Al momento de pasar al consultorio, noto que es de las primeras veces que nos mantenemos callados, inclusive Hee Chul solo se queda observándola después de un tenue "adelante, por favor".

Repaso el consultorio, es amplio, lo equiparon bien, tiene bicicletas conectadas a computadoras, cables por todos lados, debo admitir que es un poco aterrador.

Es hechizan te ver lo concentrada que está escribiendo en la computadora, al grado de aun no notar nuestra presencia, o simplemente nos está ignorando.

-doctora, buen día- dice el manager logrando hacer que retire la mirada de la computadora para por fin mirarnos.

-buen día, supongo que ellos son el grupo que espero desde ayer- mientras habla regresa a escribir –hoy puede solo quedarse Kim Hee Chul, es con el único que trabajare hoy.

El único feliz con la decisión es Hee Chul, ya que felizmente se dirige al escritorio sentándose frente de ella.

Permitiendo que todos salieran del consultorio no pude evitar mirarla, sus manos son pequeñas, su pelo liso negro, que enmarca perfectamente su pequeño rostro, no redondo pero tampoco delgado, labios bien marcados pero no gruesos y unas cejas negras tupidas adornando sus ojos casi negros, grandes y redondos.

Cuando me doy cuenta que la he observado demasiado, es tarde, ella me mira sin expresión, no sé si está molesta, o le ha agradado mi interés, no veo nada, solo un rostro neutro, indiferente.

Quiero hablarle, quedarme con ella, calmar esta intriga que crece en mí por conocer a esta persona tan indiferente a nosotros, pero cuando me decido a hablar, la mano de Hee Chul se posa sobre la de ella, pero lo que no puedo soportar ver es como ella rompe el contacto visual conmigo, para verlo a él y regalarle una sonrisa, que si me preguntan es la más hermosa que he visto.

Pero a quien quiero engañar todos tienen más posibilidades que yo de conquistarla, y sé que lo intentaran, al cerrar la puerta tras de mí no puedo evitar sentir envidia por Hee Chul, que si bien lo conozco hoy mismo le pedirá salir con ella y no creo que ella se niegue, por algo pidió todo el día con él.

Camino a casa, después de sentirme rechazado antes de intentarlo, acepto la invitación de Ryeo Wook de pasar el resto del día juntos, se la intención con la que me busca, y sé que no le puedo corresponder, pero se siente tan bien tener a tu lado a alguien en los días de soledad.

Mi familia no está en casa, así que tranquilamente podemos relajarnos, conforme vemos una película, pedo sentir como busca contacto, como sus manos delicadamente buscan mi calor.

Sé que está mal, pero no puedo rechazar cuando me besa, no es de quien deseo un beso, pero se siente bien.

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Mientras escribo parte de los expedientes que me pasaron ayer, decido trabajar con el llamado Kim Hee Chul, ya que veo tiene lesiones de aquel accidente, los cuales están afectando su rendimiento hoy en día.

Cuando comienza a quitarse la playera que trae, me tengo que recordar que vengo a trabajar, no a socializar y mucho menos a meterme a la cama con alguien que voy a trabajar, pero es tan atractivo, todos lo que he visto lo son.

Deberían tener un manual de como poder trabajar día a día sin arrancarles la ropa, pero estoy muy segura que no lo hay.

Todo el día transcurre tranquilo, he tenido que ignorar las insinuaciones de Hee Chul constantemente, coqueto pero respetuoso diría yo, planeamos sus terapias y los días que nos tendremos que ver para trabajar y revaluar.

Ya casi al anochecer, hemos terminado.

Y antes de salir dela compañía tengo que rechazar su invitación por un trago, no porque no lodesee, claro que me encantaría, pero aun no me siento lista para aceptar algode nadie, aún no he sanado y no quiero perder mi tiempo recordando un pasadoque no vale la pena recordar.