Lisa se encontraba disfrutando de una película de Disney con ChaeWon y MinJeong.

Específicamente La Princesa y El Sapo, las cachorras desarrollaron una especie de obsesión con la película unas semanas atrás, por lo cual la omega ya se sabe las canciones de memoria.

Definitivamente su favorita es la de ‹‹lograremos ser humanos››.

El verano estaba cerca, y las cachorras estaban emocionadas.

ChaeWon no podía esperar a dejar de ir a sus aburridas clases, y Lia había tomado un trabajo en la heladería del centro comercial, seguía ahorrando para conseguir su auto.

—Mami. —ChaeWon llamó la atención de Lisa, jalando un poco su suéter.

Las tres estaban acurrucadas en el sofá, MinJeong veía entretenida la película, pero la atención de ChaeWon estaba fuera.

—Si, bebé.

—¿Cuando sabes que te gusta alguien?

Lisa rió nerviosa.

—C-Creo que cuando quieres lo mejor para esa persona, te gusta su forma de ser, su físico tal vez, también es importante que te interese lo que la otra persona piensa.

—Entonces, ¿te gusta papá?

Lisa vio sorprendida a ChaeWon.

—ChaeWonnie, y-yo...

Las llaves de JiSoo se escucharon en la puerta, entrando la alfa quitándose su abrigo.

Al encontrar a las tres personitas en la sala sonríe.

—Hola, mis personas favoritas. —le da un beso en la frente a cada una.

—Papá —ChaeWon llamó la atención de su padre—. ¿Te gusta Lisa?

JiSoo vio confundida a ChaeWon, pero rió.

—Yo adoro a Lisa, ChaeWon. —le guiñó un ojo a Lisa, quien solamente se sonrojó.

Las tres tuvieron un momento agradable terminando de ver la película, hasta que Lisa y JiSoo decidieron empezar con la cena, mientras las niñas jugaban un rato.

—Las niñas están emocionadas por el verano. —Lisa le sonrió a JiSoo.

—Siempre ha sido así, adoran nadar en la piscina. espero puedas quedarte este verano, Lisa. —Lisa vio confundida a JiSoo.

—JiSoo, adoro estar aquí, es mi trabajo, pero cuidar a tus cachorras me parece lo mejor en este mundo.

JiSoo vio con cariño a Lisa, quien seguía cortando en forma de estrella las zanahorias de MinJeong.

—¿Q-Qieres ir a una cita conmigo? —tartamudeó JiSoo, sus mejillas estaban rojas y podía jurar que se su voz desafinó al final.

Lisa le dio una sonrisa cálida a la tímida alfa que estaba junto a ella.

—Me encantaría. —Lisa dejó lo que estaba haciendo para tomar la mano de JiSoo y atraerla a un abrazo.

La omega se acomodó en su pecho, disfrutando del calor que irradiaba la alfa y su delicioso olor a café.

La alfa estaba sonrojada, y acariciaba la cintura de Lisa.

—¡Mamá! —llegó corriendo junto a Lisa, Lia, la arrebató de los brazos de JiSoo y lloró en su pecho, agachándose—. ¡Los niños son muy crueles, y sus padres insoportables!

Las lagrimas pesadas bajaban por las mejillas manchadas de helado de chocolate de Lia, y su cabeza tenía un gorrito celeste con rosa y el dibujo del un cono de helado en el centro.

Lisa consolaba alarmada a Lia, quien ignoró totalmente a su padre, quien bufó por dejar de tener la atención total de Lisa.

Lisa alejo un poco a Lia, quien tenía su delantal blanco lleno de helado de fresa, por lo cual Lisa ahora estaba llena de helado de fresa.

—Lia, ¿Qué sucedió? Estabas bien hace unas horas.

Lia secaba sus lagrimas y tomó un trapo de cocina con el cual sorbió su nariz.

—¡L-Ls niños! Hicieron una guerra de comida en el local ¡Eran tantos vestidos de karatecas! —sollozó Lia, y se volvió a poner el el pecho de Lisa, quien acarició su cabello. Se separó un momento y tomó a Lisa de sus hombros—. ¡Sus padres me gritaron a mi, y una madre se rehusó a pagar, así que lo tuve que hacer yo! —siguió llorando en el pecho de Lisa, quien solo acariciaba su espalda.

—¿Q-Quieres que vaya a hablar con tu jefe?

JiSoo negó con su cabeza, llamando la atención de Lisa.

—Lisa, Lia tiene que aprender lo complicado que es tener un empleo, especialmente tiene que aprender a lidiar con gente que no es exactamente educada.

Lia siguió sollozando.

—¡¿Cómo nos soportas, mamá?!

Lisa rió y separó a Lia un momento.

—Porque las adoro, mi cachorra —dejó un beso en la frente de Lia, quien detuvo un poco su llanto—, ahora... Sé que no puedo ir a tu trabajo a hablar con tu jefe —vio a JiSoo, quien asintió seria—, pero puedo prepararte tu cena favorita, bebé. —Lia le sonrió débil y Lisa rió.

Lia salió de la cocina, y Lisa se quedó cocinando lasaña y ensalada, con una JiSoo viéndola.

—JiSoo, me pones nerviosa.

—¿Eso es malo?

Lisa le entrecerró los ojos.

—Si, me desconcentras. —Lisa le ofreció una sonrisa a JiSoo, quien solo rió bajito.

Lisa dejó lo que estaba haciendo otra vez y se acercó a la alfa, rodeó el cuello de la alfa con sus brazos y la abrazó, la alfa tomó su cintura y la apretó hacia ella.

—¿Qué tal si vas a pensar en nuestra cita? ¿A que te gustaría llevarme?

—¿A donde quieres ir, omega?

—Sorpréndeme, alfa.

La alfa dejó un beso en la mejilla de la omega y salió de la cocina, feliz.

Y todos griten conmigo: LiSoo, LiSoo, LiSoo, LiSoo.

¡Gracias por leer!

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