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Nombre: Miyabino Reiichi

Años: 16

Nacionalidad: Rusia

Simbolo del zodiaco: Acuario

Sirviente: Yukimura Hyouga

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Rusia, el pais mas grande del mundo. Lugar donde tiene muy bajas temperaturas y se encuentras animales muy hermosos. Nosotros nos iremos a Mónaco, donde la familia esquiadora miyabino residia en un gran chalé...

-Yukimura~ cogeme! Me da pereza levantarme- dijo la voz del hijo de esa familia, Miyabino Reiichi. Este chico era muy hermoso, todas las personas que lo veian se enamoraban perdidamente del....y esa es la causa por la que era tambien muy conocido por jugar con los corazones de los demas; pero hubo uno, solo uno, que hizo que cayera perdidamente a sus pies, todo lo contrario a lo que el hacia....ese chico que le habia robado el corazoncito tenia el nombre de... -Yukimura??

-Ya voy, ya voy señorito miyabino...

A los pocos segundos entra un chico de piel bastante blanca mirando con su masculina mirada, pero su piel se volvió rosada al ver al menor...este llevaba una camiseta que le llegaba a las rodillas....ya esta...nada mas. Cuando sus miradas se encontraron, miyabino sonrió coquetamente levantando los brazos como un niño pequeño cuando quieren que lo cojan...

-Cojeme! Porfiiiiiss~ chi?- sonrió internamente al ver la cara de idiota enamorado cogiendolo con cuidado por su caderas cojiendolo a lo princesa

-Y-y a donde quieres ir?- preguntó mas rojo que un tomate mirando a la puerta. El pequeño sonrió por el nerviosismo del otro y le beso la nuca notando como se tensaba todavia mas...

-Quiero que me lleves al jardin para comer allí!!

-Ya voy....señorito Miyabino- y se fueron para el jardin...

Al llegar al campo, dejó al peliplata en el suelo y tres segundos despues ya estaba comiendo los bollos que le habia preparado su sirviente. Ante esa imagen yukimura sonrió, le parecia muy tierna su forma de ser, podia ser un explotador de yukimuras...pero en realidad era un niño que nunca tuvo la atención de sus padres. Se sentó al lado viendo como se comia el bollo de crema y le revolvió el cabello sacandole un sonrojo al chico.

-Q-que ocurre yuki-chan?- preguntó todavia con la piel rosada notando como este no le sacaba la vista de encima.

-Nada, solo te miraba...te ves muy lindo asi- contestó von toda la sinceridad del mundo haciendo que el peliplata se pusiese rojo como un tomate. Este, ya cansado por ser el sonrojado, vió como yukimura cojia una galleta dispuesto a comerla, pero miyabino con un rapido movimiento la cojió de sus manos haciendo un puchero dejando a yukimura intrigado. Miyabino suspiró aburrido llevandose la galleta en la boca dispuesto a morderla, o eso era lo que hiba a hacer si no fuese que el peliazul le diese un mordisco a esa misma galleta rozando sus labios...la saboreó cerrando los ojos y sonriendo mientras el pequeño estaba de piedra.

-Esta bastante ricas...a que si miyabiAHHHH!!- gritó de dolor cuando miyabino, quien parecia un semaforo, le habia dado una patada voladora en todo el estomago llendose con el orgullo herido -p-porque hiciste eso!!

-Porque el coqueto aqui soy yo!!

FIN

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