de ahí en fuera, mientras Kei estuviera a su lado, lo demás no importaba.

Saeko compartía lo último con Saya, mientras esté con Kei no le importaba a dónde ir, aunque si estaba consciente de que los demás chicos querrían ver a sus familiares.

-Yo creo que deberíamos hablarlo una vez estemos allá-, Yuiji mencionó.

Los demás le prestaron atención.

-Muchos de ellos querrán ver a sus familias, yo por mi parte estaré bien donde sea, mi única familia es Yuu, así que no me preocupo demasiado-, termino sonriendo.

Ellos también sonrieron, Kei asintió, lo hablarían una vez se establezcan en su hogar.

Después de un breve tiempo los cuatro volvieron al interior con los demás, Kei fue a dormir junto a Saya y Saeko, ambas abrazadas de cada lado suyo.

Por primera vez después de tantas cosas, pudo dormir con algo de tranquilidad.

La cercanía de todos le producía mucha tranquilidad, más la cercanía de sus dos razones para vivir en ese momento.

Su hermana dormía junto a Kohta, le pareció algo raro, pero Kohta era un buen chico.

-A la mañana siguiente- Narrador Yo-

Era el medio día, todos nos habíamos levantado temprano y rápidamente nos encaminamos devuelta en la ciudad.

Los mire a todos con una sonrisa, ahora parecían más animados que otros días, estaban con más energías.

Me encontraba al frente de todos, con Saeko y Saya acompañándome a cada lado mío.

Sostuve firmemente mi arma mientras me preparaba para avanzar.

-Muy bien, desde aquí comienza nuestro nuevo camino-, mencioné seriamente mientras todos comenzabamos a avanzar.

Todos los demás nos siguieron.

En realidad aquellas palabras tenían un doble significado.

El futuro ahora en adelante era completamente impredecible, no hay manera de que yo pueda saber lo que pasará en el futuro.

Por lo cual, aquí comenzaba nuestra historia, la historia que de ahora en adelante nosotros escribiríamos.

Aquí comenzaba mi historia, la historia de...

"Yo Reencarnando en Highschool Of The Dead".

...

¡Esto ha sido todo!

¡El final de la Primera Temporada llegó!

Me siento muy feliz, porque esta es la primera historia que subí a Wattpad y por fin, después de tanto tiempo pude terminar su primera temporada.

En realidad me costó mucho llegar aquí.

Pueden dejar de leer si quieren, en realidad me desahogare un poco.

Esta historia vio muchas facetas de mi, la comencé en el año 2018 cuando tenía 15 años, era prácticamente un niño todavía, ahora tengo 18.

Creo que se notó mucho el cambio de escritura y la manera de relatar los hechos, se notó mucho más en esta historia, pues fue la que prácticamente me vio crecer.

En realidad me pone muy feliz terminar con esta parte, estaría llorando de alegría si no fuera porque se controlarme.

Agradezco mucho a todos aquellos que llegaron hasta el final de la historia, a todos aquellos que me han acompañado a lo largo de esta historia y que siempre estuvieron a la espera de un nuevo capítulo, muchas gracias.

Tendría muchas cosas más que decir, pero me las guardaré para mí mismo.

¡Muchas gracias!

Y nos veremos en un tiempo con la Segunda Temporada, la cual aún ando pensando en si hacerla aquí mismo o hacerla en una historia aparte.

Todos sus OC's comenzarán a ser introducidos en la Segunda Temporada.

Bye bye ^^