Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 18 Buenas Noticias

Antes de año nuevo, Johann llevó a Yessabell con la modista, para ver el avance en su vestido, el cual estaba quedando hermoso.
Aprobaron los últimos detalles y ambas regresaron a la casa, para arreglarse para el baile de año nuevo.

Johann había contratado un servicio de banquetes, para no tener que preocuparse por los detalles.
Se colocaron mesas, sillas y mantelería en el jardín que ya lucia algo blanco por la nieve, bajo una enorme carpa que cubría la mayor parte del jardín, en una especie de casa, colocada alrededor de la pista, dejando un espacio en el centro para bailar. Un buen equipo de sonido, una pista de madera falsa bajo todo. Y luces de colores por todas partes. Un gran cartel en el fondo de la carpa, con las palabras “FELIZ AÑO NUEVO 2017” en tonos dorado y plateado.

Yessabell desenvolvió el regalo que le dieron su abuela Monique y Gerard.

Suspiró al ver el hermoso vestido azul marino, largo hasta el suelo, con una pequeña abertura en la parte izquierda de la falda, delgados tirantes y cuello en v. Liso, sin detalles, solo un delgado cinturón en la cintura, haciendo que la parte de la falda, callera en una hermosa cascada sobre el suelo. Y en el fondo de la caja, unos hermosos tacones plateados, a juego con el vestido, con pequeños diamantes incrustados, en la parte de atrás de los tacones.

El conjunto era hermoso y Yessabell sabía con qué lo combinaría. El collar y los pendientes que le habían regalado los padres de Joey.

Se vistió y arregló su cabello de lado, dejando que sus hermosas hondas castañas, cubrieran su hombro derecho, dejando algunos mechones sueltos en el hombro izquierdo.

Una vez terminado de arreglarse, Yessabell salió de su habitación, para encontrarse con Ezra, quien estaba a punto de tocar la puerta.

Ezra abrió la boca para decir algo, pero nada salió, sus ojos se abrieron como platos y no sabía que decir. Yessabell le sonrío y él extendió las manos, tomándola por los hombros, para regresar la adentro de la habitación.

Le dio un suave beso y se apartó, bajando las manos lentamente.

-Te ves increíblemente hermosa esta noche Yessabell.

-Gracias –Se sonrojó y apartó la mirada –Date prisa, tenemos una hora para bajar, y quiero ver si mi mamá necesita ayuda con algo.

-Como ordene, mi lady –Ezra le dio otro beso y se apresuró al baño, para tomar una ducha y arreglarse.

Cuarenta minutos después.

Ezra en un hermoso traje, de un negro noche y una corbata azul marino, a juego con una camisa blanca y zapatos negros, perfectamente limpios y lustrados, cabello peinado de lado y alisado con un fijador.

Tomó a Yessabell del brazo y ambos bajaron al salón, donde Johann daba las últimas órdenes a los meseros, mientras algunos invitados se congregaban en el jardín, bajo la carpa.

Johann, en un hermoso vestido negro, con lentejuelas, que le llegaba hasta los pies, luciendo radiante, a lado de un Joey en traje azul rey, completamente prendado de ella, no se habían percatado de la presencia de los chicos, en el salón.

-¿Necesitas que te ayudemos con algo mamá? –Preguntó Yessabell caminando hasta ella.

Johann volteó y al verla, se llevó las manos a la boca, en una expresión de sorpresa.

-¡Yessabell, pero mirate nada más! –Exclamó sosteniendo sus hombros para verla bien –Eres toda una mujer, en qué momento creciste mi niña...

-Mamá, por favor –Interrumpió riendo y avergonzada –Tú también te ves increíble.

-Cariño, muchas gracias –La soltó y volteó a ver a Ezra –Bueno, pero si todos han decidido verse mejor que nunca –Se agarró del brazo de Joey –Espero que luzcan igual de radiantes el día de nuestra boda.

-Así será –Aseguró Ezra sonriente.

-Bueno, pasen al jardín, recibiremos a los últimos invitados y después los alcanzamos –Pidió Joey sonriente.

-Ok, los vemos en un rato –Yessabell salió al jardín, de la mano de Ezra.

Nicolás y Renata, ya habían llegado, con sus respectivos padres, todos estaban sentados en la misma mesa, hablando y riendo, como la gran familia que eran.

Sus abuelos y los padres de Joey, estaban en una mesa, con uno de los hermanos de Joey, su esposa y dos niños pequeños. Algunos de los amigos del trabajo de Johann, con sus familias, en las mesas cercanas.

En el fondo de la carpa, se habían reservado dos mesas, una para Yessabell y su familia y otra para la tía Cristina y Hannah, junto con sus familias.

El lugar se estaba terminando de llenar, cien invitados en total. El DJ, estaba poniendo algo de Christina Perri.

Yessabell caminó saludando a todo mundo, presentando a Ezra como su novio, hasta llegar a la mesa de Nicolás y Renata.

-¡Hola chicos! –Saludó alegremente.

Ambos se levantaron para saludarla.

-Yessabell, feliz cumpleaños atrasado –Dijo Renata, envolviéndola en un fuerte abrazo –Te dejamos tus regalos con Johann, esperamos que te gusten –La soltó y le sonrío ampliamente.

-Muchas gracias chicos, no debieron molestarse –Aseguró con timidez.

-Feliz cumpleaños hermanita –Repitió Nicolás, dándole un abrazo tambaleando –Que sean muchos, muchos más –La soltó y Yessabell le sonrío.

-Gracias, de verdad, espero que se la pasen muy bien –Yessabell volteó a ver a los padres de Nicolás y Renata –Buenas noches Señores Galen, Señores Valenzuela –Les estrechó la mano y les dio un beso en la mejilla, a los cuatro –Hola Miriam –Saludó a la hermana menor de Renata, de 13 años.

-Hola Yessabell –Saludó el señor Galen –Después de mucho tiempo, podemos verte en persona.

-Ahora solo te admiramos en las revistas –Agregó la señora Galen riendo.

-Por cierto, no te hacen justicia –Intervino la señora Valenzuela –Eres muy hermosa querida.

-Y estamos felices de que nuestra hija, tenga buenas amistades como tú –Añadió el señor Valenzuela.

-Yo estoy feliz de que mi hermana conozca a una top model –Apuntó Miriam sentada, con los ojos brillantes.

-Muchas gracias por sus halagos, yo también estoy feliz de tenerlos como amigos, y con respecto a lo de top model, no lo soy –Aseguró viendo a Miriam –No es lo mío, por desgracia.

-No importa, te ves increíble y yo colecciono todas las revistas y periódicos en los que has salido, espero que algún día me los firmes –Confesó Míriam decidida.

Todos en la mesa rieron.

-Miriam, por favor –Pidió la señora Valenzuela –No incomodes a Yessabell con tus comentarios –Terminó dándole una mirada de regaño.

-No se preocupe, no me molesta –Yessabell le dedicó una sonrisa amable y después volteó a ver a Miriam –Seguro que podremos vernos en la boda de mi mamá, tal vez pueda sentarme a hablar contigo un rato y puedes traer tus revistas –La chica asintió y Yessabell le sonrío –Si nos disculpan, quiero saludar a unas personas.

-Claro, adelante –Todos le sonrieron y volvieron a sentarse, mientras Yessabell se alejaba con Ezra de la mano.

-¿Vieron que guapo es su novio? –Susurro Miriam, antes de que Yessabell dejara de oírlos.

-Creo que les causaste buena impresión y ni siquiera dijiste algo –Comentó Yessabell riendo, mientras se acercaban a la mesa, donde estaban sus tías.

-No hace falta, mi sola presencia es cautivadora –Ezra le dio un beso y Yessabell le sonrío.

-Pero que vanidoso eres Ezra Miller –Lo tomó de la mano y caminaron hasta la mesa de sus tías –Tía Cristina, tío Lucas –Ambos voltearon y se levantaron rápidamente. Hannah, con un niño de un año en sus brazos, se levantó también, junto con su esposo –Es bueno verlos a todos.

-Yessabell, corazón –Cristina le dio un abrazo nostálgico –Hace mucho que no nos vemos y tengo que saber de ti, a través de las noticias y revistas.

-Se la pasa mucho en el las redes sociales al pendiente de ti y lo que todos comentan –Agregó Lucas riendo.

-No es cierto, no le creas a este –Cristina le dio otro abrazo rápido a Yessabell –Mirate –La vio de pies a cabeza –Estas hecha una mujer y seguro Anthony estaría encantado contigo –Yessabell le dio una sonrisa un poco triste.

-Yessabell, no te pongas triste, me tienes a mí y a Joey. Sabes que puedes contar conmigo y Cristina, cuando lo desees –Aseguró Lucas dándole un abrazo realmente confortante.

-Muchas gracias –Susurró en cuanto se apartaron –Antes de que me eche a llorar... –Bromeó –Quiero presentarles a Ezra –Lo acercó a su lado –Ezra Miller es mi novio. Ezra, ella es Cristina Lovato, hermana de mi padre y su esposo Lucas Harrison.

-Un placer conocerlos –Ezra estrechó la mano de ambos.

-El gusto es nuestro Ezra –Concedió Cristina sonriéndole.

-Un gusto Ezra, espero que hagas feliz a nuestra sobrina –Pidió Lucas seriamente –No queremos que vuelva a salir herida.

Yessabell se removió un poco incomoda.

-Les aseguro que no le haré daño, no está en mis planes –Informó Ezra serio, viendo de Cristina a Lucas –Prometo que no le hare daño, no la hare llorar, a menos que sea de felicidad.

-Eso espero –Anunció Hannah, uniéndose a la charla, con su esposo.

-Hannah –Yessabell le dio un abrazo y se apartó rápido -¿Cómo está el pequeño Mason? –Preguntó viendo al niño –Hola Mario –Saludó al esposo de Hannah.

-Todos bien, gracias –Contestó Hannah alegre –Así que ¿Este es el famoso Ezra Miller? –Preguntó viendo a Ezra.

-Lo hemos visto en los tabloides, los hombres se han puesto celosos por su suerte –Agregó Mario, estrechándole la mano a Ezra –Mario Esparza, amigo de la familia.

-Ella es Hannah –Presentó Yessabell –Es la socia de mi mamá, en la imprenta. Y su pequeño Mason.

-Un gusto conocerlos –Saludó Ezra, sincero –Y sobre lo que escucharon, es cierto, lo único que quiero, es hacer feliz a Yessabell –Le dio un beso en los nudillos a Yessabell y ella le sonrío –No seré como los demás.

-Eso esperamos –Aseguró Lucas, más relajado.

-¿Dónde está Miranda? –Preguntó Yessabell -¿No vino?

-Oh, claro que vino –Intervino Cristina rápidamente –No se lo perdería. Fue al tocador, su novio tiro una copa de vino en su camisa –Terminó con una expresión de pena.

-No paraba de hablar de venir –Informó Lucas riendo –Igualita que su madre.

-¡Yessabell! –Miranda llegó corriendo desde el umbral de la puerta del salón que daba al jardín, su novio corrió tras ella, para alcanzarla. Llegó a Yessabell y la estrechó en un abrazo fuerte, dándole vueltas -¡Te he extrañado tanto! –Exclamó soltándola.

-Yo también Miranda ¿Cómo has estado? –Preguntó sonriente.

-Tenemos que hablar, pero, ¿Te parece si vamos a tu mesa? –Preguntó Miranda viendo a todos.

-Nos vemos en un rato Yessabell –La despidió Cristina y todos regresaron a sus lugares.

Yessabell caminó con Miranda del brazo. Ezra y el novio de Miranda, las siguieron hasta la mesa, donde se sentaría Yessabell, con Joey y Johann, quienes estaban en la puerta, recibiendo a los últimos invitados.

-Bueno, son tantas cosas –Comentó Miranda en cuanto se sentaron.

-Miranda, quiero presentarte a Ezra Miller, mi novio –Interrumpió Yessabell –Ezra, ella es Miranda, hija de Cristina y Lucas.

-Un gusto –Saludó Ezra estrechándole la mano –Yessabell tenía muchas ganas de verte, y yo quería conocer a la famosa prima de la que ella tanto hablaba.

-Pero si ya nos conocemos, aunque no en persona –Aseguró Miranda soltándole la mano –Te he visto en las revistas y periódicos y en las redes sociales y con respecto a lo de famosa. Eso solo es cosa de Yessabell.

-Por accidente –Corrigió Yessabell rápidamente.

-Como sea, lo eres –Miranda volteó a ver a su novio. Un chico alto y atlético, su cabello castaño, en un corte, estilo militar, enfundado en un elegante traje gris, combinando con Miranda, quien llevaba un vestido gris Oxford, de manga larga y cuello en v –Él es Damon Kagel, mi novio –Presentó orgullosa.

-Mucho gusto Damon –Saludaron Ezra y Yessabell, al mismo tiempo.

-Pero si son tan tiernos –Argumentó Damon estrechando la mano de ambos –Dicen las mismas cosas, eso habla de lo conectados que están.

-Son tan lindos –Agregó Miranda haciendo una mueca chistosa –Yessabell te ves hermosa con ese vestido y los pendientes –Miranda acercó su mano y tocó el collar –Un conjunto peculiar.

-Muchas gracias, fueron regalos de mis abuelos y los padres de Joey –Explicó tocando su collar.

-No cabe duda, que el buen gusto viene de familia –Apuntó Damon, en un pequeño acento español.

-Como sea, solo quería decirte, que todos en mi clase, están vueltos locos, quieren que te lleve conmigo un día y te presente, todos son tus fans y cuando supieron que éramos primas, no dejaron de hacerme preguntas por ti, sobre todo los chicos, quienes no dejaban de pedirme tú número y que hablará de ellos contigo –Explicó Miranda rápidamente, moviendo las manos para enfatizar y haciendo muecas –Cuando les conté que te vería en vacaciones, me pidieron autógrafos personalizados y toda la cosa, yo les dije que no se hicieran muchas ilusiones, porque seguramente estarías muy ocupada con tu novio.

-Descuida, no será problema –Concedió Yessabell sonriendo –Por cierto ¿Este año terminas verdad?

-Así es, y adivina qué –Preguntó Miranda sonriente.

-¿Qué? –Preguntó de vuelta devolviéndole el gesto.

-Ya tengo un lugar, donde trabajar. Es un preescolar cerca de mi casa, así podré regresar un tiempo con mamá, en lo que Damon y yo ahorramos un poco –Explicó Miranda exudando felicidad.

-¡Eso es increíble Miranda! –Exclamó abrazándola -¿Y para qué van a ahorrar? –Preguntó apartándose.

-Bueno, tenemos algunos planes –Contestó Damon –Ya que Miranda estudio Ciencias de la Educación y yo Pediatría, podemos ahorrar un poco y después ir a trabajar en algún otro lugar, donde ganemos más y conozcamos otros lugares.

-Sí, bueno la idea es esa, pero no sabemos que podemos hacer después –Agregó Miranda –Por eso lo de los ahorros. Nuestros padres podrán querer seguir pagando nuestros gastos, pero queremos independizarnos.

-Suena a un buen plan –Intervino Ezra –Supongo que lo han estado pensando un rato, y la verdad no muchos se preocupan por la parte de tener un respaldo económico, eso está bien para ustedes, nunca se sabe que pueda pasar en un futuro.

-Exacto –Secundó Yessabell –Me alegro mucho por ustedes y que bueno que planeen seguir juntos.

-Bueno, aunque Miranda dice que aún no planea casarse, esos ahorros podrían servirnos para eso –Sugirió Damon coqueteando con Miranda, quien le dio una sonrisa tímida.

-Ya sabes cómo soy –Explicó Miranda, viendo a Yessabell –Tengo planes de viajar desde hace tiempo y no pienso dejarlos.

-Ok, eso también me gusta –Accedió Damon -¿Por qué no le damos un espacio a los tortolos? –Sugirió –Ya diste tus buenas noticias y aún estaremos mañana, para que terminen su charla.

-Claro, lo siento Yessabell –Miranda se levantó y tomó la mano de Damon –Nos vemos en un rato y mañana seguimos hablando –Dijo unos pasos y después se detuvo, volteando a ver a Yessabell -¿Te importa si nos tomamos una foto? Después te etiqueto en Facebook.

-Ok –Yessabell le sonrío. Miranda tomó la foto, donde salieron los
cuatro, le agradeció a Yessabell, le sonrío a Damon y ambos regresaron a su mesa, dejando a Yessabell, sola con Ezra.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro