JUG, tengo miedo -murmuré hacia el teléfono-
Sam, ¿que pasa? ¿donde estás? -preguntó Jughead-
Estoy en casa. Pero es que siento que alguien me vigila, Jug. No se... -murmuré mientras me abrazaba a mi misma entre las sábanas- mi miedo a la oscuridad empeora las cosas
Sam, cariño, calmate, ¿si? -me dijo y después suspiró- quédate en tu habitación. Tranquila. No pasa nada. Es solo tu imaginación
Pero... -comencé-
Sam, tienes que calmarte. No te va a pasar nada -me dijo Jughead- solo no salgas de casa. Quédate en tu habitación, ¿si?
Llevo una hora aquí dentro -le dije viendo la luna a través de la ventana-
Todo esta bien, Sam. Trata de dormirte. Yo estoy justo aquí -susurró Jughead mientras lentamente me acostaba en la cama y dejaba el teléfono aún lado mio sin colgar- trata de dormir un poco. No te va a pasar nada
Esta bien... -susurré de vuelta. Sólo se escuchaba su respiración a través del teléfono y la mía algo entrecortada por el miedo. Sólo necesitaba eso, sentir que no estaba sola-

¿JUGHEAD? -murmuré justo cuando me desperté y vi que la llamada aún seguía-
¿Pudiste dormir, Sam? -preguntó con la voz algo ronca. Probablemente él también se hubiera dormido-
Sí -le dije y sonreí minimamente- te has quedado toda la noche
Te dije que no te iba a dejar sola -dijo él-
Te quiero, Jug -le dije mientras me levantaba de la cama-
Y yo a ti. Luego te llamo, ¿si? -me dijo-
Esta bien -le dije para luego colgar. Me cambié, desayuné y luego me fui rápidamente al instituto-

BETTY -le llamé al verla mirar un sobre con su nombre fijamente- ¿que es esto?
Una carta -dijo ella aún sin mirarme- de Capucha Negra. Dice que lo hace por mi
Vaya letra de mierda que tiene -murmuré mientras trataba de leer la carta-
Mi discurso le inspiró. Ese estúpido discurso -dijo Betty-
Habrá estado allí -le dije-
Todo el pueblo estuvo -dijo ella-
¿Qué hacemos? ¿Se la damos a Keller? -le pregunté-
El código, si, la carta no -dijo ella- esto es para mi... no podemos decirlo
Pero es una prueba... -le dije-
Sí se lo damos a Keller, se lo dará a mi madre -dijo Betty- se asegurará de que este muy lejos. Esto es una prueba. Como dijo ¿y si la primera prueba es ver que hago con la carta? ¿la comparto o no? ¿soy... fuerte? ¿o soy débil? ¿soy noble?
Betty, mi amor, eres solo una adolescente -le dije dándole la mano-
¿No es mejor que todos se centren en el código y no en la carta? -dijo la rubia-
¿Cómo? -le pregunté. Con su mirada lo entendí- vamos a ello

ACOSTADA en el suelo de la casa Cooper. Betty sentada en el escritorio tratando de descifrar el código y yo haciendo lo mismo. Incluso llamé a Jughead pero no me lo cogió así que supuse que estaba ocupado. Hasta que me escribió "siento no contestarte, Sam. ¿Podemos hablar mañana?. Y yo le puse: esta bien
¿Todo bien? -preguntó Betty. Yo apagué el teléfono y la mire-
Sí.  Todo bien. Sigamos con esta divertida tarea -reí para seguir quemando mi neurona intentando resolver esto-

SAM -saludó Jughead con cara de recién levantado abriendo la puerta-
Siento venir tan temprano -le dije para dejar un pequeño beso en sus labios-
Siento el aliento mañanero. ¿Te apetece un café? -me dijo mientras entraba a su casa-
No hace falta. Betty esta yendo a la librería. Estamos con ese maldito código. Sólo quería saber si estabas bien -le dije- ayer estabas algo... raro
Sí,  todo bien -asintió Jughead sentándose y desayunando-
¿Por qué no nos ayudas con el código? -le pregunté mientras acariciaba con delicadeza su pelo-
De hecho... Tony y yo ya empezamos con eso en Rojo y Negro -dijo Jughead-
Bueno... vale -le dije. No, no estaba celosa. Es solo un trabajo- ¿podríamos trabajar todos juntos? Solo si quieres. Estamos Betty, Kevin, Tony,  tú y yo
¿Kevin? -se extrañó Jughead-
Sí,  una larga historia -le dije. Bueno, al menos aceptó. Llevamos varias horas todos juntos tratando de averiguar los códigos-
Estos símbolos se me hacen familiar -dijo Betty sentada a mi lado- ya los he visto antes. Me estoy volviendo loca. No recuerdo dónde
Quizás si te sueltas la coleta -murmuró Toni haciendo que todos le miremos y ella a nosotros- ¿que? Era una broma
Esa coleta es un icono y está por encima de todo reproche -dijo Kevin. Traté de no sonreír al ver a Jug escondiendo su risa-
Esta bien, Kev. Llegados a este punto, probaré lo que sea -dijo la rubia soltando su pelo-
Cómo dicen los libros de Paroo, he buscado relaciones de letras típicas como L-A, U-N, A-R -dijo Jughead sentandose-
Yo busco la S -dijo Toni- como en "asesinar"
Qué macabro -dijo Kevin-
No sabemos si sería en nuestro idioma. Podría ser un anagrama -dijo Jughead pasando sus manos por mis hombros y haciendo un pequeño masaje en estos-
Lo tengo en la punta de la lengua -dijo angustiada Betty-
Volvamos a lo básico -dijo Jughead- ¿que sabemos de este tipo? ¿quien es?
Un hombre blanco con 40 y pico. Como todos -dijo Toni-
No, ¿por qué mata personas? -dijo Jughead. Betty, Kevin y yo nos miramos- por lo menos, ¿por qué ahora?
Sabemos que a Capucha le obsesiona limpiar el pueblo -empezó Betty al darse cuenta de la mirada de ambos- de pecadores e hipócritas. Y parece atacar al cualquiera relacionado con el norte
Volvemos con las noticias falsas -negó Toni- los del norte y vuestro privilegio. Sólo demonizais al sur, por supuesto crees que Capucha Negra es de ahí
Vale, parad las dos. Venimos a lo que venimos, no a pelear -les advertí a las dos. Claramente ninguna de las dos me hizo caso y siguieron peleando- Toni, nosotros nos odiamos a los serpientes
¿Y por qué tu novio te oculta que se sienta con nosotros? -dijo Toni. Vale, golpe bajo. Sam, piensa-
Yo me voy -dijo Kevin y se fue seguido de Toni y Betty-
Me siento con los Serpientes por puras razones de supervivencia -dijo sentandose a mi lado-
Da igual, Jug -murmuré siguiendo viendo el código-
Se que no te da igual -me dijo-
En serio, Jug, no tengo que saber cada una de las cosas que haces. Si quieres sentarte con ellos, yo no te lo voy a impedir -me encogí de hombros y continuamos con los códigos hasta que nos quedamos dormidos juntos en el sillón-

¿JUG? -murmuré al verle enfrente mía haciendo que me siente en la cama con los papeles de los códigos ya que esperaba a Betty- ¿todo bien?
¿Por qué no me dijiste que Capucha Negra le escribió una carta a Betty? -dijo Jughead dándome el papel-
Uno: yo no tengo que explicarte nada. Dos: has estado unos días desaparecido. El día que te llamé fue para contártelo, pero no me coste el teléfono así que no te lo dije y tres: ¿vienes a mi casa solo para echarme en cara que no te cuente algo de alto peso? -le dije-
Solo han sido dos días.  A mi tampoco me gusta lo de estar en institutos diferentes pero puedes seguir contándome las cosas -me dijo y suspiré mientras se sentaba a mi lado- ¿por qué no me lo contaste? La verdad
Porque se que Betty se sentiría culpable si Archie se enterase -le dije- se que también se siente culpable por mi. Por eso no he dicho nada
Sam... -murmuró y luego pasó su brazo por mis hombros pero apareció casi corriendo Betty-
¡Creo que ya se como descifrarlo! ¡vamos! -dijo ella para volver a bajar rápidamente. Ambos nos miramos para luego seguirla hasta llegar a la biblioteca-
De niña, sacaba este libro de forma obsesiva -dijo Betty mirando entre las estanterías. Ya sabía que libro es-
¡Lo encontré! Toma -le dije dándole el fino libro. Se sentó en el escritorio y después de unos minutos lo averiguó-
"Volveré A atacar donde todo empezó" -dijo Betty leyendo-
Tu discurso... el ayuntamiento. Vamos -dijo Jughead tras unos segundos. Recogimos los papeles y fuimos lo más rápido posible-
¡Todos fuera! Capucha Negra viene -les dije tocando la herida de mi abdomen ya que no fue muy buena idea correr-
Dijo que sería si siguiente blanco -dijo Jughead-
¿Dices que viene aquí? -dijo Alice sin entender-
El código dice que viene -le dijo Betty mientras Jug ponía su mano encima de la mía comprendiendo lo que me pasaba. En ese momento se fue la luz y los truenos y rayos seguían. Hasta que la rubia apretó la alarma de incendios y la gente empezó a irse-

¿ESTÁS bien? -preguntó Jug mientras me ayudaba a secar mi pelo después de ir a la casa Cooper y entregar la carta que ocultabamos-
Sí. Yo rompo las leyes. Alguien me dice que no haga algo y es lo primero que hago -reí yo mientras me acostaba en la cama-
¿Me dejas ver...? Solo para comprobar de que no tengo que llevarte al hospital -dijo divertido Jughead. Subí un poco mi camisa y la piel se me erizó cuando pasó sus dedos por mi abdomen- creo que esta todo bien. No sangra, eso es bueno
Bien -sonreí para luego bajar mi camisa sin importar que su mano siguiera en el mismo lugar y dejarle caer a mi lado para dormir abrazados- hace frío
Nos llovió encima -susurró Jughead pasandonos la manta por encima para luego besar mi cuello y meter su cabeza en este-
Jug, no me gusta que nos peleemos por estupideces -murmuré-
Ni a mi tampoco -murmuró para luego acariciar mi pierna a través de mi pantalón de pijama-