Su cuerpo nuevamente reaccionó por la ronca voz, incluyendo las directas palabras que salieron de la boca de Chanyeol. Sus manos agarraron firmemente las sábanas y su cuerpo comenzó a temblar levemente por el nerviosismo. Todo estaba repentinamente pesado y podría jurar que parte de su conciencia se había apagado.

-Yo... no -Su boca apenas y pudo abrirse pronunciado eso-. Tú vas a... A mí... ¿Qué?

Más voces se escucharon y con ellas vino un extraño movimiento de caderas de parte del alto. Quedando frío y con un jadeo atorado en su boca, Baekhyun sólo pudo reaccionar con el instinto de tomar la camiseta de Chanyeol. Por otro lado, él tomó ambas piernas con sumo cuidado y las separó, haciendo que quedaran juntos, en una intimidad que nunca había experimentado.

Observó el rostro de Chanyeol, pero éste no pareció inmutarse por el roce.

-Simulemos.

Los ojos de Chanyeol eran visibles aún con la oscuridad y a Baekhyun se le secó la boca al detectarlos. Su cuerpo se relajó un poco ante la delicadeza con que el otro lo manejaba e intentó buscar una explicación coherente con lo que acababa de decir. ¿Simular? Eso nunca había pasado por su cabeza. Ante su silencio, Chanyeol tanteó terreno y se fue hacia abajo por el área de su cuello mientras pretendía estar besándolo. Aún y haciéndolo con seguridad, Baekhyun podía leer entre líneas que él estaba listo para quitarse si detectaba algún rechazo de su parte. Por un momento sus mejillas se acaloraron por la acción y posteriormente sintió escalofríos cuando los labios de Chanyeol rozaron la extensión de su cuello.

-Puedo pretender tener sexo contigo, Baekhyun -anunció Chanyeol, volviendo a levantarse para mirarlo a los ojos-. No te preocupes, no haría nada literal. Estos idiotas tienen una cámara muy mala, si sólo pretendemos el movimiento se la tragaran todita, pero...

Ahora una completa embestida hizo que los nervios en el cuerpo de Baekhyun se conectaran, dejándolo escapar ahora sí un sonido de sorpresa que fácilmente podía interpretarse como un gemido y se quiso morir. Chanyeol lo miró con ojos determinados y curiosos, totalmente inmerso en ayudarle. Baekhyun llevó sus manos a la boca como si eso eliminara lo que había ocurrido.

Una leve sonrisa apareció en el rostro del de cuarto, tomó sus manos y las dejó nuevamente a los lados.

-El audio está bien, ellos nos escuchan perfectamente -susurró lo más cercano a su oído-. Por lo que tienes que convencerlos de que lo estamos haciendo.

Chanyeol dio un par de embestidas seguidas evitando que pudiera sostenerlo.

De entre todas las emociones que Baekhyun podía estar sintiendo, el miedo fue lo primero que le punzó en el estómago. Sin embargo, aunque Chanyeol era prácticamente un desconocido de cara a cara, era extraña y relativamente fácil sentirse cómodo con él. Incluso en ese tipo de situación -con su corazón corriendo al mil- podía sentir mediante su toque una tranquilidad casi desbordante. Además de que las acciones de Chanyeol estaban casi sincronizadas con sus reacciones: mientras más se relajaba, Chanyeol se volvía más activo.

Con un Baekhyun casi mudo por la sorpresa, Chanyeol podía entender su respuesta con un simple toque.

-Está bien, comprendo si te excitas -repitió el movimiento un par de veces más. Baekhyun elevó su respiración-. Eres gay, probablemente estás frustrado sexualmente y yo no estoy tan mal, ¿o sí? -soltó una pequeña risa, Baekhyun maldijo a su ego-. Yo estaré bien, no reaccionaré, estoy seguro. - Su camiseta fue deshecha al final de esa frase.

Su mente estaba por explotar, se estaba excitando, quería tirarse desde la litera y quedar inconsciente. Un todo de Chanyeol lo estaba poniendo así, no era solo el hecho de aquel roce, sino su voz, la manera en que le entendía incluso sin una maldita palabra y la confianza en sí mismo. La tiembles en su cuerpo no se disipaba, aunque había disminuido. Los movimientos de cadera de Chanyeol estaban volviéndose más rápidos y a través de sus pantalones de algodón podía sentir cómo su miembro estaba creciendo bajo el roce del alto.

Estaba confundido, ¿realmente aquello iba a funcionar? Si Chanyeol pretendía tener sexo con él era muy probable que lo dejaran de molestar, sí. Sin embargo, le preocupaba el hecho de que las personas empezaran a hablar y entonces sería Chanyeol quien podría salir perjudicado.

-¡Ah! Yo... ¡Ugh! -Baekhyun se retorció. Excelente, tu primera palabra y ya estás jodido-. Dijiste que...

Uno de sus pezones fue atacado por la tibia lengua de Chanyeol y fue ahí cuando la cabeza de Baekhyun se fue hacia atrás, casi golpeándose con el metal. El choque del frío y el calor hicieron que se irguiera de una manera rápida. Gimió fuerte cuando se lo llevó entero a la boca succionándolo una y otra vez.

-No pueden escucharte -informó Chanyeol mientras se separaba dejando una línea fina de saliva mirando fijamente a Baekhyun por si mostraba alguna negación-. Tenemos que asegurarnos de que te escuchen. Tienes que, prácticamente, gritar Baekhyun. ¿Estás de acuerdo con esto?

De acuerdo. Bien, tenía que concentrarse.

Los ojos de Chanyeol lo veían preguntándole si realmente quería aquello. Asintió torpemente e intentó tomar la delantera, a fin de cuenta no perdía nada -tal vez un poquito de su dignidad, pero poca le quedaba. Además, Chanyeol estaba dispuesto y guapo y muchas cosas más que un bastante caliente Baekhyun lo tenía bien decidido- entonces, fingió un gemido que más bien pareció un eructo. Chanyeol controló las ganas de reír mientras que él desviaba la mirada genuinamente avergonzado.

Segundo uno: fracaso.

-¿Qué ha sido eso? -molestó Chanyeol mientras se enderezaba para quitarle los pantalones.

No se percató de la acción debido a que estaba muy ocupado recriminándose el haber hecho algo tan estúpido.

-He intentado gemir, maldita sea -respondió entre enojado y tímido-. Es sólo que yo no suelo...

Su voz se debilitó cuando se percató de la acción del mayor. Si sus mejillas pudieran teñirse más de rojo podría llegar un toro contra él. Bien, estudiando la situación, frente a sus ojos Chanyeol le había quitado los pantalones dejándolo en libertad, y una de verdad: su pene salió disparado rápidamente medio erecto hacia arriba. El mayor levantó una ceja, su expresión decayó un poco en una mueca de sorpresa y algo más, Baekhyun no podía identificarlo, pero se quedó un poco incómodo también.

Heteros de mierda.

-Demonios, parece que vas a vomitar -Baekhyun rompió el hielo.

Chanyeol reaccionó tan solo dos segundos después.

-Ah, lo siento. ¿No sueles llevar ropa interior? -preguntó casualmente mientras bajaba las piernas de Baekhyun colocándolas nuevamente debajo de él.

-¿Quién usa ropa interior al dormir?

-Cierto. De verdad. Sí. Muy natural.

Pudo sentir algo de encogimiento en las palabras ajenas, como si hubiera dicho aquello para calmarse o algo así. De todos modos, Baekhyun podía comprenderlo, para alguien heterosexual tal vez era la primera vez que miraba otro pene en vivo tan cerca de su rostro y además que estaba medio erecto. Debió ser algo grotesco y repentino.

-¿Estás bien? -Baekhyun preguntó cuando el otro se había quedado quieto, pero nuevamente, éste reaccionó.

-Sí.

Las piernas de Baekhyun fueron levantadas un poco más, haciendo que su miembro quedara cerca de la propia entrepierna de Chanyeol dentro del pantalón. Éste comenzó una nueva serie de movimientos enfocándose solamente en hacer gemir a Baekhyun por la fricción. No se tardó mucho en hacerlo, estaba ultrasensible y más del plus del alto atacando su oreja, lo único que tenía que hacer era elevar un poco más su voz para que los pervertidos pudieron oírlo fuerte y claro.

Para esas alturas el pene de Baekhyun estaba fuerte y en alto sobre su vientre, sus pezones rojos como unas dulces cerezas y hecho un manojo de nervios por cualquier lugar donde le tocaran. Chanyeol pareció haberse percatado de que ya era hora de avanzar en el tema y se arrastró un par de centímetro atrás para colocar sus manos sobre el trasero de Baekhyun.

Dio un respingo cuando las grandes manos lo tocaron con cuidado y se sintió un poco fuera de lugar. ¿Acaso aquellas personas también podían ver eso?

Chanyeol tomó por detrás la manta y la separó un poco de sus hombros. Se quitó su camiseta y luego se detuvo en seco. Baekhyun lo miró.

-Vas a... ¿Vas a quitarte tus pantalones? -preguntó Baekhyun en un tono escéptico.

Chanyeol asintió.

-Ellos deben ver que me quito mi ropa -dijo con la voz raposa mientras dirigía las manos al elástico de sus pantalones y luego subió la mirada con una sonrisa-. La ropa interior también.

Sexy. Baekhyun ya no podía con lo estúpidamente sexy que se veía Chanyeol. Intentó echarle un ojo con inseguridad hacia su parte baja. ¿Era adecuado mirar? Todo era con fines para la ciencia. Tal vez pudiera utilizarlo después para una tarea. El alto había sacado sus pantalones y los había tirado en un punto donde la cámara viera esa acción, segundos después, su bóxer fue separados de las caderas e igualmente los tiró muy lejos de la litera.

Baekhyun tuvo que mirar hacia arriba para no venirse de una.

Mierda, se sentía pequeño. En todos los jodidos aspectos.

Su mirada quedó en blanco hacia el techo sin saber qué más hacer, tal vez pensar en la inmortalidad del cangrejo era una buena opción. Pero todo se fue al caño cuando sus brazos fueron tomados haciendo que se enderezara.

-Súbete en mí.

Quería llorar. Demonios, quería hacerlo. Su estómago estaba revolviéndose con el simple hecho de sentir apenas el miembro de Chanyeol a carne viva sobre el suyo. ¿Cómo era que no pudiera estar ni un poco levantado? Ni siquiera a mismísima biología tenía una explicación. Todo poco a poco se sentía cada vez más ligero, como si estuviera en un sueño transparente, esperaba que no lo fuera (o tal vez sí).

-Voy a pretender prepararte -declaró Chanyeol mientras hacía que él pasara los brazos por sus hombros y después enrolló la sábana sobre sus cuerpos-. La sábana tapa las acciones, lo único que tienes que hacer es gemir.

Una de las manos de Chanyeol tomó la espalda baja de Baekhyun para poder guiar un poco las acciones mientras que él se acoplaba. El dedo de Chanyeol tentaba la zona en su retaguardia, sólo lo rodeaba. No estaba seguro de cómo se veía el movimiento frente a las cámaras, aunque de entrada se viera turbio por la noche todavía se debía cuidar hasta el más mínimo detalle. Había un pequeño roce de genitales, pero no era lo suficiente como para hacerlo gemir, más bien, eso sólo hacía que quisiera mover también sus caderas para buscar una fricción más placentera. Aunque bueno, Baekhyun comprendía que el mayor no quisiera friccionarse por completo.

-Baek, tienes que gemir -insistió Chanyeol a un minuto de que no saliera ni un sonido fuerte.

Mordió su labio cuando esas palabras rozaron en su oreja. Debido a eso soltó un leve gemido, uno que sólo Chanyeol podía escuchar. No pudo hacerlo más fuerte, simplemente no podía hacerlo. Abrió su boca un par de veces intentando recrear un sonido, uno de esos falsos que tanto gritaban las personas en el porno, pero no podía recrearlo. Eran leves y directos para Chanyeol, sólo para él en su oído.

-Baekhyun.

Baekhyun se agarró más del cuello del mayor, bajando un poco más su trasero y haciendo que por fin sus miembros pudieran tocarse más de cerca. No podía evitarlo, tal vez así pudiera hacerlo mejor. Se sintió extraño cuando en su oído la respiración de Chanyeol se volvió pesada, negó con la cabeza, y algo dentro de su estómago se revolvió.

Había más gemidos pero el volumen era el mismo.

-Lo...Lo siento, no sé cómo debería... -comentó Baekhyun entre leves jadeos-. Yo... ¡ah!

-Joder.

Bien, las caderas de Baekhyun lo traicionaron. Sí, se movía para un jodido roce y así conseguir más gemidos, pero terminó por darle en la dirección equivocaba haciendo que el dedo de Chanyeol entrara un poco en él. Dentro de él. Eran tal vez sólo unos cuatro o cinco centímetros dentro y entró en pánico. Había detenido el movimiento y se aferró fuertemente al cuello de Chanyeol.

Nuevamente sintió la respiración un poco agitada de Chanyeol, sí, ¡porque él había metido el dedo del mayor sin querer!

-Baekhyun...Demonios... Tienes que dejar de apretarlo.

Obviamente una entrada virgen activa su modo de defensa cuando algo intenta colonizar allí. El anillo de músculos alrededor estaba tensado sobre el dedo de Chanyeol y, nuevamente, quería llorar de la pena. No podía fingir gemir, sin querer hizo que un chico heterosexual metiera su dedo dentro de él, es muy probable que para esas alturas los otros chicos de cuarto supieran que algo andaba raro allí y lo peor es que le ha dolido un poco. Quería volver a su hoyo de tristeza y no salir de allí nunca más.

-¿Te hice daño?

Baekhyun apretó los puños alrededor de su cuello. Con un movimiento de cabeza negó, le dolía más el orgullo.

-Baekhyun, gime.

Su cabeza estaba cabizbaja sobre el hombro ajeno y soltó una maldición.

-No puedo fingir -lloriqueó apretando el abrazo.

-Baekhyun.

-Olvídalo, ellos ya han de saberlo de todos modos.

Las caderas de Chanyeol se movieron hacia arriba.

La sangre del menor se heló.

No fue algo provocado para que él gimiera, de eso está seguro. Ese fue un movimiento instintivo, lo supo cuando la respiración de Chanyeol fue más difícil. El dedo ajeno seguía adentro y Baekhyun jadeó cuando se movió un par de centímetros más hacia arriba a la par que su espalda se tensaba.

-Cha...Chanyeol qué...

-Tienes que gemir, mierda -consiguió decir, su voz ya no sonaba tranquila y serena, parecía haberse desesperado consigo mismo-. Ellos tienen que créelo, hemos llevado esto muy lejos. Ahora, si me permites, lo siento, pero si no puedes gemir por ti mismo tendré que provocarlo yo. Golpéame si te lastimo.

El dígito de Chanyeol salió sólo para volver a entrar de nuevo. Se sentía un poco incómodo por la intromisión, pero todo cambió cuando la mano del alto dejó su muslo y lo dirigió directamente a su miembro. Dios mío. Baekhyun gimió de tan sólo el toque, la mano de Chanyeol parecía torpe sobre su miembro, pero cuando logró tomarlo y moverlo de una manera rápida, Baekhyun volvió a gemir.

-Tiene que estar por aquí...

Escuchó la voz de Chanyeol hablando consigo mismo, pero el cómo lo masturbaba hacía que sus ojos se perdieran en el hombro ajeno. Una de sus propias manos quería viajar a su entre pierna para tocarle igualmente, pero cuando estaba por hacerlo, se detuvo a sí mismo a medio camino. Las punzadas en su vientre comenzaron a apuñalarlo una y otra vez, y fue bastante diferente cuando Chanyeol finalmente encontró lo que buscaba. Sus ojos se abrieron y su trasero se vino abajo cuando el mayor logró tocar el punto dulce dentro de Baekhyun.

-Oh... -Chanyeol se alarmó un poco ante el shock de Baekhyun-. Lo encontré.

Cuando no hubo un golpe o negación por parte de un tieso Baekhyun, Chanyeol repitió la acaricia y poco después volvió a gemir en alto cuando comenzó a abusar de su punto allí dentro.

-Pensé que esto era un mito -murmuró Chanyeol volviéndolo a meter-. Gime, Baekhyun.

Y lo hizo. Dolió un poco al principio, pero cuando logró dar de nuevo en el punto esto se disipó. Sus brazos cayeron a los lados moviendo sus caderas donde por delante estaba la mano de Chanyeol dándole atención a su pene y por detrás estaba un dedo dándole en un punto inexperimentado que le mandaba punzadas placenteras. ¿Acaso Chanyeol quería que se corriera o algo así? Porque si era así lo estaba consiguiendo. Sus caderas se movían cada vez más rápido, jadeos y gemidos fuertes salían de su boca, podía jurar que esos chicos pervertidos tenían una erección ahora mismo.

Gimió en desacuerdo cuando Chanyeol dejó su miembro y su trasero para tomarlo de las caderas y aventarlo nuevamente sobre el colchón. Rápidamente el alto puso la sabana sobre su espalda y se colocó sobre Baekhyun volviendo a tomarlo de las piernas, separándolas más y situándose frente a su entrada. Los ojos de Chanyeol estaban muy cerca de los suyos.

-Recuerda que esta es la parte más importante -murmuró Chanyeol dándole una veloz acaricia al pene de Baekhyun-. Tienes que simular que te estoy cogiendo, Baek.

De tan solo oír eso podía jurar que su miembro dio un salto.

Chanyeol dejó escapar un fuerte suspiro colocando su frente contra la de Baekhyun.

-Gime.

Tomó las piernas de Baekhyun y falseó el hecho de estar dentro de él. Por otro lado, Baekhyun simplemente necesitaba imaginárselo. Chanyeol embistió su propio miembro por fuera del trasero del menor, éste gimió como si realmente se la hubieran metido, porque, en su imaginación, así había sido.

Chanyeol lo embistió una y otra vez, disimuló ir lento y luego más fuerte. Había un choque estrepitoso de caderas, las cuales solo eran los roces del pene de Chanyeol contra Baekhyun. La imaginación era algo muy poderosa y él sabía eso ahora mismo. Dentro de su mente, realmente el otro estaba metiéndosela duro y sin pudor, estaba profanándolo sin parar -y que mejor que sin una pizca de dolor, cada vez más rápido. Se imaginaba como si realmente no fuera su primera vez -que aún no está pasando, cabe recordar- como si ellos dos lo hubieron hecho cien veces más antes.

Joder, estaba teniendo fantasías con un chico heterosexual.

-Baekhyun. -Lo llamó de una manera extraña sin dejar de moverse-. Recuerda que tienes que...Tienes que... ah...

Los ojos de Baekhyun se abrieron de una manera rápida, dirigió su mirada al otro quien no dejaba de moverse y lo único que podía ver era su flequillo en su rostro. Sintió algo más duro chocar contra él y de tan solo pensar qué era, sus niveles estaban por sobre pasar los límites. No pudo controlarse más y llevó su mano a su miembro, no sabía si realmente Chanyeol buscaba que llegará de verdad o si quería que lo fingiera también, pero para esas alturas tenía que eyacular sí o sí.

Escuchó otro gemido de parte de Chanyeol.

Mierda.

-Chanyeol -Baekhyun comenzó a mover su mano de arriba hacia abajo-. Estoy... Ugh, ¡Qué, Chanyeol!

El mayor cambió de posiciones de una manera rápida tomando una de las piernas de Baekhyun sobre su hombro haciendo que ambos penes chocaran entre sí, un dedo se coló por su trasero volviendo a atacar el punto y tuvo que morder su propio brazo. Demonios, Chanyeol ya no estaba frotándose con Baekhyun para hacerlo gemir, parecía querer su propia satisfacción también. Porque ese maldito caliente hijo de puta estaba duro.

-¡Chanyeol! -gritó Baekhyun mientras tomaba con fuerza las sábanas con las manos.

Un par de roces más -junto con un dedo abusando su punto- y se liberó fuertemente sobre su pecho agradeciendo a los mil dioses. Podía jurar que le cayó algo de semen a Chanyeol, éste, ante este hecho, se detuvo en seco. Baekhyun aún podía ver una que otra estrella por el orgasmo, pero se dio a la tarea de abrir sus ojos y ver al otro quien mantenía una respiración irregular. Tragó saliva cuando muchas cosas volvieron a su cerebro.

-Chanyeol... -murmuró lentamente.

El nombrado levantó la cabeza con los ojos saltones que tenía y lo soltó como si su cuerpo quemara. Ouch, eso lo lastimó un poco. Las manos del alto fueron a su cabeza -pareció mirar un poco el dedo que había metido dentro de él- y la rascó mientras que sus ojos iban de un lado a otro como decidiéndose qué hacer. Baekhyun miró debajo del ombligo ajeno, Chanyeol estaba erecto, completamente.

-Cha...

-Creo -interrumpió en un susurro-... que ya te dejarán en paz.

Baekhyun lo miró con un poco de terror, Dios mío, qué acababan de hacer. Se habían corrompido mutuamente.

-Buenas noches, Baek.

Y con eso último, el chico bajó rápidamente de la litera y se metió en la cama de Jongdae.

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A la mañana siguiente cuando despertó, Chanyeol ya se había ido a su partido de hockey.

Era jueves por la mañana, sabía que podía levantarse en dos horas, aún tenía tiempo para dormir. Sin embargo, su cabeza pesaba el triple de lo que debería, sus labios estaban más que magullados por los constantes mordiscos a sí mismo y sentía que en cualquier momento iba a echarse a llorar como una niñita por miedo a las consecuencias.

Viendo en retrospectiva no era necesariamente totalmente su culpa -prácticamente fue el otro quien se le vino encima- pero aun así no lo detuvo teniendo esa oportunidad a brazos abiertos.

Gruñó de frustración, ¿por qué la única persona con la que pudo entablar una conversación no sexual había terminado de esa forma con él? Ugh, quería golpearse la cara contra la pared. Reposó su cabeza nuevamente sobre la almohada mientras intentaba contar las líneas sobre el techo.

Un repentino recuerdo de anoche lo abordó haciendo que diera vueltas una y otra vez por el colchón.

-¡Jodido Chanyeol! -gritó al tiempo en que se impulsaba para quedar sentado, se cruzó de brazos mientras que movía la cabeza de un lado a otro evitando la calentura-. ¡Argh!

Saltó desde la repisa de arriba terminando en el frío suelo. Su cuerpo se tensó cuando sintió algo levantarse y luego caer hacia abajo. Bajó su mirada.

Uh-oh.

Había olvidado que estaba desnudo en un día de invierno y la calefacción había sido apagada. Sus vellos se erizaron rápidamente como su boca comenzó a tiritar y maldijo por onceava vez a Chanyeol, el por qué, no lo sabe. Se dirigió rápidamente hacia su closet sacando un par de prendas de ropa y en menos de un minuto ya estaba bajo una ducha caliente. Sus facciones claramente estaban fruncidas y probablemente si una mosca llegara a tocarlo le insultaría hasta verla morir en un hoyo de depresión.

Salió con pereza con una toalla alrededor del cuello. Había mucha tranquilidad, demasiada, originalmente para esas horas los de cuarto año ya estuvieran golpeando su pared. Miró molesto hacia la cámara de seguridad y por puro instinto levantó el dedo de en medio, que se joda quien estuviera detrás viéndolo.

Su celular sonó con el tono de mensaje y pateó el bote de basura que -según él- se había puesto en su camino para joderlo más. Abrió la bandeja de entrada viendo el nombre de Jongdae, casi iba a golpear el celular contra el suelo, pero pudo leer antes el mensaje.

[De Jongdae:

Tengo tres preguntas para ti.]

Baekhyun tragó saliva ante la seriedad. Jongdae la mayoría de las veces enviaba mensajes llenos de emoticones, con frases molestas llegando una y otra vez uno detrás del otro. Suspiró intentando no dejar caer al suelo su teléfono, demonios, él sabía algo.

Le contestó con una simple palabra.

[Para Jongdae:

Suéltalo.]

Se quedó sentado esperando con paciencia una respuesta mientras que en su cabeza un sin fin de posibilidades se apoderaban de ella. Cuando escuchó el tono de mensaje, lo abrió inmediatamente.

[De Jongdae:

Uno, ¿qué le hiciste a Chanyeol? Dos, ¿qué te hizo Chanyeol a ti? Tres, ¿qué tan grande es su pene?]

Su celular terminó roto en el suelo.

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Durante la tarde no recibió ni un acercamiento de parte de nadie. No es que él lo quisiera -demonios, no- era el simple hecho de que no estaba acostumbrado a no recibirlo. Ahora eran más las miradas que lo tenían aturdido, ya no eran aquellas que lo juzgaban o se lo comían con los ojos, si no eran ahora como personas orgullosas de algún tipo de cosa.

Entró a la biblioteca alrededor de las cinco de la tarde de ese día. Estaba completamente decidido a darle fin a su reporte, y como ya no lo acosaban, podría estar muy tranquilo sin necesidad de tener un ojo viendo hacia atrás cada quince segundos. Se maldijo cuando divisó al grupo de cuarto desparramados en los sofás de la primera habitación. Como era la costumbre, estaban haciendo más ruido de lo que deberían y el bibliotecario no se encontraba cerca para callarlos.

Baekhyun tomó con fuerza el libro que tenía en las manos e intentó retroceder, pero como él no era alguien especialmente cuidadoso, fue culpa de su mochila cuando está topó con la puerta de vidrio haciendo que uno de los chicos lo mirara.

-Ooooh. Es Baekhyunnie.

Cuando aquel chico fortachón dijo su sombre toda aquella docena de chicos voltearon simultáneamente.

No sabía si sentirse aliviado por el hecho de que los ojos de aquellas personas ya no lo miraran con lujuria o asustarse por aquella nueva mirada extraña. No podía definir exactamente qué era, pero no le gustaba porque no sabía de qué trataba. Respiró hondo cuando sus pies se movieron rápidamente para dirigirse a la sala de cómputo del lugar.

-Sólo vengo a trabajar -habló lo más firme que pudo-. Con permiso...

Sus palabras no fueron escuchadas cuando uno de los chicos se puso en su camino.

-Ah, vamos Baekhyun. -Aquel chico fingió un puchero-. No te preocupes, ya no te vamos a hacer nada.

-¡Sí! De todas formas, ya no hay nada que queramos arrebatarte.

Los chicos rieron.

Se encogió de hombros cuando el mismo chico quien se había puesto en su camino le dio palmaditas en la cabeza.

-Los chismes vuelan amigo -dijo nuevamente el más alto-. Si no lo supiéramos ya estarías en una orgía improvisada en este momento.

Baekhyun tragó saliva cuando la mano acarició todo su rostro. Mierda, no quiere ni imaginarse qué pasaría si aquellos lobos supieran que todo era otra mentira.

-Oh, ¡Kris! -Una conocida voz se escuchó desde la puerta del almacén-. ¡Deja de asustarlo!

Segundos después, Baekhyun divisó a Jongdae saliendo de aquella habitación con una sonrisa socarrona en su rostro. Pudo respirar un poco a la vista de una persona reconocible, sus hombros se relajaron en el momento que su amigo se colocó a su derecha. Por otro lado, detrás de él salía otro chico más pequeño con el cabello revuelto, labios hinchados y unos lentes de pasta enormes caminando tímidamente hasta detrás del mostrador; Jongdae no estaba demasiado diferente.

No necesitaba ser muy inteligente para saber lo que pasó.

-Jongdae, mi gran colega. -Ese tal Kris se rio-. ¿Fue divertido? Te hicimos una gran guardia, como lo ves -apuntó a todos sus amigos.

El nombrado asintió jocoso.

-Agradezco su disposición por cuidar de la biblioteca mientras Kyungsoo estaba ocupado -levantó las cejas un par de veces al chico quien sólo se encogió simulando ver unos papeles.

Baekhyun pudo ver como ese Kyungsoo dio un brinco de la impresión al bajar la vista pero no se movió.

Jongdae volvió al rubio sin apartar la sonrisa.

-Pero ahora mi querido Baekhyun necesita terminar su gran proyecto, así que sería mejor que se retiraran.

-Oh, sí -dijo el rubio mientras hacia una señal con la mano para que todos los demás se levantaran-. ¡Nos vamos chicos! ¡Hoy hay fiesta de celebración por las finales!

Jongdae se unió a los aplausos y chiflidos mientras que Baekhyun cerraba momentáneamente sus ojos. Le hacían doler la cabeza.

-Recuerda la gran fiesta de hoy, Jongdae. -Kris le dio una palmaditas mientras caminaba hacia la salida-. ¡Necesitamos que tú, nuestra estrella, esté allí para celebrar!

-Claro que sí. ¿Cuándo me he perdido yo de una fiesta?

-¡Nunca!

Hubo lo que parecía ser una calurosa conversación entre los de cuarto y Jongdae hasta que casi todos estuvieron afuera. Jongdae, como buen portero que era, se despidió de todos sus mayores quienes parecían tenerle más respeto a él.

-Uh-oh.

Jongdae volteó hacia un chico quien parecía mirar por los alrededores.

-¿Qué sucede, Yixing? -preguntó.

-Ja. Hemos perdido a Chanyeol en el camino -comentó de una manera confusa mientras que sus labios se fruncían en un lindo puchero-. Podría jurar que estaba con nosotros hace unos minutos.

Jongdae levantó una ceja pasando la mirada hacia Baekhyun quien parecía sordo a todo lo dicho y asintió dándole unas palmaditas a Yixing.

-No te preocupes, ya volverá en sí.

Sin más, aquel último chico salió por la puerta no sin antes ajustar su bufanda. Jongdae cerró la puerta y caminó unos pasos hacia Baekhyun quien mantenía aún los ojos cerrados.

-¿Ahora te enrollas con el bibliotecario? -molestó Baekhyun cuando sintió a su amigo acercarse-. ¿No le pegaste el resfriado?

Abrió los ojos y divisó cómo Jongdae parecía indiferente a lo dicho. Éste mantuvo su rostro sereno, pero la sonrisa leve no desaparecía, eso le hacía sentirse un poco -muy- transparente hacia él.

-Fui rechazado por Minseok de nuevo.

-Y vas y te lías con el bibliotecario -repitió sin importar si hería sus sentimientos o no-. Gran paso para que confíe en ti.

Por primera vez en mucho tiempo la mandíbula de Jongdae se tensó y su sonrisa desapareció de su rostro.

-Me mandó al demonio -murmuró Jongdae con una voz más baja.

Baekhyun ahora sí sintió un poco de pena por él. Claramente es su mejor amigo, pero él debería saber que siendo un hijo de puta no podría conseguir enamorar a alguien tan inteligente como Minseok. Suspiró dándole una mirada de entendimiento.

-Dejemos de hablar de mí. -Después de unos segundos, la sonrisa gigante se posó en los labios de Jongdae-. Byun Baekhyun, tienes que decirme qué cojones pasó anoche.

Suspiró mientras se frotaba la frente. Ugh, él realmente no esperaba hablar sobre eso tan rápido. Ni siquiera sabía por sí mismo qué pasó exactamente, los ojos de Jongdae seguían clavados en los suyos de una manera demandante. ¿Sería adecuado contarle la verdad? Dios, no. Su cerebro simplemente expulsó esa opción, ya sabía de lo que su amigo era capaz de hacer si se entera de algo que iba "contra las reglas". Si se enteraba que mentía de nuevo, era su jodido fin. Así que tomó aire e hizo a su cerebro comenzar a trabajar.

-Supongo que lo que escuchaste -contestó de la manera más indiferente que su cuerpo pudo. Caminó unos cuantos metros dirigiéndose al bibliotecario quien tenía un ojo hacia ellos.

Jongdae, quien se había cruzado de brazos, achicó sus ojos siguiéndolo por detrás.

-Escuché muchas cosas, Baekhyun -dijo mientras se colocaba a un lado del mayor y miraba cómo éste le entregaba su identificación a Kyungsoo para el acceso-. Muchas. Cosas que hasta tú mismo te desmayarías si las oyeras.

Baekhyun aguardó a que el bibliotecario tomara sus datos en la computadora. Sus dedos estaban incrustados en la pequeña tabla que dividía el mostrador, tenía que controlarse.

-Entonces dime qué escuchaste -pidió sin mirar a su amigo.

Jongdae se rio.

-Te dejé al cuidado de mi amigo -comenzó-, y al parecer terminaron haciendo una porno a través de las cámaras de seguridad. Cabe recalcar que tú eras un virgen decidido a no ser follado por cualquiera y que ese amigo, Chanyeol, era el chico más heterosexual de toda esta jodida universidad. En pocas palabras tuviste sexo de una noche con alguien a quien apenas conoces.

Okay. Baekhyun tuvo que tragarse el nudo -inexplicable- que se formó en su garganta. Se sintió un poco sucio, y no entendía el trasfondo de eso. Él no hizo nada, pero, nuevamente, tenía que hacerle creer a las personas que sí lo hizo y lo estaba cansando un poco.

Pero tenía que simular.

-Bueno, no es muy diferente a lo que hice -su mente le dio un golpe interno por sonar tan vulgar-. Sólo se dio.

Kyungsoo le había entregado cuidadosamente su identificación de nuevo. Por otro lado, Jongdae no cambió mucho su expresión.

-¿Es eso verdad? -La voz de su amigo sonó más como una acusación-. ¿Es realmente éste el Baekhyun que yo conozco?

-Jongdae.

-No -Baekhyun podía escuchar como si su amigo estuviera decepcionado, no había sonrisas-. ¿Sexo de una noche? ¿Tú? ¿En tu primera vez? Sé que eres más que eso, Baekhyun.

Baekhyun podía irse directo a la sala de cómputo, pero su sangre hirvió en sus venas. ¿Por qué le estaba reprochando? Miró a su amigo quien seguía en un modo defensivo con sus brazos cruzados.

-¿Por qué te importa? -cuestionó con un tono desagradable-. Finalmente, yo, el puto virgen de la universidad ha sido desvirgado. Eso es lo que tú querías, lo que todo el mundo quería. No veo el problema de cómo o con quién sucedió.

-No eres el único involucrado en esto -refutó su amigo, después tosió-. Chanyeol lo está. Y él no es sólo un quién, es mi amigo también. Y es extraño, jodidamente extraña toda esta situación. En todo el partido de hoy él estuvo completamente fuera de sí.

Cuando Baekhyun se enojaba podía sacar todo su lado hipócrita llena de mentiras en cualquier situación. Sus brazos estaban a sus lados y se acercó a Jongdae sin desconectar el contacto visual.

-Supéralo -pidió de una manera que cualquiera le hubiera soltado un golpe en la cara-. No me importa. Chanyeol fue un puto barco para salir libre de las jodidas hormonas de sus amiguitos.

-¿Entonces desde el principio fue por eso que no te importó el que él entrara? Claro, un chico heterosexual -preguntó su amigo sin ninguna emoción en especial-. Tenías todo calculado.

-Ajá.

Ya no podía dejar de mentir.

-Parece que salió herido.

La garganta de Baekhyun intentó bloquearse ante esas palabras. Pasó saliva una y otra vez lubricándola para que más palabras pudieran salir.

-Eso le hará pensárselo dos veces antes de que se aviente sobre mí de nuevo. Yo no se lo pedí.

Jongdae soltó una corta carcajada.

-Tampoco lo detuviste -comentó finalmente su amigo mientras se despegaba del mostrador, suspiró-. Sólo no termines como yo, Baekhyun.

Por un momento la mirada de Baekhyun se posó en el bibliotecario quien parecía meramente en tensión por la discusión. Sus ojos sobre el suelo y con uno de sus labios entre sus dientes. El mayor volvió a su amigo quien tenía toda la índole de irse próximamente de allí. Le dolía la cabeza, no le encontraba sentido a aquella discusión. ¿Qué tan de malo era que haya perdido -de mentira- su virginidad con Chanyeol? ¿Qué tiene de diferente a otro cualquier chico? Debería sentirse aliviado por el hecho de que ya no tendría más problemas, ¿entonces por qué se sintió tan triste cuando su amigo comenzó a atacarlo de esa forma?

-Tú mismo lo dijiste, Baekhyun -continuó Jongdae-. Siendo un hijo de puta no llegarás a nada.

Apretó sus dientes, juraría estar aguatándose demasiado para no soltarle un golpe a su amigo.

-No comprendo tu molestia -se defendió nuevamente.

Jongdae suspiró.

-Chanyeol es muy abierto en sus emociones y tú le has movido a algo que no debiste -dijo calmado-. Pero no te importa.

Quería gritarle en la cara Jongdae que no pusiera palabras en su boca. Que él no era esa clase de persona y que, sí, que sí le importa y lo sabe porque tiene un maldito dolor en el estómago desde anoche. Sabe que no debía aceptar lo que el mayor le propuso, pero que no podía evitarlo. Sabe que ahora mismo está comportándose como Jongdae lo hacía en sus inicios, pero le gritaría también que todo es una actuación. También quiere decirle que no, que él no se acostó en realidad con Chanyeol, pero que sí, que sí hizo algo que no debía. Quería gritar y patalear diciéndole que en realidad tenía mucho miedo por lo que sintió con Chanyeol.

Pero aquello se quedó simplemente en sus pensamientos.

En un momento Kyungsoo saltó a la escena haciendo señas con sus manos hacia Baekhyun. No entendió correctamente, pero apuntaba hacia abajo. Negaba rápidamente con la cabeza, pidiéndole que se callara. Sin embargo, eso fue algo que Baekhyun no pudo entender ya que ignoró nuevamente al bibliotecario y contestó con palabras frías a Jongdae.

-Por mi Chanyeol se puede ir al carajo.

Al mirar a Jongdae con una media sonrisa en su rostro, Baekhyun intuyó que algo andaba mal. Era como si su amigo hubiera esperado a que dijera algo como eso, y cuando movió su cabeza hacia Kyungsoo nuevamente, éste tenía los ojos abiertos junto con una mueca de angustia. Fue ahí cuando nuevamente apuntó hacia debajo de su lado del mostrador y Baekhyun no dudó en seguir donde apuntaba. Sus entrañas se hicieron un alboroto cuando algo se removió frente al bibliotecario y unos cabellos negros se dispararon hacia arriba.

Baekhyun temió cuando su cuerpo captó aquel aroma que tuvo jodidamente cerca anoche y miró a Jongdae quien seguía en su pose natural. Aquel pareció decir con sus labios algo como Mal hecho, Baek; pero no lo tomó muy en cuenta al ver ya al cuerpo incorporándose detrás del mostrador. Estaba de espaldas y era como si se reusara a voltearse, tapaba por completo al pequeño cuerpo de Kyungsoo por su altura.

Jongdae soltó un alarido por el ardor de la gripa en su garganta haciendo que el ruido volviera a la habitación.

Baekhyun lo maldijo, golpeó, mató y quemó su cuerpo; todo en su cabeza. Jongdae. Hijo. De. Puta.

Fue en ese momento que Chanyeol se volteó casualmente reposando sus brazos en el mostrador mientras dirigía una mirada hacia Baekhyun. Si pensaba que su estómago no podía estar peor, estaba completamente equivocado.

-Byun Baekhyun.

Su voz fue dos octavas más hacia abajo y se golpeó a sí mismo cuando sintió un hormigueo recorres su cuerpo. Mierda, su voz ya tenía el total control a reaccionar en su cuerpo. Baekhyun giró su cabeza de una manera robótica. Sentía sus propias facciones completamente tensas y sus ojos podrían explotar en lágrimas de estrés.

-Es interesante saber su punto de vista. -El corazón de Byun se detuvo un segundo cuando el otro habló de manera formal-. Entonces lo pensaré dos veces al irme sobre usted.

Su boca se abrió, pero no salió nada más que murmullos sin sentido. El mayor retomó nuevamente la plática.

-Pero tenga algo en claro -continuó sin apartar aquella mirada potente de sus ojos-. A mí no me gustan los trabajos a medias.

Las palmas de Baekhyun sudaban. El trasfondo de aquellas palabras hacía que la imaginación de Baekhyun volara hacia todas direcciones, soltó un leve jadeo.

-Por lo que tenga por seguro que yo acabaré con mi trabajo de ser su capitán guiándolo fuera de las manos de esos jodidos de cuarto -juntó ambas manos enderezándose-. Ahora sí, de verdad.

Chanyeol rodó el mostrador y se dirigió lentamente hacia la entrada. Su rostro podría decirse que estaba sereno, no había ni una pizca de emoción por allí. Sin embargo, cuando se encontró a la par de Baekhyun, el mayor se dio la tarea de recalcar la diferencia de alturas y nivel corporal colocándose a un lado de él. Éste ladeó su cabeza agachándose para llegar al oído de Baekhyun.

-No se moleste en poner todas aquellas cerraduras -susurró de una manera escalofriante-, porque yo voy a derribarlas todas.

Baekhyun tragó saliva por milésima vez mientras que el alto caminaba hacia la salida dándole simplemente un vistazo a Jongdae. Al verlo atravesar la puerta, Baekhyun fulminó a Jongdae con la mirada.

-Lo hiciste a propósito -acusó en un gruñido-. ¡Tú lo sabías, sabías que estaba allí!

Jongdae se encogió de hombros.

-Yo nunca dije que no sabía -Baekhyun iba a soltarle un golpe-. Tampoco te forcé a hablar.

Dejó que sus límites se atravesaran y finalmente golpeó fuertemente a Jongdae en la mejilla. Éste pareció aceptarlo de ante mano por lo que no buscó protegerse o regresárselo. Kyungsoo gritó corriendo hacia su lo-que-fuera y se agachó para levantarlo.

-¡Muchas jodidas gracias Jongdae!

Jongdae escupió algo de sangre y se carcajeo entre los brazos del bibliotecario.

-¿Qué no te lo dije, Baek? -comentó con lo último que le quedaba-. Tú te mereces una buena cogida histórica, ¿y quién más que un chico caliente enojado contigo para dártela?

Baekhyun pateó el estómago de Jongdae y éste ya no pudo pronunciar palabra alguna.