Narro yo

Un nuevo día había llegado, me desperté temprano ya que mi cuerpo se había acostumbrado a entrenar en las mañanas, al intentar levantarme, me dio cuenta que no puedo.

Al levantar las sabanas me encontró con una de las mejores sorpresas de mi vida, ahí estaba Sera abrazándome fuertemente con una gran sonrisa que solo la hacía lucir realmente hermosa.

Pude ver como estaba profundamente dormida, al que no es de extrañarse ya que habían estando haciendo el amor casi toda la noche, solamente pararon en la madrugada porque Sera había llegado a su límite, aunque realmente duro mucho más de lo que esperaba sabiendo que ese era esa era su primera vez, me imagino que saco toda la frustración que había guardado todos estos años.

La tome por la cintura y la acerque a mí, ella inmediata mente me abrazo más fuerte antes de acurrucarse más, se vería realmente muy linda de esa manera.

Pase mi mano por su cabello suave si sedoso, realmente se veía linda cuando estaba así, aunque prefiero sus dos coletas, soy un hombre de preferencias sería una mujer con el pelo corto como el de Sona o una mujer de pelo largo, pero de coletas, por alguna razón siempre se ven lindas así.

Pero como la verdad no me importa mucho después de todo considero a toda mujer hermosa, un regalo de la vida que está ahí para admirarla y apreciar lo hermosa y bella que es, además de respetarlas después de todo son seres que pueden crear vida.

Me quede ahí con Sera, mientras la veía dormir, algo que siempre hacia con Ophis, siendo alguien que aprecia lo bello del mundo, observar lo hermosa que es una mujer es como un pasatiempo para mí que me gustaría hacer por toda mi vida.

-Realmente eres muy hermosa Sera –Le dije, aun cuando ella estaba dormía mientras seguía acariciando su cabello.

Después de un largo tiempo, Sera se está empezando a despertar poco a poco.

-Buenos días amor –Le dije aun estando somnolienta, le di un beso en sus labios ella inmediata mente rodio sus brazos por mi cuelo para profundizar el beso.

-Buenos días amor –Me dijo ella sonrojándose cuando nos separamos del beso, al parecer se avergüenza que la llame así, se ve tan adorable cuando esta así.

-Qué hora son –Me pregunto mientras se sentaba a mi lado mostrándome casi todo su cuerpo desnudo sin ninguna vergüenza, bueno después de todo lo que hicimos anoche, es algo normal.

-Deben de ser como las once de la mañana –Le conteste tranquila mente.

-Qué bueno que tenemos el día libre por el juego de ayer –Dijo mientras se estiraba, verla así parecía que se había quitado un gran peso de encima, ya podía sentir como era más viva, más alegre, como si todas sus preocupaciones habían desaparecido.

Me senté en la cama y la atraje a mis brazos a lo que ella soltó una linda risita.

-Alguna vez te he dicho que te vez muy hermosa cuando sonríes –Le dije con una gran sonrisa al ver que de verdad se veía muy hermosa con esa sonrisa que adornaba su bello rostro.

Sera soltó una risita aún más linda mientras rodeaba sus brazos por mi cuello y quedábamos al frente uno de otro.

-Si siempre me lo dices, y siempre me gusta escucharlo de ti –Me dijo ella con una sonrisa para después darme un beso rápido.

-Bueno entonces déjame decirte que te vez hermosa cuando sonríes –Le dije para su sonrisa creciera y me volviera a besar.

-Gracias, aunque tú no te quedas atrás, ya que eres alguien muy guapo –Me dijo ella mientras pasaba su mano por mi pecho y abdomen que están bien trabajados, eso me hiso sonreír.

Realmente ella era muy alegre y traviesa, así era su personalidad y así es como la amo.

-Te amo –Le dijo con toda sinceridad, a lo que ella me volvió a mirar que me abrazo fuerte mente.

-Yo también te amo –Me dijo ella con una voz un poco quebrada, al parecer quería llorar, después de haber escuchado todo lo que su corazón guardaba, yo solamente la abrase mostrándole mi amor, mi afecto y lo importante que era ella para mí.

Ella se separó de mi un poco después de estar un tiempo abrazados y puso su frente con la mía quedando cerca uno de otro, con nuestras miradas fijas.

-Gracias, por amarme –Me dijo con una voz suave y dulce que expresaba su más sincero agradecimiento, pero también su gran amor y afecto por mí.

-No, gracias a ti por dejarme amarte –Le dije de la misma manera, ella se había convertido en alguien irremplazable en mi vida, y tenerla a mi lado me haría sumamente feliz.

Ambos nos besamos apasionada mente, donde se intensificaba a cada momento, ambos empezamos a dar vueltas por toda la cama mientras empezábamos a excitarnos como a poco, queriendo seguir con nuestro acto de amor.

Pero en ese momento algo nos interrumpió.

*TOC* *TOC*

Alguien estaba tocando la puerta para desgracia de ambos, ya que clara mente ambos teníamos claros deseos de seguir con el acto.

-Si –Grite de manera tranquila a quien sea que estaba tocando.

-Disculpe la molestia señor Yagami, pero los Lord Sitri y Lady Sitri pidieron su presencia para que los acompañen en el almuerzo que se llevara a cabo en una hora –Me dijo la sirvienta del otro lado de la puerta.

-Muchas gracias por informarme ahí estaré –Le dije de manera tranquila, y acepte la solicitud a pesar de que Sera me estaba haciendo un puchero por aceptarla, ya que ella quería seguir con lo nuestro, pero acepte solamente porque este era el último día que estaba aquí ya que en la tarde nos iremos, o al menos yo, con mis palabras la sirvienta se retiró.

-Te vez tan linda cuando haces un berrinche –Le dije de manera divertida al ver el puchero que hacía, se veía tan linda con sus cachetes inflados.

-Yo quería pasar todo el día aquí contigo, mostrándote mi amor –Me dijo ella con el mismo puchero, no pude evitar sonreír por verla así, me alejé de ella y me senté en el borde de la cama.

-A mi también me encantaría pasar todo el día aquí y hacerte mía una y otras veces –Le decía mientras ella se sonrojaba.

-Pero tus padres piden mi presencia y como es el último día que paso en el inframundo antes de volver al mundo humano acepté su invitación, además tú me tendrás cuando tú quieras –Le dije de manera tranquila a lo que ella se acercó a mí y me abrazo por la espalda, dejándome sentir sus grandes pechos.

-Pero no puedo verte todos los días –Me dijo con un puchero, enserio si ella sigue así voy a morir de diabetes, ella y Sakura me mataran uno de estos días por ser tan tiernas.

-No te preocupes, estoy desarrollando un hechizo para solucionar esto –Le dije para gran interés de ella.

-Enserio –Me dijo muy feliz a lo que yo asentí.

-Si estoy trabajando en crear un portar que conecte dos ubicaciones, gracias a mi gran dominio sobre la magia espacio/tiempo, lo terminare tal vez para lo próxima semana –Le dije para que sus ojos brillaran en felicidad al escucharme.

-Cuando la termine pienso poner una que valla de mi casa al castillo Leviathan, de esa manera podrías ir a mi casa rápidamente, incluso podría ir a cenar, incluso dormir ya que sería como una puerta donde al abrirla y entrar estarás en el castillo Leviathan, o retro ceder un paso estarás en nuestro hogar –Le dije para que ella sonriera grande mente.

- ¿Como que nuestro hogar? –Me pregunto ella con duda y yo simple la aleje un poco de mí y le señale su pecho izquierdo, cuando lo vio se sorprendió bastante ya que ahí estaba mi marca la misma que tenía Ophis, era la cabeza de un dragón de color plateado con el borde dorado.

-Eres mía a partir de ahora, nadie te va alejar de mi lado, eres mi novia, muy pronto mi prometida y en un futuro mi esposa, eso ya está decidido, por eso es "nuestro hogar" ya tu ahora eres parte de mi familia, por ende, ese también es tu hogar –Le dije con una sonrisa mientras ella seguía mirando su marca, en un momento ella volvió a verme, sus ojos estaban llorosos.

Inmediata mente ella se lanzó sobre mi yo la recibí en mis brazos, puso rostro en mi pecho y lloro, lloro fuerte mente, mientras me decía repetida mente "Gracias", por mi parte yo solamente la abrasé y la consolé diciéndole que cuando la amo, y que nadie o nada la va alejar de mi lado.

Después de que ella se desahogara nos dimos unos besos, le pregunte que si ya estaba más tranquila y ella asintió.

-Todavía nos quedan más de 40 minutos para el almuerzo, que te parece si tomamos un largo y relajante baño –Le dije para que ella me sonriera feliz mente.

-Sí, pero creo que necesitare tu ayuda ya que no creo poder caminar –Me dijo muy sonrojada, algo que no pude evitar reírme por eso, a lo que ella se sonrojo y volvió a mirarme enojada, aunque más que enojada parecía un puchero.

La tome en mis brazos la lleve al baño, cuando ingresamos, no paso mucho tiempo para que se volvieran a escuchar gemidos que provenían del baño.

.

Ahora nos dirigimos al comedor, todavía nos quedaban un poco de tiempo para el almuerzo que estaba programado a las 12pm.

Ambos nos habíamos bañado, no sin antes divertimos un poco, nos alistamos y arregle por completo esa habitación ya que toda ella tenía el olor a sexo.

Después de alistarnos, nos dirigimos al comedor, llevaba a Sera abrazada de la cintura ya que después de aplicarle varios hechizos de curación para que caminara, todavía cojeaba un poco, así que la tome abrase para que no se callera.

Aunque en el camino todos nos apartaban las miradas después de sonrojarse al vernos, esa reacción no me gusto para nada, pero no le di mucha importancia.

Cuando llegamos al comedor ya estaban todos en el lugar, incluso todo el sequito de Sona, aunque todos parecían un poco cansados.

Inmediata mente cuando nos vieron todos y digo todos porque fue hasta los sirvientes que estaban en el lugar se sonrojaron, Ok ya esto me está asustando, al ver a Sera me doy cuenta que también se dio cuenta.

Pude ver Lord Sitri estaba de una manera tranquila sin esa aura hostil hacia mí, al parecer que hoy amaneció de buen humor.

Lady Sitri estaba con un sonrojo en su rostro que clara mente me decía que no preguntara el porqué.

Todo el grupo Sitri tenía ojeras y estaban sonrojadas, nunca nos dio la cara, definitivamente algo paso. Nos dirigimos a los dos campos vacíos y nos sentamos.

Todo el maldito lugar estaba en silencio, enserio ya esto me está incomodando, volví a ver a Sona que se sonrojo fuerte mente con mi mirada y la aparto, volví a ver a Tsubaki y fue la misma reacción, incluso Tomoe.

-Dime hija pasaste una buena noche –Le pregunto Lady Sitri a Sera que rápidamente se sonrojo, en ese momento mi mente hiso "clik", me golpe la cara con mis manos y me volví a Sona que estaba a mi lado.

-Por favor dime que active los sellos de privacidad –Le pregunte a Sona que, aunque no me miro, ella negó con la cabeza.

Sera al ver esto su rostro se volvió completa mente roja, y yo no sabía adonde meterme, no había activado los sellos de privacidad, solamente significaba que todo lo que hicimos anoche fue escuchado por todos ya que las habitaciones estaban casi juntas.

-JuJuJu nunca pensé escuchar a Sera-chan gritar con esa pasión el nombre de alguien –Por el amor de... cuando Lady Sitri dijo esas palabras quería matarme ahí mismo, después resucitar y volverme a matar de la vergüenza, mientras que Sera estaba a punto de desmayarse.

-Realmente eres un hombre que sabe cómo complacer a las mujeres Ryu-kun –Si, definitiva mente me voy a matar, empecé a invocar a Excalibur para darme una muerte rápida e indolora.

-De verdad que Sera-chan y So-chan serán muy felices a tu lado –Por favor para... te lo suplico, mi corazón está sangrando, no puedo con esto, volví a ver a Sona y ella no decía nada solamente estaba ahí totalmente sonrojada con lo que decía su madre, y no hablemos de Tsubaki y Tomoe.

-Todos en la mansión pudieron escuchar cómo Ser... -Fue lo único que llego a decir cuando Sera que estaba al lado de su madre le tapó la boca, yo solo la veía como estaba a punto de desmayarse de la vergüenza.

-Por favor madre... no más te lo suplico –Suplico Sera a su madre que ella asintió, cuando le quito las manos, Lady Sitri tenía una sonrisa divertida y burlona que nadie se la va a quitar, pero lo que me extraña es ver que Lord Sitri seguía sin decir nada, estaba ahí de una manera tranquilo y sereno.

Aunque verlo él y después ver la gran sonrisa y el sonrojo de Lady Sitri, no había que ser un genio para llegar a saber que pasaron una muy buena noche.

En ese momento llego la comida, todas las sirvientas me daban una mirada de arriba abajo con un gran sonrojo, además que su mirada era como si me estuvieran viendo un pedazo de carne, eso me hiso sentir incomodo ya que sentí que mi vida peligraría.

-Oigan es mío, aléjense de él –Dijo Sera abrazándome muy posesiva mente mientras liberaba un poco su aura haciendo que todas ellas salieran corriendo.

Todos estaba sorprendidos, incluso yo al ver a Sera actuar así, aunque me gustó mucho verla celosa, pero como si el mismísimo Lucifer quiere que no esté tranquilo Lady Sitri volvió a hablar.

-Oh Sera-chan esta celosa que alguien le quite a su hombre es tan linda, aunque creo que necesitaras ayuda en otras cosas ya que por lo que escuche, él hiso un muy excelente trabajo contigo –Enserio quien es esta mujer, donde está la amable y tranquila Lady Sitri que he conocido todo este tiempo, esta mujer de aquí no puede ser ella.

Tras de eso Sera solamente se sonrojada sin decir nada y para la cereza del pastel, Sona, Tsubaki y Tomoe, estaban viendo a Sera con una mirada celosa, y a mi aun con su sonrojos y vergüenza, con cierta mirada de deseo.

Yo mejor me quede callado para que todos empezáramos a comer, entre más rápido termine ese maldito almuerzo, será mejor, definitiva mente me era quedado en el cuarto con Sera, aun cuando ellos nos pudieran escuchar, era mejor que estar ahí.

El almuerzo continuo de manera tranquila gracias a Great Red, cuando terminamos todos hablamos de diferentes temas, las cosas se empezaron suavizar para gran alegría mía, sin embargo, sucedió algo inesperado.

-Yagami-san, me permitiría tener una plática con usted en privado –Me pregunto Lord Sitri a lo que todos se callaron y volvieron a verlo.

-No veo porque no, así que si es tan amable de guiarme –Le dije a lo que él simple mente asintió y se puso de pie igual que yo.

- Zeldry –Susurro Lady Sitri a su esposo que solo él pudo escuchar, a lo que le dio una mirada que tranquilizo a ella por alguna razón.

Él empezó a caminar fuera de la habitación, cuando iba a ir Sera y Sona me sujetaron de las manos, pude ver la preocupación legitima en sus ojos.

-Tranquilas, solamente vamos a hablar –Les dije para darle un beso en la frente a Sona y un beso en los labios a Sera.

Ambas me soltaron y me fui por donde se fue Zeldry, siento que esta conversación iba a hacer muy interesante.

Narración Normal

Cuando ambos hombres se fueron, inmediatamente Lady Sitri se volvió a su hija mayor y le dio una gran sonrisa que hiso que Serafall tenga un escalofrió por su espalda.

-Bien Sera-chan que te parece si tienes una charla de chicas –Dijo Lady Sitri de manera tranquila, demasiado tranquila según la maou de coletas.

Y no era la única ya que las demás chicas estaban igual que ella, sin embargo, después de lo de anoche, no podía evitar querer saber sobre esa charla de chicas.

-Sona-sama, creo que iré a caminar un poco –Dijo Saji llamando la atención de todas, él sabía que lo mejor era salir de ahí ahora porque si no su vida podía correr peligro y más aún si eso era una charla de chicas.

Sona asintió en confirmación, y Saji se volvió a donde estaba Lady Sitri y después de una reverencia este se fue de la sala, y se fue a entrenar en algún lado.

Cuando Saji salió todas las miradas cayeron en la pobre Serafall que estaba completa mente roja, había pasado tiempo desde que su madre se había comportado así, ella sabía que era una persona que le gusta avergonzar ya sea a ella o Sona, principalmente era Sona el objetivo de bromas, pero ahora era ella y por la sonrisa de una Sona sonrojada sabía que lo estaba disfrutando.

-Vamos Sera-chan cuenta a tu madre como estuvo, aunque por los gemidos que estaban gritando, creo que fue una experiencia única –Dijo lady Sitri de manera tranquila molestando a su hija que estaba completa mente roja, igual que todas las demás, después de todo durante casi toda la noche ninguna pudieron dormir de escuchar los gemidos de placer de la maou, si bien al principio no entendía que estaba pasando, al escuchar como ella pedía más mientras gritaba el nombre de albino, ya con eso todas entendieron y no pudieron evitarse sonrojarse fuerte mente.

Principal mente tres chicas que su imaginación voló esa noche y se imaginaron a ellas en lugar de la maou, mientras decían el nombre de su amado, en completo éxtasis ya que así era como sonaba la maou.

-Madre, no sigas por favor –Dijo Serafall, ella estaba completa mente roja, ya que eso también le recordó todo lo que hiso anoche con su novio, haciendo que se sonroje aún más, y que no podía negar que fue una experiencia muy única que quería seguir experimentando con su amado novio.

-Vamos hija, esa fue tu primera vez, y a pesar de eso, clara mente se escuchó que lo disfrutaste mucho, incluso vi como no podías caminar muy bien –Decía Lady Sitri con una sonrisa cada vez más grande al ver como su hija se cubría su rostro, ella amaba con todo su corazón a sus hijas, y ver a una de ellas así después de todo lo que escucho anoche cuando su esposo y ella iban a ir a hablar con el albino, hacía que su corazón muy feliz al ver que una de sus hijas había recuperado la felicidad que le habían arrebatado hace mucho tiempo, su verdadera felicidad.

-Si vamos Onee-sama cuéntanos –Dijo Sona de una manera divertida al ver a su Onee-sama de esa manera, mientras que esas palabras sorprendieron a su sequito al verla con esa sonrisa de su rostro, ya que ella era una persona seria, y la única forma de verla así era cuando estaba con el albino.

Su madre no pudo evitar sonreirá desde lo más profundo de su corazón al ver a su segunda hija con esa sonrisa molestando a su hermana, ya que ella sabía que desde que la comprometieron le había arrebato su felicidad, ella solía ser una persona alegre que le gustaba mucho jugar y molestar a su hermana, pero desde aquel momento ella había cambiado y tuvo que madurar forzada mente para enfrentar la realidad de la vida, volviéndose alguien extremada mente seria y estricta.

Verla así realmente le alegro el corazón ya que desde niñas ambas hijas habían heredado su forma de burlarse de la gente.

Serafall al ver a su hermana así, estaba en shock su hermana la había vendido a su madre, su querida y amada So-tan.

-Cómo crees que voy a poder caminar bien después de hacerlo con Ryu toda la noche, después de todo 12 pulgadas es demasiad... -En ese momento Serafall se tapó la boca, había dicho aquellas palabras al sentirse traicionada por su So-tan y dijo aquellas palabras sin pensarlo.

Sin embargo, ya era muy tarde, todas las chicas presentes estaban con los ojos abiertos hasta más no poder, incluso Lady Sitri estaba con los ojos muy abiertos hasta más no poder al escuchar lo que dijo su hija mayor.

Sona, Tsubaki y Tomoe estaban completa mente roja, tanto que pondrían a un tomate en vergüenza por el sonrojo que tenían las tres chicas.

Pero a pesar de su sonrojo, en sus mentes se habían imaginado a su amado con esa arma, al frente de ellas apunto de tomarlas por completo, y se imaginaron gimiendo como lo hacía la maou de coleta la noche anterior.

(Nota: No me vengan con que ellas no son así, ya que a pesar de son serias siguen siendo mujeres, seria mentira decir que nunca han tenido fantasías sexuales.)

En ese momento no pudieron evitar excitarse, aunque intentaron disimularlo, sus piernas se estaban frotando entre sí, al sentir su partí intima caliente.

-Oh, ahora sí creo que mis lindas hijas se sacaron el premio grande con Ryu-kun –Dijo Lady Sitri al salir de su sorpresa de escuchar el arma que tenía su yerno, si bien no pudo evitar envidiar un poco a sus hijas después de todo, eso no se encuentra todos los días y la idea de que apenas es un adolescente, no quería imaginarse cuando madure por completo.

Como toda mujer no pudo evitar excitarse un poco, y es que todavía recuerda como gritaba su hija mayor la noche anterior, solo imaginárselo, no pudo evitar excitarse como toda mujer, pero no iba a pasar de ahí ya que ella ama a su esposo.

Serafall y Sona se sonrojaron aún más si era posible, principalmente Sona, al escuchar las palabas de su madre, la sola idea de que el albino las reclamara no sonaba para nada mal en sus cabezas en ese momento, clara mente Serafall, no le molestaría que lo hiciera otra vez, de hecho, esperaba con ansias la próxima vez que su novio la reclame como suya, aunque a Sona su mente estaba jugando con ella ya que se imaginó a ella y al albino haciendo cosas nada santas, se maldijo a si misma por no controlar sus hormonas.

Por parte de Tsubaki y Tomoe no estaban para nada bien, principalmente Tsubaki que era la más cercana al albino la sola idea que al albino las reclamara estaba haciendo llevar a ambas chicas a la inconciencia.

Mientras que las demás chicas, intentaban con todas sus fuerzas no escuchar esa conversación, realmente estaban pensando en seguir al rubio Sitri que estar ahí ya que tanto como las otras ellas también habían escuchado todo lo que pasó la noche anterior entre la hermana de su rey y su sensei y no podía quitar los sonidos de su mente ya que también estaban recreando la escena, nada más que con otra persona.

Lady Sitri se quedó ahí sin decir nada, decidió que había molestado demasiado a sus amadas hijas por hoy, así que no dijo nada más.

-Por cierto, Sera-chan, Serena (Lady Phoenix) nos invitó más tarde a tomar el té –Dijo Lady Sitri sorprendiendo a la mencionada ya que ella no era de ir a eso por estar con sus deberes o su tiempo libre con su Ryu que siempre aprovechaba y se iba su casa.

-Solo me dijo que le gustaría hablar contigo sobre algunos asuntos –Serafall estaba un poco curiosa al saber que eran esos asuntos.

Después de eso la sala se había tranquilizado dejando aquel tema tan vergonzoso para la maou olvidado... al menos por ahora.

Narro Yo

Momentos antes - En otro lugar de la mansión Sitri.

Acabo de salir del comedir, seguí un poco alejado a Lord Sitri, realmente tenía mucha curiosidad de que era lo que quería hablar, ya que desde el principio no le he agrado para nada y me a tratado muy hostil mente, la única razón por la que no he ido demasiado lejos como para golpearlo es por Sera y Sona ya que a pesar de que no me guste el sigue siendo su padre.

Caminamos por unos pasillos que nunca había visto, hasta llegar a una habitación, el entro y me espero en la puerta, me hiso una señal para que pasar y lo hice.

Inmediata mente supe que este lugar era el su estudio, un lugar con bastantes libros y todo lo que un lugar así puede ofrecer.

El cerro la puerta y camino hasta el escritorio y me invito a sentarme a lo que yo simple mente acepté y me senté, quedando freten uno de él. Nos quedamos unos minutos mirándonos sin decir nada, realmente me estaba cansando de eso.

-Sucede algo Lord Sitri –Le pregunte de manera tranquila a lo que él solamente negó.

-No, solo quiero saber qué fue lo que vieron mis hijas en ti –Fruncí el ceño cuando dijo esas palabras tan groseras, enserio que si me molesto.

-No fue lo que vieron en mi si no lo que puedo hacer, y eso es hacerlas felices, algo que usted no ha logrado –Le dijo seria mente, el frunció el ceño con mis palabras a lo que ya con eso estaba bastante satisfecho.

-Sé muy bien que no he podido hacer felices a mis hij... Fue lo único que lo deje decirle antes de interrumpirlo con un poco más de enojo.

-Tras que lo admite y sabe, nunca hiso nada para solucionarlo y solo ignoro ese hecho –Le dije con claro enojo en mi voz y expresión.

-Que querías que hiciera, me obligaron, no pude hacer nada –Me dijo de manera tranquila que solo hiso aumentar mi enojo, golpe la mesa con fuerza.

-Luchar por ellas, eres su padre con un demonio, y ni siquiera pudiste hacer feliz a una de ellas –Le dije bastante enojado, enserio unas palabras y este tipo ya me tiene alterado, después de lo de anoche me di cuenta de todo lo que Sera tuvo que pasar y estoy seguro que Sona también, ya que a pesar de que ambas son hermanas sus actitudes son demasiado diferentes, es como si forzaran a Sona a madurar razón que explicaría de su seriedad y su porfa de hacer las cosas estrictamente.

-Crees que no lo intente, el consejo me prohibió –Me dijo enojado, pero tanto como lo estaba yo.

-Entonces lo matas y ya, eres su padre, tu deber por encima de todo era velar por la felicidad de ella, era soportar sus cargas mientras ellas sonríen, protegerlas de todo incluso del inframundo si era necesario, pero por tu maldito orgullo y tu estúpido deseo de poder te hiciste aun lado y dejaste a tus hijas sin ningún maldito soporte, a Sera la mandaste a la guerra quitándole todo lo que tenía, incluso su felicidad, y a Sona mejor no quiero saber qué fue lo que ocurrió para que la obligara a madurar de esa manera –Le dije casi gritando mientras mi aura salía un poco.

-QUE QUERIAS QUE HICIERA –Grito muy enojado cuando se levantó a lo que yo me levante también.

-PELEAR MALDITA SEA, ERES SU PADRE TU PRINCIPAL DEBER ES PROTEGER A TU FAMILIA, PONTEE AL FRENTE DE TODO Y RECIBIR TODO LO QUE VENGA, SI OBLIGARON A SERA ENTONCES DEMUÉSTRALES QUE NO LO IBAS A PERMITIR, Y SI CONTROLARON O OBLIGARON ALGO A SONA ENTONCES MATA A TODOS SI ES NECESARIO –Le grite, enserio que este tipo es uno de los que más me molesta, si no fuera por Sona y Sera, este pedazo de imbécil ya lo hubiera matado ya hace mucho tiempo.

-SE QUE FALLE, LES FALLE A ELLAS, lo admito, es por eso que quería hablar contigo –Me dijo esta vez con una expresión seria en su rostro.

-Qué quieres de mi –Le dije mientras lo miraba seria mente pensando en que le había pasado mientras no miraba ya que a pesar de que antes grito nunca expreso su hostilidad hacia mi como antes o su desaguado y es que, desconocido para mí, él estaba pensando en todo lo que escucho la noche anterior cuando estaban en mi cuerpo, todo lo que Sera y yo hablamos.

Ese era el motivo de su cambio ya que ahí fue donde se dio cuenta de su error, y por fin había abierto los ojos.

-Quiero que las protejas –Esas palabras me dejaron un poco aturdido, vi como él se sentó nuevamente a lo que yo también lo hice.

-Sé de mis errores, las amo mucho y solo quiero verlas felices, algo que tu logras, así que por eso te llame –Me dijo mientras agachaba su cabeza, ok sea lo que sea que allá pasado parece que le afecto mucho.

-Sé que peleaste contra Loki, y pudiste mantener una pelea con él, eso ya demuestra tu poder a tu edad, sé que solo seguirás creciendo en poder, por eso te pido que las cuides –Me dijo a lo que yo lo volví a ver seria mente.

-Estas intentado obtener algún beneficio de mí, tal vez un heredero poderos –Le dije con el ceño fruncido mientras incrementaba mi aura más que antes, pero el solo negó.

-No, pido que las protejas, no como un demonio o como líder de la casa Sitri, te lo pido como un padre que siempre ha querido el bienestar de sus hijas, que a pesar de que no estuvo cuando más lo necesitaban y sé que tengo que cargar con ese error por el resto de mi vida. Lo único que quiero es ver a mis hijas felices eso es todo, algo que tú puedes lograr –Me dijo a pesar de que estaba con el ceño fruncido estaba realmente muy sorprendido de sus palabras.

Pudo escuchar su arrepentimiento, y sentir que su deseo era sincero, realmente que fue lo que habrá pasado para que el cambiara de la noche a la mañana además de que no me ha reclamado por lo que hice con Serafall.

-Levanta la cabeza, aun cuando no me lo pidas yo siempre las protegeré, sin importar que suceda –Le dije sincera mente, todo mi enojo se fue, no puedo con una persona así, realmente este tipo era muy extraño, aunque me alegro que ya no sea hostil.

-Serafall Sitri ahora es mi novia y mi futura esposa, la amare y la protegeré, aunque me cueste la vida, sobre Sona no se sabe dónde llevara todo, sin embargo, te doy mi palabra que, aunque no estemos juntos que haré todo lo posible para protegerla y verla feliz –Le de manera calmada y tranquila.

-Gracias, de verdad te lo agrades –Me dijo a lo que to le dije que no era nada.

-También quería disculparme por mi comportamiento hacia ti todo este tiempo –Se disculpó, ok definitivamente no entiendo nada algo realmente paso.

-Que fue lo que paso para que cambiaras tanto tu idea de mi persona, y tu forma de pensar –Le pregunte directa mente ya no entendía nada de este hombre que estaba al frente mío.

-(Suspiro) Anoche mi esposa y yo íbamos a ir a agradecerte por todo lo que hicisteis por nuestra hija, pero sin querer escuchamos lo que estabas hablando con nuestra otra hija –Ya con esas palabras entendí todo, escucharon todo lo que Sera se había guardado en su corazón, eso explicaría el total cambio.

-Me di cuenta que ella te ama, y se perfectamente que tú la amas a ella –Me dijo mirándome a los ojos, yo me quede callado después de todo si, la amo, la adoro y la quiero desde lo más profundo de mi corazón.

-Su felicidad es a tu lado, entendí eso cuando la escuché hablar, todo lo que dijo me hiso darme cuenta de lo que había hecho, por eso me disculpo contigo, te falte al respeto desde el principio sin importarme conocerte, sin darme cuenta quien eras, te desprecie –Me dijo y si lo recuerdo, nuestro primer encuentro, fue realmente emocionante.

-Con los días te seguí despreciando, y cuando ayer me di cuenta de todo esto, también me di cuenta que no creo que haya alguien mejor para mis hijas, eres alguien con grandes principios, eres alguien recto y firme en tus decisiones, no retrocedes y solo sigues adelante y solo quieres proteger a tus seres queridos, un hombre así para mis hijas no puedo encontrar un mejor candidato para ellas –Me dijo esta vez una manera tranquila mirándome a los ojos.

-Me estas dándote permiso de estar con tus hijas –Le pregunte no muy seguro de entender que quería decir con todo eso, el solamente asintió, algo que no pude alegrarme, ya que no importa lo que pase seguía siendo el padre de ellas dos, si bien no me importaba mucho su permiso ya que con el de Lady Sitri me bastaba, ahora que lo tengo por muy extraño que parezca me alegra, ya que al menos ahora no tendré problemas con la casa Sitri.

-Veo que de verdad tu mentalidad tuvo un gran cambio –Le dije a lo que él me volvió a ver, me levanté y le extendí la mano para desconcierto de él.

-Ahora que te has ganado un poco de mi respeto, empecemos de nuevo, así que, Hola mi nombre es Ryu Yagami, el actual Dragón de la Sabiduría y el Conocimiento –Le dije, dándole una segunda oportunidad, después de todo lo que hemos pasado por este mes, el me miro sorprendido por unos momentos para después levantarse y darme la mano con una sonrisa.

-Mucho gusto Yagami-san, Mi nombre es Zeldry Sitri actual cabeza del clan Sitri –Se presentó, así debió de ser desde un principio, una tranquila presentación intentando llevarnos bien, yo por él es el padre de mi novia y amante y él porque yo era la el novio y amante de su hija.

Nos volvimos a sentar y hablamos o intentamos hablar de manera tranquila, él me preguntaba como conocí a sus hijas y yo le preguntaba sobre la forma en que era con su familia.

.

Después de hablar por un tiempo con Lord Sitri, pudimos llevarnos mejor que antes, yo conocí su otro lado, el lado bueno y mientras que yo le mostré el mío ya que hasta ahora solamente nos mostrábamos nuestro peor lado.

Cuando termine de hablar pase la tarde con Sera que me pregunto qué había pasado con su padre, pero yo solo le dije que habíamos hablado y ya, a pesar de su lindo puchero no le dije nada.

Así que pasamos lo que quedaba de la tarde con ella, un tiempo a sola entre nosotros, ya en las tres de la tarde aproximada mente me estaba despidiendo por ahora de Sera y que todos ya nos íbamos, en un tren privado de la familia Sitri.

Me despedí de Lady Sitri y solo le extendí la mano a Lord Sitri que la acepto, para gran Sorpresa de los presentes, solo su esposa sonrió al ver eso, me imagino que ya sabía todo.

Y con un beso y un abrazo me despedí de Sera, y todo el grupo Sitri nos fuimos de inframundo.

Narración Normal

-Hija quiero pedirte perdón –Dijo Lord Sitri a Serafall que lo volvió a ver sorprendida ante esas palabras, este se volvió a verla de frente.

-Me comporte como un estúpido e imbécil frene al joven Ryu, lo juzgue sin importarme conocerlo, sin importarme lo que pensabas –Decía Lord Sitri, mientras que su hija mayor lo veía en shock.

-También sé que no he sido el mejor padre del mundo, te he fallado muchas veces, no te he apoyado cuando debería de haberlo hecho, realmente no me merezco ser llamado padre ya que también le falle a Sona, es por eso que quiero disculparme y ver si puedo recuperar tu cariño y confianza –Dijo Lord Sitri inclinándose a su hija buscando su perdón, el sabiendo muy bien que si bien su relación no es muy buena, desde que tuvieron aquella conversación en la cena el primer día había perdido todo respeto y aprecio de su hija.

Sin embargo, estuvo un tiempo así esperando una respuesta de su hija, pero nunca llego, cuando levanto la cabeza para ver a su hija fue recibido por un fuerte golpe en el rostro por cortesía de Serafall.

-Eso es por todo lo que nos hiciste pasar a mí y a Sona –Dijo Serafall extremada mente enojada, para después darle un segundo golpe.

-Eso es porque nunca estuviste ahí para nosotras –Dijo Serafall, pero esta vez con una voz quebrada y algunas lágrimas bajaban de su rostro mientras le daba otro golpe en el rostro que lo hiso caer al suelo y le saco la sangre.

-Eso es por la forma en que trataste a la persona que amo con todo mi corazón –Dijo Serafall llorando mientras Lord Sitri se dejó golpear, sabía que se lo merecía, por eso no vio a su hija, pero sabía muy bien que estaba llorando algo que le partió el corazón ya que a pesar de todo él amaba a sus queridas hijas y ver a una de ellas lo destrozada.

Sin embargo, en ese momento vio cómo su hija se agachaba y lo abrazaba, mientras lloraba en su pecho.

-Esto es porque al fin volviste a hacer aquel padre que tanto ame cuando era una niña –Dijo Serafall llorando en el pecho de su padre, ella estaba enfadada con él, incluso furiosa, pero él era imposible odiarlo, después de todo era su padre y aun recordaba como en su niñez siempre jugaban y pasaba tiempo con ella.

Lord Sitri le bajo unas lágrimas en sus ojos al escuchar lo que dijo su hija, abrazo a su hija mientras la consolaba, se dio cuenta de todo el daño que le había hecho no solo a Serafall, si no también a Sona.

-Perdona hija –Fue lo único que dijo mientras lloraba, él se dio cuenta desde que sucedió aquella guerra él había cambiado, lo había cambiado, así como su forma de ser, como su forma de pensar, y hubiera seguido así, si no fuera por cierto albino, agradeció mental mente a Lucifer Original por haber hecho que sus hijas conociera al albino.

Lady Sitri estuvo viendo toda la escena sin decir o hacer algo, sin embargo, en su bello rostro tenía una hermosa sonrisa de felicidad, miro por donde se fue su hija y su sequito, así como el albino.

-Gracias –Susurro ella pensando en el albino que ya sea consiente o inconsciente mente había ayudado a su familia a que se volvía única como lo fue en un principio que, aunque apenas estaban empezando, ese era el primer paso.

-Qué te parece si invitamos al joven Ryu en otra ocasión, solamente nosotros tres, Sona y él –Dijo Lord Sitri a su hija que sintió.

-Eso me encantaría –Dijo Serafall, alegre de que al fin pudiera recuperar a su padre, además de que ahora su familia había aceptado a su amado novio en su familia.

-Gracias Ryu-chan –Susurro Serafall para ella misma agradeciendo al albino que tanto ama ya que por alguna razón hiso que su padre volviera a hacer como era antes, pero sin que ella o alguien más se diera cuenta su marca, soltaba un hermoso, pero leve brillo de color plateado con dorado.

Narro Yo

Me encontraba en un vagón del tren Sitri que estaba completa mente oscura, solamente había una lámpara prendida a mi lado ya que estaba leyendo un poco mientras íbamos al mundo humano ya que, así como vinimos. así nos vamos.

Mientras que una mano estaba sosteniendo el libro con el otra estaba acariciando leve mente el cabello de Tomoe que había venido a hablar, pero al estar oscuro el vagón y por mi aura tranquila, se relajó tanto que se durmió, la acosté en mis piernas y le empecé a dar caricias en su cabello, ella se durmió profundamente con una linda sonrisa en su rostro.

Y no era la única ya que del otro lado en mi hombro se encontraban Tsubaki a recostada a él, ella también estaba completa mente dormía, había venido un tiempo después de que Tomoe había llegado, cuando la vio dormida en mi regazo pude ver los celos en sus ojos algo que me hiso sonreír.

Así que sin decirle nada la atraje a mí, y le di un suave beso que ella acepto después de recuperarse de mi repentina acción.

Con cuidado tome su cabeza y la puse en mi hombre rápida mente se había quedado dormía mientras la rodeaba con mi aura, realmente se vea tan linda durmiendo tan pacíficamente.

Sin embargo, cuando estaba en mi lectura y acariciando el cabello de Tomoe pude sentir un fuerte sentimiento de agradecimiento y amor, sin embargo, por alguna razón sentía que era Sera.

No entendí que estaba pasando, sin embargo, estaba 100% seguro que eran los sentimientos de Sera que había sentido, lo deje pasar por ahora, pero decidí investigar después, así que con una sonrisa y en un Susurro de decirle "Te amo" esperando que le llegara a ella, sin saber que aquellas palabras habían llegado a ella, al menos el sentimiento de ella.

Narración Normal

- Inframundo - Castillo Phoenix –

Serafall y Lady Sitri iban entrando en la mansión Phoenix, ambas habían sido llamadas por Lady Phoenix.

-Es bueno verlas a las dos –Dijo Lady Phoenix con una sonrisa recibiendo a ambas chicas.

-Gracias por su invitación Lady Phoenix –Dijo Serafall educada mente.

-No te preocupes por las formalidades Serafall, ahora estas fuera de tu trabajo, además tanto tu como tu madre con viejas amigas –Le dijo Lady Phoenix de manera tranquila.

-Es bueno volver a verte Serena –Dijo Lady Sitri a su gran amiga.

-Lo mismo digo Celesti –Dijo Lady Phoenix a su gran amiga, ambas chicas se abrazaron, desde que eran jóvenes eran muy buenas amigas, junto a Lady Gremory y Lady Agares.

Las cuatro chicas siempre han sido muy buenas amigas y a pesar del tiempo su amistad siempre se ha mantenido.

Las tres chicas pasaron a la residencia hasta que llegaron a una habitación donde las estaba esperando Ravel.

-Serafall-sama, Lady Sitri, es bueno tenerlas en nuestro hogar –Saludo la rubia Phoenix educada mente, pero todo se fue al... por Serafall.

-Kya, sigues siendo tan linda Ravel-chan –Dijo Serafall que se apresuró a abrazar a la rubia, desde que le dijeron que esta era una visita informal, su comportamiento serio y tranquila desapareció y saco su verdadera personalidad, su personalidad burbujeante y alegre.

-Jajaja al parecer Serafall está de muy buen ánimo –Dijo Serena al ver la actitud de la maou, algo que ya todos la conocían ya que ella se caracterizaba por ser así, aunque cuando la situación lo merita su actitud se forma seria.

-Bueno eso es algo normal después de todo tuvo una muy buena noche –Dijo Celesti con una sonrisa divertida, haciendo que su hija la volviera a ver, con una expresión de súplica en su rostro haciendo que su madre tenga aún más ganas de seguir la conversación.

- ¿Enserio? –Pregunto serena un poco interesada por el tema ya que nunca había listo a su amiga con esa gran sonrisa y a la maou con una expresión de desesperación.

-Sí, pero será tema para otra ocasión –Dijo Celesti dándole un respiro a su hija... por ahora. Las cuatro chicas se pasaron a la mesa que había cerca, los sirvientes vinieron rápido y repartieron un poco de té y unos aperitivos, después de hablar temas al azar por un tiempo Celesti hiso la pregunta que tanto, se esperaba.

-Bueno Serena, es muy bien que nos invitaras a tomar el té, pero ambas sabemos que este no era el motivo por el cual nos llamaste verdad –Dijo Celesti de manera tranquila mirando a su amiga con una mirada acusadora.

-Parece que me conoces demasiado bien –Dijo Serena a su amiga con una sonrisa divertida.

-Nunca fuiste buena para ocultar cosas, eres demasiado directa –Dijo Celesti devolviendo la sonrisa a su amiga, mientras las otras dos chicas solamente se quedaban ahí sin decir nada, aunque Ravel tenía su mirada hacia el suelo un poco sonrojada.

-Bueno, iré directamente al punto, quisiera que tú y principalmente tu hija me hablen sobre Ryu Yagami –Dijo Serena de manera seria pero tranquila sorprendiendo a ambas chicas Sitri y sonrojando aún más a la rubia Phoenix.

-A qué se debe eso –Pregunto Serafall un poco sorprendida, aunque su madre ya se hacía una idea al ver a la hija de su amiga.

-Bueno como ya deben de saber, todo el inframundo sabe que tú, estas con una relación con alguien, nadie sabe a certeza abierta quien es, fuera de un grupo pequeño de persona, siendo yo uno de ellos, y ya que estas en una relación con él, me gustaría saber un poco de él –Dijo Serena mientras miraba a la maou sorprendida por ese comentario, la verdad no se había dado cuenta que de eso en el inframundo, aunque la verdad no le importa mucho, después de todo ella era feliz con él y nadie le iba a quitar esa felicidad.

-No tengo ningún problema sobre eso, aunque me gustaría saber él porque tu interés sobre él –Pregunto interesada Serafall, ya que era muy extraño que le preguntara sobre eso.

-Eso se debe a que, mi hija aquí presente le gustaría poder volver a verlo, sin embargo, no conozco nada sobre él, y al saber que tu estas más cerca de él, pensé que tal vez me podía hablar un poco de él –contesto Serena de maneara tranquila, pero Serafall volvió a ver a la rubia Phoenix un poco sorprendida y recordó que su novio se llevaba muy bien con ella, o por lo menos él tenía cierto interés en ella.

-Bueno no veo porque no, que les gustaría saber –Pregunto Serafall de manera tranquila.

-Primero me gustaría saber cómo te sientes a que él tenga ya una esposa y una hija –Pregunto Serena, ya que desde que supo sobre eso, se molesto ya que su hija se había deprimido por el asunto.

-La verdad no me molesta, a pesar de que no me ha dicho quién es su esposa, no me hace sentir inferir o menos que ella, ya que él me dijo, que no importa cuántas mujeres tenia, si eran solo cinco o diez, él siempre me iba amar de la misma forma que ama a su esposa ya que a pesar de que era su esposa no significaba que la amara más ya que para él todas son importante y nos ama y respeta de por igual a todas –Dijo Serafall feliz al recordar como su novio siempre la ha tratado, siempre le gustaba como él le hablaba, como la abrazaba, como la hacía sentir querida y no menos que otra persona.

Esas palabras sorprendieron a las tres chicas que escuchaban, ya que, si bien Celesti había hablado con él en varias ocasiones haciendo que conociera algo de su carácter, no conocía nada de cómo era con las chicas.

Por parte de Serene estaban sorprendidas por eso, realmente era muy extraño que un hombre trate a sus chicas de la misma manera, siempre había una preferencia.

Mientras tanto Ravel escuchaba eso con gran asombro haciendo que la imagen que tiene del albino crezca más ya que las pocas veces que se ha topado con él siempre la ha trato muy bien.

-Bueno conociendo su carácter no es muy difícil de creer –Dijo Celesti de manera tranquila.

-Que quieres decir –Pregunto Serena a su amiga.

-Ya debes de saber que, durante el último mes, él estuvo quedándose con nosotros, clara mente aproveche para hablar con él en varias ocasiones y realmente es una persona con un muy buen carácter y principios –Dijo Celesti, sorprendiendo a las dos Phoenix sobre eso.

-Incluso logro que mi esposo lo aceptara como yerno de nuestras hijas –Volvió a decir Celesti con una sonrisa mientras Serafall se sonrojaba.

-Estás hablando enserio –Pregunto Serena a su amiga al escuchar que Lord Sitri aceptara como yerno sabiendo cómo era la actitud de él esposo de su amiga.

-Sí, aunque al principio tuvieron diferencias, al final pudieron arreglarlo –Contesto de manera calmada.

-Disculpe Celesti-sama, porque dijo anterior mente "hijas" –Pregunto Ravel un poco confundía.

-Eso se debe a que también Sona está detrás de él, al parecer apenas se estaba conociendo, pero creo que ambos van a poder formalizar su relación en un tiempo –Contesto Celesti sorprendiendo ambas chicas nueva mente, principalmente a Serena al saber la actitud fría y estricta que tiene la segunda hija de su amiga, realmente nunca pensó que llegaría alguien que le robara el corazón.

-Realmente es una sorpresa –Comento Serene sin ocultar su asombro.

-La verdad no solo ella, ya que dos piezas de Sona también están detrás de él incluso una de ellas se lleva mejor que con mi hija... al menos por ahora –Dijo Celesti dejando nuevamente a ambas Phoenix sorprendidas.

-No tienen que sorprenderse tanto, Ryu-chan es una persona realmente cariñosa y amable, cuida y protege con su vida lo que él considera importante, en este caso sus seres queridos, se esfuerza mucho y da su mayor esfuerzo y ayuda a quien puede y todo eso es porque quiere sentir orgullosos a sus padres, ya que fue todo eso lo que ellos le enseñaron –Dijo Serafall con un toque de tristeza en la última parte, recordando cuando su novio le conto de ello.

-Algo paso con ellos –Pregunto Serena no muy segura de sí quiere saber.

-Sus padres murieron desde muy joven, gracias a los genes de su padre desde muy pequeño estuvo consiente del mundo, a los tres años perdió a su madre por una enfermedad, y tres años después su padre murió de soledad al no tener a su único amor, la soledad lo ataco y murió –Eso dejo callado todos en la sala nadie decía nada.

-Es por eso que él es así, ya que su madre siempre le hablaba como debería de ser y actuar, literal mente su madre lo educo mientras que su padre lo entreno por tres años antes de dejarlo solo, después de eso, el me conto que viajo por el mundo luchando, sobreviviendo por el mismo, y durante uno de sus viajes se topó conmigo y me salvo de aquel entonces –Dijo Serafall con una sonrisa triste al recordar todo eso, realmente se sentía un poco triste de todo lo que ha vivido su novio de niño.

-Es por eso que él defiende a alguien si alguien le critica su educación ya que es una de las cosas que él más aprecia ya que es un recuerdo de su madre y se entrena fuertemente recordando siempre a su padre –Termino de decir Serafall, Celesti ahora si estaba totalmente segura que no había un mejor hombre para sus hijas, si alguna vez dudo ya no lo hiso más.

Serene se sintió un poco mal por como lo trato al principio, lo había juzgado sin ni siquiera saber nada de él, sintió un poco de vergüenza por su comportamiento, después de todo en ese momento sintió y vio que el chico no era malo, y sus intenciones eran honestas desde que le dijo que no estaba interesado sentimental mente en su hija... al menos en ese momento.

Ravel tenía su cabeza agachada, tenía leves lagrimas queriendo salir de sus bellos ojos al escuchar la vida que tuvo el albino, que había despertado esos sentimientos.

-De hecho, es por eso que lo amo tanto y a la vez lo admiro –Dijo Serafall con una gran sonrisa a lo que las tres chicas la volvieron a ver.

-Su esfuerzo de seguir adelante, su valor de nunca rendirse, su determinación de vivir, y su fuerza de luchar tan dura mente toda su vida, y a pesar de todo lo que vivió el nunca miro hacia a tras o se rindió, siguió su camino, mientras la educación que le dio alguna vez su madre lo hacía un hombre admirable, cariñoso, amble, dedicado, comprensivo y protector, y el entrenamiento que le dio su poder solamente lo hicieron volverse más y más fuerte con el motivo de proteger y defender a sus seres queridos –Dijo Serafall con una sonrisa tranquila recordado todo lo que su novio le había contado sobre sus aventuras y el cómo se sentía sobre eso.

Sin embargo, lo que Serafall no se había dado cuenta era que su sonrisa y su mirada expresaban un gran amor, así como sus palabras, cuando se refiere del albino, mostrando que verdadera mente lo está muy enamorada de él, ya que incluso su madre nunca la había visto con esa expresión.

Serena se sorprendió al ver a la hija de su amiga de esa manera ya que nunca la había visto así, aunque la más sorprendida era Ravel al escuchar todo eso, no pudo evitar hacer que su corazón latiera fuerte mente al escucharlo, pero también sentía un poco de celos increíble mente al ver la expresión de la maou y al saber que ella esta con su la persona que ella le había tomado un gran "aprecio".

-Serafall me gustaría preguntarte algo, o mejor dicho decirte algo –Dijo Serena a lo que la mencionada la volvió a ver.

-Como ya tienes conocimiento, el joven Yagami y mi hija tiene cierta razón especial con él, y me gustaría saber tu opinión sobre esto ya que, quiero que mi hija estudie en el mundo humano y me preguntaba si el joven Yagami aceptaría tenerla bajo su protección –Dijo de manera seria, pero tranquila Serena a la maou que se sorprendió por eso mientras que Ravel bajo su mirada y se sonrojo ya que ella sabía que era ella misma si podía hacer eso, si bien al principio se negaba, se había dado cuenta que estaba en una relación con la maou y aprovecho esa oportunidad para persuadir a su madre.

Sin embargo, se sintió feliz de volver a ver al albino.

- "Muy pronto" –Se dijo ella misma en su mente mientras escuchaba las palabras de la maou.

----------------------------------------------------------------------------------

Gente ayudarme a recordar ya que estuve buscando, pero no puede encontrarlo y no estoy muy seguro... yo le puse nombre a Lady Sitri, si bien me acuerdo del nombre de Lord Sitri, no me acuerdo si le puse nombre a ella, por favor una ayudita si alguien recuerda si lo hice o no.

El hecho de que alguna mujer se excite o se sonroje por Ryu, como en este caso con Lady Sitri que a pesar que se excito no significa que valla y se engañe a su esposo con Ryu solo por eso, o con Grayfia cuando se conocieron que ella se sonrojo, eso no significa que le gusten, nada más admiten y aceptan que el albino tiene algo que les pone así, pero nada más.

Como vieron les puse nombre a Lady Phoenix y Lady Sitri, ya que la novela no ha mencionado sus nombres... que yo sepa, si en algún momento lo revelan, les cambiare el nombre por los reales, así que mientras que no digan sus nombres se llamaran de esa manera. Lady Sitri: Celesti – Lady Phoenix: Serena.

Ya casi aparece mi linda y Tsundere Phoenix, como vieron ya se está preparando para ir al mundo humano.